FANFIC 1 (Decision, destino, consecuencias)

La mañana había amanecido lluviosa, washington tenía un color mortecino, espectral.

Brenan se subió en el coche en una rutina que la llevaba cada día hasta su despacho en el Jeffersonian, pero aquella rutina no presagiaba la verdad de la jornada.

Al llegar, dejó sus cosas ordenadamente en la mesa, sin percatarse de que unos ojos la observaban desde el fondo de la sala.

- Hola Temperance.

Brenan dio un respingo y se giró en guardia, extrañada de no haberse dado cuenta antes de que no estaba sola.

Pero no estaba preparada para afrontar directamente a la persona que la miraba desde el otro lado de la estancia.

Sully, moreno, con ropa informal y sintiendose muy emocionado por volver a verla no podía disimular en sus ojos las preguntas sin contestar que se arremolinaban entre los dos.

- Hola Temperance.

-Eso ya lo has dicho

-No me cansaría de repetirlo

-¿Que tal estas?, ¿Como fue el viaje?. Creia que estaría mas tiempo fuera yo no pensaba verte tan pronto, quizas si me...

Brenan hablaba deprisa nerviosa por una situación en la que no se sentía controlar las pautas, nerviosa porque no había pensado en que le diria cuando volviesen a verse, si volvian a verse.

-Temperance, espera, más despacio. No se si puedo seguirte si hablas tan rápido.

Sonrio, estaba más guapa de lo que recordaba.

-Te he echado de menos. Di media vuelta y regresé, sentia que no podía comenzar una etapa si dejaba tantas cosas pendientes en la anterior, ¿y tu?

Brenan lo miraba perpleja, encontrarlo era una sorpresa, lo que sentia al verle una incognita, pero asimilar lo que acababa de escuchar, algo imposible, necesitaba un minuto para ordenar sus ideas. El destino no le concedió ni siquiera un segundo, pues en ese mismo instante entró pletórico Booth en la sala con noticias de su último caso.

-Huesos, buenos días, sabía que estarías ya aquí. Escucha me han llamado del laboratorío del FBI y ya tienen los resultados de las pruebas que Hodgins pidió sobre el recipiente radioactivo que contenía el cadaver del guarda del museo.

Huesos, ¿no me oyes?, en marcha que tenemos trabajo.

Booth de espaldas no veía a Sully que paseaba la mirada entre la espalda de su amigo y la mirada azorada de Brenan que escondía algo que Sully no lograba descifrar.

-Hola Booth que tal va todo?.

Dijo Sully haciendo que Booth se volviese perplejo hacia él. Las reacciones fueron esclarecedoras y lentas a un tiempo. Booth miró primero a Sully, después a Brenan con una expresión inquisitiva y acusadora a partes iguales; y en este corto espacio de tiempo Sully los observó a los dos, formandose en el despacho una extraño ambiente, sólo roto al final por la afabilidad de Booth, fiel amigo de sus amigos, que se acercó hasta Sully y le dio un sentido abrazo.

-Hola Sully, no sabía que volvias ¿que tal ha ido todo?

-Bien aunque ya veo que el ritmo sigue por aqui tan frenético como siempre ¿no?

-Si eso es. Bueno ahora tengo que marcharme esto no puede esperar. Me alegro de verte, te ves muy bien en serio. Llamame esta tarde y quedamos para charlar y tomar un cafe. ¿Vienes Huesos?

Y Brenan se quedó alli mirando confusa hacia la puerta donde Booth la esperaba para resolver otro crimen, y hacia el fondo de su despacho donde Sully aguardaba unas repuestas que ni siquiera ella sabía si conocía...