Antes de nada,pokemon no me pertenece por razones obvias y no gano nada escribiendo esto. Simplemente me gusta hacerlo ^^
POV Misty
Miré otra vez. Respiré ,dos,tres...Sin poder eché a temblar.¡No,no podía ser! Pero las otras diez pruebas que había hecho tenían el mismo resultado. Asustada y ya sin ninguna esperanza,volví a mirar el pequeño objeto que tenía en mis manos. Decía lo mismo que antes. Positivo. No sabía que estaba llorando hasta que vi una lágrima caer al suelo.
Lo que tenía agarrado era un test de embarazo. Había dado positivo,como los otros. Eso solo significaba una cosa...estaba embarazada.
Sin fuerzas, me dejé caer al suelo, llorando desconsoladamente. ¿Cómo había ocurrido esto? ¿Cómo? ¡Sólo tenía 17 años! ¡No estaba preparada para tener un bebé!
Una oleada de náuseas me obligó a dirigirme al baño a vomitar, mientras intentaba convencerme de que me sentía mal por las emociones acumuladas y el susto. Pero, ¿a quién intentaba engañar? Las náuseas eran por el embarazo, igual que los mareos que había sentido durante esa semana. Cuando el malestar se me fue, me senté en el suelo, apoyando la espalda en la pared fría mientras me calmaba inútilmente. Sin embargo fui incapaz de no recordar por qué había llegado a ese punto. ¡Si él no fuese tan estúpidamente irresistible! Pero tampoco le podía echar la culpa. Me gustara o no, había sido el mejor momento de toda mi vida. Me sonrojé mientras las imágenes de ese día iban apareciendo en mi mente...
Flash-back
_ ¡Adiós, que te vaya bien!
Cerré la puerta del gimnasio y me apoyé en ella. Había sido el último entrenador que me había retado y estaba cansada. Necesitaba algo para distraerme, para salir de la rutina. Se me ocurrió salir a tomar el aire. No era lo más divertido, pero de momento me servía. Mis hermanas no estaban y no tendría que dar explicaciones, por lo que era mejor aprovechar el momento. Decidida, cogí mi mochila y me fui.
Me dirigí a una zona llena de árboles, donde los entrenadores novatos iban a veces a entrenar. Tuve suerte al ver que estaba vacío, necesitaba tranquilidad. Noté un olor muy familiar en el ambiente. Humedad. Miré al cielo y comprobé que estaba cubierto de nubes grises que indicaban que iba a llover. Me encogí de hombros,a mi la lluvia no me molestaba, y me apoyé en el árbol que tenía más cerca. Suspiré, relajada. El gimnasio era muy duro a veces y la "ayuda" de mis hermanas no mejoraba las cosas. Tenía la impresión de que hacía frío, pero yo no lo sentía a pesar de llevar unos shorts y una camisa de tirantes. La hierba húmeda me hacia cosquillas en las piernas y el aire me revolvía mi pelo largo, que me había crecido con el paso de los años.
De repente sentí que algo me cubría los hombros. Sobresaltada abrí los ojos y miré lo que llevaba encima. Alguien me había puesto una chaqueta. Empecé a mirar alrededor para buscar al propietario de la prenda cuando sentí que alguien me susurraba al oído:
_Ibas a coger frío.
Me di la vuelta con el corazón a cien. Esa voz me era tan familiar como desconocida. Me fijé en la persona que estaba detrás de mí. Era un chico, tenía el pelo negro algo desordenado y sus ojos oscuros estaban clavados en los míos mientras que en su rostro advertí una sonrisa que me dejó paralizada. Llevaba puesta una camiseta algo ceñida y unos jeans, que me permitieron comprobar lo bien que se mantenía físicamente. Me ruboricé levemente cuando me di cuenta de lo que estaba pensando. Le volví a mirar a la cara. Y ya no me quedó ninguna duda. Sabía quien era.
_Ash...
_Yo también me alegro de verte,Misty _dijo riéndose.
Sentí que me sonrojaba aun más.
_Yo..._no sabia que decir. Llevabamos muchos años sin vernos y no había estado preparada para volver a verle tan de repente._ ¿Q-que haces...aquí?
Noté que no le gustó mucho esa pregunta, pero era lo único que podía decir de momento.
_Si no te alegras de verme puedo irme...
_ ¡NO!_solté sin poder evitarlo._No...Quédate.
Se quedo mirándome con una expresión radiante en la cara y volvió a sentarse a mi lado.
_Es que...no se que quieres que te diga _ sabía que no era lo mas indicado decir eso, pero no pude evitarlo._Hace tanto que no te veía que no...no se que decirte.
Su sonrisa pasó de ser de felicidad a ser triste y hasta algo culpable.
_Ya...lo siento,queria venir, pero...
Fruncí el ceño al ver que no terminaba la frase y vi que tenía la mirada desviada y las mejillas algo encendidas.
_ ¿Pero?_le animé a seguir.
_No importa._dijo sacudiendo la cabeza._Lo importante es aprovechar este momento.
Empezamos a hablar y a contar lo que nos había pasado durante ese tiempo que no habíamos estado juntos. Aunque lo intenté, no pude concentrarme demasiado en la conversació le tocó a él hablar sobre sus aventuras, miré mejor y me di cuenta de lo mucho que había cambiado. No era ese niño flacucho y bajo al que había acompañado durante bastante tiempo en sus viajes. Ahora tenía delante de mí a un joven alto y guapo, con un cuerpo que nunca me hubiera imaginado que precisamente él pudiera tener y,que conservaba esa inmadurez que le caracterizaba y que me encantaba.
_ ¿Misty? ¿Me estas escuchando?
Volví a la realidad cuando le oí llamarme. Me miraba con una mirada llena de picardia, y creí que me estallaba la cara de vergüenza cuando me preguntó:
_ ¿Que mirabas tan concentrada que no me estabas haciendo caso?
Desvié la mirada totalmente roja y Ash empezó a reírse. Me abochorné aún más si era posible mientras bufaba por lo bajo...maldita manera de comprobar que también podía ser maduro, aunque solo en los momentos mas inoportunos.
_No me has contestado, Miyst.
Me sobresalté. Eso había sonado demasiado cerca de mí. Sentía su respiración en mi oído y me estremecí. Intente alejarme, pero me agarró por la cintura y no me dejó. Iba a quejarme cuando noté una gota fría caerme en la cara. Dirigí la vista hacia el cielo y me di cuenta de que estaba lloviendo. Ash también se fijó y, sin soltarme la cintura, me ayudó a incorporarme para echar a correr hacia el gimnasio.
Aunque corrimos lo mas rápido posible, llegamos empapados y jadeando por el esfuerzo. Me apoyé en la pared que tenía mas cercana a mi y Ash se apoyó en la que había enfrente. Estaba agachada y sujetándome el pecho intentando volver a tomar el aire que necesitaban mis pulmones y cuando pude recuperarme un poco, mire a Ash con intención de ofrecerle una toalla. Pero en cuanto vi su aspecto,las palabras se me atascaron en la garganta. Si la camiseta era ceñida, ahora me permitía ver cada uno de los músculos de su torso como si no tuviera la prenda puesta. Sus jeans también se le pegaban a las piernas. Pude ver a través de su pelo negro, pegado completamente a la cara, que me miraba fijamente. Sentí mis piernas temblar y desvié la mirada hacia mi cuerpo para intentar calmarme. Pero cuando vi como me encontraba yo, me puse aun más nerviosa. Tenía la camisa y los shorts totalmente pegados al cuerpo como una segunda piel y se me notaba el sujetador más de lo que me habría gustado. El pelo lo tenia desordenado y goteando.
Le miré a los ojos. Ash también me estaba observando, pero sus ojos reflejaban deseo y ardor. Un escalofrío me recorrió la espalda al ver como se acercaba a mí. Quise decir algo, pero no me dejó. Sus labios se pegaron a los míos con furia y pasión, y no pude evitar responderle, a pesar de que no me gustaba parecer tan vulnerable. Mis brazos se colocaron alrededor de su cuello y gemí ahogadamente cuando sentí su lengua abrirse paso entre mis labios y rozar la mía, mientras su cuerpo me acorralaba entre él y la pared. Había soñado tanto este momento que no tuve mas remedio que dejarme llevar.
Nos separamos por la falta de aire. Estaba totalmente ruborizada y respiraba agitadamente.
_Misty..._me llamo con voz ronca y agitada._Te necesito...ahora.
Me quede sin habla. No sabía si estaba preparada y la repuesta inconsciente de mi hormonal cuerpo no me ayudaba a pensar con claridad.
_Por favor..._insistió arrastrando sus labios hacia mi cuello para empezar a besarlo con ansia.
Me abandoné a sus caricias, ya que yo lo deseaba tanto como él y antes de que me diera cuenta le había rodeado la cintura con las piernas y sentía sus manos tantear bajo mi camiseta húmeda mientras me volvía a besar . Sin embargo, había algo que no me dejaba disfrutar del momento. Cuando volvió a atacar mi cuello, aproveché para hablar.
_Ash..._oí mi propia voz débil y temblorosa, pero tenia que asegurarme de una cosa antes de seguir.
_ ¿Mmm...?_fue lo único que dijo sin parar de besarme.
_Tu...tu me..._me aleje de su boca para evitar perderme de nuevo en las sensaciones que solo él podía provocarme_¿Tu me quieres?_bajé la mirada al preguntar aquello, pero no podía entregarme a alguien solo por el deseo del momento, aunque ese alguien fuese Ash.
Se quedo un poco asombrado, pero al momento se puso a reír suavemente. Sin darme tiempo a nada, me abrazó y me susurro al oído:
_ ¿Eso es lo que te preocupa? ¿Que no te quiera?_me dijo mientras me acariciaba el pelo como si me estuviera explicando algo obvio._No te quiero, te puedo querer _ abrí la boca para contestarle, llena de dolor, pero me hizo callar poniendo su dedo en mis labios._Para mi no es amo.
Mi corazón se paro un segundo antes de volver a latir con rapidez. Por un momento creí que había oído mal. ¿Él me amaba? ¿A mí? sentí que los ojos se me llenaban de lágrimas, pero parpadee para retenerlas.
_ ¿D-de...verdad?
_Si._
Volvió a besarme, pero esta vez también pude notar ternura y cariño. Con el pulso acelerado y la sensación de estar viviendo un sueño, me deje llevar, sin querer hacer nada más que sentir...
Fin Flash-back
Unos golpes en la puerta me sacaron del trance en el que había caído. Intenté levantarme para abrir la puerta, pero otro mareo me obligó a quedarme como estaba, sentada en el suelo.
_ ¿Misty? ¿Estás ahí?
Era Daisy. Mis hermanas no sabían lo que había pasado y tampoco sabían lo que ahora me pasaba a mí. Sentí miedo cuando me acorde de mi situación. ¿Cómo se lo iba a tomar él? o peor, ¿cómo se lo iba a decir?
_ ¿Misty?
_La puerta está abierta, Daisy.
Sentí a mi hermana abrir la puerta y andar hacia el baño. Se quedó mirándome con una expresión extraña en la cara y supe que quería una explicación. Negué con la cabeza y ella se encogió de hombros. Ya se lo contaría.
_Myst, si sigues así vas a llegar tarde.
_ ¿Tarde?_pregunte extrañada.
_Si, ... ¿sabes que día es hoy?-me preguntó al darse cuenta de que no sabía de lo que me estaba hablando.
Empecé a intentar recordar la fecha, a la vez que me preguntaba por qué hoy era un día "especial".La boca se me secó en cuanto lo averigüé.
_Hoy...viene Ash del viaje... ¿verdad?
Mi voz no debió sonar lo suficientemente alegre, porque Daisy me miró fijamente y con el ceño fruncido.
_ ¿Por qué? ¿No te alegras?
Sacudí la cabeza mientras forzaba una sonrisa para tranquilizarla.
_Claro que me alegro, no digas tonterías._al ver que abría la boca para decir algo más,la interrumpí_Y tengo que vestirme antes de que llegue, así que si no te importa dejarme sola para elegir ropa...
_Vaaale...ya me voy.
Cuando oí que cerraba la puerta, me levanté con algo de dificultad, pero esta vez no tuve la sensación de mareo ni nauseas. Me dirigí al armario para sacar algo de ropa, mientras pensaba en la mejor manera de decirle a Ash que...que íbamos a tener un hijo.
Después de aquel momento, Ash me avisó de que tendría que estar fuera un par de semanas para arreglar unas cosas de la Liga, ya que al final había podido cumplir su sueño de ser un Maestro Pokémon, y que luego volvería para estar conmigo. Suspiré. Menuda sorpresa de recibimiento le tenía preparada.
¡Ya está! Me ha llevado un tiempo escribir esto,pero creo que ha merecido la pena.
Antes de nada, quisiera dar las gracias a Sumi, que me animó mucho a publicar el fic...¡Arigato!
Espero con ilusión sus reviews, pero no sean demasiado malos conmigo U.U Es el primer fanfic que escribo ;) Gracias por leerme!
