EL AMOR ES MI DEMONIO

El expreso de Hogwarts se encontraba en su trayecto de regreso a Londres al termino del curso, el sexto para Harry Potter un joven de 16 años que en esos momentos se encontraba en un compartimiento del tren con su amigos, Ron Weasley y la hermana de este Ginny sus dos mejores amigos, no hacia más de 10 minutos los hermanos gemelos de estos acababan de salir del compartimiento, ese sería el ultimo viaje de aquellos chicos en el tren y el año próximo sería el turno de el y de Ron.

Pensando en esto miro por la ventana y se percato de que ya pronto llegarían a la estación.

-...verdad Harry?-Pregunto Ron al distraído castaño

-¿Cómo? –Pregunto

-Le decía a Ginny que estas vacaciones iras solo a la casa hasta después de tu cumpleaños-

-Si, mamá quiere redecorar la casa al estilo muggle-Comento a los pelirrojos

-¿Y eso por que?, si lo hacen sin magia tardarían días- Pregunto Ginny

-Ese es el propósito, mamá dice que necesitamos hacer cosas juntos, por más de cinco minutos- El tren disminuyo su velocidad indicando a todos los alumnos que habían llegado.

Los chicos bajaban del tren para reunirse con sus familias, los cuatro pelirrojos bajaron y tras ellos Harry

-Hola chicos que tal están-Saludo la señora Weasley estrechando a todos –Harry cariño, tus padres están por aya-Indico Moly

-Gracias-Dijo Harry mirando el lugar que le indicaban a lo lejos un hombre al el cual se parecía enormemente lo saludaba acompañado de una mujer pelirroja de ojos verdes, tras ellos Harry vio una nube negra detrás de su padre que se disperso cuando fijo su mirada

-Vendrás a quedarte unos días con nosotros verdad cariño-Lo distrajo la señora Weasley

-Por supuesto que lo hará Moly-Los padres del chico se habían acercad hasta donde la familia de pelirrojos

-Lily, James¿cómo han estado?-

-Bien Moly gracias como han estado ustedes-

-De maravilla James, de maravilla, bien, nosotros tenemos que irnos, Arthur tiene muchos compromisos hoy-Dio a conocer Molly agrupando a sus hijos –Bien todos, Fred quieres dejar eso ya-Grito al gemelo que intentaba poner una véngala a el portafolios de un tipo que pasaba por ahí

-Nos veremos-Se despidió Harry mientras se alejaba con sus padres

-Cuídense- Se despidió Ron

Los Potter's salieron de la estación se dirigieron a un callejón

-Y como te fue-Pregunto James a Harry

-Bien, lo normal, nada emocionante-Contesto con simpleza

-Cuando lo dices de ese modo parece que te aburre el colegio-Comento Lily mirando a su hijo al tiempo en el que alcanzaba una lata aplastada y la ponía frente a los dos hombres que la acompañaban y miraba su reloj.

Ambos hombres tomaron la lata y en cuestión de segundos una ráfaga de colores se mostró frente a sus ojos y la sensación de que los jalaban del ombligo se hizo presente pero segundos después desapareció, los tres aparecieron en un lugar totalmente distinto a el callejón al que habían entrado, ahora se encontraban en un pequeña colina cubierta de un frondoso césped y unas piedras que delineaban un camino que guiaba hacia una casa de dos plantas en lo que parecía ser la mitad de la nada, ya que no había señales de casas aledañas

-Buenos es que, si se podría decir que de no ser por el Quidditch la escuela sería totalmente aburrida-Admitió Harry

-Pero como puedes decir eso, yo no he conocido otro lugar más divertido que Hogwarts, bueno tal vez uno-Dijo James guiñándole un ojo a su esposa que comprendió la indirecta

-Tal vez aya sido así en sus tiempos pero, ahora es diferente-Harry había entrado a la casa arrojándose al primer sillón que vio, detrás suyo su padre levitaba su baúl hasta el segundo piso donde se perdió de vista tras el muro, pero intentes después se escucho un abrir y cerrar de puerta lo que indicaba que el baúl estaba en la habitación del chico

-No puedo creerte Harry, con mi capa y el mapa es imposible que te aburras-Alego James sentándose frente a su hijo desordenándose el cabello, gesto que imito su hijo

-Quieren los dos dejar de hacer eso, tu ya estas muy grandecito y tu ya lo tienes demasiado desordenado para que lo desordenes más-Reclamo Lily a padre e hijo para sentarse a lado de James

-Pues créelo papá, de nada me sirve el mapa o la capa si no tengo a donde ir o que hacer-

-Imposible siempre hay algo que hacer, recuerdo cuanto tiempo nos tardamos en descubrir cada pasadizo y las veces que salíamos para visitar a Remus-

-Eso es claro lo que digo, yo no tengo ningún pasadizo que descubrir, por que tu ya lo hiciste y no tengo que escabullirme para visitar a nadie a media noche

-Ni a la hermosa pelirroja amiga tuya?-Pregunto en tonó burlesco James lo que provoco que Harry se sonrojara, miro asía su derecha

-¿Qué no se escucho?-Se burlaba James Harry volvió el rostro a los adultos y de nuevo ahí estaba la espesa nube negra tras su padre-¿Qué?-Pregunto este al ver que Harry miraba sobre su hombro y giro el rostro hacia su espalda y al hacer dicho acto la nube se disperso

-Nada-Respondió Harry quitándose los lentes y limpiándolos

El día paso entre anécdotas del pasado una rica cena y comentarios despectivos de Snape que era defendido por Lily, y así las vacaciones de Harry pasaron casi volando sin ningún contratiempo, más la ocasional visión de la nube negra que parecía perseguir a su padre

-Me pasas la mantequilla-Pidió Harry a su madre durante el desayuno, a un semana de su cumpleaños 17, los tres estaban vestidos con ropas ya viejas y bastante manchadas de pintura lo que indicaba que la redecoración aun no terminaba

-¿Mamá?-Pregunto al ver que la mujer miraba con recelo a su marido, James que también había notado el despiste levantado la vista del periodito que leía

-¿Me decías?-Respondió al darse cuenta de que Harry le había llamado y no se percato

-La mantequilla-Señalo

-O claro-Tomo la mantequilla y la paso a su hijo

-¿Pasa algo?-Pregunto James

-Bueno...-Dudo Lily-Nada creí ver humo a tu espalda es todo-James se giro y no encontró nada a Harry le pareció extraño aquello, así que al parecer no era el único que veía aquel extraño suceso

-Ah... yo también-Dijo Harry

-¿Tu también que?-Pregunto su padre

-Que yo también lo he visto-Al ver que sus padre no comprendían aclaro-El humo-Los dos le miraron para intercambiar miradas entre ellos –No ahora, en otras ocasiones, desde que llegue a casa-

-Debe ser la imaginación, tanto sol y solventes-Aclaro James sin darle importancia al asunto, sonrió nerviosamente y regreso a la lectura del periódico aquel gesto levanto sospechas en Harry

-Algo no anda bien-Se dijo así mismo Harry sintiéndose algo nervioso