Capítulo 1.

-El inicio-

Fanfic re-subido y editado completamente en redacción. Propiedad del usuario D.D Lunarsea, perteneciente al grupo "AutumnWriters". Agradecimientos a Nani por su aporte de ideas.

El anime y manga "Naruto" no nos pertenece, es obra del mangaka Masashi Kishimoto. Esta historia es de fans para fans, sin fines de lucro.

-"entrecomillado": Onomatopeyas, títulos, suposiciones.

-cursiva: pensamientos, diálogos descritos por el autor.

-Asteriscos*: palabras con aclaraciones al final del texto.

¿Qué es eso?

Sonoros ruidos se escuchaban a lo lejos, demasiado lejos como para prestarles atención.

Así que todo volvía a esa inmensa tranquilidad, todo se volvía negro de nuevo…

…de repente se volvieron un poco más claros, de algún modo, suenan conocidos.

Abruptamente, había sido sacado de esa paz envolvente.

¿Perros?

Sí, eso parece ser… ¿Por qué?

Después lo averiguaría, después sería el momento…

…De nuevo, ruido. Ésta vez era claro e intermitente. El fruncimiento del ceño no se hizo esperar.

Aquel sentimiento de tranquilidad se difuminaba lentamente. El subconsciente ahora estaba enfocado en aquel sonido.

Eran golpes. Iban de 3 en 3, y así seguían, cada vez más fuertes…

¿Qué demonios es eso? Es molesto.

Era el límite, necesitaba detenerlo.

Y de repente, abrí mis ojos.

-Qué… qué es eso- Murmuró una voz grave y ronca, las palabras salían entrecortadas, entintadas con un toque de molestia. El enunciador de las mismas se revolvía entre sus sábanas blancas, para después cubrirse el rostro con las mismas.

El sonido de su reciente sueño seguía molestándolo. La procedencia de aquella tríada de golpes ahora parecía obvia.

Con resignación, decidió despedirse de cualquier posibilidad de regresar a aquella cálida calma, descubrió bruscamente su rostro y con esta acción, el ruido incrementó su volumen, y el número de veces pasó de ser de 3 en 3 a sonar sin cesar.

Con el fin de detenerlo, volteó a la dirección de dónde provenía.

-¡Sasuke! ¡Al fin despiertas! ¡Creí que nunca lo harías!- y así fue que el anterior sonido fue rápidamente intercambiado con algo mucho más molesto.

Ahí estaba Naruto, su mejor amigo, uniformado y trepado como un chimpancé afuera de la ventana de su habitación, saludándolo con una gran sonrisa como si nada hubiera pasado.

El pelinegro se destapó completamente dejando ver su torso desnudo, se incorporó de la cama, y se dirigió con la mirada clavada en el suelo hacia la ventana.

-¡Ábreme Sasuke! Me costó demasiado subir aquí con todo y mochila- dijo el rubio con voz quejumbrosa, golpeando insistentemente de 3 en 3 la ventana, de nuevo.- Ya sé que faltan algunas horas para entrar, pero no pude dormir porque estaba muy emocionado- Explicaba éste con una gran sonrisa, mientras Sasuke abría lentamente la ventana.

-Por cierto, sé que a tu padre le gusta la seguridad y todo eso, pero no hace falta tanto perro y sobre todo si son tan agresivos y… -Naruto fue interrumpido por una macabra sonrisa y ojos amenazantes de parte del pelinegro.

–Hey Sasuke, tranquilo camarada, tú sabes que no fue mi intención despertarte ni nada de eso, si sabes ¿no?- Explicó Naruto entre risas nerviosas escuchando como su amigo tronaba sus nudillos.

-Naruto-

-¿Sí?-

Seguido de eso se apreció a un cuerpo volando por los aires; después algunos gruñidos, ladridos y demás sonidos provenientes del repertorio de un perro, acompañado de los gritos de cierto rubio que había sido despedido de un golpe desde el segundo piso hasta el jardín.

-Idiota- murmuró Sasuke al mismo tiempo que cerraba la ventana.

Salió de su habitación con pesadez y abrió la puerta que se encontraba al otro lado del pasillo, exactamente enfrente de su puerta. Entró al cuarto de baño, tomó su cepillo dental, el dentífrico y empezó a cepillarse mientras se dirigía de nuevo a su habitación.

Se fijó en el reloj digital que estaba en su mesita de noche, para cerciorarse de que estaba en lo correcto.

Abrió la ventana y escupió el dentífrico de su boca, esperando que le cayera al rubio en el ojo o algo así. Se limpió las comisuras de los labios con el antebrazo.

-10 de agosto, inicio de clases- Exclamó molesto Sasuke en un suspiro, recordando como su mejor amigo le había pedido, o no, más bien rogado todos y absolutamente todos los días de las vacaciones de verano que estudiaran en la misma preparatoria para no perder contacto.

El chico se dirigió al armario y sacó su uniforme escolar, lo arrojó sutilmente a la cama y tomó la camisa blanca de manga larga.

-Si tan solo no me hubiera hartado, si tan solo el cielo me hubiera brindado más tolerancia- se regañó el chico mientras abotonaba rápidamente su camisa y se ponía sobre de ésta un saco azul con un escudo en color dorado a la altura del corazón- Si fuera una persona menos apegada a la tranquilidad, no hubiera terminado en la misma preparatoria que esa máquina traga ramen con patas- finalizó molesto, terminando de subir sus pantalones grises de corte recto.

Después de colocarse un cinturón gris de tela, ponerse sus calcetines y la corbata a rayas azules y grises un poco suelta y fuera del saco, se acomodó el cabello, tomó su mochila y salió de su habitación.

Bajó las largas escaleras de la casa Uchiha hasta encontrarse con el comedor, en el cual estaban sentados su padre y su madre, mientras su hermano, Itachi, con unos guantes y un mandil rosado lleno de holanes perteneciente a su madre, les servía el desayuno.

-Sasuke-chan, ¿no te quedas a desayunar?- pregunto Itachi amablemente con el sartén en la mano.

-No Itachi, y abstente de decirme Sasuke-chan- respondió Sasuke con obvia molestia por el honorífico.

-Como tú quieras, Sasu-chan- dijo Itachi burlonamente, con falsa inocencia, ganándose una mirada asesina de parte de su hermano menor.

-¿Por qué no te quedas hijo?- preguntó su padre Fugaku Uchiha, dueño de una de las empresas más grandes de Konoha, mientras leía detenidamente el periódico.

-Por el sabor del dentífrico. Me acabo de…

-Fugaku, ¿acaso no es obvio? Nuestro bebé hermoso está creciendo, no quiere desayunar porque ya es todo un estudiante de preparatoria que de seguro prefiere comprar el desayuno para poder integrarse en la cafetería con sus compañeros, pronto nos dejará y se irá, dentro de un abrir y cerrar de ojos se habrá ido con alguna bruja que me lo quitará de las manos por alguna boda arreglada por un embarazo temprano y…

-Mamá- interrumpió Sasuke el drama con lágrimas incluídas de su madre, Mikoto Uchiha- me acabo de cepillar los dientes, como anteriormente quise decirle a papá- aclaró.

-¡Haberlo dicho antes mi amor! ¡Diviértete!, pero toma aunque sea ésta rebanada de pan- Dijo ésta entusiasmada, antes de lanzarle un pan tostado y darle unas pequeñas palmaditas de aprobación en la espalda. Itachi, él y su padre simplemente se miraron asustados entre ellos por los repentinos cambios de humor de la señora Uchiha.

Sasuke se dirigió a la puerta principal de la casa, en donde una de las amas de llaves lo despidió con amigables deseos de buena suerte.

Al salir se encontró a Naruto recargado en la jardinera, con unos cuantos moretones y mordidas, el cabello desenfadado, el uniforme mal arreglado y el ojo rojo e hinchado con las pestañas pegoteadas con un poco de pasta dental. Sasuke sonrío victorioso por su buena puntería.

-¡Desgraciado, hijo de la gran…

-Cállate y come- le dijo Sasuke lanzándole a la cara la rebanada de pan tostado- conociéndote no habrás comido nada en casa- Dijo el pelinegro disponiéndose a avanzar, seguido por un sonido proveniente del estómago del rubio, el cual sonrió apenado.

-Fien Fafsuke, enftonfes, ¿¡Festás lisfto!?- Exclamó entusiasmado el rubio con la boca llena, dejando salir proyectadas algunas migajas de pan.

-No-

-Pero-

-No- dijo cortante Sasuke, mientras metía las manos a los bolsillos de su pantalón y seguía caminando rumbo al colegio.

-Pero será super mágico, ultra fantástico- canturreo Naruto, mientras limpiaba las migajas de pan sobrantes que habían caído en su pecho y dentro de su camisa, deshaciéndose de la picazón que éstas le proporcionaban.

-No sé por qué no me sorprende que hayas sacado tu frase de Bob Esponja- Dijo Sasuke, el cual había dejado atrás al rubio mientras éste se limpiaba.

-¡Hey! ¡Espera!- gritó Naruto para después correr un corto tramo hasta alcanzar a su amigo ojinegro.

Después de un no muy largo pero tedioso recorrido con las constantes estupideces, gestos y movimientos de Naruto, él y Sasuke llegaron al imponente y aparatoso colegio. No se podía esperar menos de la mejor escuela de Konoha, donde solo los niños ricos con gran fortuna heredada, los hijos de grandes empresarios como lo eran Naruto y Sasuke y los estudiosos becados podían entrar.

-¡WOOOOOOOOOOOOW!- exclamó Naruto- Es tan…

-Ridícula- completó Sasuke.

-Iba a decir genial, pero si, también es algo exagerada-dijo el Uzumaki despreocupado, dándole la razón al Uchiha

Los dos chicos entraron al colegio, observando el gran jardín lleno de flores, árboles, bancas, caminos de piedra y una gran y hermosa fuente en el centro del lugar con algunas monedas reposando en el fondo de la misma. Ya que habían llegado muy temprano, solo había unas cuantas personas deambulando por el lugar, así que aprovecharon para ir a la pizarra en donde señalaban la asignación de los estudiantes a las aulas, más no encontraron su nombre por ningún lado.

-¿¡QUÉ!? Pero estoy seguro de que estamos inscritos, ¡Yo mismo nos inscribí!- Dijo confundido Naruto, jalando su cabello rubio con desesperación.

-Naruto, te odio- dijo Sasuke molesto, diseñando un plan de asesinato en su mente que fuera de lo más sutil para que pareciera un accidente. De repente, una voz femenina lo sacó de sus pensamientos.

-Disculpa, ¿eres Sasuke Uchiha, cierto?- Preguntó una dulce voz con amabilidad. El aludido volteó encontrándose con una chica de ojos jade y un cabello color rosa chicle.

-Sí, ¿Por?- respondió cortante.

-Es que, bueno, pues te vi algo confundido y ehm, tú nombre está en aquella hoja- Dijo la chica sonrojada y señalando una hoja en la esquina de la pizarra.

Sasuke empezó a caminar hacia la pizarra, sin siquiera agradecer y dejando a una desconcertada chica gracias a su inexistente amabilidad.

-¡Gracias por aclararnos la duda, nos salvaste! Me llamo Naruto Uzumaki, ¿Y tú?- dijo emocionado Naruto extendiendo su mano para estrechar la de la señorita como saludo, con esperanza de que tal vez podría hacerse amigo de la hermosa ojijade.

-Qué te importa- dijo la pelirosa dándose media vuelta, dejando a Naruto con la mano tendida y una expresión triste, pues como siempre, pareciera que al lado de Sasuke el fuera invisible.

-¡Oye, Naruto!- gritó el ojinegro sacándolo de sus pensamientos.

-Sí, sí ya voy- dijo Naruto con pesar y se dirigió hacia donde estaba su amigo, encontrándose con lo que sería el pequeño papel que contenía sus nombres.

-¿Reunión de alumnos de nuevo ingreso?- pregunto desconcertado el rubio.

-Aquí dice que reúnen a los nuevos para orientarlos y darles información sobre el colegio- leyó el pelinegro en voz alta -al parecer no fue tan mala idea que me despertaras 2 horas antes, ya que éste evento es en 10 minutos, ¿Qué no te dijeron nada de esto a la hora de inscribirnos?- preguntó Sasuke.

-Creo que me dieron un folleto o algo así, mis padres salieron de viaje y me dieron algo de dinero, pero lo gaste todo en figuras coleccionables de One Piece-Dijo orgulloso Naruto con los brazos recargados en la nuca.

-Y bien cabeza de chorlito, ¿qué tienen que ver tus muñecas de One Piece en esto?- dijo Sasuke molesto, ya que las cosas que decía su atolondrado amigo no tenían una pizca de relación entre sí.

-Que como me gasté todo en FIGURAS COLECCIONABLES de One Piece- enfatizó el rubio- No hice la compra de la semana, por lo tanto me tuve que alimentar del ramen instantáneo que había dejado mamá en la alacena por si había un desastre natural y por consecuencia de esto, me enfermé de una terrible diarrea y como no había suficiente papel higiénico, tuve que usar el folleto y algunos otros formatos como último recurso para limpiarme el…-

-No quiero oír más nada, cerdo asqueroso- interrumpió Sasuke- Al parecer no me equivocaba, efectivamente tienes el coeficiente intelectual de una silla. Marchémonos ya, que faltan 5 minutos-Ordenó el Uchiha, para después dirigirse a donde sería la reunión.

-Cascarrabias- murmuró Naruto mientras caminaba de mala gana.

Llegaron al lugar, un amplio auditorio con estructura semicircular y múltiples hileras de butacas fijas divididas en tres secciones, de las cuales solo eran ocupadas las de la primera y segunda fila de la sección de en medio, antes del proscenio*. En el escenario, de madera de nogal de característico color negro, se encontraba colocado un podio o plataforma para orador con un micrófono. La iluminación tenue del auditorio contrastaba con las intensas luces del escenario dirigidas al podio. Las butacas estaban reservadas con los nombres de los estudiantes, siendo las de Naruto y Sasuke las únicas butacas asignadas que se encontraban vacías. En total había 26 personas en un espacio de capacidad para al menos, 1000 personas. Los estudiantes que se hallaban en el auditorio tenían conductas y aspectos diferentes entre ellos, por ejemplo, un chico de complexión rellenita con un peinado muy raro, no desistía de comer frituras todo el rato, remplazando el silencio con el molesto ruido que la bolsa de éstos bocadillos hacía a la hora de que el introducía su mano para sacarlos. Otra chica peinada de dos chonguitos* se encontraba hablando con otra rubia de coleta alta, la cual tenía unos llamativos ojos azules, aunque no tan llamativos como el escote pronunciado que se asomaba gracias a algunos botones desabrochados. Luego también estaba éste chico pelirrojo con mirada sombría, ¿será porque se le corrió el delineador que lleva puesto? ¿Es delineador, no? ¿O serán ojeras? Quién sabe.

Al rubio le tocó sentarse junto a un sujeto de pelo largo recogido en una cola alta, el cual se encontraba durmiendo. Sasuke se tuvo que sentar en el otro extremo de la fila, junto a una mujer pelirroja con gafas que no dejaba de observarlo y pegarse como pudiera. Al cabo de unos minutos, que parecieron de eterna espera, llegaron dos personas al auditorio. El primero de ellos era un sujeto muy extraño de amplia sonrisa, que llevaba el cabello negro y perfectamente lacio con un corte tipo hongo, acompañado de unas cejas muy pobladas. Aunque lo más llamativo de éste ejemplar no eran las anteriores características, si no el esmoquin satinado color verde brillante, con moño y camisa naranja, a juego. El hombre caminó hasta el pie del escenario y subió las escaleras, parándose al lado del podio con las manos detrás de la espalda. Detrás de él, caminando de forma decidida y haciendo resonar los tacones de aguja de sus zapatillas Louboutin* color blanco sobre el pulcro suelo, se encontraba una mujer de cabello rubio claro a los hombros, perfectamente peinado con algunas ondas sueltas. Sus ojos miel contrastaban con el traje sastre color lavanda que llevaba, la falda entubada hacía resaltar sus caderas y algunos botones desabrochados de la blusa blanca debajo del saco desabotonado, dejaban ver un poco de escote. La mujer al igual que su compañero, subió las escaleras al escenario y se posicionó enfrente del podio, dejando reposar unos papeles que antes llevaba cargando debajo de su brazo sobre éste. Acto seguido, aclaró su garganta, removió un mechón de cabello de su frente dejando al descubierto una marca violeta en forma de rombo, recargó los brazos sobre el podio y sonrió amablemente antes de disponerse a hablar.

Continuará...

Aclaraciones de palabras con *:
-chonguitos (palabra usada en México): Plural de "chongo" en diminutivo. Peinado o recogido que consiste en enrollar el cabello en una bolita. En éste caso una bolita en cada lado de la cabeza, como Pucca. Lo suelen usar las bailarinas de ballet. Sinónimos: moños, cebollas.

-Louboutin: Marca de calzado femenino, del diseñador francés Christian Louboutin. Se caracterizan por tener suelas rojas y ser muy costosos D: lol

Y ¡bueno! Aquí está el primer capítulo de éste fanfic, que sin duda fue muy divertido de volver a leer y editar. Trajo tantas memorias de cuando fue escrito, hace casi 2 años :')

En sí lo único que cambió por completo fue la redacción, pues quise dejarle su esencia c: ¡Espero que a los que les haya dado curiosidad de entrar y leerlo, les guste mucho! si es así, pueden dejar su review y juró que harán a la autora muy feliz c':

Espero estar actualizando pronto, le agradezco mucho a mi colega de ésta cuenta Nani por haberme acompañado a la hora de las primeras ideas para éste fanfic, que en sus tiempos fue un disfrute grandísimo de hacer. (Y ahora de editar)

¡Gracias a los que se tomaron la molestia de leerlo en el pasado! Y espero que si lo vuelven a leer, les siga gustando 3

¿Dudas, preguntas, comentarios? Dejen un review y lo leeré. 3

Disculpen los errores que pueda contener este humilde fanfic x3

Muy buen día a todos 3

¡Hasta la próxima actualización!

-D.D. Lunarsea-