Konnichiwaa! Megu trayéndoles un fic de Vocaloid, en el cual se basa en la saga Synchronicity que solo qedo en 2 partes, ESTE FANFIC ESTA HECHO COMO YO ME LO IMAGINO, DEJANDO EN CLARO QUE VOCALOID NO ME PERTENECE, SOLO FUE PARA DARLE UN FIN A LA SAGA YA QUE NO HA SIDO PUBLICADO, NO ES LA VERSION ORIGINAL PERO ASI ES COMO YO ME LO IMAGINO . Dejen REVIEWS y disfruten, si alguien la ha visto y no le entendía, asi es como yo la entendí xD SayOnaraa! (( Si no la has visto, te recomiendo qe primero la veas :D))

megu-chan

SYNCHRONICITY 3 (*recuerdos de las partes uno y dos*)

(Parte 1)

Miku era un bruja, que con su báculo logro predecir el ataque de un temible dragón, lo cual sucedió. La reina Luka ordeno que la encerraran ya que por su culpa el dragón había aparecido, antes de encerrarla, la gente del pueblo le coloco una mascara, que ella no podría quitar, la encerraron en lo profundo de un castillo al parecer hecho de cristal, desde entonces, ella informa a la reina quien será la próxima diva que cante al dragón para que este se amanse y no suba a atacar a la gente del pueblo, pues se encontraba en una cueva de la cual no debía salir…Miku predijo que la próxima diva seria una gemela, al escuchar esto, los guardias de Luka fueron a alguna casa en particular, donde supuestamente se encontraban unos gemelos recién nacidos. Dentro de esa casa, todo era armonía, una señora de largo cabello rubio, cuidaba de los pequeños angelitos que dormían tranquilamente, hasta que se escucho un golpe a la puerta, la señora abrió, encontrándose con los guardias que pronto la tomaron y uno de ellos cargo a la niña y se la llevo lejos, para practicar su voz y al crecer ser encerrada con el dragon. Len, en sus sueños veía a una chica con una bella sonrisa y hermosa voz, que aunque no la conocía, sentía que tenían un fuerte lazo, que dentro de el anhelaba protegerla, salió en busca de la nueva Diva, encontrando en su camino un colgante con una nota musical, por una extraña razón reconoció el colgante, lo guardo y pensando que seguía el camino correcto, recorriendo así todos los pueblos y obstáculos. Uniendo aliados como Gakupo y Kaito… Acercándose cada vez más al castillo de la Reina Luka.

(Parte 2)

La pequeña Diva de hermoso cabello rubio, aún seguía cantando, una y otra vez, recordando así, todas las voces de las antiguas divas que habían muerto a manos del dragón, la chica rubia se esperaba lo peor, pero eso lo asía por que así era su destino, anhelando que algún día alguien la rescatara de lo profundo de esa oscura cueva… Al estar enferma comenzó a sentirse mal, hasta quedar tendida en el suelo. Al llegar al castillo de Luka, Len pretendía sacarle información de donde se encontraba la chica de la hermosa sonrisa que desde pequeño en su mente aparecía, Luka sin temor llamó a Meiko una soldado vestida de carmesí que ataco a Len, explicando sumamente furioso que solo buscaba a la chica que era una diva y que Meiko abrió completamente los ojos, mientras poco a poco se llenaban de lágrimas, recordando a su hermana llamada Teto que años atrás también había sido una diva y muerte por ese cruel destino. Apunto de romper en llanto aventó a Len, y su espada quedo en dirección a su pecho, la soldado carmesí sonrió con maldad y rápidamente empuño su espada asía la reina Luka, la cual no se notaba ninguna emoción, ante ello, otro soldado con un parche apareció y la detuvo con una guadaña. Gakupo que horas atrás había llegado a la reina para asesinarla pero fue atrapado y encerrado en un cuarto, recordaba a aquella mujer que le había dado la vida, fue atada en cadenas y su hogar que en un principio fue feliz había sido destruido por el temible fuego que soldados de la reina Luka habían arrojado, después de eso, su madre había sido convertida en Diva, por ello, se unió a Len, pero su esfuerzo había sido en vano. De repente la puerta del cuarto de abrió, era Kaito quien tenia amordazado con su brazo al guardia y gracias a ello obtuvo las llaves, rápidamente salieron de lugar para reunirse con Len y Meiko que se les había unido para vengar a su hermana. Corrieron deprisa hasta cruzar aquella enorme puerta, ante la mirada furiosa de la reina Luka. Avanzaron por más pueblos, donde trataban de obtener información de donde se encontraba ese castillo de cristal, por más dificultades que se interponían, seguían, pueblo tras pueblo. La reina Luka se entero que casi estaban cerca de aquel castillo, ordenando así que sus guardias los atacaran y asesinaran. Siendo los guardias quienes derramaran su sangre. En los pueblos por los cuales pasaban, les tenían miedo, ya que las personas creían que eran enviados por la reina para llevarse a la próxima diva, pero nunca era así. En lo más profundo del bosque y zonas montañosas se encontraba el castillo. No perdieron tiempo y entraron. Lo cual Miku ya los esperaba y comenzó a atacarlos con sus poderes, lograron esquivarlos, hasta que por fin Len pudo llegar ante ella, deteniendo la espada de Len con su báculo, se acerco a sus labios, logrando que el rubio se confundiera, y aventarlo lejos, quedando desmallado… Kaito, Meiko y Gakupo quedaron heridos ante los poderes oscuros de Miku. Ella recordó su sufrimiento con esa mascara, ya que en realidad no era mala, pero al estar encerrada y ser despreciados por todas esas personas, la soledad se apodero de ella, convirtiéndola en un ser malvado…
-Por favor, canta…- repetía en la soledad, para que las hermosas oraciones de las divas no terminaran y ella tuviera más tiempo para quitarse esa mascara y ser libre para derrotar con al dragón ya que había encontrado la solución para matarlo.
-La historia se repite…- Dijo con un eco acompañándola, asiendo que Len despertara, ya que si se repite… entonces la chica pronto moriría… Decidido a llegar pronto, se puso de pie, Miku se giro sorprendida, para luego lanzarle otro de sus poderes, Len esquivo aquel ataque, y corrió asía ella empuñando su espada. El grito de la joven bruja resonó por todo el lugar… No estaba muerta… el rubio al que intento matar la había liberado de esa mascara... de ese castillo… En la mente del chico solo aparecía la pequeña Diva, que pronto alcanzaría…