Hola! Este es el primer fic en el cual aparecen Nikolai y Anya, espero que os guste…
Los personajes de Hetalia no me pertenecen, solo me pertenece milenka.
No tengo en quien confiar…
En algún lugar, dos hermanos discutían.
El hermano menor parecía arrepentido de algo. Tenía el cabello corto hasta la barbilla, blanco puro como la nieve y unos hermosos ojos azules claros… y profundos.
-Lo siento hermana, yo sólo quería…
-¿Protegerme? ¿De qué, o de quién? –Dijo la hermana mayor, parecía enfadada. Era muy guapa, de cabellos largos y claros, tez blanca como la nieve y ojos morados.
-De ese maldito chino. No me da buena espina.-Dijo el hermano menor, parecía arrepentido de algo. Tenía el cabello corto hasta la barbilla, blanco puro como la nieve y unos hermosos ojos azules, claros… y profundos.
-A ti no te da buena espina nadie que se acerqué a mí. Tienes que olvidarme, encontrar a otra persona, en parte porque soy tu hermana, y en parte porque me das miedo.
El chico se fue cabizbajo, se dirigió a hablar con su hermano, en busca de su consejo.
-¡Ho-hola hermano!-Le saludó alegremente.
-Di-Dimitri, quería hablar con-contigo…-Dijo el chico. Parecía tener vergüenza de lo que diría.
-¿Qué te pasa, hermanito?-Preguntó preocupado el hermano.
-Ve-verás… esto… ¿Debería dejar de intentar casarme con…?-No le dejó terminar.
-Si.
-¡No me has dejado terminar!
-Ya me imagino que dirías. Debes encontrar a alguien mejor, que te quiera.
-¿Pero quién?
-Cierto, lo siento hermano, no te puedo ayudar.-Lloriqueó el hermano.-Sólo puedo decirte que será difícil y larga esta búsqueda.
Mientras tanto…
En el patio del instituto, un chico y una chica volvían a casa…
-¿Quieres salir conmigo?-Me preguntó.
-¡Qué no demonios! Por enésima vez ¡HOY! No.-Dije ya estresada ¿Os ha pasado algo sí alguna vez? Si os pasó lo siento, si no os pasó, os envidio.
-¿Quieres salir conmigo?
-¿¡Quieres dejarme en paz!?
-No.
-¡Cállate por favor! Me vas a volver loca…
-¿Quieres…?
No le aguanté más. Esto lo soporto todos los días. Le di con la cartera del instituto en la cara y salí corriendo.
¿Qué tiene conmigo?
Al día siguiente fue lo mismo… salvo que esta vez esquivó mi cartera… que pena.
-¿Por qué no me dejas en paz?
-Porque te amo demasiado.
-¡Pues ámame un poco menos!
-No puedo…
Me agarró de la muñeca, y me empujó hasta un callejón. Me puso contra la pared, agarró mis dos muñecas con una mano y subió mis brazos apoyándolos también en la pared. Tenía miedo, no podía moverme…
-Escúchame cielo ¿Te acuerdas de hace unas semanas, cuando te dije que tenías hasta tu cumpleaños para aceptar salir conmigo?
-S-si…
-Bien, a esto me refería. Si me hubieras aceptado, te habría hecho un regalo de cumpleaños, como no… mi regalo será este…
Agarró con fuerza mi barbilla, acercando mi cara a la suya, y me lamió desde la barbilla hasta la oreja.
-Iremos a tu casa… Vives sola ¿No?
Era cierto, mis padres murieron en un accidente de tráfico cuando tenía ocho años, mi hermano, quien ya era mayor de edad me cuidó, renunció a la vida de un joven adulto normal, a estudiar, a salir, y empezó a hacer trabajos parciales. Por eso, cuando fui mayor de edad, no queriendo ser una carga, me independicé.
-Quien te ha dicho que te dirigiría a mi casa bastardo.
-Tranquila, se la dirección. ¿Te acuerdas cuándo encontré tu agenda?-Asentí asustada.-Bien, pues ahí tenías apuntada la dirección de tu casa…
Las lágrimas de ira y terror se amontonaban en mis ojos, y resbalaban por mis mejillas ¿Qué me iba a hacer ese maldito bastardo?
De repente, un chico cogió de la muñeca a ese maldito bastardo.
-¿Qué te crees que haces?
-¡Déjame, no te incumbe!
El chico apretó la mano del bastardo.
-He dicho ¿Qué te crees que haces?
Escondió sus ojos azules bajo el flequillo, su rostro se tornó frío, me dio miedo… Con todavía la muñeca atrapada, le dio una patada en el costado, tan fuerte que se calló, y por tanto me soltó. Le dio una patada en la cabeza, (por diversión creo yo) me agarró de la muñeca y salió corriendo.
-¿Estas bien?
-S-si… gracias…-Por alguna razón, me sonrojé.
-Está bien.-El chico procedía a irse.
-¡Espera!-Giró la cabeza en mi dirección, su semblante todavía frío, ya no me daba miedo.-E-esto… te tengo que agradecer que me ayudases… Si quieres ven a mi casa, y te preparó algo…-Dije tartamudeando ¿Por qué tenía que tartamudear?
-Gracias. No hace falta que me lo agradezcas, ni que te molestes.
-No es molestia, vamos.-Le indiqué con la mano que me siguiera, y le guie hasta mi casa.
Una vez en casa la pregunté qué quería beber o comer.
-N-no, ya dije no quería ser molestia.
-Y yo te dije no es molestia.
Como no quería nada le preparé 'Pastila' (Pasta de fruta) Un postre ruso riquísimo.
-Toma, come esto anda… Por lo menos pruébalo.
Lo probó.
-Está muy rico.
-Gracias.
-¿Lo preparaste a mano?
-Si.
-Spasibo! (Gracias)
-Pozhaluysta! (De nada)-Dije alegremente.
-¿Sabes ruso?
- da! (sí)
Reímos durante un rato.
-A todo esto ¿Cómo te llamas?
-Nikolai. ¿Y tú?
-Milenka.
-¿Eres rusa?-Preguntó extrañado.
-No, pero mis padres encontraron el nombre y les encantó. Y aquí está Milenka Wang.-Sonreí.
-¿Wang?
-Sí, ¿Conoces a mi hermano? Quizás sí, sale con una chica rusa, y te pareces bastante. Mi hermano mayor se llama Wang Yao.
-¿Yao?
Asentí.
-¿Te pasa algo? Has palidecido.
-E-estoy bien… ¡Tengo que irme, adiós!
Salió de casa a toda prisa, llegó a la suya, se apoyó contra la pared resbalando hasta sentarse con una mano sujetándose el pecho.
¿Por qué saldría corriendo? Es en lo único en lo que pensaba. ¿Por qué?
-Poco después llego mi hermano. Tenía marcas de haberse raspado toda la cara, mejillas ensangrentadas, ropa hecha jirones. Últimamente, venía así ¿Qué le pasa? ¿Esto y lo otro tiene relación?
Fui a preguntarle a Yao directamente.
-NiNi (hermano) ¿Puedo preguntarte algo?
-¡Claro aru! ¿Te preocupa algo?
-¿Por qué vienes así? Casi todos los días que me visitas bienes ensangrentado.
-No eres tonta aru, te lo diré. La chica con la que salgo tiene un hermano menor aru, bien, pues ese chico quiere casarse con su hermana, y me impide que me acerqué a ella aru.
-¿E-ese chico…?-Pregunté temerosa de la respuesta.- ¿Se llama Nikolai?
-Sí, ¿Cómo lo sabías aru?
-No importa.-Dije cabizbaja ¿No puedo confiar en nadie?-¿Quieres comer algo?-Le pregunté ocultando mis sentimientos.
-Si sólo me pudieras preparar un té aru, por favor.
-Bien, ahora lo preparo.
Me dirigí a la cocina y le preparé el té. Estaba nerviosa, ese chico me ayudó, pero… ¿Por qué pega a mi hermano? Bien, está enamorado de su hermana. Debe ser una persona maravillosa.
-"Que suerte tiene Anya"-Me sorprendí a mí misma pensando esto.
¡Y hasta aquí el primer capi!
¿Qué tal ha estado?
Fatal.
Gracias, yo también te quiero Xd.
Por favor comentad libremente, si queréis que cambie algo en la personalidad de algún personaje decídmelo, todavía no utilicé nunca a Anya ni a Nikolai…
¡Muchas gracias por leer!
Por favor reviews, si no tengo reviews me muero.
¡Hasta el próximo capi! Ciao!