Bon giorno! Olas~ Bienvenidos a este two-shot de Ansatsu Kyoshitsu. Dentro de un AU (1r preparatoria) Donde la clase E salvó la tierra (YES!)

Warnings: Yaoi o.o (chicox chico) (han pasado siiiiglos desde mi último yaoi XD)

Warning 2: asesinatos descritos y sangre pa' todos la'os.

Con los personajes, bueno, he dado lo mejor de mi.

Lo hago solo por diversión, esto se tornó un turbio hobbie. Y esta escrito e inventado por mi Kagura-chan!

(Si les gusta no olviden dejar fav, follow o review, me hacen feliz como escritora, dioses.)

3, 2, 1, 1/2 1 and 3/4

Go, go!


Sangre rojo carmesí

-No debí salir de fiesta la noche pasada...- con todo el cuerpo entumido pero ya despierto del todo está tendido largo en su amplia cama, las sábanas desperdigadas y el caos de la alcoba muestran el estado del propietario.

Sabía lo de la fiesta y que la noche había sido una auténtica locura pero ahora mismo no sabe ni el día ni la hora, ha perdido completamente la noción del tiempo.

-Estoy hecho un desastre- se arrastra hacia un lado de la cama y se pone de pie, sacude la cabeza y su pelo rojo se embrolla sobre sus ojos.
¿Dos días de fiesta seguidos? ¡Pues claro!
Y hoy empieza la segunda fase.
No más levantarse su móvil se pone a emitir sonidos que aún ser constantes no los había oído en sueños.

33 nuevos mensajes y abre la bandeja de entrada desbloqueándolo.

Ansatsu kyoshitsu group...

Maehara:
Karma-kun te invitamos a nuestra fiesta de esta noche, en el viejo aulatorio que dejamos al final de secundaria tras el asesinato perfecto de koro-sensei (que por cierto disfrutó y elogió hasta el último segundo)
Allí y gracias a las aportaciones de Hana, Nakamura, Ritsu e Isogai
¡Podremos celebrar el comienzo del segundo semestre que saltamos por la fiestas locales!
¡Dios mío!, ¡fue una locura! ¡Si te interesa mensajea a Okuda-san para confirmar!
!Nos vemos!

Bloquea el teléfono y se encamina a la ducha.
Esas fiestas si habían sido locas y había tantísima gente que no tuvo la oportunidad de cruzarse con nadie de la ex-clase E, ahora mismo divididos según los niveles, entr claro.
Karma comparte el aula con 15 de sus ex-compañeros de la clase E y lo mejor es que la clase de asesinos sigue reuniéndose en primer año de preparatoria.
Karma después de asearse se dirige a la fiesta.

Bebe de lo que le invitan y busca algo de diversión. Molestar a su ex-compañeros era lo más genial del mundo.
Los ha visto a todos, los ha saludado y pinchado verbalmente pero...no lo ve.
-Nagisa no está- dice en voz alta.
La mejor amiga del chico nombrado vira hacía él.
-Nagisa está en mi clase, en la B-aclara Kaede y sorbe hasta la última gota de su vaso. -Nunca sale de fiesta- ella tuerce una sonrisa.-Voy siempre yo sola.
Al acabar todos se despiden y planean a votación donde será la próxima.
Karma se marcha tranquilamente con las manos en los bolsillos.
Desde finales de tercero no había visto al pequeño peli-azul, de hecho ahora no sabe nada de él.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Una semana sigue a ese pensamiento hasta la llegada de una invitación, al parecer para sus padres, pero hurtar el correo ajeno sirve de mucho.
Obliga sus padres a llevarlo objetando que se aburre mucho en casa solo y que sus notas son más que excelentes, jodiendo al hijo del director, claro.
-Esto es interesante- piensa para sí mismo al llegar al hall del hotel.
Mucha gente que no le conoce por lo tanto nadie puede predecir sus jugarretas.

Deja de lado a la pareja de padres y entra ojeando todo por encima.
Hombres, mujeres disfrutando de fluidas pláticas y buena comida y bebida. Ligera y un poco austera decoración, música de fondo y excelente y aburrido ambiente adulto.
Se apresura a salir de aquel salón que amenaza con dejarlo sobado.

Recorre los pasillos en busca de un objetivo que le entretenga, usa la tarjeta de acceso privilegiado de su padre e utiliza el ascensor.
En determinado paso oye una acalorada conversación, muchos pasos toscos, otros ligeros, movimiento de muebles y en un instante un enorme golpe, el caer de algo muy pesado.
Acelerado y apresurando sus andares se presenta ante la escena.
La puerta de una suite abierta de par en par, la puerta siendo sujetada por una persona, la mano izquierda sobre la madera y media espalda de uno de los protagonistas.
La persona desaparece para volver a salir con alguien más. Puede ver unas piernas delgadas arrastrándose por el suelo, dobladas seguidas de un vestido corto de color carmesí intenso y puede oír quejidos de dolor.

Ese hombre tiene y arrastra a una mujer por el pelo.
Sin ninguna delicadeza la rebate contra la pared y ella queda tumbada. El hombre se acerca a ella y se agacha en cuclillas para verla mejor.
Ver como ella separa sus manos y saca una afilada navaja que clava en su yugular que extrae en un brusco tirón salpicando todo, que aparta el cuerpo inerte a un lado y se pone de pie.
La mujer de espaldas a karma con un vestido carmesí manchado de sangre, lanza su afilada arma en un tiesto cerca de ella, entra en la suite y el silencio vuelve a reinar en los corredores testigos.

Karma se acaba de percatar que esta de rodillas, que tiene los puños y los dientes fuertemente apretados sin embargo a parte de haber pasado miedo ha tenido otro tipo de sensación, quiere que esto tan increíble y grotesco suceda otra vez ante sus ojos.
De rodillas pone las palmas de las manos en el suelo, temblorosamente se dirige hacia la suite; antes de mirar a través de la puerta abierta se toma unos segundos en contemplar y no pisar el cuerpo inerte tirado aquí.
Una vez guardado esa horrorosa escena para una persona normal, pero con algo de orgullo y admiración por parte de Karma, se dispone a mirar.
Entre las penumbras de la suite determina tres cosas, las cortinas están cerradas, la suite está dispuesta en vertical mirado desde el plano aéreo y tres: la mujer está en la cama cambiándose la ropa.
Ojos de un asesino que poco a poco se acomodan a la oscuridad, una delgada figura que pierde la tela que la ocultaba, la figura ahora lisa con piernas finas, caderas anchas y cintura estrecha se mueve de dirección.
La figura se agacha un poco y otra tela que sujeta entre las pequeñas manos es la que se pondrá.

-Otro vestido carmesí, ¿eh?- en el cuerpo de karma corre un acelerado escalofrío.
Manchar el carmesí de rojo sangre es como pintar la muerte de negro, es redundante.
Karma oye pasos, se ha puesto los zapatos además de que se acercan.
Se aparta y corriendo se oculta en la esquina del pasillo como antaño.

La mujer está fuera de la habitación, de pie con otro vestido rojo y un pequeño, mas donde cabe un cuchillo, bolso.
Esta vez es ella quién de agacha a la altura del muerto, lo arrastra un poco y lo golpea contra el ventanal principal de la pared, la alarma silenciosa salta.
Ella tira el contenido de una bolsa entera en el tiesto y le prende fuego.
Sale cambiando y pasan por su lado los agentes de seguridad en busca del problema, le preguntan a ella.
Ella llora de pena al girarse, simulando venir desde el pasillo transversal, correr hacia el cadáver medio chamuscado y llorar desconsolada y desgarradamente, la calla, la animan y la dejan marcharse.
Ellos de espaldas, ella se gira y en sus enromes pero diabólicos ojos azul eléctrico, esta dibujada la cara del señor de la burla e hipocresía.

-Cielo santo- es lo único capaz de decir antes de echar a correr desesperado a la sala de fiesta, sin darse cuenta estaba presenciando un asesinato y no tenía cuartada y buscaran información sobre él hallarían que no tiene buen historial, que digamos.

En la sala de baile encuentra a sus padres dando la casualidad de que ellos también le buscaban.
-Dime hijo- su madre irrumpe sus densos pensamientos/ recuerdos.- ¿Has conocido a alguien interesante?- le hace ilusión saber que gustos tiene su hijo.
-Si...- contesta medio distraído. -Aunque creo que la sensación que tuve, la impresión al verlo todo, le resultaba un poquito familiar. Coincidencia supongo, piensa para sí mismo.
Acabo de pillarme por una asesina profesional, al igual que Bitch-sensei.
Estoy destinado a no salir de este mundillo nunca.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-

-Akabane-kun- el profe interrumpe su enorme empane y le deja el examen en la mano.
-100 puntos excelente Akabane-las felicitaciones del profe le importan un comino o dos.
Se levanta y sale del aula, era el único que estaba ahí porque lleva una semana atontado desde la fiestecita.

A sus anchas recorre los pasillos del edifico principal en busca de las escaleras laterales que dan al piso inferior.
-¿Dónde más podría encontrarla?- es lo único que tiene en mente.

El silencio le ayuda a pensar y el ruido de llaves tamb...- no eso no.
Al pasar la esquina ve una silueta, está cerrando la puerta de la clase mientras sujeta los libros con la otra, en 0,5 segundos más reconoce quien es.
Bajo, pequeño y peli-azul, ni más ni menos que Shiota Nagisa.
Karma iba a moverse pero algo de su instinto le impide moverse.

Unos pasos apresurados llegan donde Nagisa, tres de primero A el club de los toca pelotas por excelencia máxima en la academia están al lado del chico.
-Oye gallinita- (el gafitas al que tanto odio) -Me debes esos deberes para que me los copie- ve los folios sobresalir de una de las carpetas de Shiota.
-Eso, eso- los demás van en sincronía.
Nagisa solo da un paso hacia dos ellos y ya tienen un lápiz apuntando pero no clavado a la yugular.
-Tengo cosas que hacer- dice como si se estuviera disculpando por haberlos empujado un poquito.
Todos caen al suelo y le abren camino quedándose tirados a los costados.

Al Akabane le recorre otro escalofrío. Son placenteros.
Como un cosquilleo en todo el cuerpo y el sentir el latido del corazón en todas partes.
Gallina de piel.


Si desean segunda parte, aunque ya la hay... déjenlo en los review, si hay alguno .-.

Gracias por leer (tacaños ·-·)