Nota de la Autora : Este fic fue inspirado en el manga de The Legend of Zelda : Ocarina of Time. Al cual le agregue un par de cosas que deben ser evidentes... espero que lo disfruten tanto como yo disfrute al escribirlo.
Capitulo 1 .- Recuerdos Borrosos
Hace mucho, mucho tiempo atrás, cuando la magia existía y podía ser manejada por algunos seres de suprema inteligencia.. Existió una leyenda que dio origen a un legado... Todos los habitantes de esta tierra eran seres de suprema belleza con orejas alargadas para escuchar el mandato de las diosas Din, Farore y Nayru que crearon la tierra de Hyrule... Pero había una niña de 10 años que tenia orejas cortas... todos se burlaban de ella diciéndole cosas hirientes para su corta edad... que era diferente... Muchas veces lloraba sola... no soportaba su realidad... Con aquella tristeza escribió en su libro con suaves palabras...
Siempre he sabido que no soy de este mundo, pero a diferencia de otros, no he luchado por buscar de donde soy en realidad, cuando intento recordar quien soy yo, un gran dolor en el pecho me viene y paso muchos días en cama, he olvidado eso para encontrarme con esta realidad... Todos me llama la "Orejas Cortas" ya que todos aquí tienen las orejas largas... y sin contar el apodo " La chica del Lago " Dicen que aparecí inconsciente en el Lago Hyrule cuando aun la población iba en aumento, no recuerdo mucho mi infancia ni mi niñez, solo tengo recuerdos vagos y como si hubiera vivido todo tan rápido que no recuerdo mas que algunas voces y objetos... Si, quizás ya no recuerde las burlas referente a mis orejas por eso he vivido toda mi vida con mi pelo liso y largo para así quien no me conozca no sabrá que soy una ciudadana normal como todo el mundo, aun que no entiendo que tiene de importante el largo de las orejas... ? He vivido con un anciano muy bueno, El no me trata diferente como quienes me recogieron, Se llama Aias, Ya han pasado los años y se nota en su cara el paso del tiempo, Se que no le queda mucho tiempo de vida cosa que me da mucho miedo... ya que allí quedaría sola... - Al terminar de escribir su libro, Naesse lo cerro con esmero, quizás pensando que así se le quitaría un poco la pena momentánea que tenia. -
Por que siento que mi niña tiene pena? - Se escucho una voz muy deteriorada, era el Abuelo de Naesse, Aias, se acercaba penosamente a la habitación de la niña.
Aun ciego abuelito sientes mi tristeza, verdad? - Naesse se giro a verlo, El abuelo asintió con la cabeza y mostró las ultimas piezas dentales que le quedaban en su anciana boca.
Naesse... Niña mía... yo se que no viviré por mucho tiempo más - Los ojos de Naesse se abrieron de sorpresa y sus pupilas parecían moverse - Por eso te pediré lo que te haré prometerte...
Abuelito... pero que cosas dices! te queda mucho tiempo mas! - Le dijo divertida pensando que era una broma, pero el silencio del abuelo le hizo temerse lo peor -
Naesse... escúchame bien... - Naesse se quedo callada como intentando contener las lagrimas que se le desbordaban de sus ojos verdes azules - En un tiempo muy cercano, pasara algo terrible, eres pequeña, se que no lo entenderías, pero tu caerás en un profundo sueño durante 7 años... cuando despiertes todo estará maldito... El lago se secara, las planicies de Hyrule se secaran hasta parecer desierto... se congelara El dominio Zora... Cosas terribles... Por eso, escúchame bien, un buen amigo mío te llevara a los Bosques perdidos para que la maldad no se expanda hacia tu sueño... un lugar sagrado... Por eso debes prometerme que buscaras al Portador de la Trifuerza del Coraje... El portador de la Espada Maestra... es muy importante que no mueras... y lo ayudes en su búsqueda, tu eres alguien muy importante en este puzzle, Me prometes que buscaras al muchacho? - Le pregunto abriendo los ojos.
Abuelito... - Naesse le quedo mirando como si estuviera divariando - Soy muy pequeña aun... para eso faltara mucho tiempo, además tengo 10 años!
Pero a mi no me queda mucho tiempo... es un chico con una hada... Por favor buscalo! cuando sea el tiempo... - Naesse quedo muda, pensaba que estaba totalmente loco... - Naesse... yo antes era el gran adivino de la corte real de Hyrule... pero... yo prefije algo que el Rey no acepto por ningún motivo verdadero... Pero yo se que esta predicción no es falsa! Creeme... - Naesse se sorprendió por tal revelación y opto por creerle... pero... se acordaría de la promesa que le había requerido su abuelo? -
Abuelito... esta bien, lo prometo... pero vamos, debes descansar, se hace tarde! - Así acompaño a su Abuelo a un cuarto continuo de la pequeña vivienda, un cuarto seco que tenia una gran ventana, Pero Naesse parecía un poco nerviosa... - Realmente esta loco... - se decía a si misma... Como podría dormir 7 años? - Genial, perderé tiempo de mi vida en una profecía - Se rió para si misma mientras arropaba al anciano... Luego se acerco a la ventana, el viento le susurraba historias lejanas... la luna, blanca y reluciente se hacia notar en el cielo...
Quizás sea la ultima vez que vea la Luna brillar... - Cerro los ojos y meneo la cabeza, luego se arropo para dormir...
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El gallo sonó muy fuertemente más que de costumbre y Naesse se despertó exaltada... Se levanto para calentar agua en un caldero para tomar desayuno y se acerco al cuarto del Abuelo, pero parecía muy tranquilo durmiendo... Al cabo de la hora se dio cuenta que aun no se levantaba el abuelo, volvió al cuarto húmedo y se acerco a mover al abuelo, pero no reaccionaba, Naesse se comenzó a desesperar y al cabo de unos minutos, con lagrimas en sus ojos, noto que el abuelo había muerto... Se sentó en el suelo y se cubrió con sus pequeñas manitos su cara de muñeca...
No lo puedo creer... He quedado sola! y todo por una estupida predicción!!!!!!!!!! Abuelito!! por que tuviste que morir, he quedado sola en este mundo que todos me consideran extraña... POR QUE?! - Rompió a llorar ruidosamente... al cabo de unas horas se llevaron el cuerpo al pueblo de Kakarito, al Cementerio... era un lugar muy tétrico... y asistió mucha gente, El rey el mismo que lo saco del castillo fue a verlo. Naesse, llena de lagrimas pudo notar una pequeña niña que también derramaba unas lagrimas, no la conocía, pero le parecía familiar, iba a la derecha del rey y a su Izquierda estaba un Hombre, de piel morena con una gran nariz y cabello rojo... Naesse noto su presencia por que le costaba bastante respirar cuando estaba cerca de él. El Entierro fue solemne digno de alguien cercano al rey, Cuando llevaban el ataúd comenzó a cerrarse el día y a llover copiosamente... Naesse fue la ultima en irse, Dampè, el sepulturero noto la tristeza de la niña y la invito a su pequeña casucha que estaba en el Cementerio propiamente tal.
Él sabia que iba a morir - le dijo entre sollozos al Hombre con una pala al hombro, afuera sonaba fuertemente los relámpagos como si el cielo estuviera enfurecido.
El Señor Aias fue muy buena persona, por eso en su entierro vinieron mucha gente... - Le dijo con una expresión serena, La niña recordó repentinamente la promesa -
Señor Dampé, debo volver a casa, muchas gracias por la taza de agua caliente - le dijo mas serena, aun que la tristeza parecía crecer mas por cada suspiro -
Esta bien Señorita Naesse... recuerda visitarme de vez en cuando, hasta en mi Tumba si es preciso - A la pequeña niña se le pusieron los pelos de punta ante el tono de voz que puso la decir " Hasta en mi Tumba si es preciso " parecía feliz al decirlo... -
Lo recordare... - Dijo cerrando la puerta, aun llovía copiosamente y algunos candelabros que estaban estáticos en la Tumba de la Familia real parecían moverse, La niña se hecho a correr mientras las Risas se oían mas fuerte... No miro hacia atrás... y cerrando los ojos noto como las fuerzas le faltaban cuando estaba bajando la escalera cerca del pozo, vencida ante tanta tristeza se quedo allí por un momento... tendida en el pasto y con fuerzas solo para llorar y mientras la luna se hacia ver, iluminando, La quietud de la noche se hacia sentir... El viento hizo notar el silencio de la lluvia que fue quebrado por una voz de un niño con una voz más pequeña.
Debemos darle esto a la Princesa! Rápido!... ¿Navi? - El Chico siguió mientras Navi volaba alrededor de Naesse
Hey Link! - Al ver que el niño no le hacia caso se acerco volando y le pego un golpe en su gorro verde - Como puede ser tan insensible!
Ouch! Esta bien Navi... - Se acerco suavemente a la Niña - ¿Estas bien?
Naesse un poco sorprendida ante la voz tan suave del niño con orejas puntiagudas se levanto y lo miro, La Luna hacia notar sus rasgos finos, Nariz respingada, Ojos Azules y Cabello Rubio, vestido de verde completamente y llevaba un gorro verde y a su lado, una hada que la miraba preocupada. Naesse se refregó los ojos y se paro.
Si, estoy bien, ahora debía ir al Castillo... - Y Navi comenzó a moverse dejando una luz cegadora.
QUE?! No, hay guerreros esqueletos a estas horas, nosotros también vamos hacia allí, vamos, te ayudaremos a llegar hasta allá - le dijo Navi con una diminuta sonrisa -
Si, debemos ir al Castillo... lo mas rápido posible, Ven vamos! - Naesse afirmo con la cabeza y le siguió
Bajaron por la escalera y a penas al tocar la tierra aparecieron Guerreros esqueletos, Naesse se quedo a la Espaldas del Niño mientras el sacaba la espada hábilmente, Elimino uno por uno, tranquilamente como si fuera algo sencillo. Naesse en la puerta elevadisa vio a una silueta conocida, que al cruzar el puente que conecta el Castillo con el Pueblo Kakariko se paro y mostró una sonrisa serena, Si, era el jefe de los Caballeros que custodian el palacio, Naesse lo había conocido ya que cuando sus primeros padres no la aceptaron, él la cuido unas semanas y después la llevo con su abuelo... Les saludo fervemente.
Naesse, Debemos ir de inmediato al Bosque perdido... - Naesse parecía confundida pero asintió, el hombre fue a buscar el caballo -
Muchas Gracias Link y Navi, espero que nos volvamos a ver... alguna vez... - Les dijo con un dejo de tristeza.
De nada Naesse, eso espero yo también. - Le dijo Link, parecía mas adulto y Navi se apoyo en el hombro y con su mano diminuta le hizo un gesto de despido, El hombre subió a Naesse y tomo el camino del Noreste, camino al Bosque perdido. Cuando cruzaban el Pequeño Puente de madera de Bosque Kokiri, Naesse comenzó a tambalear, El hombre la sujeto por que sabia que la profecía iba a ser cierta... El Caballero la dejo en un lugar Sagrado, le dejo ropas de mujer adulta ya que de seguro crecería y la recostó en una pequeña cueva llena de hadas, tenia dos pequeñas escaleras... Se paro a su frente y dijo.
Padre, mi misión esta completa... espero que todo salga según predijiste... Naesse...Espero que hagas tu mejor esfuerzo... - La niña lo miro medio adormilada y al escuchar estas ultimas palabras cerro sus ojos para no abrirlos... Por muchos años...
