Se que este será otro de esos días donde deseas no haber salido de la cama, lo predije desde que Enzo me trajo el desayuno a la cama con un atisbo de sonrisa.
Luego lo confirme en mi teléfono.
Era el cumpleaños de Bonnie.
Aunque los muertos no cumplen años ¿o sí?
Me mire al espejo haciendo una mueca de sonrisa y espere hasta que esta hiciera efecto y saliera por sí misma, no debía de preocupar a Enzo y menos hoy, el día que terminábamos nuestro recorrido por el mundo.
En unas pocas horas íbamos a estar en Nueva Orleans.
En mi defensa no quedaban más pueblos por visitar en todo el mundo, incluso habíamos pasado una temporada en Alaska, divirtiéndonos con los pingüinos. Pero había retrasado mucho tiempo ir a Nueva Orleans con miedo de cruzarme con Klaus. Otro atisbo de mi pasado.
—Han pasado más de cincuenta años Care, el no estará allí —me susurre a mí misma antes de darme una ducha y lavar mi pelo que hasta ahora estaba a la mitad de mi espalda
—¡Date prisa! —exclamo Enzo desde el otro lado del apartamento a lo que resople, ignorándolo
En todos estos años Enzo ha sido lo mejor que me ha pasado, intenta protegerme de los lobos que se nos acercan —alegando que tengo olor a uno de ellos—, de las brujas que nos hemos cruzado y sobretodo de mi misma.
Eso no tiene sentido para ustedes pero para mí sí.
No les hablare de eso ahora, no tengo ganas.
El apartamento en el que estábamos actualmente, era rentado y tenía vencimiento mañana. Aunque por ahora no parecía habitado.
Me puse un vestido rosa pálido y unas botas negras, recogí mis cosas del baño y las tire a la maleta abierta que tenía allí.
Había aprendido que mientras menos maletas lleves, mejor era.
Solía comprar ropa en los lugares que iba. Luego de usarlas dos veces la donaba a la caridad y lo mismo hizo Enzo. Sin trabajar, gracias a la cuenta abierta que dejo mi mamá y a los trabajos ocasionales que hacemos, quedándonos un tiempo en algún lugar nos dejaban beneficios. Sin olvidarse de la compulsión.
—¿Estas lista? —pregunto con los brazos cruzados desde la puerta a lo que asentí y tome mis maletas bajándolas rápidamente y volví a la habitación en busca de mi bolso y mi teléfono.
Suspire antes de salir del apartamento y me susurre mentalmente otra vez que Klaus no estaría allí.
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—¿Se supone que debemos de tomar un taxi? —pregunte escéptica a lo que el sonrió y asintió —¿Es enserio? ¿No podemos rentar un vehículo?
—Ya sabes Care, mejores experiencias. Además es mi primera vez en Nueva Orleans al igual que la tuya y tenemos que disfrutarla. Solamente sonríe un poco y tomamos un taxi.
Odiaba cuando me trataba como una chica de cinco años, rodé los ojos a lo que el sonrió y saco mis lentes de sol de mi bolso
—Así eliminaremos esa mirada de odio que tienes allí.
—Ay Enzo, deja de hacerte el ridículo. Sabes que estoy al límite, no me molestaría clavarte una estaca, sacarla y volverla a clavar.
En respuesta, soltó una carcajada.
—La gatita ha sacado sus garras. Que adorable, estoy seguro de que a Stefan le hubiera gustado eso.
Solté un gruñido, intentando controlar los colmillos a lo que el sonrió como si no le importara.
—Es enserio, no sé porque estoy aquí contigo —gruñí furiosa mientras arrastraba mis maletas saliendo del aeropuerto, mientras escuchaba sus carcajadas siguiéndome
—¡Ya basta! —grite girando a lo que tropecé con alguien, genial —Lo lamento mucho, enserio. No fue mi intención golpearte ¿estás bien? —las palabras salían atropelladas de mi boca y podía escuchar a Enzo reprimir las carcajadas
—Estoy bien, no te preocupes. Me siento bien de haber chocado con semejante belleza —sonriendo intento ayudarme con mis maletas —Soy Marcel.
Levante las gafas de sol para que pudiera verme bien y le sonreí tranquila.
—Caroline. Ese que se está matando de la risa es Enzo.
El asintió sin dejar de mirarme lo que me hizo sentirme extraña pero al mismo tiempo aliviada.
—¿Turistas?
—Le puedes decir así, aunque no del todo —sonrió Enzo a lo que solté un suspiro, esto no iba a salir bien
—Claro que no, hace mucho tiempo que no tenemos una pareja de vampiros como turistas. ¿Cuánto tiempo se quedaran?
—Aun no lo sabemos. ¿Podrías dejar de preguntar tanto? Quiero tomar un taxi y darme una ducha. Sin ofender pero no soporto a los que preguntan tanto.
El solo rio a lo que solté un suspiro
—Claro. Esta noche tendremos una fiesta en el casino ¿les gustaría venir?
Sentí como Enzo ponía su brazo en mi hombro a lo que solté un suspiro.
—Claro que sí, no nos perderíamos nuestra primera fiesta en Nueva Orleans ¿no es cierto cariño?
Asentí a lo que el asintió y luego de despedirnos tomamos el tan esperado taxi.
—¿Cuántas veces te he dicho que no me digas cariño? Es extraño además de que eliminas todas mis posibilidades de alimentarme pensando que estoy contigo.
—¿Es que no lo estás? —pregunto inocentemente, podía escuchar su sonrisa. Intentaba ponerme furiosa
Lo ignore y observe las calles por las que cruzábamos hasta que nos detuvimos en el edificio por el que estaríamos quedándonos por tiempo indefinido.
—Esta vez la habitación más grande es la mía. Ni intentes decir que no —murmure dejando el equipaje en la puerta para revisar cuál de las dos era la más grande
—Podemos compartir, sabes que a mí no me molesta.
Creo que mi rostro no le agrado para nada ya que sonrió inocentemente mientras caminaba hacia la cocina.
—Te preparare una rica cena mientras te preparas para la fiesta.
—¿Podrías de dejar de tratarme así? Sé que hoy no es el mejor día de todos pero no soporto que me trates así. Ha pasado más de cinco años y siempre es lo mismo. Ya lo supere.
El asintió en silencio y nos quedamos mirándonos hasta que fui débil y camine hacia la habitación grande —resulto ser color crema— arrastrando mis maletas.
Saque mi teléfono del bolso y encendiéndolo observe la hora.
Casi las ocho de la noche.
Podría decir que este día ha pasado muy rápido. Es mejor así.
El teléfono empezó a bombardearme con avisos de llamadas perdidas, mensajes e incluso correo de voz. Todos de mi pasado. Más bien: Elena, Matt, Tyler y él.
Incluso no soportaba pensar su nombre, me daban ganas de matar a alguien.
Para cuando salí de la habitación, Enzo estaba listo para la fiesta. En la mesa del comedor teníamos panqueques a lo que reí haciéndolo sonreír pero de un momento a otro se convirtieron en sollozos.
—Se supone que esto no iba a ser así —me queje entre lamentos, sentía los dedos de Enzo acariciarme la espalda y solté un gemido —He arruinado tu camiseta —me queje a lo que el no dijo nada —Mejor vamos a comer esto y luego vamos a olvidarnos de nuestros nombres. No importa si tenemos que buscar una bruja para que encante nuestro alcohol. Se supone que Nueva Orleans es el centro de las brujas más poderosas ¿no?
No deje que respondiera sino que comí los panqueques rápidamente y le sonreí intentando aparentar tranquilidad
—Iré a arreglar mi maquillaje. Cámbiate la camiseta, te aseguro que yo misma la lavare y quedara como nueva.
Sin esperar nada en respuesta corrí al baño donde había dejado el maquillaje desorganizado, podía escuchar al teléfono vibrar también pero no lo tome. Ni siquiera me intereso mirarlo.
Esta noche iba a ser diferente.
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—Al parecer las noticias de que Nueva Orleans es de nuevo una ciudad tranquila han estado circulando —anuncio Marcel a un Elijah tranquilo mientras este ponía su libro actual en el regazo
—¿Qué quieres decir Marcellus?
Marcel sonrió al ver que atrapo la atención de Elijah, si lo había hecho con el de seguro Klaus estaba escuchando también
—Una pareja de vampiros ha llegado hoy. Creo que Klaus la conoce. ¿No había mencionado Esther el nombre de Caroline antes de morir?
Un segundo después Marcel estaba contra la pared y sus pies alejados por unos centímetros del suelo
—Alto Niklaus —demando Elijah mientras se ponía de pie caminando en su dirección —¿Por qué crees que esa es la Caroline que menciono madre antes de morir Marcellus?
—Solo lo sé. Tengo un presentimiento de que es ella. Aunque no estará fácil para Klaus. Tiene novi… —dijo sin poder terminar la palabra ya que Klaus había apretado más fuerte
—No te atrevas a hablar así de Caroline. Te matare si te escucho. Caroline esta en Mystic Falls y punto.
Sin decir más lo dejo caer al suelo y desapareció.
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¡Hola a todos! Aquí estoy con mi primer fic de TVD, con mis parejas favoritas.
Klaroline y Carenzo.
Esperando reviews como loca.
Nel
