Título: Confesiones.

Fandom: Katekyo Hitman Reborn!

Personajes: Gokudera Hayato & Sawada Tsunayoshi.

Género: Amistad, Romance.

Rating: T

Advertencias: Shonen Ai, 5927.

Resumen: Gokudera por fin se confiesa. ¿Qué le dirá, Tsuna?

Disclaimer: Katekyo Hitman Reborn! no me pertenece, pero por suerte, sí a Amano Akira.

08/08/11.

- ¡Me gusta, Décimo!

- ¿Eh?

Tsuna no está seguro de haber escuchado bien. Su expresión extrañada, confusa, lo confirman.

- ¡Me gusta! -repite Gokudera, con una encantadora sonrisa y un pequeño sonrojo en sus mejillas al por fin confesarse.

"Simplemente... adorable".

Piensa embobado Tsuna, con un tenue sonrojo al ver a los ojos al italiano.

- Le gustaría... ¿Le gustaría salir conmigo, Décimo?

Extiende su mano como un Príncipe lo haría, haciendo sonrojar más al castaño.

Entonces… ¿Sí, escuchó bien? ¿Su amigo le está diciendo que lo quiere, y que quiere salir con él?

Con sólo pensarlo, su corazón late con tanta prisa que incluso lo escucha en sus oídos, sintiendo también como se pone rojo hasta las orejas, y claro, tartamudea porque está muy nervioso... y es él.

Tan predecible de Sawada Tsunayoshi, alias "Tsuna, inútil".

- ¿E-Ehm? Yo... yo...

¿Qué hace? ¿Qué le responde? Jamás se esperó una propuesta así, y mucho menos por parte de su mejor amigo, compañero de clases, Guardián de la Tormenta, futura Mano Derecha y…

"¡Alto!".

Se dice a sí mismo, al perder la cabeza y desvariar como un completo idiota.

Si bien es cierto que es consciente de la forma en la que Gokudera-kun le mira, la forma en la que le sonríe o cómo se pone nervioso cuando se tocan o están muy cerca, y sus sentimientos hacia su persona son tan claros y obvios que alguien tan despistado como él se dio cuenta desde hace tiempo. Jamás se imaginó que tuviera el valor de hacerlo, de confesarse con una seguridad y un porte… ¡Qué Dios! ¿Quién no caería ante él? ¡Es tan lindo!

- ¿Décimo?

Su voz se escucha preocupada y su expresión eso refleja, al pasar los segundos y no obtener ninguna respuesta ni reacción de su parte.

¿Acaso hizo mal? ¿Se equivocó al confesarle sus sentimientos? ¡Claro! ¿Por qué alguien tan especial y maravilloso como su Décimo iba a aceptarlo a él, pudiendo tener a cualquier persona a su lado?

Hayato comienza a preocuparse y atormentarse, arrepintiéndose de lo que ha dicho. Se dejó llevar…

- ¡L-Lo siento, mucho, Décimo! –hace una reverencia a modo de disculpa, evitando mirarlo a los ojos.- ¡Olvide mis palabras, no debí decirle…!

¿Eh? ¿Se está arrepintiendo? ¡No puede permitir eso!

- ¿Qué? ¡N-No, Gokudera-kun, no te disculpes, por favor! –lo abraza con fuerza, para evitar que termine su oración.

- ¡Pero yo…!

- ¡No!

Un extraño y tenso silencio se forma entre ellos. Es ahora o nunca.

- ¡Por supuesto que me gustaría salir contigo! -exclama de pronto, sintiéndose tan avergonzado pues no sólo su amigo sino también las personas que pasaban por ahí lo han escuchado al gritar de ese modo.

Quiere que la tierra se lo trague.

"Sólo espero que… nadie conocido me haya escuchado".

Lo suelta poco a poco, agachando su mirada al estar completamente rojo.

- ¿Décimo? –la Tormenta busca sus ojos.

Su capo es tan bueno, que para no lastimarlo o poner en peligro su Amistad, le ha dicho que sí sin pensar. No obstante, no quiere forzarlo de ninguna forma. No sería justo para él.

- No tiene que aceptar sino quiere, Décimo. –sonríe con un pequeña sonrisa melancólica.- Lo entiendo, de verdad. No se preocupe…

- ¡No me estás entendiendo, Gokudera-kun! ¡Si te he dicho que sí es porque yo…! Porque tú también… -murmura, mirando hacia otro lado al no poder pronunciar esas palabras. Es tan difícil, pero si él ya las dijo, es lo mínimo que puede hacer.- Me… gustas.

- ¿Eh? –su expresión cambia por completo. Jurando Tsuna que su amigo brilla de la emoción y hasta tiene unas lindas orejas caninas y una cola.- ¿Lo dice en serio, Décimo?

- Sí.

Dice por lo bajo, sintiendo después como la Tormenta lo estrecha feliz entre sus brazos. Él se deja hacer, poniéndose más rojo y sintiéndose tan bien ahora. ¿Cuántas veces soñó con eso?

- ¡Muchas gracias, Décimo! ¡Le aseguro que no se va a arrepentir!

Gokudera se separa un poco, dándole un tierno beso en la mejilla.

Aquello es suficiente para hacer que su cuerpo se caliente gradualmente hasta hacer que se desmaye de la emoción, felicidad y hasta vergüenza.

Sigue siendo un niño.

- ¿Décimo? –lo sostiene entre sus brazos, sin saber qué es lo que ha pasado.- ¿Qué le pasa, está bien? ¡Décimo!

Sin duda, no está hecho para lo relacionado al Amor. Hasta en ese campo tiene que ser débil y patético…

… aunque ahora es muy feliz. Eso no lo puede negar.

Fin.


Bueno, ya saben que también amo a esta linda pareja :D

Por lo que no puedo parar de hacer aportes al 5927. Esto serán viñetas inspiradas en cualquier cosa (auto conclusivas, por supuesto) porque el 5927 está en todas partes (?). El título de esta colección fue tomado del capítulo 182 del anime, donde se define que Imprudencia (Gokudera) e Ingenuidad (Tsuna) son necesarias y tienen un vínculo muy fuerte.

Sin más por ahora, gracias por leer. La siguiente viñeta pronto ;)