El bar

Capítulo 1: Love of my life

El hombre que ya pasaba los treinta años miraba por la ventana perdido en sí mismo. Se notaba por las arrugas en su rostro que el dolor había dejado sus huellas en él. La vida cruel que había tenido que soportar, había dejado las marcas en su cuerpo... y en su alma. Su cabello rubio ya no era el de aquel adolescente que enamoraba a las muchachas en Hogwarts. Ahora se veía bastante grasiento, y muy dejado.

La nieve caía impasiva sobre la hermosa ciudad de Londres que ahora se veía blanca. El frío demostraba que el invierno había llegado, y los pobres habitantes, arropados hasta las orejas, intentaba caminar por las calles.

De pronto, alguien le tocó el hombro.

"Aquí tiene su café..." Le dijo una mujer extendiéndole una taza con el humeante líquido que se apresuró a tomar. Aún no entendía que diablos hacía en un bar muggle como ese. Y su cabeza le respondió.

Hacía años que no trataba con magos. Desde que el Lord Oscuro había caído, hacía ya seis años, había tenido que huir... debió mezclarse entre aquellos a los que había tildado de enemigos, y hacerse pasar por uno de ellos para no ser enviado a Azcaban. No quería terminar como el idiota de su padre...

El cálido sabor del café le devolvió un poco la tibieza que el frío viento le había arrebatado. Continuó perdido en sus pensamientos y se olvidó del mundo...

Pensaba en ella...

El atardecer caía sobre la ciudad, mientras el cielo se convertía en una gran paleta llena de colores azules y violetas. Draco terminó de beber el café y se echó atrás en la silla. Suspiró.

Y de pronto, una mano que él conocía muy bien se posó en su hombro. El rubio tardó en darse vuelta. No quería reencontrarse con aquella mirada que él sabía le traería su pasado a la realidad.

Pero lentamente, se volvió y sus ojos se posaron en la hermosa pelirroja que le sonreía a su lado.

"Ha pasado mucho tiempo, Draco..."

"Demasiado..."

La chica se sentó en su mesa y llamó a la camarera, para luego pedirle una taza de té.

"¿Y bien?" Le preguntó él, impaciente. Ella lo observó detenidamente. Los recuerdos comenzaron a aflorar en su pecho como una catarata de sentimientos. Se acordaba de muchos encuentros... fugaces, pero encuentros al fin, en los que habían luchado uno contra el otro por sus vidas.

"Quería verte... saber como estabas... han pasado seis años, Draco. Y no he dejado de pensar en ti..." El silencio provocador, de nuevo se cernió entre ellos. Él la miraba fijo, sin demostrar ningún tipo de sentimiento. Y ella trataba de decirle que a pesar de todo lo ocurrido...

Aún lo amaba...

O:o:o:O:o:o:O FLASHBACK O:o:o:O:o:o:O

"¿Por qué no puedes dejarme en paz?" Le gritaba la joven pelirroja, que lloraba tendida en el suelo mientras un rubio la miraba con altivez.

"Tú no mereces estar en paz... no después de humillarme como lo hiciste..."

"¿Humillarte?"Le preguntó ella mientras trataba de pararse. Se hallaba realmente confundida. Todo en su vida iba mal. El mundo se encontraba sumido en la peor de las guerras, y ella no sabía que hacer para ayudar. Sus hermanos la obligaban a quedarse en casa para su protección... pero ella odiaba que la trataran como si fuera de cristal.

Y ahora que sentía que por fín alguien la valoraba, se enteraba que solo había sido para sacarle información.

"Volviste con Potter... y eso jamás te lo perdonaré..." La chica logró levantarse, pese al dolor que sentía en su cuerpo. Una punzada en su estómago le recordó el golpe que había recibido de un mortífago... el que ahora yacía muerto en el suelo gracias a Malfoy.

Había matado a uno de los suyos para protegerla...

"¿Y yo debo perdonar que hayas jugado conmigo? Si yo volví con Harry es solo porque tú me obligaste..." Le respondió al mismo tiempo que buscaba con la mirada a aquellos ojos que alguna vez la habían cautivado.

El rubio se quedó pensativo. Sus labios parecían duros y ella rezaba porque pudieran expresarle lo que en realidad pensaba de ella.

"¿Y quien diablos te dijo que jugué contigo?" Draco avanzó impasivo hacia ella y tomó su rostro en sus manos.

"No... no hagas esto... te lo suplico... no estoy dispuesta a que vuelvan a lastimarme..." Le susurró ella sin mucha convicción mientras sentía su aliento a milímetros de su boca. Se estremeció, y él lo notó.

La besó.

Y la soltó.

"¿Aún crees que estoy jugando contigo?"

O:o:o:O:o:o:O:o:o:O FIN FLASHBACK O:o:o:O:o:o:O:o:o:O

La pelirroja reía animadamente mientras el rubio seguía hablando. El ambiente se hallaba algo mas calmado. Sobre la mesa, la torta de frambuesa estaba por la mitad y una nueva ronda de café estaba a punto de desaparecer.

"...y entonces, tu hermano entró en el cuarto y tuve que desaparecerme al baño... pero justo tu otro hermano estaba... bueno... haciendo sus necesidades..." No pudo continuar hablando, porque una carcajada de Ginny lo interrumpió.

"¿En serio no lo recuerdas?" Inquirió él tras beber un sorbo de su café. Ella meneó la cabeza negativamente.

"La verdad que no... pero es bueno recordar los viejos tiempos..." Ambos se quedaron mirando. Sus ojos se encontraron un instante. En los de él se notaba el cansancio de los últimos años, y en los de ella la chispa de amor que aún crepitaba en su corazón.

Apartaron la vista rápidamente.

Ninguno sabía que decir.

"Creo que se hizo tarde..." Susurró ella de repente, mirando su reloj de pulsera. Se levantó bruscamente y él le tomó la mano entre las suyas.

"No te vayas..."

Ella suspiró y lo miró directo a los ojos. En aquel instante, todo en su vida se desmoronó.

"Draco... sabes lo mucho que quería verte. Dame tiempo... deja que aclare mi vida un poco..."

"¿Más tiempo? Ginny... te recuerdo que seis años en las sombras esperando que te decidieras es mucho tiempo..." Le contestó molesto. La soltó de golpe, y ella sintió que un frío terrible invadía su cuerpo. Un escalofrío la sacudió por completo y fue cuando se dio cuenta que él tenía razón. Si seguía esperando, iba a perder todo lo que quería para siempre.

Lo iba a perder a él.

"¿Mañana aquí a la misma hora?"

"Te estaré esperando..."

Ella le sonrió y tras besarlo en la mejilla suavemente, desapareció tras la puerta entre la muchedumbre de gente. Draco se quedó allí parado. Pero un viento gélido le sopló en la cara, y lo hizo volver a la realidad. Pagó la cuenta, y salió del bar.

Caminó y caminó hasta llegar al edificio donde vivía. Tomó el ascensor que tanto odiaba y llegó al piso cuatro. Colocó la llave en la cerradura de la puerta y entró.

O:o:o:O:o:o:O FLASHBACK O:o:o:O:o:o:O

El rubio la miraba dormitar mientras le acariciaba los cabellos. No pudo evitar que un suspiro fugitivo escapara de sus labios. La guerra parecía no terminar nunca, y ellos seguían tratando de ser felices a su modo. Se llevó las manos a la cara.

Últimamente, las cosas iban de mal en peor.

Mientras él buscaba la manera de serle fiel a su Lord, tenía que convivir con algo que comenzaba a gestarse muy dentro suyo. El amor a ella. Y lo que había comenzado con un plan para sacarle información a la Weasley más pequeña, se había transformado en algo muy peligroso que debían ocultar si querían seguir vivos.

"¿Todavía estás aquí?" Escuchó que le preguntaba una voz a su lado. Él la observó. Se hallaba semidesnuda, y ella trataba de taparse con las sábanas que la protegían del frío. Draco le sonrió como sólo él sabía hacerlo.

"Yo siempre estaré aquí, cuidándote..."

O:o:o:O:o:o:O FIN FLASHBACK O:o:o:O:o:o:O

Ginny llegó a su casa exhausta. Se tiró en el sofá a pensar. Aquel día, lo había estado esperando desde hacía mucho tiempo.

Verlo de nuevo.

Se sonrió a sí misma. Por fín eran libres de sentir aquello tan hermoso que los unía... ya no estaba ni Voldemort para enfrentarlos...

Ni Harry para separarlos...

Una sombra cruzó su rostro. Hacía exactamente seis años que la oscuridad había desaparecido de la Tierra junto con el reinado de terror del Dark Lord. Pero junto con él, la llama de vida del "Niño que vivió" se había apagado.

Pero a pesar de que ahora las cosas eran muy diferentes entre Draco y ella... el tiempo había marcado sus vidas. Aún perduraba la distancia en sus palabras... y ya no eran los mismos.

Emitió un enorme bostezo y se dirigió a su cuarto. Lentamente se despojó de sus ropas y se metió en la cama. El sueño no se hizo de rogar, y pronto la alcanzó.

Y se quedó profundamente dormida...

O:o:o:O:o:o:O:o:o:O FLASHBACK O:o:o:O:o:o:O:o:o:O

"¡Harry no me hagas esto!" Gritaba ella desesperada, mientras el morocho alzaba la varita. Draco, tirado en el suelo sangrando por doquier, luchaba por no cerrar los ojos.

"Ginny... él es un mortífago... es un Malfoy... no puedes estar enamorada..." Le dijo secamente. Ginny sentía las lágrimas resbalar por su rostro, pero no podía hacer nada para evitar el llanto. Rápidamente se interpuso entre la varita de Harry y el cuerpo de Draco.

"Tú no vas a decirme lo que debo hacer... y no tienes derecho a matarlo..." Últimamente desconocía a aquel que había sido su mejor amigo. Y tal vez algo más. Desde la muerte de Sirius, Harry ya no reía. Se había transformado en una máquina de matar. Era frío y calculador... y su única meta era la venganza.

"Apartate... no quiero lastimarte, Ginny... "

"Ya lo estás haciendo..." Ambos se miraron y lentamente el muchacho fue bajando la varita.

"Estoy seguro que te arrepentirás de esto..."

"¿Vas a contarle a Ron?" Le preguntó ella alarmada. Pero cuando levantó la vista hacia él, Harry había desaparecido.

"Draco... ¿Estás bien?" Inquirió mientras se agachaba y trataba de reanimarlo. El rubio tenía múltiples heridas que Harry le había provocado. Ginny no podía creer que él fuera capaz de lastimar tanto a alguien...

Al ver que él no contestaba, le tomó una mano y concentrándose mucho se desapareció junto con él a su casa. Una vez allí, se dispuso a curarlo.

Aquella fue una de las últimas veces que ella lo vio antes de que el Lord Oscuro fuera derrotado.

"Ginny... desearía que jamás amaneciera otra vez... así no tendría que irme de tu lado..." Le había dicho una vez cuando se hallaban uno junto al otro en la cama, aguardando el odiado momento de la despedida.

Los rayos de sol comenzaban a alertarlos... pero ellos trataban de engañarse diciéndose que aún era de moche y que las luces eran simplemente eso. Luces.

"No te preocupes Draco... alguna vez esto terminará, y podremos estar juntos todo el tiempo que queramos..."

"Me encantaría creerte, Gin... pero me es muy difícil..." Ella se abrazó fuertemente a él como queriendo aferrarse a su cuerpo y así no tener que separarse nunca.

Y así, unidos, aguardaron el momento de la triste despedida...

O:o:o:O:o:o:O:o:o:O FIN FLASHBACK O:o:o:O:o:o:O:o:o:O