Hola soy yo de nuevo con este proyecto que ya traía entre manos y que he decidido subir, Espero le den una oportunidad y que lo disfruten tanto como yo

Es una historia corta de dos capitulos


-Mi vida es un asco-Con que tristes palabras iniciaba la noche fría de aquel oscuro día, su opinión no hacia referencia a un hecho o momento difícil, más bien era para globalizar lo poco o casi nada que había dispuesto en su existencia. Cerca de cumplir 37 años Sesshomaru Taisho había malgastado años en supuestas metas que jamás realizo, no era del todo su culpa simplemente había sido una victima de las circunstancias.

A temprana edad su madre se fue de casa abandonándolos a él y a su padre en esa enorme casa rustica en medio de la carretera principal a Shikon no Tama, casa que tiempo después fue reconstruida como motel de paso, por algún tiempo las cosas entre Sesshomaru y su padre anduvieron muy bien, pero cuando cursaba su ultimo año de secundaria otra tragedia toco su vida, su padre Inu no Taisho había fallecido de un ataque al corazón, fue tan inesperado que ni él mismo supo procesar su duelo llevándolo de ese modo a tomar muchas malas decisiones.

Y ahora, aquí estaba él, en el mismo lugar, en el mismo motel, en las mismas circunstancias de hace años, solo, sin nada mas que una propiedad que le daba algunas rentas para vivir modestamente, solo, sin amigos ni conocidos a quien llamar o visitar, solo, sin mujer o hijos que lo esperaran al volver a casa, solo, completamente solo.

-A la mierda- ya basta de sentir lastima por si mismo, había vivido a su manera sin dar cuentas de sus actos, porque ahora tendría que ser distintas las cosas, tenia el motel, sus ahorros y pequeñas diversiones ocasionales.

Regreso al interior del establecimiento encontrando tras el mostrador a su único empleado y asistente, Jaken. Jaken era un vagabundo que paso por el motel hace mas de 10 años, no tenia estudios ni experiencia, pero si unas ganas de servir a cambio de un techo y un poco de pan, era tonto y muy adulador no obstante barato y leal, eso compensaba su a veces molesta presencia.

-¿Cuántos clientes?- Pregunto sin miramientos

-Tres habitaciones ocupadas señor, solo uno se retira esta noche-En este motel no era común tener muchos huéspedes solo viajeros que paraban para descansar lo suficiente antes de seguir su camino

-Está bien, aun así prepara otra habitación, probablemente llueva y algún idiota precavido decidirá pasar aquí la noche antes que enfrentarse a una tormenta en la carretera-

-Si señor- El enano se fue a cumplir la orden de su jefe

Sesshomaru se acerco a la ventana y con una soda en la mano miro las gotas caer del cielo, lluvia, odiaba la lluvia, no le gustaba el olor que dejaba en el bosque, y sobre todo los charcos que después se convertían en fosas de lodo manchándolo todo, diablos debería vender ese maldito motel e irse a vivir a la ciudad, lo único que lo detenía era el hecho de que no tenia estudios ni un oficio para valerse en la gran urbe, además por lo menos estando en ese maldito lugar él era el jefe y de ese modo no tendría que arrastrarse a los pies de otros.

Repentinamente la campana de la puerta se escuchó sacándolo de sus divagaciones, se trataba de una mujer que con el saco de su traje se cubría el rostro de la lluvia, por el estilo de sus ropas Sesshomaru dedujo que se trataba de una mujer de ciudad que como bien él había predicho decidió parar en su motel por el mal clima.

-Buenas noches-Jaken había llegado justo a tiempo para atender al recién llegado

La dama se quito el saco para contestar el saludo, a pesar del cabello un poco desalineado y el cuerpo empapado no impidieron que Sesshomaru la mirara a detalle. Era baja y de compleción media, de piel blanca y llamativos ojos cafés, su rostro redondo estaba perfectamente definido por una larga melena castaña, en conclusión, era atractiva-Buenas noches, disculpe tendrá una habitación disponible-

-Por supuesto, el costo por noche es de…-A penas iba a decir el precio cuando la chica lo interrumpió

-No, disculpe será posible pedir una habitación por una semana entera-Tanto a Sesshomaru como a Jaken les tomo por sorpresa su solicitud, ningún cliente había durado en el motel por más de dos noche y esta chica quería permanecer una semana entera.

-Ammm su supongo que sí es posible pero…-

-¡Perfecto! Iré por mis cosas-La chica salió sin esperar respuesta

-¿Qué opina señor?-Jaken seguía estupefacta do

-Si quiere malgastar su dinero una semana con nosotros no se lo impidas, dale un descuento de 20% sobre el total de noches y pídele la mitad por adelantado, otra cosa, sí pregunta dile que tú eres el dueño-

Jaken se sorprendió-¿Señor?-

-El que esa chica quiera permanecer aquí una semana es por un motivo en específico, si me hago pasar por otro huésped de paso es probable que ella se abra y me diga sus motivos, como sea la encuentro interesante al menos su estadía me dará algo en que entretenerme-Tirando la lata de soda vacía sobre el cesto, se retiro a su cuarto a dormir.


Jaken se levantaba primero que nadie a preparaba el desayuno para tenerlo listo a las 9:00 en punto, máximo hace 4 porciones una para él, otra para su jefe y dos por si algún huésped decidía comer algo antes de irse. Como el lugar era pequeño solo había un cuarto destinado a las comidas y en este solo hay una mesa grande para compartir, a Sesshomaru esto carece de importancia ya que normalmente tomabas sus comidas en su cuarto, pero por esta ocasión decidió bajar al comedor.

-Informe-Junto a su desayuno pedía un informe diario de sus clientes

-Dos de los tres huéspedes que teníamos partieron desde muy temprano, pagaron sus cuentas y se fueron, solo resta la extraña chica de la lluvia- Informo al tiempo que servía la comida

-No creo que se refieran a mi-Los hombres se giraron para ver llegar a una conocida

-Buenos días, señora Kagura- Jaken saludo de inmediato, mientras Sesshomaru le señalaba un lugar de la mesa junto a él.

Tomando su invitación se acomodo en la silla-También buenos días para ti Sesshomaru-

-Hola, Jaken sirve a la señora-

Kagura era una viuda de 40 años muy bien conservada a pesar de su edad, hace 6 años su esposo falleció en un accidente de carretera dejándola bien protegida con varios negocios a su nombre, su vida era simple y sin preocupaciones, solo visitaba a Sesshomaru cuando la soledad de su casa era demasiado insoportable de vivir, entre ambos existía una relación sin ataduras, pero en el fondo Kagura guardaba la esperanza de sentir más que solo un calor corporal, la esperanza de que otro hombre la volviera adorar.

-¿Quién es la chica extraña de la lluvia?-Kagura entendía que Sesshomaru y ella no eran exclusivos por eso tomaba el tema sin darle más importancia de la necesaria

-Un huésped que llego anoche junto a la lluvia-Sesshomaru no tenía secretos con Kagura, ella era lo más cercana a una confidente.

-¿Es hermosa?-

-Joven más bien-

-Ahh, y que la hace tan peculiar, no parece distinta a otras que han pasado por aquí-

-Pidió una semana completa de hospedaje en mi motel-Eso si sorprendió a Kagura

-Eso es muy extraño, este motel esta en medio de la nada solo hay un bosque y una carretera vieja al frente ¿Por qué alguien quería permanecer más de una noche en este lugar?-

-Por eso es la chica extraña de la lluvia- Los dos terminaron su desayuno para salir al bosque a terminar su conversación

Hacia un poco de frio, el otoño casi llegaba a su fin y el frio viento de las montañas comenzaba a sentirse con mayor frecuencia, los dos miraban el vasto follaje sin otra emoción que la nostalgia de la rutina marcada a fuego en sus cuerpos.

-¿Qué pretendes hacer con esa chica Sesshomaru?-

-Desde cuando tengo que darte cuenta de mis acciones Kagura-Los dos se respondían con parsimonia

-No se trata de eso y lo sabes, lo pregunto porque esperaba pasar unos días contigo-

-Me interesa por el hecho de que algo podría estar ocultando, saber si es una chica loca que huye del ajetreo de la ciudad ó una chica que se esconde aquí por algo que cometió, tan simple como eso-

-Entiendo, descubrirlo no debería llevarte más de dos días, llámame en cuanto descubras lo que necesitas saber-Acercándose a él, lo tomo del cuello para besarlo-Hasta pronto Sesshomaru, gracias por el desayuno-Subiendo a su camioneta se fue a la ciudad. Tal vez en alguna de sus calles encontraría una diversión que la distrajera lo suficiente hasta que Sesshomaru le llamara, era patética al desperdiciar su tiempo en un hombre que claramente no la miraba más que como compañera de momentos, pero se aferraría a él hasta que la esperanza se extinguiera de su corazón..

Después de despedir a Kagura, Sesshomaru entro al motel en busca de noticias sobre su huésped, al parecer seguía dormida ya que no había salido del cuarto, como no pretendía esperarla semejando a un adolescente en primera cita, se fue al bosque a partir leña


-¿Qué pretende esa mujer? Acaso no piensa levantarse-Eran cerca de las cinco de la tarde y la misteriosa chica de la lluvia no salía de su habitación

-No se que decirle señor, ha pasado por su cuarto y ni un ruido hace-De repente un idea vino a su mente-Señor, tal vez se trata de una asesina que viene a planear su próximo asesinato ¡Oh por dios! Y esta en nuestro motel, cuando la policía llegue nos van acusar de complicidad e iremos a la cárcel, señor yo no puedo ir a la cárcel, soy muy débil para esas bestias podrían matarme o lo que es peor me podrían vio…..-

-¡Jaken! Déjate de estupideces, solo ve a la cocina y prepara la comida-Dijo al tiempo que subía las escaleras para ir al cuarto de su huésped

-¿Qué piensa hacer jefe?-Pregunto desde abajo

-Despertar a la bella durmiente-

Llegue a su puerta decidido a saber quien era, aunque estúpidos los pensamientos de mi sirviente bien podrían tener algo de verdad, con la mano hecha puño toque la puerta tres veces. No hubo respuesta, eso me inquieto y con más fuerza volví a tocar.

-Espere-Por fin una respuesta, de cierto modo me sentí aliviado

La puerta se abrió y detrás de ella había una chica con las mismas ropas de la noche anterior, desalineada y un poco soñolienta-¿Qué se le ofrece señor?-

-El dueño me envió para ver si estaba bien-Como dije me arría pasar por un extraño y de esa manera descubrir si la chica representaba un peligro a mi propiedad

-Que considerado de su parte, dígale que estoy bien, que en un momento bajo a desayunar-La podre despistada creía que era de mañana

-Quera decir cena-

De inmediato la chica despertó-¿Enserio?-Reviso su reloj de muñeca comprobando que lo que le decían era cierto-¿Cómo pude dormir tanto?-

Lo mismo se preguntaba él-La comida estará servida en unos minutos sería bueno que bajará a probar alimento-

-Si gracias. Dígale al señor Jaken que lamento haberlo preocupado-Sabiendo que antes de bajar necesitaba tomar una ducha, cerró la puerta para darse prisa en alistarse


-¿Un empleado señor?-Pregunto Jaken

-Si, es la mejor manera de que ella me diga lo que quiero saber, de modo que no importa lo que diga o ella te pregunte tú solo sígueme la corriente ¿Entendido? -

-Si señor-

-También será necesario que te comportes como el dueño de este lugar-

Jaken de inmediato pensó un disparate-Eso quiere decir que podre darle ordenes-

Sesshomaru guardo silencio un segundo antes de responder-Supongo que sí, de otra manera ella se dará cuenta de nuestra mentira; aunque por cada orden que me des esto se vera reflejado severamente en tu pago-Que el infierno se congelara antes de que un ser tan inferior como Jaken intentara darle una orden a él.

-Disculpen, ¿Llego a tiempo? -La chica aguardaba en el umbral de la puerta

-Adelante señorita-Jaken acompaño a la señorita hasta su asiento-¿Descanso bien?-

-Si gracias, lamento haberlo preocupado ni yo misma me di cuenta de la hora-

-Eso ya no importa, espero no le haya molestado que enviara a uno de mis empleados a despertarla-A pesar de la amenaza Jaken no quiso perder la oportunidad de subir de puesto.

-Al contrario, le agradezco la atención-Los alimentos ya habían sido servidos así que procedieron a comer

Sesshomaru después ajustaría cuentas con su subordinado, la prioridad era desenmascarar a su huésped-Y dígame señorita…-

-Ah disculpen, mi nombre es Rin…. Rin Ayumi-

Para Sesshomaru no paso desapercibido su tartamudear-Mucho gusto señorita Rin, mi nombre es Inu no Taisho-Si ella no era sincera porque él debía serlo

-Mi nombre es Jaken y como pudo darse cuenta este Motel es mío, espero le agrade su estadía con nosotros-

-Espero lo mismo-

Sesshomaru hizo el primer movimiento-Dígame Señorita Rin, es de Shikon no Tama-

-No, solo visito la ciudad por negocios-

-¿Qué tipo de negocios disculpe?-

-Nada de importancia, en realidad lo que menos me gustaría es hablar de trabajo señor Inu-menciono de manera un poco tosca

Sesshomaru no quería meter presión, de lo contrario ella podría evitarlo-Comprendo-

-¿Y usted a que se dedica señor Inu?-Ahora ella buscaba sacarle conversación

-Solo hago trabajos de mantenimiento en este lugar-

-¿Y vive por los alrededores?-

-El señor Jaken me deja permanecer en el Motel a cambio de mis servicios-

-Me imagino que lleva bastante tiempo viviendo aquí-

-Lo suficiente-

-Entonces… espero no sea un atrevimiento de mi parte si le pido un paseo por el bosque mañana, eso si el señor Jaken esta de acuerdo-Miro al mayor pidiendo su aprobación

-Por mi no hay inconveniente señorita –

-¿Qué dice señor Taisho, podría guiarme por el bosque?-Pregunto emocionada

Sesshomaru conocía el bosque como la palma de su mano, y de antemano sabía que no había nada interesante en ese lugar, más la oportunidad era lo indicado para sus objetivos-Podemos salir después del desayuno-

-¡Enserio! Muchas gracias-Rin acababa de terminar sus alimentos

-Y por desayuno me refiero a las nueve en punto-

-Si comprendo, muchas gracias por la comida señor Jaken-Levantándose de la mesa se despidió-Me retiro caballeros que pasen buena noche-Con paso tranquilo abandono la habitación dejándolos solos

-¿Qué opina señor?-Pregunto Jaken en cuanto escucho como la muchacha subía las escaleras

-Es claro que oculta algo, tartamudeo al darme su apellido y si se mostró hostil al momento de hablar de su trabajo, es por que esta relacionado con lo que oculta-

-¿Cree que sea peligrosa?-

-No lo creo, pero me intriga sus acciones, dudo que alguien con un poco de juicio encuentre fascinante este maldito bosque, la caminata me dará un motivo para descubrir lo que oculta-Levantándose de la mesa se encamino a su habitación- Antes de que lo olvide Jaken-

-¿Qué pasa señor?-

-Estuvo bien tu actuación, pero recuerda que cuando termine la semana volverás a tu posición inicial, te sugiero no sobrepasar tus limites-

-Si…si señor-Aclarado el punto Sesshomaru se fue.


-¿Qué esta haciendo?-Sesshomaru aguardaba impaciente el regreso de Rin, según ella solo iba a su recamara por un objeto que había olvidado, eso hace más de 20 minutos.

-Tal vez se durmió de nuevo señor-Jaken acompañaba a su jefe

-No puede ser tan perezosa-Algo que odia Sesshomaru entre su tan larga lista de cosas que odiaba, era la impuntualidad

-Disculpen la demora-Decía la chica mientras bajaba las escaleras de prisa-Pero no encontraba mi cámara-Rin vestía de manera muy sencilla era obvio que no se esforzaba por impresionar, pero aun con tan simple arreglo te llamaba la atención mirarla.

-¡Vamos!-Abriendo la puerta trasera del motel, la invito a seguirlo.

El bosque abarcaba varias hectáreas de terreno fértil no obstante, eran pocas en las que se podía transitar sin la ayuda de un equipo especial y aunque Sesshomaru lo había caminado tantas y tantas veces no veía en dicho lugar un motivo de interés.

-Hay ríos, lagos o alguna fuente de agua cerca de aquí-Rin caminaba detrás de Sesshomaru poniendo especial atención en los alrededores

-No, solo cuando llueve el agua que se acumula en las colinas baja en forma de arrollo-

-¿Y qué me dices de los animales?-

-Insectos en su mayoría, a veces puedes encontrar, liebres, zorros o víboras-

Por precaución Rin se acercó un poco más a Sesshomaru-¿Enserio? Y de pura casualidad trae entre sus ropas algo para defendernos-

-No es necesario, una liebre o un zorro se alejará antes de que te des cuenta de que esta junto a ti, los insectos no pueden hacerte daño y si tu temor es por las víboras, en esta época del año se resguardan del frio en sus nidos-Rin suspiro aliviada

Caminaron por un par de horas haciendo paradas cada vez que Rin decía que tomaría una foto, una vez que terminaba seguían caminando en silencio, para Sesshomaru estar callado era algo cotidiano característico de su personalidad, pero el que ella no quisiera hablar le daba otro motivo para aumentar su interés; esto ya que en situaciones pasadas pudo comprobar en carne propia como una mujer tiende a contar su vida a un extraño en menos de un día, les da una libertad de desahogo y en ciertos casos un motivo para impresionar. Rin, no se comportaba como la mayoría de las mujeres.

-Descansemos-Habían caminado una gran distancia, les tomaría aproximadamente unas tres horas volver al motel lo mejor era tomar un descanso antes de regresar. Rin se acomodó cerca de un viejo tronco partido a la mitad, primero estiro cada musculo entumido de su cuerpo y luego se sentó a beber agua ignorando en cada movimiento a su guía.

Sesshomaru observo todo llegando a una conclusión, si quería obtener información de su huésped solo había un camino, ser directos-Ayumi no es tú verdadero apellido ¿Cierto? -

Rin levanto la mirada, no había sorpresa ni desconcierto en su rostro, al contrarío parecía tranquila y fresca-Fue uno de los muchos apellidos que tuve mientras crecía, en realidad fue el que más me gusto de todos-

-Y el que te quedes en el Motel una semana no tiene nada que ver con tu trabajo-

-Mi trabajo puede ser muy demandante la mayor parte del tiempo señor Inu, más no significa que ande buscando un escape de la realidad, poco o nada tiene que ver con mi decisión de quedarme-Rin se mostraba serena y dispuesta a cooperar

A pesar de sus respuestas la mente de Sesshomaru está más revuelta que al principio de la conversación-No la entiendo, sino es un refugio o un escape, ¿Qué es lo que está haciendo en este lugar? -

Ella con una sonrisa coqueta, respondió-Tomando fotos-Una enorme carcajada desquebrajo el silencio del bosque, reía y reía como si en años no lo hubiera hecho, parecía tan feliz, tan contenta que Sesshomaru se contagió de su entusiasmo, no lo demostró, pero una parte de él estuvo más tranquilo.

-Entonces, señor Inu es ese su verdadero nombre-Rin también tenía sus dudas con respecto a su acompañante-Disculpe, pero no tiene cara de Inu y mucho menos de "señor"-

-Inu era el nombre de mi padre, mi nombre es Sesshomaru, soltero-Con más soltura se fue abriendo ante sus preguntas, algo le indicaba que podía bajar un poco sus defensas, además si le daba algunas respuestas ella también lo aria

-Me gusta más Sesshomaru que Inu-Le dijo

-Sesshomaru significa "Perfecto asesino"-Un dato que casi nunca compartía

-El que sea tu nombre, no te define como persona-Otra se hubiera escandalizado ante tal confección, pero Rin lo hizo

-¿Entonces que lo hace?-Sesshomaru estaba cada vez más interesado en su opinión

-¡Tus actos! Tus actos y tus palabras definen quién eres Sesshomaru-

Rin hablaba como quién sabía todas las respuestas y fue por eso que Sesshomaru no detuvo su lengua al preguntar, una característica impropia de él-¿Y quién soy Rin? ¿Quién crees que soy?-

Rin lo miro a los ojos y vio algo distinto en ellos, no era un juego o un chiste, realmente Sesshomaru buscaba una respuesta honesta a su pregunta. Y una respuesta, fue lo que le dio-Eres un náufrago atrapado en una isla desierta, que cada tarde observa como los ocasos se llevan uno a uno sus días, un hombre que ha dejado ir sus deseos con el viento pidiéndoles algún día volver…un preso de sí mismo-

Sesshomaru y Rin se miraban sin apartar la vista el uno del otro, no decían nada, pero en el interior de ellos un sentimiento extraño de entendimiento los envolvía a ambos, Rin lo había descubierto no por suerte o casualidad más bien porque en ella rugían los mismos sentimientos, podían ser distintos, pero tenían algo en común. Vacío, un gran y enorme vacío .

-Ya es tarde- Sesshomaru dio la vuelta y detrás de el lo siguió Rin, caminaron en silencio y no volvieron a mirarse en ningún momento, llegaron al motel cerca del atardecer pidiendo cenar cada uno en sus respectivas habitaciones, no volvieron a coincidir en el resto del día y la noche.


Los ojos de Jaken estaban al límite de su capacidad, un poco más y Sesshomaru juraría que se saldrían de sus parpados. Él podre diablo miraba desde la puerta de la cocina a su jefe preparando el desayuno, esto podría ser una exageración para cualquier otro, pero Jaken que llevaba diez años sirviendo en ese Motel jamás vio nada igual, su jefe no era de los que se levantan temprano a cocinar para otros, su jefe no era así ¿O sí?

-Señor, son las ocho de la mañana-Lo primero que menciono debido a la impresión

-Sé que hora es Jaken-No le dio importancia a su sorpresa, de hecho él tampoco lo podía creer pero debido a la charla de ayer le fue imposible dormir tranquilamente, así que opto por levantarse y hacer algo con su tiempo

-Señor, no es necesario yo bien puedo…-

-Prepara la mesa y cállate, no requiero de alguien que me diga que puedo y que no puedo hacer-Su señor le hablaba golpeado, pero lejos de parecer grosero a Jaken le dio la impresión de que no quería que lo mirara, como si estuviera abochornado. Luego entendió porque.

-Buenos días-Rin había llegado a la cocina guiada por el olor de la comida-Veo que estas preparando el desayuno ¿Quieres que te ayude? -Jaken estaba a punto de decirle que su jefe bien podía arreglárselas solo, (Querría evitarle a la señorita un desplante por parte de su jefe) cuando él se le adelanto

-Tuesta las rebanadas de pan con mantequilla-Esto sí que era el colmo-Por su puesto ¿Algo más?-Pásame las fresas…-Jaken observo como ambos lo ignoraban olímpicamente, estaban tan metidos en lo suyo que el mundo dejo de importar en el instante que se juntaron, se comportaban como si fuesen amigos de años que después de mucho se volvían a ver, Jaken por un momento dudo estar despierto, pero un fuerte pellizco en el brazo vio que todo era real.

Estando en la mesa los tres procedieron a comer con calma, solo Jaken alternaba la mirada entre uno y el otro buscando algo que le dijera que estaba pasando, pero ellos seguían en su labor de ignorar su presencia.

-Rin-Hablo Sesshomaru

-Sí, dime-

-Hoy debo ir carretera arriba hasta una granja donde se compran las hortalizas de la semana ¿Quieres acompañarme? -En realidad Jaken era el encargado de las compras

-Me encantaría, pero no se molestará el señor Jaken si voy contigo-Después de horas parecía que por fin lo notaban. Jaken iba a responder, pero de nuevo lo callaron

-No tiene porque, ya lo arreglo todo-Aseguro Sesshomaru

-Entonces iré por mi cámara y un abrigo-Levantándose de la mesa corrió escaleras arriba directo a su habitación, Sesshomaru le siguió yendo por las llaves de la camioneta

-Jaken- El nombrado tardó en reaccionar -S…si señor-

-No nos esperes para cenar, si viene algún cliente diles que no hay habitaciones disponibles y cierra la entrada, no quiero a nadie a nuestro regreso-Dicho lo ultimo espero a Rin en las escaleras para juntos salir de la casa.

Jaken no estaba seguro de que fue lo que sucedió así que siguiendo las ordenes de su jefe, coloco el letrero de cerrado en la entrada y se fue de nuevo a su cuarto a dormir. Tal vez después de una siesta el mundo volvería a tener sentido.

-El señor Jaken parecía confundido ¿Crees que este bien? -Pregunto Rin

Sesshomaru quién iba manejando respondió-Tal vez este cansado eso es todo-

Rin asintió, girando la cabeza observo el paisaje a través de la ventana-Esta vez hablaremos o nos ignoraremos como anoche-

-Eso depende de ti, ¿De qué te gustaría hablar? -En esta ocasión Sesshomaru no deseaba guardar silencio, esperaba charlar con Rin no sabía porque pero eso era lo que quería

-De cualquier cosa, pero sé que hay preguntas que ninguno de los dos esta dispuesto a responder, así que te ofrezco un trato-Mirándolo continuo-Si alguna pregunta no es de nuestro agrado, tenemos todo el derecho a no responder, no habrá mentiras ni engaños, solo respuestas honestas-

Sesshomaru lo pensó un momento, en su vida había mantenido muchos secretos para si mismo y en alguna ocasión gente allegada a él le pidió expresarlos tal era el caso de Kagura o Jaken, pero ni en ellos había confiado tanto como para hacerlo. Rin en cambio buscaba honestidad siendo libre de negarle respuestas si él así lo decidía y eso le gusto-De acuerdo-

-Está bien empezare yo, Señor Sesshomaru ¿Qué edad tiene? -Intentaría con algo simple

-¿Qué edad crees que tengo?-Parecía fácil pero Sesshomaru aún mantenía sus defensas

-No es correcto responder una pregunta con otra pregunta, más sin embargo yo diría que unos treinta cinco-Rin advirtió que este ejercicio era difícil para ambos, abrirse nunca es fácil más si hay un dolor bloqueando tus respuestas

-Tengo 37 ¿Y tú?-

-Acabo de cumplir 28-

-Respondiste muy rápido, normalmente una mujer se cohíbe al dar su edad-

-Recuerde que estamos siendo honestos, pero debo agregar que soy de la opinión de que si se ha vivido con plenitud orgullosamente decimos nuestra edad, es como si expresáramos que estamos en acuerdo con el paso del tiempo-

-Entonces ¿Respondió por qué está siendo honestad o por que ha vivido plenamente? –

-Por honestidad… en mi vida me hacen falta muchas cosas-Hubo un espacio de silencio el cual Sesshomaru supo interpretar como algo de lo que ella no hablaría.

-Mi turno ¿Siempre viaja con una cámara? –

Rin agradeció el que no insistiera con el otro tema-Si, en secundaría tuve taller de fotografía por dos años me gusto tanto que desde entonces llevo mi cámara en todos mis viajes, nunca se cuándo la necesitare-

-Yo no termine la secundaría- Para Sesshomaru este tema representaba una espina muy dolorosa, no solo por el recuerdo de la muerte de su padre, también porque lo consideraba el primero de muchos proyectos que nunca termino.

-¿Y?-

Sesshomaru se sorprendió con su respuesta-Acaso no piensas preguntarme por qué deserte-

-Sus motivos tendrá, la verdadera pregunta es ¿Qué te detiene a continuar? –

-Hmtp… soy demasiado viejo-

-Viejo para qué ¿Estudiar? Mire, en tres años usted podría terminar la secundaria y preparatoria con un curso intensivo en línea, más sin embargo supongamos que decide no hacerlo por considerarse "viejo" para esas cosas, de igual forma esos tres años van a transcurrir la diferencia está en que decida hacer con el tiempo-Rin era una mujer preparada y creía firmemente en que una persona sin importar sus limitaciones debía hacer el esfuerzo por superarse, nunca consentiría que alguien se diera por vencido sin antes intentarlo

A Sesshomaru nunca le habían dicho nada igual, la mayoría le decía que estaba bien con el motel y que no debía preocuparse por el futuro, Rin en cambio le mostraba otra perspectiva de cómo podía ser su vida, no como un fracasado enfrascada en un punto medio de la carretera, sino como un hombre que decide pararse y continuar lo pendiente.

-Llegamos…-El camino fue tan corto que apenas lo sintió, a lado de esa chica todo era distinto.


No entendía por qué se comportaba de esa manera. En cuanto llegamos a la granja Rin estaba de tan excelente humor que no tardo en abordar a Jinenji con toda clase de preguntas sobre esto y aquello ¿Qué tanto tarde un repollo en crecer? ¿Cuándo es tiempo de cosecha? ¿Se puede plantar verduras y frutas en el mismo campo? Pobre Jinenji ni yo hubiera podido responder tanta duda.

Como a Rin parecía que nada podría satisfacer su curiosidad Jinenji opto por llevarla a la parte trasera de su casa donde él tenía a sus animales, las gallinas, conejos, y perros captaron de inmediato el interés de Rin haciendo que por fin dejara a Jinenji respirar.

Jugo con cada animalito que vio, a algunos les asigno nombres de acuerdo a su apariencia y a otros que ella considero "muy muy lindos" les tomo una fotografía, al contemplarla se me asemejo a una niña pequeña que salía por vez primera de excursión, todo era nuevo y fascinante a sus ojos como quién descubre un nuevo mundo y después lo enseña al resto. Me daba envidia su alegría, por que a pesar de vivir aquí nunca vi realmente la belleza de mi hogar y sus alrededores, estaba ciego de costumbre, de cotidianidad, de aburrimiento, que poco a poco le perdí importancia a las cosas más simples, esta era mi tierra y no estaba orgulloso de ella.

Llegada la tarde Jinenji nos invito a comer en su casa, Rin rápidamente protesto alegando que no comería a ninguno de los adorables animalitos que había conocido ese día, que después de a ver conocido la ternura del bosque se volvería vegetariana irrevocablemente. Jinenji le aclaro que había preparado arroz con pescado, de modo que nos quedamos a cenar (Y la idea de ser vegetariana murió tras el primer pescado)

Después de llenar la camioneta con las provisiones de la semana y habernos despedido de Jinenji regresamos al Motel sumidos en un incómodo silencio. No entendía por qué se comportaba de esta manera, habíamos tenido un grato día, pero parecía que todo eso se había olvidado, su vista puesta en la ventana sin nada más que un "Si, estoy bien" cada vez que preguntaba por su estado. No insistí.

Llegamos al Motel cerca de las nueve de la noche, bajamos los víveres y para sorpresa mía me ayudo a colocarlos en la nevera, seguía en ese estado de encierro, parecía que estaba sufriendo pero muy a mi pesar me obligue a no preguntar, tal vez el secreto de su estadía la agobiaba en estos momentos así que respetando nuestro acuerdo no pregunte, no obstante quería decirle que no estaba sola, que yo estaría a su lado, que estaba de pie junto a ella, pero con que derecho podría declarar algo así, yo…yo no era más que un extraño

-Mañana…¿Podríamos pasar juntos el día de mañana?-Hablo de golpe sin aviso

Mirando sus ojos vi reflejado el brillo de quién espera ansiosa un sí de mis labios, sea lo que sea que estuviera lastimando el corazón de Rin yo no lo podría curar, pero si mi compañía disminuía su carga aunque sea solo un poco, con gusto lo arría. En secreto, ella hacía lo mismo por mí.

-De acuerdo-Y después de mucho esperar ella volvió a sonreír.


Jaken trato de disimular un poco al ver que la mañana de ayer se volvía a repetir, su jefe y huésped preparaban el desayuno sin notar que él estaba ahí presente, no tenía caso sentirse herido de cualquier forma su jefe la mayor parte del tiempo lo ignoraba; en fin, con tranquilidad fue colocando la vajilla en la mesa para el desayuno, a casi terminar el ruido de un motor lo distrajo-¿Tal vez se trate de un cliente?-Se dijo, de modo que fue a averiguarlo

-¿Qué trabajo tienes pendiente hoy? Tal vez te pueda ayudar-Pregunto Rin, mientras exprimía unas naranjas para hacer jugo

Sesshomaru aun no le aclaraba todo lo del asunto del "Dueño del Motel" de esa manera podía seguir fingiendo que era un hombre sin estudios pero muy trabajador, a tener que confesarle que él era dueño de un Motel y que duras penas conocía lo que significaba la palabra trabajo-No será necesario, como no hay huéspedes de más las tareas son mínimas-

-Entonces…es como un día libre-

-Se podría decir que sí-Y como no, él se había encargado de que no hubiera más huéspedes

-¡Genial! ¿Qué te gustaría hacer?-Tomando los alimentos, los llevaron a la mesa mientras hablaban

-A dos horas en carretera hay un templo con estanques de peces dorados-Sesshomaru tomo lugar en la mesa junto a Rin, entre los dos se sirvieron la comida

-Recuerdo habías dicho que no había nada de interés cerca de aquí ¿Cómo sabes del templo? -

-¡Porque yo se lo dije!-Parada en el marco de la puerta Kagura esperaba con Jaken a sus espaldas-Buenos días Sesshomaru-Kagura se canso de esperar y fue en busca de Sesshomaru, pero cual fue su sorpresa al encontrarlo con "la chica extraña de la lluvia" desayunando tranquilamente

Sesshomaru había planeado un día de actividades diversas para él y Rin juntos, ahora con Kagura ahí sus planes se iban directo al caño-Buenos días Kagura

-Espero no interrumpir nada-Dijo acercándose a la mesa, justamente a un costado de Sesshomaru

-Desde luego que no-Rin se mostro cortes con la recién llegada-Apenas íbamos a desayunar ¿Gusta usted? -Después se dirigió a Jaken-Señor Jaken acompáñenos por favor, yo ayude al señor Sesshomaru a prepararlo-

Kagura se sorprendió al escuchar lo mencionado, pero rápidamente lo disimulo-Así que Sesshomaru preparo este festín-Buscaba una aclaración más concreta

-Si, ¿Por qué lo pregunta?-Dijo Rin. Sesshomaru no sabía qué hacer, así que opto por el silencio

-Lo pregunto por qué normalmente es el señor Jaken quién gusta de hacer las comidas a sus huéspedes, es una costumbre suya querida-Kagura no tuvo problema con seguirles el juego, No era la primera vez que se burlaban de un huésped fingiendo ser otras personas

-Ohh tiene razón mi primera comida me la preparo él, que hermosa cortesía la suya señor Jaken-Entre tantas mentiras, ninguno fuera de Rin estaba a gusto en esa mesa

-Querida no nos hemos presentado, mi nombre es Kagura de Onigumo amiga del señor Jaken y de Sesshomaru ¿Y tú eres?-

-Rin Ayumi, solo un huésped que está de paso-

-Un placer, y dígame señorita Ayumi planeaban salir esta mañana-Kagura podía fingir tanto como esos dos, pero entre tantas mentiras sacaría algún benefició

-Así es, el señor Sesshomaru a sido muy amable en permitirme acompañarlo en sus diligencias aun cuando sé que solo soy una molestia, pero le agradezco mucho su tiempo-Rin miro a Sesshomaru manifestándole a través de sus ojos que lo dicho era honesto.

Kagura los observaba a detalle-Interesante, no les importa si los acompaño, tengo tiempo libre y desde hace mucho he querido visitar ese templo-Para ser más exactos, invito a Sesshomaru a ir desde hace un mes pero él se negó alegando que no le gustaban los templos, al parecer lo único que no le gustaba era viajar con ella.

-Por mí no hay inconveniente ¿Qué opinas Sesshomaru?-

Claro que deseaba negarse pero de hacerlo tendría que dar algunas explicaciones y en ese momento no estaba de humor-Hay lugar demás en la camioneta-

Aquella mañana que él imagino sería de convivencia grata y recuerdos agradables, estaba por convertirse en la más agobiante y pesada de los últimos meses.


-No llamaste-Rin disfrutaba a lo lejos una explicación impartida por uno de los monjes acerca de la historia del templo, mientras Sesshomaru y Kagura permanecían rezagados a una distancia prudente donde no les pudieran escuchar.

-No tuve tiempo-No podía evitar esta discusión por muy tedioso que fuera

-¿No tenías tiempo o no querías hacerlo?-Le reclamo

-Hay alguna diferencia-Que caso tenia mentir, a estas alturas Kagura ya sabía el por que nunca hizo esa llamada

-Al terminar la semana ella se ira, y después que aras ¿Me buscaras para sustituirla ó le seguirás como perro faldero? -Kagura tenía la osadía de enfrentar a Sesshomaru sin miedo a su carácter, pues ella también sabía sacar las garras cuando la ocasión lo amerita

-¡Basta!-Era mejor que no continuara con eso

-¡No! Tu basta de engañarme, de mentir, de siempre hacerme lo mismo, es que no lo entiendes-Cuantos sentimientos había guardado solo para él, la esperanza de ser ella la primera era el sueño que la levantaba por las mañanas, solo aguardando a que ese día fuera el ultimo en soledad.

Sesshomaru la encaro de frente-¡La que no lo entiende eres tú!- No, no era para nada justo el pago a todos sus desvelos, tanto aguardar, tanto esperar, solo para que otra fuera la elegida, pero engañarla sería mucho peor-Sabes que lo intente, que cuando empezamos esto yo también buscaba lo mismo que tú, pero no funciono-

-Ni siquiera lo hemos intentado enserio-Refuto enseguida

-Que más quieres intentar Kagura, somos similares en muchos sentidos y son esas similitudes las que nos alejan, nunca podría funcionar algo entre tú y yo-Levantando su mano, acaricio la mejilla de ella deteniendo una lagrima que había escapado de sus bellos ojos rojos- Fuera de un afecto sincero, el amor que me pides no te lo puedo dar-

Como dolía escuchar aquello que tan celosamente su mente siempre supo, pero que su corazón le pidió ocultar-Maldito… como puedes ser tan cruel, ¿Por qué Sesshomaru?, ¿Por qué me dejaste alimentar la esperanza tanto tiempo?-

-Por la misma razón por la que tu siempre volvías-Mas y más lagrimas se unieron a esa primera, con el pañuelo que llevaba en el bolsillo empezó a limpiar todas-Ninguno de los dos quería dar el primer paso, era más fácil mentirnos y evitar así la soledad-

El pañuelo no basto, Kagura se lazo a sus brazos escondiendo el rostro en su chaqueta-Te quiero…te quiero-Hablo sin poder ya detener su lengua

Sesshomaru le acaricio los cabellos con suavidad-Kagura, no lo hagas más difícil-

Levantando el rostro suplico-Por favor, no lo hagas-

-Ya todo termino-Era hora de avanzar

-Dame algo Sesshomaru, dame algo solo para mi-Agachando la cabeza se refugió entre sus brazos

Después de un largo silencio Sesshomaru hablo- Nunca en ningún momento del tiempo que pase contigo fue una decepción, has sido lo más cercano a un verdadero amigo, alguien en quien puedo confiar plenamente-Alejándola de su pecho busco su mirada- Kagura eres uno de mis recuerdos preferidos-

Los dos se miraron el uno al otro reviviendo en sus mentes aquellos recuerdos que habían compartido, Sesshomaru tenía razón varios de ellos valía la pena conservarlos con ternura y aprecio, más que amantes fueron amigos, que raro, hasta ahora se daban cuenta que había además del sexo otras cosas que los unían

Después de tantas lagrimas una sonrisa genuina pinto su rostro, aquello era lo más lindo que le pudiera haber dicho y lo mejor es que fue honesto-Gracias-Tomando distancia ella termino por secar lo ultimo de su llanto

-Vamos, aun no hemos entrado al templo-Le invito a continuar pero ella no tomo la mano que le extendió -¿Te vas?-

-Si…-Seguir ahí, en el mismo lugar que ella, era una tortura que Kagura prefería evitar

-¿Volverás?- Una parte de él aun deseaba tenerla como amiga, pero reconocía que su presencia en estos momentos no era lo más indicado, aun así esperaba que volviera

-No lo sé-Después de esto Kagura se alejaría de Sesshomaru por un tiempo, no por cobardía o enojo simplemente porque necesitaba aplacar los fuertes sentimientos que refulgían en su corazón, saber cuanto tardaría en sanar era algo que ninguno de los dos podía responder

-Las puertas del Motel siempre estarán abiertas para ti, no importa la hora o el día-Sin importa cuanto tardara Sesshomaru le guardaría un lugar en su mesa para cuando ella estuviera lista

-Adiós Sesshomaru-Viendo por ultima vez, dio la vuelta y comenzó a caminar

-…Kagura-Dijo, cuando ella a lo lejos desaparecía entre la multitud de visitantes

Sesshomaru miro el lugar por donde ella se había ido, algo en él se sentía herido tal vez se debía a la costumbre de siempre poder contar con ella, pero ahora tendría que aprender a prescindir de su compañía.

Kagura era de las pocas personas que tenía en alta estima su ausencia se sentiría, pero al menos se alegraba de ya no lastimarla, tal vez algún día sus caminos se volverían a cruzar y si eso sucedía estaba seguro que todo sería distinto.

Con una culpa menos sobre su conciencia, Sesshomaru levanto la comisura de sus labios en una sonrisa, por él, por ella, por todo lo bueno-Hasta pronto Kagura-Girando el cuerpo se dispuso a seguir adelante, lamentablemente no fue así, solo había dado un paso cuando la presencia de otra persona se interpuso en su camino-Rin…-

Rin había visto todo desde un inicio, aguardando en silencio mientras todo terminaba, no fue su intención ser chismosa pero algo dentro de ella le impidió dar la vuelta e ignorarlos, lo había visto todo y aun así no sabía que hacer o que decir para ayudar

Sesshomaru tomo la palabra por los dos-Volvamos al Motel-


Tras llegar al Motel le pidió a Rin que entrara en la casa, había sido un largo día y lo único que deseaba era un momento consigo mismo, había tanto que pensar que sin darse cuenta las horas pasaron convirtiendo la tarde en noche. En medio de su reflexión llego a una conclusión que no le gusto para nada, ya no ambicionaba con estar solo, aquel horrible y desagradable sentimiento le consumía la vida entera, Kagura evitaba que su soledad fuera pesada pero ahora que se había ido quién le ayudaría a disminuir su carga, no, ya no deseaba ser tan miserable.

-Sesshomaru…-A sus espaldas Rin llego con dos tazas de café caliente y una frazada colgando del brazo-Creí que te gustaría entrar en calor, la noche es fría-

-No era necesario que vinieras-Tomando la taza se la llevo a los labios degustando con gran placer el primer trago. El liquido paso por su garganta despertando todas esas partes frías por el duro clima-Gracias-

Rin dejo que bebiera a placer, mientras tanto envolvió con la frazada el cuerpo de ambos obligándolo a estar cerca de ella-Un poco más y en vez de una persona hubiera encontrado una paleta de hielo- Trato de alegrar el ambiente con un poco de humor

-No estaba en mis planes pasar la noche afuera-Pronto noto lo cerca que estaban el uno del otro-¿Por qué viniste?-

-Algo me decía que podrías necesitar una buena taza de cafe-

Alzando las cejas pregunto-¿Solo por eso saliste?-

-No-

-¿Entonces por que?-Con una mano puesta en su cintura la acerco más a él. No mostro desacuerdo por que la tocara así que continuo

-Porque sé cuándo es momento de estar solo y también cuando ya es suficiente-Con la taza en la mano ella también tomo un poco de su bebida

-¿La querías?-Después de lo que había visto la curiosidad la estaba matando por dentro-Te recuerdo que no estás en obligación de contestarme, es solo que….

La corto de inmediato-Si, pero no del modo en que tu piensas, era una de las pocas personas con las que me sentía cómodo hablando y su compañía siempre fue de mi agrado, pero con forme pasaron los años me di cuenta que más allá de un afecto sincero, nada podría ofrecerle-

-Se ve que tú eras importante para ella, tal vez con un poco más de tiempo…-

-No, el sentimiento sería el mismo hoy, que dentro de 5 años, solo hubiera aplazado lo inevitable-

Rin lo comprendía plenamente, a veces por temor a las consecuencias evitamos muchas situaciones incomodas, pero Sesshomaru era fuerte y aunque enfrentar a Kagura no estaba dentro de sus planes, el hacerlo fue lo mejor, aunque una parte de ella se alegraba con la separación de ellos.

Sesshomaru poco a poco dejaba atrás esos sentimientos de culpa y reproche, ya nada podía hacer al respecto y al igual que Rin una parte de él se animaba por dejar esa situación en el pasado, para bien o para mal terminar con Kagura fue acertado-Rin-

-Si….-

-Hazme un favor-

Rin asintió, desde que salió de la casa su única intención era asistirlo en este momento dificil, así que no importaba lo que le pidiera ella diría, sí.


Por un momento creyó que declinaría su petición, pero ahora, con ella entre sus sabanas sabía que no era una mentira

-¿Alguna vez habías hecho esto?-A pesar de estar vestidos y sin tocarse Rin tenía un ligero rubor en las mejillas

-No ¿Y tú?-Las únicas veces que invito a una mujer a su cama fue después de tener sexo con ellas, tener a Rin de ese modo era algo nuevo y diferente, no obstante esa noche lo que menos deseaba era estar solo

-Nunca-

-Ni siquiera dudaste, que tal si en vez de dormir te hubiera pedido sexo, igual hubieras aceptado-Con Rin las cosas se manejaban de manera distinta, con ella no tenia reparos en mostrarse como era

-¿Quién dice que no dude? Es solo que si hubieras querido tener sexo, estoy segura que no me lo pedirías, simplemente lo arias y ya-De igual modo para Rin era fácil soltarse con Sesshomaru, confiaba en él

-¿Estas cansada?-

-Solo un poco, aun puedo permanecer despierta si necesitas hablar-Le aseguro

Claro que estaba agotado, pero más fuerte que el cansancio eran sus ganas de estar con ella, de verla, de hablarle, de pasar cada minuto juntos-De acuerdo ¿Cuántos años tenias cuando perdiste la virginidad?-Volvían al juego de hacer preguntas como en la camioneta

Con sorpresa pregunto-¿Acaso buscas excitarme?

-No es correcto responder una pregunta con otra pregunta-Cito sus mismas palabras

-¡Tramposo!-Rin estaba entre abochornada y sorprendida

-Ya lo dijiste, si quisiera hacerte el amor lo haría sin rodeos, pero estando en la cama con una mujer hermosa me es difícil pensar en temas de conversación que no involucren el sexo-

Rin se rio por lo bajo ante su cinismo, pero igual se estaba divirtiendo-Tenia quince años-

Sesshomaru alzo las cejas-Un poco precoz no te parece-

-No me digas, apuesto a que tú tenías menos años que yo cuando te acostaste con una mujer-Aseguro

-Parte del trato estipula que puedo negarme a responder las preguntas que me plazca-Realmente se estaba divirtiendo con algo tan tonto como eso

Haciendo un puchero contesto-¡No es justo! En fin, mi turno ¿Cómo fue tu primera experiencia sexual?-

Sesshomaru frunció el ceño en señal de recordar aquel momento, después de una pausa respondió-No puedo hablar por los dos, pero por la expresión de su rostro estoy seguro que he sido el mejor amante que tubo en toda su vida-Arrogante hasta el final

-¡Que vanidoso eres!-

-¿Vanidad? Querrás decir seguridad-

Reía sin parar-Ja Su turno….

Aquella noche los dos se durmieron hasta altas horas de la madrugada hablando de muchas cosas, la mayoría de tonterías y cosas sin sentido, pero para ambos fue uno de los momentos mas divertidos y especiales en muchos, muchos años.


-¿Señor? ¿Señor? Ábrame por favor-Eran las nueve de la mañana y Jaken estaba alterado al descubrir algo desconcertante-No me lo va a creer, pero la señorita Rin acaba de desaparecer-Había revisado la casa de arriba abajo y ni rastro de ella-Primero revise la casa y después los alrededores, pero solo dejo su auto. Señor estoy sumamente preocupado que tal y si nuestras suposiciones eran ciertas y la señorita Rin solo vino con su carita de ángel para confundirnos, lo más probable es que la muy pilla ya se largó dejándonos un cadáver en la cajuela del auto, ¡Oh por dios!-La mente de Jaken trabajaba a mil por hora-Y si el cadáver es….¿Señor? ¿Señor Sesshomaru? ¿Está bien, está vivo?- Alterado, empezó a golpear la puerta con la intención de tirarla-¡Jefecito bonito responda! Jefecito yo….

La puerta se abrió de golpe y en vez de una persona Jaken se encontró de frente con la muerte-¡Guarda silencio Jaken!-Por muerte me refería a la cara de pocos amigos que tenía Sesshomaru, el hombre estaba cansado y no escucho cuando su sirviente lo llamo, pero en cuanto los golpes y los gritos se alzaron de tono, se levanto rápidamente de la cama para detener el parloteo incesante de Jaken.

-Gracias a los dioses que esta bien jefecito-Aunque Sesshomaru lo mataba con la mirada Jaken estaba sumamente contento por verlo en una pieza-No sabe lo feliz que estoy de verlo señor, que bueno que no haya caído en las garras de esa maldita y desagradable arpía que es la señorita…..-

-¡JAKEN!-Abriendo un poco más la puerta Sesshomaru le dejo ver a su sirviente que no estaba solo

-Buenos días señor Jaken-Rin lo saludaba desde la cama intentado contener la risa que toda esa situación le provocaba. Rin se había despertado desde el comienzo, pero no dijo nada para escuchar todo lo que se decía de ella-Escuche algo sobre una desagradable arpía mata hombres, espero que no este cerca de aquí, no sabe lo nerviosa que eso me pone-

Jaken rápidamente cambio de moreno prieto a rojo escarlata en cuestión de segundos-Yoo, yo, yo solo….yo….-

Sesshomaru intervino-Tú solo viniste a decirnos que el desayuno ya está servido ¿Cierto?-Dijo en modo de advertencia

-Ehh ¡Si! Así es, el desayuno ya está servido con permiso-Que capacidad tan sorprendente la de ese hombre, pues ni tarde ni perezoso se desvaneció como el aire. Sesshomaru cerro la puerta con un fuerte golpe, gracias a Jaken tendría que responder ciertas preguntas

-¿Entonces el dueño eres tú y el empleado es él?-Rin de inmediato empezó con sus cuestionamientos

Acorralado, no le quedo de otra-Si-

-¿Y cuando fingías ser un ayudante era para averiguar si era una asesina?-Rin se abrazo a sus piernas inquieta cual chiquilla

-Jaken imagino aquello, yo solo quería saber por que deseabas permanecer una semana aquí- Dándose la vuelta la miro recargado en la puerta

-Hubiera sido más sencillo si me lo preguntabas de frente ¿No crees?-Dijo con simpleza

Sesshomaru noto que Rin no estaba molesta por la situación, al contrario parecía relajada e interesada en las conjeturas que se habían hecho con respecto a ella-No lo creo, aun si te hiciera esa pregunta en este momento, estoy seguro que no me dirías la verdad-Con solo unos días a su lado la había aprendido a leer, muy a su pesar, sabía que a esa pregunta nunca encontraría la respuesta.

El semblante de Rin cambio a una más serio-¿Y eso te molesta?-

Desde luego que sí, Sesshomaru estaba acostumbrado a tener el control con respecto a todo lo que estuviera dentro de su Motel, pero por única ocasión iba hacer una excepción - No importa lo que te allá traído hasta aquí, mientras estés conmigo lo demás no me interesa-Para que andar con rodeos, Rin era lo mejor que le había pasado en toda su vida, con ella todo era nuevo, interesante, mejor. Dicen que hay personas que son la sal de tu vida, y Rin sin duda le daba sazón a todo.

-Gracias-Rin giro el rostro para disfrazar una lagrima que se había escapado de su ojo, aunque lo intento Sesshomaru se dio cuenta.

-Tengo hambre que te parece si vamos por ese desayuno- Rin se bajó de la cama buscando sus botas, Sesshomaru le imito estando listo solo un minuto después.


-¡Esto es una locura!-No podía creer lo que estaba haciendo, nunca en su vida había faltado a la ley, y ahora, una ola de adrenalina la recorría de los pies a la cabeza. Sí tenía que admitirlo, esto era lo más osado que había hecho, ni siquiera de adolescente se le hubiera ocurrido semejante disparate

Sesshomaru sacaba las pinzas de la mochila para empezar a cortar la alambrada-Dijiste que lo arrias-Le recordó, poco a poco fue cortando la malla haciendo un espacio por donde pasar

-Sí, pero por un momento pensé que era broma-

Sesshomaru se detuvo para mirarla escéptico -¿Enserio? Me viste llenar la mochila y pensaste que era una broma-

Rin tomo la mochila para que Sesshomaru se moviera con más libertad-Bueno sí, tienes razón, pero eso no quita sea incorrecto lo que estamos haciendo-

Sesshomaru acababa de cortar la malla, usando su camisa como guantes doblo el alambre haciendo un espacio por donde pasar-Eso lo hace interesante-Primero paso él y después le ayudo a ella a cruzar

-¿Lista?-

-No-Esa voz dentro de su cabeza llamada conciencia le gritaba que no lo hiciera, pero solamente esa voz estaba en contra, el resto del cuerpo estaba más que dispuesto

-Sígueme-

Mientras desayunaban Rin hizo mención de que una de las actividades que más disfrutaba hacer era nadar, pero que por cuestiones del trabajo hacía mucho que no practicaba este deporte. Sesshomaru buscando complacerla le dijo que sabía de un lugar donde podrían hacerlo, pero que el único inconveniente es que se trataba de un sitio exclusivo. Al principio Rin supuso que se trataba de una alberca privada o de un club deportivo para gente VIP, cualquiera que fuera el caso contaba con el capital suficiente para pagar la entrada, pero para su pesar cuando Sesshomaru dijo "exclusivo" se refería a un lago protegido por asociaciones dedicadas a la protección y cuidado del medio ambiente.

-¿Enserio ya lo habías hecho?-Sesshomaru había mencionado que no era la primera vez que lo intentaba

Sesshomaru los guiaba a través del follaje cuidando no encontrarse con un agente-Una vez, fue en secundaría-

Rin se angustio-¡Eso fue hace años!-

A Sesshomaru parecía no importarle-Era costumbre entre los chicos del último año entrar en algún sitio prohibido y traer pruebas de tu hazaña – Sesshomaru miraba el camino ignorando como los labios de Rin se fruncían hasta formar una linea

Rin recordaba sus inicios y el cómo la situación la había obligado a crecer antes de tiempo, mientras la mayoría de los chicos iban a fiestas o hacían locuras como las que relataba Sesshomaru, ella trabajaba y estudiaba al mismo tiempo, lo más penoso de esta situación es que aun cuando era todo lo que siempre quiso ser, aun seguía sin conocer ese lado divertido de la vida-Supongo que había un premio o algo para el vencedor-Dejando los recuerdos tristes a un lado se enfocó por donde pisaba, al menos así tendría una aventura que contar algún día

Ya casi llegaban, al parecer era su día de suerte por que no se habían topado con ningún vigilante-El premio no era precisamente un objeto, lo hacías por el respeto y la admiración de otros-

-En pocas palabras, por orgullo y superioridad entre machos-Rin lo había dicho sin tanto titulo

Sesshomaru sonrió con arrogancia-Es una forma de decirlo-Saliendo del follaje subieron una colina que los dejo en el punto exacto donde el lago se apreciaba en toda su plenitud-Solo para aclarar, ese año fui el vencedor-

Rin quiso objetar su vanidad, pero las palabras nunca salieron ya que era imposible contradecir lo que sus ojos admiraban. El lago era sin dudas esplendido, a pesar de ser un área protegida por el gobierno era claro que este había modificado un poco el ecosistema, el lago estaba rodeado por un camino de roca con el follaje a unos cuantos metros de este, la vegetación estaba perfectamente cuidada lo que sin dudas era obra de profesionales en botánica y jardinería. Haber entrado en ese lugar fue la mejor locura de todas

-Sesshomaru…esto es hermoso-Bajaron la colina situándose cerca de unos arboles

Sesshomaru se sentó en las raíces de un árbol observando como Rin aun no pasaba la etapa de sorpresa-Rin, no se cuanto tiempo tenemos lo mejor será que aproveches los minutos-

Rin asintió con efusión mientras comenzaba a desvestirse, después noto que era la única haciéndolo-¿No piensas entrar?-

-Dije que concia un lugar para nadar, jamás mencione que entraría-Sesshomaru prefería admirarla

Rin no se molestó por su negativa le gustaba esa manera de ser de él, además ella era la que deseaba nadar él solamente complació su capricho. Ya se había retirado los pantalones y la camiseta quedando en ropa interior-Tienes razón, bueno disfruta la vista-Diciendo esto, retiro de su cuerpo el resto de su ropa.

Sesshomaru agrando los ojos sorprendido, Rin se desnudaba por completo frente a él dejándole ver la belleza de su piel. La temperatura de su cuerpo aumento, sus ojos no parpadearon por temor a cerrarlos y perderse un solo instante de ese espectáculo, de sobra conocía la composición del cuerpo femenino pero el nudo en su garganta revelaba que además de un sentimiento de apego a Rin, también existía deseo.

Rin sabía lo que su acción provocaba, hombre y mujer son seres de impulsos y deseos, más no buscaba incitar esos sentimientos, solo quería liberarse de las ataduras de su mente-No es lo que piensas, solo es algo que necesito hacer-Sin mirarlo se sumergió en el lago terminando la tensión del momento

Sesshomaru no dijo ni hizo nada, sabía que Rin no lo había hecho con la intención de seducirlo, aunque su cuerpo no reacciono del mismo modo. En realidad, trataba de entenderla, pero para eso necesitaba respuestas-¿Duele?-

Rin no se había alejado de la orilla, así que lo escuchaba claramente-No sabes cuánto-Nadaba boca arriba de modo que no lo miraba a los ojos, eso le ayudaba mucho

-No se puede huir por siempre, tarde o temprano regresaremos a ese lugar-Sesshomaru se identificaba con el sentir de Rin, aunque ignoraba los detalles ambos deseaban cosas que no habían conseguido obtener

-Lo sé, pero a veces la vida te estrangula con tanta fuerza que piensas "Ya no puedo más", no, no se puede escapar del camino, pero tal vez puedas detenerte a encontrar la fuerza para seguir adelante-Rin vivía una soledad distinta a la de Sesshomaru, pero soledad, al fin y al cabo.

-También existe otra opción-Rin se enderezo de inmediato, mirándolo directamente a los ojos-Podrías quedarte y no volver nunca más-

Enmudeció un instante-¿Es broma?-Pregunto escéptica

Sesshomaru negó-No lo es-Rin seguía mirándolo sin creer lo que había dicho, "Quedarse" "Quedarse y ser libre" Cuantas veces no lo había soñado, pero ¿Acaso era posible?

-Rin ¿Por qué volver al lugar donde eres tan infeliz? Podrías quedarte y hacer todo lo que quisieras, tienes la capacidad para hacerlo de eso no me cabe la menor duda, y si eso no basta, me tienes a mí…yo te apoyare sin importa que escojas-Una palabra de ella y Sesshomaru movería el mundo entero solo por verla sonreír, nunca antes alguien le había hecho sentir lo que ella animaba en él, ese sentimiento de fulgor y pasión lo incitaba a cambiar, a querer ser más mucho más, estaba dispuesto a darlo todo por tenerla a su lado.

Rin no supo que contestar, un enorme nudo se le había formado en la garganta mientras unas cuantas lágrimas empañaron sus ojos nublando su vista, las palabras de Sesshomaru habían tocado su alma con la calidez y dulzura de un amante.

Nunca antes alguien le ofreció todo a cambio de nada, había crecido con la enseñanza de "Nada es gratis" y que las promesas y favores era un lujo que no se podía dar, sin embargo, era Sesshomaru quién le ofrecía todo -Gracias-

-¡Oigan ustedes dos! ¿Qué están haciendo?-

Un guardia cruzando el lago los había descubierto -¡Quédense donde están!- Amenazo

Sesshomaru se puso de pie tomando la ropa de Rin guardándola en la mochila, Rin salió del agua con la queja marcada en el rostro-No hay tiempo, Toma-Sesshomaru le coloco su camisa que era más grande que la de Rin esta le cubría el cuerpo hasta las rodillas- ¡Vamos!-Tomándola de la mano la jalo corriendo hacía el bosque

A pesar de no llevar zapatos Rin le mantuvo el paso ignorando el punzante dolor de las piedras que se le enterraban al pisar-Corre, ya estamos cerca de la maya-Le dijo Sesshomaru


Llegaron al atardecer, la huida había sido todo un reto, el policía los siguió hasta la malla y posteriormente cuando abordaban la camioneta, gracias al cielo se detuvo después de entender que a pie no superaría las llantas del vehículo-Creí que nunca se detendría, debo reconocerle que tenía excelente condición física-Dijo Rin desparramada sobre el asiento

Sesshomaru aun tenía las manos en el volante-Hmpt….no lo hizo mal-

La carcajada que estuvo conteniendo durante todo el trayecto no soporto ni un minuto más, tenía razón Sesshomaru locuras como esas, las haces por la pura anécdota-Ya es tarde lo mejor será que entremos y te devuelva tu ropa-Rin aun portaba la camiseta que Sesshomaru le dio

Por toda la emoción del escape Sesshomaru olvido que debajo de esa camisa Rin estaba desnuda-Vamos-Que difícil fue decir eso, sin remojarse los labios por el deseo

Ambos bajaron de la camioneta, Sesshomaru llego al pórtico con las llaves en la mano, notando así que Rin aun no se movía de donde bajo-¿Estas bien?-

-Ehh, si, es solo que…-

Sesshomaru regreso hasta ella descubriendo el problema-¡Que imbécil!-Se maldijo por lo bajo. Los pies de Rin tenían varias cortadas y una que otra piedra enterada en la planta, sin duda le debía de doler-Sujétate-Sin preguntar, Sesshomaru tomo a Rin y la acomodo en sus brazos, con ella pegada a su cuerpo la llevo directo a su habitación depositándola en las sabanas, luego salió del cuarto regresando con un pequeño botiquín de primeros auxilios en las manos.

Rin anticipo sus intenciones-No es necesario que te tomes tantas molestias, si me pasas un algodón y agua oxigenada puedo hacerlo yo misma-Le intento detener pero Sesshomaru la ignoro.

Acomodándose en la cama, se coloco frente a ella con todo lo necesario tomando el pie izquierdo para comenzar-Trata de no moverte, si te lastimo dime-

Rin alejo el pie-Pero…-

Sesshomaru afilo la mirada-No me hagas repetirme-Después de mucho meditarlo Rin entendió que Sesshomaru no desistiría, derrotada estiro el pie dejando que él lo tomara.

Un pesado silencio se posó sobre ellos, pues en la cabeza de cada uno, una lucha feroz de pensamientos y sentimientos contradictorios tenía lugar. Primero estaba Rin, quién olvidando el dolor físico observaba a detalle como las manos de Sesshomaru la tocaban con tanta delicadeza como si fuera de cristal, ¿Qué bonito a de ser que te amen así? Pensó, sentirse protegida y a salvo, imaginar llegar a casa y ser recibida por unas manos iguales a esas, sentirte mujer entregándote por completo sin reparos, ser ella por una vez en su vida.

De igual modo Sesshomaru no la miraba, porque de hacerlo estaba seguro no poder ocultar lo que su corazón ardientemente gritaba, mientras curaba cada una de sus heridas un deseo ardiente crecía poco a poco en su pecho amenazando con salir de sus labios "Se mía" Proponerle una vida diferente donde los dos empezarían desde cero, donde ninguno estaría solo nunca más, donde los dos curaríamos las heridas del otro mientras caminamos tomados de la mano. Tan cerca y tal lejos de un mismo punto. No podía. No quería dejarla ir.

Había terminado de limpiar sus pies, pero jamás la soltó, los dos sabían que ya no había vuelta atrás, faltaba algo por decir y el momento era ese, sin saber que encontrarían alzaron la cabeza fijando sus ojos en el otro, entonces lo supieron, los dos sufrían de más sin saber que el sentimiento era más que correspondido. Era correcto.

Rin le tomo de la mano invitándolo a tomar su lugar y él lo acepto.

El sol cayo, la luna corono el cielo y las estrellas poco a poco empezaron a centellar, la noche había caído sobre sus cabezas, pero ellos dos ignoraron las señales, con desenfrenada pasión desvistieron el cuerpo de su amante entre besos y caricias. No dejaron nada para ellos mismos todo lo entregaron sin dejar reservas, ya no las necesitaban.

Rin se aferro a sus brazos con fuerza pidiéndole que no la soltara, Sesshomaru no lo haría, pero las inseguridades de ambos aun estaban presentes, tanto tiempo siendo cautelosos y en un segundo ya no había malla de seguridad, habían saltado al vacío sin pensarlo, pero es que no había nada que pensar ella era todo lo que siempre busco, mientras que para Rin, Sesshomaru era ese sueño de infancia que dejo morir al crecer.

Beso desde sus cabellos hasta la punta de sus pies, la recorrió por completo marcando con sus labios la fuerza de sus sentimientos, ella disfruto cada caricia encendiendo la llama de su deseo, nunca pensó que se pudiera experimentar algo como eso, sentir la lujuria correr por sus venas prendiendo cada sentido al cien, devolviendo en igual medida para que sintiera lo mismo que ella.

Llegado el momento Sesshomaru la tomo entre sus brazos mientras su cadera se situaba en el centro de Rin, con su mano le toco la mejilla bajándola hasta llegar al mentó, con un ligero toque la hizo elevarse dejando sus labios a la altura exacta de los suyos-Rin…- Ella lo miro con profundo amor, el amor que nunca busco, pero que siempre viviría eternamente agradecida por haberlo encontrado. Con un beso tierno entro en su cuerpo llenándola de él completamente, sus estocadas fueron agresivas, pero con cada una el placer fue en aumento, ella siguió su ritmo sin apartar la mirada del dorado de sus ojos, trato de mantenerse firme sin embargo no lo logro, estando al limite de la plenitud, cerro los parpados gritando el nombre de quien la transfiguro en mujer. Sesshomaru se vació dentro de ella llevándose un doble placer en el camino, el placer de observar el rostro de Rin desfigurado en gozo.

Esa noche Sesshomaru saco en repetidas veces la mujer dentro de Rin, esa que nunca antes nadie encontró y que solo sería de él para siempre, la amo como nunca antes había amado y por ese instante todo fue perfecto.


Bueno bueno hasta aquí la primera mitad de verdad espero que me dejen un comentario por que su opinión es lo que nos ayuda a continuar