¡Hola! Esta historia, la haré detalladamente, y me decís como os gusta más. Por cierto, voy a seguir los consejos de Momochanx6, que una vez me dijo que probara a hacer una historia detalladamente, así que me deje un review ^-^ espero que no le importe.
Creo que entendeis lo de detalladamente, así que, os dejo con una historia de amor:
Era un día lluvioso. Una chica de pelo marrón por los hombros, caminaba buscando un lugar en el que refugiarse. Las calles de Altomare, una ciudad casi de agua, estaban totalmente desierta. La chica encontró por fin un lugar en el que refugiarse.
Y, de la tienda de al lado salió un chico de cabello marrón, ojos negro como el azabache, y llevaba un Pikachu en su hombro, que solía distinguirse de los demás.
La chica lo miró confusa pero no paraba de hacerlo. El chico parecía que esperaba algo, pero entonces la chica notó algo en su espalda.
-¡Bianca!
-¿eh-eh? -la chica miró detrás suya- ¡abuelo!
-¿que haces aquí? ¡Ya decía yo que estabas tardando mucho!
-Yo..estaba...Es que acababan de acabar las clases de pintura y...me ha pillado esta lluvia y decidí esperar a que escampase.
-Yo no he traido paraguas, salí de aquí pero no llovía.
El chico que estaba a su lado, sonrió a los dos.
-si queréis os puedo prestar mi paraguas. -y se lo da sin que Lorenzo, el abuelo de Bianca pudiera contestar, y se marcha.
-¡Un momento chico! ¿Con que iras tú? -pero ya era tarde. El chico ya había desaparecido bajo la lluvia.
-Ese chico...
-¿Qué pasa, Bianca?
-No, nada, que estoy pensando si estará bien, llueve tanto...
-Bueno, eso es lo de menos. Venga vámonos. -dijo abriendo el paraguas azul.
-Sí. -respondió cuando ya se había metido bajo el paraguas.
Estaban de camino. Todo estaba silencioso y se escuchaba el sonido de la lluvia al caer en el agua.
-Abuelo... -dijo Bianca al fin y siguió -¿tu crees que mañana se harán las carreras de los pokémons de tipo agua...?
Su abuelo se quedó pensativo.
-Bueno, según si llueve no creo. -y abre la puerta de su casa.
-(...) espero que no -y se mete en su casa.
Y ya dentro, la chica se subió a su habitación, soltó su bandolera en su escritorio y se tiró a su cama, pensativa.
-Mañana...¿Participará ese chico? Parecía ser un entrenador pokémon...
En ese momento, la chica cerró los ojos y entonces, se quedó profundamente dormida.
Al día siguiente, hacía Sol. La casa estaba vacía. Bianca no paraba de preguntarse, donde estaba su abuelo.
-en fin... -dijo cuando ya estaba en la cocina -desayunaré algo. No puedo irme sin nada en el estómago.
La ojiazul estaba desayunando, pero miró su reloj de muñeca, y vio que eran las...¡12!
-¡Ah! -dijo levantandose con tanta prisa que se tiró encima de su vestido su colacao. -¡oh no, encima que tengo prisa!
Y subió corriendo los escalones para volver a cambiarse.
Entonces, sorprendentemente, la puerta de entrada se abrió.
-¿Bianca? ¿Estás por ahí? -dijo un chico. Pero subió sin permiso de nadie.
-¿Quién ha entrado?
-Soy Ross, Bianca.
-¡Sa-sal, me estoy cambiando! -dijo la ojiazul escondiendose.
-Si, te espero fuera. Ya es tarde...
-Lo sé. Sal por favor.
El chico obedece y pudo oír como Bianca susurraba algo.
Cuando ella se cambió, los dos fueron a el centro de Altomare, donde tenía lugar la carrera.
Bianca estaba preparada, ella era la que había organizado esa carrera y tenía que verla junto a su abuelo.
Pero entonces, se choca con alguien y ambos se ríen.
¿Quién será? Continuará...
¡Espero que os haya gustado! ¡Dejen reviews!
