Hola! Pues bien, este es mi primer fanfic, espero que os guste y por favor, dejadme un review para saber si tengo que mejorar algo o si os gusta la historia

Pareja principal: Draco/Hermione.

Guia de lectura:

normal-- Narración

-normal-- Diálogo

-"cursiva"-- Pensamientos de Hermione

-"cursiva subrayada"-- Pensamientos de Draco

Aún hay esperanza

I. La estúpida sensación, Malfoy y las nuevas vidas

Hermione se despertó esa mañana con la desagradable sensación de que algo iba mal. O al menos, que algo iría mal pronto.

-"Tal vez le pase algo malo a Ron o a Harry, hoy era su primer día como aurores."

Con ese pensamiento, se levanto de un salto de la cama, y al salir al salón del piso que compartía con sus mejores amigos, vio que su preocupación era en vano, ya que tanto Harry como Ron, aún estaban desayunando.

-¡Hermione!, ¿que tal? tienes mala cara...- le dijo Harry, con expresión preocupada.

Ella se miro en el espejo que había colgado en la pared y vio que realmente, tenia un aspecto horrible, peor del que ya de por si tenia recién levantada. Las ojeras propias de los humanos recién levantados solo resaltaban unos ojos marrones claros algo hinchados y enrojecidos, con signos de cansancio. Su pelo, mas alborotado que de costumbre, incluso mas que otras mañanas, sumado al viejo pantalón deportivo y la camiseta excesivamente grande de tirantes que llevaba como pijama y las ojeras le daban en conjunto un aspecto triste y descuidado.

- Estoy bien, Harry, no es nada... Es que leo hasta muy tarde... Y últimamente no duermo muy bien... Ya sabes- Hermione bostezo-... estudio mucho por las noches y eso... Bueno, tú ya me entiendes ¿no?

Era una respuesta evasiva, se notaba mucho, pero nuestro amigo, El-chico-que-vivió-y-venció, no era precisamente muy espabilado en estos temas y ya que Ron estaba desayunando, y por tanto, mas atento a sus tostadas que a la conversación, ninguno noto que Hermione ocultaba algo. Pero ¿realmente ocultaba algo? No, en realidad no ocultaba nada, pero Hermione tenia la horrible sensación de que algo iba mal, y ese algo la atormentaba por las noches en forma de pesadillas e insomnio, as que prefería ni mencionarlo delante de sus mejores amigos.

-¿Fo cree que ez un foco trrde, Frarry?- dijo Ron con la boca llena de tostadas y mermelada.

- Perdona, Ronald, ¿en cristiano, por favor?- replico Hermione, quien ilusa, pensaba que viviendo con ellos podría conseguir que mejoraran sus modales.

Ron trago ruidosamente y bebió un sorbo de café antes de contestarle burlonamente:

-Era Harry a quien hablaba, señorita remilgada, no hace falta que te metas en la conversación, gracias.

- Vaya, Ronald, entonces discúlpame por no haberme dado cuenta aun de que tenéis un lenguaje secreto entre vosotros. Perdona, señor maleducado, por mi ignorancia y no te preocupes, no hace falta que me des las gracias- dicho eso, se encerró en su habitación de un portazo, dejando a dos chicos con la boca abierta, ya que su amiga jamás hablaba así con ellos.

- Tío, ¿pero que le ocurre? Cada día la entiendo menos, yo siempre hago ese tipo de bromas con ella, ¿Porque se lo toma hoy tan a pecho?- pregunto Ron atónito.

- No se, Ron, no tengo ni la menor idea. Bueno, vámonos ya, que se nos esta haciendo tarde, y Moody nos matara si llegamos tarde el primer día.

-"¿Que me ocurre hoy? ¿Porque le he hablado así a Ron? Estoy fatal... y esa estúpida sensación en el estomago no me deja concentrarme en asuntos mas importantes, como por ejemplo, que hoy también es mi primer día en el ministerio y tengo que salirme de una buena vez de la ducha... mmmmm.. Pero se esta tan bien... ¡baila el chiki-chiki, baila el chiki-chiki! ¡NO! Piensa en otra cosa, vamos Hermione... otra canción... ¡y yo sigo aquí, esperandoteee! ¡NO! esa tampoco... mmmm... ¡Aserejé, já, de jé, dejebetudejebe reiseimiunoua majabi an de bugui an de wini di pi! ¡¡NOOOO!! vamos, Herms, alguna que sea normal... mmm ¡ah, ya se! ¡¡ I love rock 'n' roll!! ... eso esta mejor... y ahora ¡Sal de la ducha Hermione Jane Granger!"

Mientras Hermione divagaba en la ducha de su piso compartido en el Londres muggle a muchos kilometros de allí, en Wiltshire, mas concretamente en Malfoy Manor, un joven hablaba con un cuadro colgado en la pared.

- Si, padre, hoy comienzo en el ministerio de magia, como ya te dije ayer, y espero tener tanto éxito como tuviste tú, en tu tiempo.

El joven (NA: como si no lo supierais ya... ¬¬) era Draco Malfoy, vestido con una túnica negra y verde muy formal, y con el pelo rubio característico de los Malfoy, que le llegaba por los hombros, completamente peinado hacia atrás y con demasiado gel para fijar. Hablaba con el cuadro de su padre, Lucius Malfoy, que tras su muerte en la batalla final de Howarts, se había convertido en su mayor confidente. Aparte de los cuadros que poblaban la mansión, tan solo charlaba ocasionalmente con sus antiguos compañeros de Slytherin y por asuntos de negocios con gente del ministerio. En los últimos tres años nadie había sabido gran cosa de el. Había tenido una vida tan normal como la de cualquier joven de su edad, amantes ocasionales, horas de estudio y fines de semana de fiesta con sus amigos.

-"Vivir para ver... YO, el gran Draco Malfoy, heredero de la fortuna Malfoy, el estudiante más brillante de mi carrera y el segundo de mi promoción en Howarts... maldita sangre sucia de Granger... YO, que soy el soltero mas solicitado de Inglaterra, el mas guapo, el mas sexy, el que esta mas bueno, el mas interesante... Empiezo hoy mi nueva vida... una vida de cual me he privado estos tres años... pero hoy, ¡Prepárate mundo! ¡Draco Malfoy vuelve a la carga! ¡Temblad chicas! ¡Tiembla ministerio! ¡Temblad sangres sucias!"

Con estos... ¿interesantes? pensamientos, el rubio mas codiciado de Londres se Apareció en el ministerio de magia. Pero toda sus intenciones de una agradable vida nueva se esfumaron cuando a su lado se Apareció una chica castaña de pelo rizado con una túnica blanca y azul celeste.

-¿¿Granger!!- Grito Draco- ¿Que coño haces tu aquí?

-¿¿Malfoy!!-Grito Hermione a modo de respuesta- ¿A ti que coño te parece? ¿Trabajar, a lo mejor? Anda Malfoy, tírate por un puente y hazle un favor al mundo.

Dicho esto, Hermione se dio la vuelta y hecho a andar hacia el Departamento de Leyes Mágicas. Malfoy decidió que ya le haría la vida imposible más tarde, así que se dirigió a su nuevo trabajo... en el Departamento de Leyes Mágicas. Por suerte, no coincidieron en el mismo ascensor, ya que la autora no tiene ganas de pensar una discusión ingeniosa en un ascensor con mas gente, y si los pone solos no resistirá la tentación de hacer que se confiesen amor eterno y se besen apasionadamente... esto... bueno, como iba diciendo no coinciden en el ascensor, por tanto, aun no saben que van a trabajar juntos (NA: muajajajaja). Cuando llegaron al Dpto. su jefe, Tom Sterling, un hombre que rondaría los 50, con ojos azules oscuros, una sonrisa fácil en la cara y la expresión de un abuelo bonachón, les esperaba junto a un sonriente Charlie Weasley.

- Ah, señorita Granger, ya ha llegado usted. El señor Weasley y yo nos alegramos mucho de que este aquí ¡Por fin!- Sterling parecía encantado con la llegada de Hermione- Su curriculum es impresionante, soy muy afortunado de tenerla en mi departamento.

Hermione se ruborizo ligeramente frente a las atenciones de su nuevo jefe. Charlie le sonrió y se acerco a ella.

-¿Que tal, Herms? Ya te acostumbraras al viejo Sterling, esta como una cabra- Charlie le guiño un ojo- Entre tu y yo, es el mejor jefe del mundo, tienes mucha suerte de entrar a trabajar aquí, además, yo seré tu supervisor en la subdivisión de Criaturas Mágicas y...

Charlie se quedo embobado mirando detrás de Hermione, así que esta se giro para ver que pasaba cuando lo vio.

-¿¿Malfoy??

-¿¿Granger??

Gritaron los dos a la vez.

-"Mierda, ya decía yo que algo malo iba a pasar... Mierda, mierda, mierda, mierda..."

Hermione maldecía su suerte. Al menos haría eso si dejara de repetir como un CD rayado "mierda, mierda, mierda...".

-"Joder, tenia que entrar a trabajar con la sangre sucia de Granger... Vamos, piensa, ¿te has equivocado de botón en el ascensor? No... Ese tio de ahí es Sterling, que va a ser tu jefe y supervisor..."

-¡Vaya! ¿Ya os conocíais? ¡Que bien!-Sterling parecía encantado con eso- así me ahorro las presentaciones ¿no? ¿Os han dicho alguna vez que hacéis muy buena pareja?

-"¡¡QUE?? ¿La sangre sucia hace buena pareja conmigo? ¿¿Pero tú la has visto?? Con ese pelo... y esa carita de no haber roto un plato nunca... vamos, y esa expresión de santurrona virginal mojigata... aunque no esta nada mal... a esa lo que le hace falta son un par de buenos besos y... ¡ey! Para el carro, Draco, que es la sangrecita sucia de Granger, la amiguita de san Potter, Oh-mírame-soy-el-salvador-del-mundo y la novia de Weasel, pobretón-vivo-en-una-habitación-con-toda-mi-familia...

-"¡¡ ¿Malfoy y yo?! ¡No me hagas reír! No es mas que un niñato creído y mimado, ególatra, elitista, egocéntrico, snob, y, y... bueno y por no hablar de su aspecto, con ese pelo... y esa carita de no haber roto un plato nunca... y esa expresión de ¡oh, mírame, soy el soltero mas codiciado de Inglaterra! Aunque con ese cuerpazo no me extraña y... ¡ey! Para el carro, Hermione, que es el hurón de Malfoy, el hijo de Lucius Malfoy, soy-la-mano-derecha-de-Voldy y el novio de Pansy Parkinson, cara-de-perro-y-me-creo-que-soy-lo-mas-de-lo-mas...

-"Vaya mierda de día"-Pensó Hermione al llegar a casa-"¿Malfoy? ¿Porque Malfoy?¡Estúpida sensación!!Estúpida Trelawney!! ¿Con que no tenia ojo interior, eh? Y yo que pensaba que mi nueva vida iba a ser genial...