Hola!. Etse es mi primer SasuHina asi que sean bunitos y comenten si le sgusto o no... nos vemos al final del capitulo... pero antes una aclaracion.
Aclaracion: mi conociemiento sobre Naruto es bastante excaso ya que solo puedo ver los atrasados capitulos que paso cartoon (recien Sakura se corto el pelo asi que imaginense...). Naruto no me pertence... Solo, me entretengo... Y todos tienen 16 años.
Ahora si, los dejo!
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Capitulo 1: Rescate
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Otra dia, otra noche. Un joven de aproximadamente dieciséis años caminaba tranquilamente. Aunque no se podia decir tranquilamente. No, esa no era la palabra ya que este joven era especial. Nunca sonreia mas que con sorna, parecia no sentir sentimiento alguno y su unico deseo en la vida era matar a su hermano. No, nunca estaba tranquilo.
Eran altas horas de la noche cuando Sasuke Uchiha abandono su entrenamiento personal nocturno. Tal vez eran pasadas las dos o una de la madrugada, no le importaba. Nada lo hacia realmente, mas que matar a su hermano. Al pensar en ello una furia se desato en el y apreto con fuerza los puños. Lo odiaba, como lo odiaba.
De repente, unos pasos. Alguien que corria rapidamente se acercaba a el. Se oculto sin demora en las sombras y espero al que el intruso llegase. Seguro venian por el. ¿Aclare que era un poco paranoico? Bueno, lo era. Y tambien arrogante. Los pasos definitivamente iban por donde el y incrementaban. Eran mas de una persona y sus sombras no tardaron en presentarse frente a el, aunque sin notarlo.
Habia corrido mucho y sus piernas no aguantarian mas. Se detuvo unos minutos para tomar aire pero fue un error. Un Kunai le habia pasado cerca, rozándole la pierna. De vuelta emprendio la carrera. Que mala idea habia sido aquella pero no era tiempo de arrepentirse de eso, debia correr. Doblo en una esquina y creyo estar a salvo en su oscuridad. Estaba equivocada, se habia metido en un callejón y los hombres la rodeaban de todos lados.
-Es un callejón, no hay salida esta vez niña.-le dijo una de las sombras. Gruño y fruncio el ceño molesta. "Por supuesto que no hay salida, es un callejón" fue una de las cosas que le hubiesen gustado decir pero su timidez se lo impedia. Siempre lo mismo.
Movio la cabeza frenetica. ¿Ahora que haria?. Estaba atrapada y asustada. Era fuerte pero ellos eran mayor cantidad, fácilmente podian ser diez o quince ninjas experimentados. Su semblante cambio, tenia que luchar. Por lo menos no se lo haria tan facil a esos malditos. Era una Hyuuga y los Hyuuga no eran ningunos cobardes.
Una de las sombras se avalanzo sobre su espalda, tomándola por sorpresa, pero rapidamente se preparo, decidida a luchar. Se saco a ese saco de papas de encima y le asesto un golpe bien dado en la nuca, desarmándolo por completo. Su flujo de chakra estaba cortado. El que al parecer era el lider de ellos, permanecio impasible. Llamo a otras dos sombras y ella se le abalanzaron. Y luego tres mas, cuatro, cinco. Y con Kunais en sus manos.
Sasuke estaba a punto de actuar, no podia quedarse ahi y solo observar como la mataban, aunque no fuese su asunto. No, el no era un maldito como su hermano y lo probaria en todo sentido. Entonces fue cuando sus pupilas se dilataron y no se movio. Sin razon alguna, los ninjas salieron de encima de la chica, volando por los aires. Entonces lo vio.
Los ojos de la joven se habian tensado, ya que esta habia activado su mayor poder de ataque, su Byakugan. Sus brazos y piernas se movían a una velocidad increíblemente. A penas sus ojos oscuros podian seguir sus movimientos. Era la técnica unica de un clan de la Aldea, aunque no recordaba cual. Pero entonces se fijo en el hombre mayor, el jefe de ellos. Este no movia ni un músculo, y sus otros dos acompañantes tampoco parecian temer a la chica.
-Jefe, nos hacemos cargos?.-dijo una de las sombras al mayor. Este asintió con la cabeza y los tres ninjas, sin duda los mejores de todos aquellos, caminaron al encuentro de la chica.
Estaba agotada. El Byakugan era una técnica que agotaba su chakra ya que aun no sabia controlarlo muy bien. Miro los cuerpos inconcientes a su alrededor y una sonrisa maliciosa salio de su rostro, sin quererlo asi. Rapidamente volvio la guardia, aunque tarde. Uno de los ninjas habia usado un jutsu de fuego, atacondola por un costado. Ella lo esquivo con éxito pero no vio venir el siguiente golpe del otro ninja. Este le corto la respiración por unos valiosos instantes.
La siguieron golpeando unos segundos mas, no podia defenderse con el poco chakra que le quedaba. Iba a morir y por ello uno de los malditos rio, una risa sadica que le recordo a la de su hermano y fue el detonante para su intervención. Salio de las sombras de un salto y asesto un firme golpee en el cuello del que habia soltado la risa. Entonces fue que los hombres se sorprendieron, asumiendo rapidamente posición de ataque.
-Cobardes...-susurro el Uchiha y miro por sobre el hombro como se debilitaba la chica, alli tirada en el frio suelo del callejón. Una ira incontrolable lo poseyo y desato su sharingan. Su maléfico sharingan. En cuestion de unos pocos minutos los hombres corrian por la calle asustados por el monstruo de fuego, sin poder escapar. El joven estaba totalmente poseído por eso y no se detendría hasta que la sangre tocase sus dedos.
Abrio los ojos con dificultad. Lo ultimo que recordaba era un golpe seco en las piernas que la habia knockeado. Se horrorizo al encontrarse con la mirada petrificada de su anterior atacante. Se alejo asustada con la mano bajo su barbilla. Lo observo de pies a cabeza. Su cuerpo estaba mutilado, como si miles de manos le hubieran golpeado a la vez. Su sangre se escapaba por su boca en una escena vil y sombria.
Se alejo mas y mas, tratando de encontrar un muro donde sostenerse y poder salir de alli. Toco algo pero no era precisamente la pared. Era un cuerpo, un cuerpo con un agujero en el centro de su pecho. Otra vez se alejo asustada, se odio por unos momentos. Otra vez habia sucumbido al panico y la desesperacion, pero era muy difícil mantener la calma cuando un cadáver te miraba. Mas aun, cuando ese cadáver llevaba en su mirada el miedo. Habia muerto con un miedo indescriptible.
-Debo salir de aquí.-se dijo en su bajo tono de voz. Sus ojos se clavaron en como una extraña sombra se cernia sobre otras sombras que al notarlo gritaron y trataron de escapar. La sombra que los atacaba no se detuvo ni cuando cayeron, siguió y siguió. Entonces paro, pero para eso ya estaban muertos los otros dos. Se tapo las manos con los ojos tratando de borrar de su memoria esa terrible imagen. Imposible, tenia demasiada buena memoria.
Trato de pararse, desesperada se arrastro por el suelo helado. Sus piernas no le respondian. Maldijo por lo bajo al maldito que la habia dejado asi. "No lamentare su muerte si me ha dejado paralitica" penso con algo de maldad, inusual en ella. Ella era tranquila y creia en la paz. ¿Por qué de repente en cada batalla disfrutaba el infligir dolor con sus manos?. Se contenia casi siempre pero con su Byakugan era inevitable.
"Diablos¿dónde rayos se metio?" se pregunto mirando frenetico el suelo del callejón, repleto de cadáveres y personas inconscientes. No tenia idea pero debia encontrarla. Parecia una persona susceptible a los ataques aunque sabia defenderse. De eso no le quedo duda cuando uso su técnica especial.
Un sonido de queja casi imperceptible se oyo a la vuelta de la entrada del callejón. Era ella. Suspiro aliviado, estaba viva y al parecer, bastante sana como para moverse asi. Cambio ese semblante preocupado a su tipica expresión fria y seria. Se acerco despacio a donde se encontraba. Vio como se arrastraba, tal cual gusano, por el piso. Le dio asco verla asi pero a la vez admiro su... ¿determinación?.
-N-no me m-mates... p-por favor d-demonio.-tartamudeo como si hacia mucho que no tartamudeaba. El demonio que habia acabado con sus atacantes la miraba con su gelida mirada. Eso la asustaba mas y mas. Estaba segura de que era el por sus cabellos, eran puntiagudos como los del monstruo que habia derrotado a los ninjas.
-Como me llamaste?.-era increíble, simplemente increíble. Le salvaba a la vida a esa chcia y ella se lo agradecia llamándolo demonio. Increíble. No es que esperase una ceremonia y todo pero un simple agradecimiento hubiera estado bien, a pesar de no estar muy acostumbrado a ello.
-D-demonio. N-no es lo que eres?.-estaba extrañada. Si no era un demonio¿qué carajo era?. Se regaño mentalmente por sus malas palabras, no era propio de ella, aunque últimamente... ya no tartamudeaba, dejémoslo como un ejemplo.
-No.-su voz fria la congelaba. Entonces el joven le dio la espalda y se dispuso a seguir su camino.
-G-gracias.-otra vez su tartamudeo. ¿Qué le sucedia?. Pero sin saber por que esas palabras habian provocado algo en el. El chico se detuvo y la volvio a mirar, pero esta vez con algo de sorpresa en su mirada, que rapidamente paso a arrogancia. Una arrogancia que se le hacia extrañamente familiar.
-Que has dicho?.- no podia creer que estaba volviendo a donde ella. Sus ojos eran grises y ahora podia distinguirlo sin el Byakugan. Esos ojos... los habia visto antes.
-G-gracias... por salvarme la vida.-lo miro frunciendo el ceño, tratando de descifrar de donde conocia a ese chico, y si por lo menos recordaba su nombre. Entonces se acerco mas y mas hasta quedar a su altura. Se ruborizo involuntariamente, era tan facil ruborizarse.
La miro unos instantes, fijo en sus ojos y la tomo en brazos. Comenzo a caminar sin tener idea de adonde se dirigia, solo sabia que no podia dejarla ahí sola, a merced de demas villanos. Hinata estaba completamente roja. Jamas le habia hervido tanto la cara. Un extraño que le habia salvado la vida la llevaba entre sus brazos, y que ademas era muy guapo.
Fijo su mirada en ella de vuelta, algo tenia, estaba seguro de haberla visto de vuelta antes. Corrio su rostro, ruborizada. Alzo una ceja. Esta chica era algo extraña o muy susceptible a los contactos... como el. Eso lo hizo interesarse mas en ella. ¿Quién seria?. No podia negar que era muy bonita y... pesada. Sino le preguntaba donde vivia para llevarla a su casa se quedaria sin brazos.
-Oye, donde vives?.-le pregunto brusco, sobresaltándola.
-Eh?.- fue lo unico que pudo decir. Su mirada negra la intimidaba.
-Acaso eres sorda? Donde vives?.-volvio a preguntarle pero arrogante y con mucha falta de tacto. Esto la hizo enfadarse. ¿Quién se creia que era? Esta bien que le habia salvado la vida pero podia ser un poco mas amable. No?
-L-la casa grande de t-tejado azul, por la e-entrada norte del p-pueblo.-iba a seguir dándole indicaciones cuando la interrumpio.
-Esta bien, se donde queda.- la miro una vez mas antes de empezar a saltar sin cuidado alguno sobre los tejados de las casas. Tenia un cabello azul muy bonito. Bueno, tambien estaban buenas su piernas y su pecho y su... "Controlate Sasuke, no es la primera vez que ves a una mujer." Le castigo su conciencia.
-Uff...-solto un bufido. No era un extranjero. Si tan solo le hubiese dicho antes... tal vez abria tenido un poco mas de consideración con ella si le hubiese dicho que era Hinata Hyuuga, del prestigioso clan Hyuuga. Eso casi siempre le traia buenos resultados con los extraños. Pero este no era un extraño, ni tampoco una persona comun. Esa mirada... en lo unico que podia pensar era en esos ojos tan familiares y... en como entrar a su casa sin que lo notase su padre, o peor aun, Neji.
Faltaba poco para llegar a la gran casa señoria, tipo mansión cuando ella le chisto para detenerlo. Eso lo molesto mucho pero aun asi le hizo caso. Solto un gruñido para que notase que estaba enfadado pero ella no parecio importarle, estaba concentrada en aparentemente, algo mas. Eso le dio duro en su egocentrismo. No estaba acostumbrado a que las mujeres se fijasen en otra cosa cuando estaban con el.
Se escondieron en las copas de los arboles que rodeaban la gran casa. La deposito en una rama con delicadeza, no demostrada por su parte hasta ese momento. Eso la hizo sonrojarse un poco. Odiaba sonrojarse. Era lo que mas detectaba de ella y lo hacia la mayor parte del dia. El solo se disponia a marcharse cuando lo detuvo. ¿Cómo llegaria hasta su ventana en su estado y sin su ayuda?
-No te vayas, espera.-le dijo y el solo bufo, aun asi se quedo. Seguramente se habia enamorado de el, como todas. "Genial, una mas para mi club de fans" penso.
-Que quieres?.-le dijo serio y cortante o mejor dicho, con el tono de voz que usaba en esos casos.
-Eh... puedes esperar unos minutos mas? No puedo llegar a mi ventana asi.-le explico con toda tranquilidad. Ese chico era lindo si y le hacia sentir algo extraño. Tal vez era porque sentia conocerlo... si eso era.
-Y por que no entras por la puerta?.- era la excusa mas tonta que le habian dado para que se quedase unos minutos mas.
-Porque mi familia no sabe que sali.-dijo sin querer darle explicaciones, no era asunto de el.
-Oye, si esta es una excusa para que me quede contigo, pudiste haber inventado algo mejor, sabes?.-se disponia a irse de verdad pero volvio a llamarlo aunque de una forma distinta. Fue su tono de voz lo que lo hizo quedarse.
-Q-que? E-estas l-loco?.-volvio a tartamudear al pensar en lo que el creia que ella queria.- yo solo quiero llegar a mi ventana, realmente no saben que sali, asi que ayudame.-le ordeno... un momento, esperen¿le ordeno?.
"Asi que ayudame" esa extraña pequeña niña de ojos transparentes le habia ordenado algo a el? Al gran Sasuke Uchiha? Si, definitivamente esta chica no era como las demas. La miro con una mirada perpleja aunque en los de ella solo habia determinación. De veras queria llegar a la ventana y que su familia no supiese que habia abandonado su cuarto. Interesante, interesante... pensaba el lado perverso del morocho.
-Esta bien, te ayudare.-accedio resignado. No sabia que era asi de persuasible.
La chica le sonrio con una verdadera sonrisa de agradecimiento. Una sonrisa que lo hizo debilitarse unos momentos. ¿Qué le pasaba? El no era asi. Nunca hubiese escuchado tantas veces a una persona. Nunca habia accedido a una orden a la que no pudiese delegar a un combate. Era diferente con ella. Esperaron hasta que las luces de la mansión se apagaron en su totalidad, como habia dicho ella que harian.
Y otra vez en sus brazos.
Fueron unos momentos menos que antes pero muchos mas suaves y cuidadosos. Ese chico era extraño. No lo entienda, simplemente no lo entendia. O quiza si... no lo sabia. Hinata llego a su ventana con la ayuda de su salvador. Apoyo su mano en su pecho, sin saber que ese simple gesto de ayuda para poner pasar el alfeizar de su ventana, habia provocado emociones sin igual en el chico.
Este la miro de vuelta con los ojos perplejos. Recupero la postura después de tragar una buena cantidad de saliva. La vio a salvo y aun asi no queria despedirse de ella. Y de vuelta la misma pregunta. ¿Qué le pasaba?. Ella lo miro tiernamente y le sonrio. Pero el sabia que habia algo mas, algo mas alla de esa pequeña mirada y sonrisa. Algo que le recordaba a la persona que menos queria ser. Le recordaba... a el mismo.
-A-adios...-le susurro algo cohibida pero aun con su sonrisa.-y g-gracias otra vez.-lo miro a los ojos, desarmándolo. Pudo ver que el también trataba de esbozar una sonrisa, pero le costo y no lo logro. Eso la puso triste sin quererlo.
-Adios.-le dijo y salio de su ventana con increíble velocidad. Lo siguió con la mirada hasta que perdio de vista su polar azul y sus pantalones blancos. De repente recordo. ¡Aun no sabia su nombre!. Bufo cansada y se recosto en su cama. Habia sido una noche muy extraña... extraña, si pero linda al fin. Solo...
Solo esperaba poder volver a verla. Su corazon latia fuertemente como nunca antes. No podia parar, tenia que llegar a su casa. Los tejados se le hicieron un manchon negro por la velocidad a la que iba y del cielo solo distinguia sus estrellas blancas o... ¿grises?. De repente todo era gris, como su mirada. Sonrio de lado para castigarse por ello. No, estaba loco.
Llego por fin a su apartamento. Por supuesto el vivia solo como Naruto y no tenia a nadie que lo importunase, ni que le reprochase sus llegadas a esas horas. Ni tampoco que le preguntase por esa estupida sonrisa en su rostro. "Diablos, Sasuke te estas poniendo debil solo por unos lindos ojos y una sonrisa tierna." Lo reto su ser. Aunque era verdad y eso lo enfado. No, usar su sharingan no lo habia puesto mal.
Conocerla a ella, lo habia puesto debil. Imperdonable, inconcebible. Seguia su conciencia. Se saco su ropa y se acosto. Mañana seria otro largo dia, otro de sus tontos entrenamientos con su despreocupado Kakashi sensei, la fastidiosa de Sakura y el hiperactivo de Naruto. Se logro calmar pero para cuando se quedo dormido...
...soño con ella.
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Y que les parecio? solo tienen que apretar el casillero violeta, escribir y boila!. Bueno, yo en realidad creo que Sasuke no se quedara con nadie pero si lo hace espero que sea con Hinata porque es re tierna!!! me enknta jeje... Aunque tambien me gustan otras parejas para Hinata,, en fin... Me voy... Besos ciao!
...Luz Malfoy...
