Este trabajo es la traduccion del fic "Morning Teach" escrito por camui_zuuki (Dean y Sam) y dream_0f_flight (Castiel y Gabriel) en livejournal.
Escribir un fic lleva dias.
Traducirlo lleva horas.
Agradecer no cuesta nada.
Capitulo 1
"... Gabriel, sigo pensando que esta es una idea terrible."
"Cassy, ¡deja de ser tan mojigato! Sé que mamá y papá odian la idea de que yo sea un flamante ho-mo-sexual, pero al menos podrías aligerarte un poco y apoyarme, idiota homofóbico! "
Castiel dio a su hermano una mirada sorprendida, pero el hombre de pelo corto arenoso sólo sonrió y se encogió de hombros, mostrando que estaba tomándole el pelo. Castiel suspiró y se pasó una mano por el pelo negro desordenado. Lo último que necesitaba en ese momento era a Gabriel burlándose de él por ser un homófobo, mientras se encontraban en una fila con hombres gay, para entrar en un bar gay.
Esto obviamente no fue idea de Castiel. Había sido de Gabe, de llevar afuera a su recluso hermano mas joven en su cumpleaños numero 29, rescatándolo de las garras de su novia controladora por una noche. Gabriel le había dicho a Meg que llevaría a Castiel a una cata de vinos con algunos de sus amigos en Napa. Poco sabía que Gabriel estaba realmente llevando a Castiel al corazón de San Francisco, directo en el Haight, el palpitante centro gay de la ciudad.
El bar era de dos pisos, en realidad un club más que nada. Tenía balcones exteriores donde colgaban banderas del arco iris, 4 pistas de baile que tocaban diferentes tipos de música de la casa para que la gente prácticamente follara uno al otro en el piso de cemento, jaulas de baile y g-go dancer etapas y 6 bares que sirven de todo, desde martinis de manzana hasta mamadas. También había algo llamado "los baños", que eran habitaciones llenas de sofás de cuero falso, futones y cojines por docenas. Se trataba básicamente donde llevabas a alguien una vez que casi lo follaste en la pista de baile, para realmente follartelo en una semi intimidad. Era ahi, o en los cuartos de baño, que rara vez eran utilizados para los fines previstos.
Por supuesto que Gabriel había olvidado decirle a Castiel nada de esto cuando él lo persuadió a salir por la noche, simplemente prometiendo un buen rato con algunos de los amigos de Gabriel, un poco de buena bebida y música decente. Hasta ahora, la parte de música decente era impredecible para Castiel, que prefería la música clásica a esta mierda techno que salía de las ventanas abiertas, pero él no iba a ser un snob. No cuando Gabriel había bajado su tono para la noche, y llevaba pantalones vaqueros que eran casi pegados a la piel, en vez de absolutamente pegados a la piel y una camiseta sencilla blanca en lugar de la brillante rosa salpicado que había aparecido usando. Cas había conseguido hacerle cambiar, ofreciendo todo lo sencillo de su propio vestuario como una forma de sentirse más cómodo en la presencia fabulosa de Gabriel.
Ya era bastante malo que su hermano mayor fuera un absolutamente flamante gay, aún peor cuando sus padres eran firmemente católicos, y trataban de meter a Gabriel en "centros de rehabilitación" para las personas homosexuales, por lo menos dos veces al año.
En Navidades y Pascua habían travestis, llenandose de nada más que peleas y discusiones.
No había nada que hacer, sin embargo, ya que ni sus padres ni Gabriel iban a cambiar para el otro, y Castiel no estaba tan seguro de por qué tenían que hacerlo.
Él mismo no era homofóbico , y sentía que estaba bien para su hermano ser como era ... era la forma en que nació, y que no había nada malo en ello.
El punto de vista de sus padres eran sus creencias, y no tenía necesidad de cambiarlos. Castiel simplemente no creía que fuera justo que se les impusiera a Gabriel, pero la única vez que lo había mencionado a sus padres inmediatamente asumieron que también era gay, y la ola de vergüenza que paso a través de él le hizo callar la idea de inmediato con un "no, claro que no! '. La mirada en la cara de Gabriel cuando lo había dicho hablaba de un daño total, y su hermano no le dirigió la palabra por alrededor de una semana después de eso, pero nunca hablaron de ello de nuevo.
Castiel fue el pacificador de la familia, calmando los nervios de punta con una mano suave, por lo que no fue una sorpresa que él fuera completamente tranquilo en su día a día. Lo cual es probablemente la forma en la que terminó con Meg, su novia con la que convivía. Ella era controladora, posesiva e increíblemente insegura. Todo tenía que ser por ella, o ella sentía que alguien la estaba ignorando, o posiblemente siendo malo o cruel. Una vez cuando Castiel había salido, después de un largo día de trabajo, con algunos compañeros suyos maestros de la Escuela Preparatoria en la que trabajaba, a Meg le dio un ataque, tirando cosas y gritándole que Castiel estaba engañándola, y no la quería. Ese había sido el final de sus salidas.
Ahora, parado en la fila de un club con su hermano, elegantemente vestido con jeans, botas y una camisa negra abotonada con las mangas enrolladas, metidas en el pantalón para evitar manos curiosas, en realidad ... se sentía a gusto. Fue agradable salir, aunque fuera a un bar gay. Por lo menos si Meg de alguna manera se enteraba de que fueron a un bar en lugar de la degustación de vinos, no podría acusarlo de coger a una chica. Todas las chicas de aquí, probablemente sería mucho más interesadas en las chicas aquí que en él, y él estaba bien con eso. Castiel vino sólo para beber, hablar con algunos nuevos amigos potenciales, y bailar a lo mejor... si Gabriel le emborrachaba lo suficiente.
"Relájate, Cassy, me estás poniendo nervioso!"
"Yo estoy relajado, Gabe ... de verdad."
Él sonríe, y sus cerúleos ojos azules se iluminan formando arrugas y en las esquinas exteriores hoyuelos, asomando en sus mejillas. Gabriel le devuelve la sonrisa, sus ojos dorados brillaban traviesamente, y momentos más tarde, después de pagar una consumición mínima de $ 15 cada uno, están en el interior del bar, la música al instante cerca de ensordecerlos. Gabriel mira a su alrededor y ve a sus amigos en el bar, agarra la mano de Castiel, y se abre el camino forcejeando.
"Uno más!"
Dean Winchester se inclina sobre el mostrador, sonriendo a Jake, el barman de esta noche en el último piso del Haight y lame la última gota del trago de sus labios. La noche aún es joven, pero ha sido buena hasta ahora. Dean ha estado aquí casi todos los días en los últimos tres meses. Por suerte, siempre es lo mismo con los clubes nocturnos - obtiene las miradas, entra la mayoría de las veces incluso de forma gratuita. Dean está en términos de llamarse por su primer nombre con los de seguridad, los bailarines, los camareros y los dueños del club. Dicho esto, Dean no paga mucho estos días.
Jake desliza otra copa de alcohol en el mostrador y le guiña un ojo a Dean, dejando la barra para caminar hacia la barandilla. Pasa entre dos parejas besándose apasionadamente y toma en el escenario a continuación. Es viernes por la noche y el club está repleto, que es prácticamente todos los días de la semana, y Dean sorbe su bebida, dejando vagar su mirada sobre la multitud. Él ve a un par de tipos que parecen dignos de su tiempo, pero nada de lo que hace parar su corazón, acelerar su sangre en las venas.
Suspira y da unas vueltas alrededor, apurando el trago de su vaso y golpeandolo de nuevo en el mostrador, antes de hacer su camino por las escaleras hasta la planta baja. Él ve a otro regular, Gabriel bailando cerca de otro individuo extraordinariamente rígido en la barra y decide decir por lo menos "hola". Pero entonces su compañero se da la vuelta y Dean se detiene en seco. Unos brillantes ojos azules vuelven su mirada, que se refleja en los millones de luces parpadeantes alrededor del club y la boca de Dean es de repente muy seca.
El hombre mira hacia otro lugar y Dean se encuentra dejando que sus ojos vaguen ahora por encima de su cuerpo. Él es delgado pero debajo de la camisa negra simple Dean puede adivinar la cantidad justa de músculo. Su piel es pálida, lo que hace que su oscuro, desordenado cabello y labios carnosos y rosados destaquen aún más. Lamiendo sus labios, Dean finalmente se mueve, dando un pequeño rodeo y se sienta en uno de los taburetes en el bar. Una cosa es clara: quiere hablar con este chico, al infierno, él tiene una lista completa de cosas que le gustaría hacer con él - pero no con Gabriel pavoneándose a su alrededor.
Su oportunidad llega más rápido de lo que pensaba, cuando Gabe es empujado a la pista de baile por un tipo y deja al ojos azules solo en el bar. Dean sonríe al ver la expresión de su rostro, todo torpeza y absoluto miedo. Se levanta y se abre paso a través de la multitud hasta que está de pie junto a él.
"¿Qué pasa?", le pregunta inclinándose hacia adelante y le pone una mano encima , sonriendo tranquilizadoramente a la confusión en la cara del otro tipo "Estás buscando un poco de diversión?"
Ojos azules sólo parpadea a él, una vez, dos veces, antes de que un rubor se extiende por sus mejillas, haciéndole parecer - si es posible - incluso más adorable. Dean se acerca más, lamiéndose los labios y rozándose contra el lóbulo de la oreja del chico.
"Creo que se la haz encontrado."
Siente el escalofrío del otro hombre por sus palabras y se aleja con una sonrisa de satisfacción, retirando su mano con renuencia. Vuelve la espalda y se va sin decir nada más. La nota que dejó en la servilleta debajo de la bebida del hombre haría el resto.
Gabriel había estado comprándole una bebida detrás de otra, y ahora Castiel estaba teniendo un poco de problemas para reconocer a las personas que eran amigos de Gabe de los que eran simplemente extraños al azar siendo increíblemente amables, así que cuando alguien camina directo hacia él y empieza a hablarle , el primer pensamiento de Castiel es que es uno de los amigos de Gabe.
En el momento en que él mira para arriba sin embargo, su aliento se queda atrapado en su garganta y es lo único que puede hacer para no caerse. Este muchacho, no... Hombre, pues tenía barba y una línea de cintura marcada y era obviamente más allá de la pubertad... este hombre, era la persona más hermosa que Castiel jamás había visto. Su corazón casi omite un latido cuando la belleza de ojos verdes le sonríe, acercándose a él con sus palabras y tocándolo con una mano cálida, pero Castiel no está realmente escuchando lo que dice por la música fuerte, sus propios pensamientos de 'oh dios ... . oh, Dios mío, es tan bonito ... ¿cómo es posible que se les permita a los hombres ser tan preciosos, yo no lo entiendo ... ".
Se ruboriza de color rojo brillante cuando el hombre se inclina más de cerca, dándose cuenta de que no había escuchado una sola palabra que él le había dicho.
"Creo que acaba de encontrarla ", dice la voz profunda en el oído, el más elemental roce de labios sobre su oreja mandando un escalofrío por su columna vertebral. El aliento de Castiel se queda atrapado otra vez cuando él se da cuenta de que hay pecas dignas de una galaxia bailando sobre la cara del hombre cuando se aleja, la sonrisa confiada casi arrogante que el hombre hermoso le lanza lo empuja tan fuera de balance que tiene que agarrarse a la barra para no caerse.
Y luego camina alejándose, y Castiel se sonroja aún más oscuro cuando se da cuenta que está mirando el culo del hombre mientras éste se aleja, en los jeans ajustados que lo muestran a la perfección. Castiel se lame los labios y luego niega con la cabeza, los pensamientos corriendo rampante a través de ella no es normal para él no, nada normal en absoluto. Joder, necesitaba otra copa, esto no estaba... bien. Se vuelve de nuevo a la bebida que tiene en el bar, y la levanta para terminarla de un trago, ojos cerrados, pero abriéndolos de nuevo cuando apoya la copa de regreso en el bar. Algo en el fondo del vaso atrapa su mirada, por lo que lo lleva de nuevo hasta el nivel de los ojos para ver dentro.
Allí, distorsionado en el fondo del vaso, teñido con gotas de líquido ambarino, estaba un mensaje garabateado en una servilleta pegada al vidrio por la condensación. La tinta manchada por las gotas de rocío de agua, pero el mensaje se veía alto y claro, y la palabra envió una onda de choque a la ingle de Castiel.
"Follame", decía el mensaje, y Castiel traga duro alrededor del nudo en la garganta. Él llama al barman y señala la servilleta, pero el barman levanta las manos y mueve la cabeza, los ojos muy abiertos en una clásica postura defensiva de "¡no era yo!" Era lo que Castiel mas temía. Él se estremece, mirando hacia atrás a través de la multitud, tratando de encontrar al hombre magnífico, una vez más, en busca de esos hombros bien tonificados y brillantes ojos verdes musgo, pero él no puede verlo.
"-Tengo que decirle que no estoy libre ... y soy heterosexual ", Castiel dice a sí mismo, y con ese pensamiento en su mente, agarra la servilleta y se pone en marcha hacia la parte posterior del club, en la dirección que él vio al hombre desaparecer unos momentos antes.
Dean puede sentir los ojos del otro hombre en su cuerpo, mientras se abre paso entre la multitud y hacia los baños. En la puerta de entrada se detiene, dando la vuelta, buscando con sus ojos y encontrando el objeto de su deseo con alegre satisfacción. Ojos azules le seguía, con la cara profundamente roja y sus labios - dios esos labios - un poco abiertos. Dean no le permite alcanzarlo, metiéndose en la oscuridad de la trastienda antes que su botín de esta noche le alcanzara. Dean conoce el camino alrededor de aquí y pronto se da cuenta de que el otro no lo hace, así que en vez de hacer eso de ser atrapado, se detiene a los pocos metros, mirando sobre su hombro para encontrar a su perseguidor justo detrás de él. Al darse la vuelta serpentea una mano alrededor de su cuello, Dean sonríe ampliamente, tirando del chico más cerca de su respiración. Su olor es embriagador, afrodisíaco, algo que Dean había reconocido en el club.
"¿Ves? ¿No es esto mucho mejor que tomar una copa ... todo ... solo? "
Respira las últimas palabras al oído del otro hombre, sintiéndolo temblar a cada sílaba y sonriendo para sus adentros. Oh, esto iba a ser tan divertido...
Castiel siente sudar sus manos cuando el otro hombre le tira acercándolo, y ya cerca de este se da cuenta de que en realidad es más corto y más delgado, que el otro. Esta comprensión envía un escalofrío por su columna vertebral, pero no sabe por qué. Se las arregla para tirar hacia atrás lo suficiente como para ver un poco a los ojos del otro hombre, todo su cuerpo zumbando enérgicamente. Están tan cerca que puede oler al otro hombre por sobre el olor a alcohol rancio y sexo en el aire, y huele puro, como a una especie de cítricos, hierba cortada tal vez fresca o limonada. Es un olor dulce, y hace que su cuerpo cosquillee mientras niega con la cabeza, tratando de formar las palabras que él sabe que tiene que decir.
Castiel sostiene la servilleta, mirando a Dean, y finalmente se las arregla para hablar, su voz aún más gruesa que de costumbre, contra la espalda de Dean.
"¿Esto es tuyo?"
Dean se las arregla para sonreír aún más al oír las palabras del otro hombre y hace todo lo posible de poner su 'yo-no-tengo-idea-sobre-lo-que-estas-hablando-' cara.
"¿Qué te parece?", Dice, la mirada de falsa inocencia dirigida al hombre sudando delante suyo.
Él no le da tiempo para responder, no cree que él sería capaz de hacerlo, ya que parece distraído por los fuertes gemidos y jadeos a su alrededor, el débil tamborileo de la música y la invasión de Dean descarada de su espacio personal.
"Déjeme decirle lo que pienso ... creo ... que estas interesado en mí ...", continúa, cada palabra susurrándola contra la piel caliente de la cara de Castiel "... por lo que me seguiste hasta aquí ...", Dean se detiene y baja sus labios para rozar el pequeño parche de piel donde el cuello y el hombro se encuentran, lo degusta jadeando sorprendido ,es dulce como la miel "y ... yo también creo ... que estás cansado de las cosas que van muy despacio ..."
Con esas últimas palabras, la mano de Dean viaja por el cuerpo de Castiel con rapidez, a palmear el bulto visible a través de sus pantalones.
Castiel deja caer la mandíbula, con la boca abierta en una 'O' contra el repentino roce de su dureza que no se había dado cuenta que estaba teniendo. Su cabeza le daba vueltas con el zumbido alcohólico, todo a su alrededor se ha fundido al fondo, solo ve al hombre frente a él, el hombre cuyo nombre ni siquiera conoce. Sus caderas empujan contra la mano de Dean y sus ojos se deslizan cerrados por un segundo, la servilleta cae al suelo sucio en un instante cuando Castiel abre sus manos en un acto reflejo.
"M... Mierda .."
Traga duro y abre de nuevo los ojos, un destello del rostro ceñudo de Meg pasa por su cabeza. Castiel agarra las muñecas de Dean y empuja la espalda contra la pared más cercana, un ceño fruncido en su rostro mientras sostiene el otro hombre allí, aplastándolo contra la oscura pared pintada , sujetándolo con sus manos, su cuerpo sólo a unos pocos centímetros de Dean.
"N-no ... eso es ... eso no es por lo que vine aquí .."
Dios, tan cerca que podía ver el perfecto arco de cupido de los labios del hombre, el destello rojo en la penumbra de su barba. Joder, era hermoso. La sonrisa arrogante en la cara de Dean envió otra sacudida a la polla de Castiel y traga de nuevo y se mueve unos centímetros del espacio de Dean.
Dean deja escapar un grito ahogado de sorpresa, cuando Castiel lo apresa contra la pared, sosteniendo sus muñecas al lado de su cabeza. Se inclina un poco, siguiendo la mirada de Castiel a sus labios, lamiéndoselos sugestivamente.
"Podemos seguir jugando a este juego, si quieres... o podrías soltar mis manos y yo podría chuparte... ¿quieres saber lo bien que mis labios se sienten envueltos alrededor de tu pene? ¿Cuan bueno sería? Te gusta ver, ¿no es así? "
Dean sonríe a la inspiración repentina del otro hombre y siente el agarre en sus muñecas aflojarse, saca las manos para dejarlas vagar sobre el cuerpo superior de Castiel, jugando con los botones y deslizando hacia abajo para tirar del dobladillo de su camisa.
"Vamos, bebe, sabes que me quieres..."
El aliento de Castiel está empezando a estremecerse, inhala y exhala, sus ojos encapuchados con lujuria mientras observa a este magnífico hombre frente a él casi desnudarse y agacharse, cada pequeño movimiento que rezuma sexo. Traga duro y tiembla cuando las manos de Dean tiran de su camisa fuera de los pantalones, el cepillo áspero de la tela sobre su piel envía la carne de gallina corriendo por toda su superficie.
Su voz se quiebra cuando habla, grave y áspera luchando contra sus cuerdas vocales.
"Y-... no puedo ... Tengo que ... v .. volver .."
Sus palabras dicen una cosa pero su cuerpo hace otra, acercándose a Dean otra vez, con el pulgar de su mano rozando sobre la felpa de los labios enrojecidos de Dean. Dios, Castiel nunca ha visto a alguien con labios como estos, tan perfectos, maduros y completos. Traga duro y sus ojos van de los labios de Dean a los ojos verdes mirando hacia él, que se burlan de su incapacidad para detenerse.
"Realmente-... mi hermano... Gabe está esperándome..."
Dean levanta la mano, ahuecando a Castiel, que está ahora tocando su mejilla y vuelve la cabeza para presionar sus labios contra su palma.
"Confía en mí, bebe... Gabe es un niño grande... puede entretenerse solo..."
Él saca su lengua para lamer sobre la piel caliente, sintiendo el estremecimiento de Castiel y el temblor de su mano.
"Hay una cosa que necesitas saber acerca de mí: puedo ser muy persuasivo si quiero algo... y en estos momentos te quiero."
Y con eso Dean da un paso hacia adelante, tirando de Castiel y cubriendo sus labios con los suyos. Durante un momento interminable, el otro hombre es rígido, completamente quieto, y Dean lo presiona mas, chupando su labio inferior, mientras sus manos descansar libremente en las caderas de Castiel.
Todo el cuerpo de Castiel se endurece cuando Dean lo besa, casi como si el flujo de su sangre corporal se detuviera apenas por un momento, luego se reinicia la inversa, en lugar de traer nuevas células de la sangre oxigenada al cerebro, brota todo recto hacia el sur y se queda allí. Castiel se estremece y gime en el beso, sus manos vienen a agarrar ambos lados de la cara de Dean mientras da un paso y pulsa al otro contra la pared, cerrando los ojos.
Al diablo con todo, nada más importaba en este momento, sino esos labios gruesos y el músculo duro, la línea dura de la polla del otro hombre cuando Castiel presiona sus caderas en contra de Dean. Traga con dificultad, un jadeo suave escapa de él antes de abrir la boca y besar a Dean profundamente, comenzando a mover incesantemente sus caderas en su contra. El alcohol estaba haciendo esto, algo en la parte de atrás de su cabeza, decía, este es el alcohol, y nada más. El placer que sentía crecer dentro de él, las sensaciones de hormigueo en los labios y el latido profundo menesteroso en su polla, era todo el alcohol interactuando con su cuerpo, alimentado por la hermosa maravilla delante de él, como una parte que sólo encendió la prueba 151 que se había acumulado en su interior. Llama a un charco de licor, y boom, ignición, chispas y fuego, y todo estaba bailando en su cabeza y Castiel no podía oír nada más, sino una voz que hablaba sobre todo lo demás, su propia voz, en voz alta, áspera y arrastrándose.
"En privado".
Dean siente la fría pared en la espalda, las manos de Castiel en su cara, su cuerpo contra el suyo y el movimiento de los labios contra los suyos. Un gemido se le escapa, una vez que sumerge su lengua y la empuja dentro de la boca de Castiel para encontrar su contraparte. Menos de diez segundos más tarde se están devorando uno al otro, cada pensamiento prohibido en sus cabezas se esfuma, su mente simplemente se sitúa en el ahora.
"Lo sabía", Dean piensa para sí mismo y sonríe en el beso, pero Castiel no dejar de besarlo, a pesar de su propio pedido de privacidad. Finalmente, Dean se aleja lo suficiente como para que se detuvieran y se aferra al otro hombre, tirando de él consigo. Les toma varios intentos, pero cuando por fin encuentran una habitación vacía, Dean empuja al otro hombre al interior y la puerta se cierra detrás de ellos. Hay un sofá de cuero en un rincón de la habitación, pero no le prestan mucha atención todavía. En vez de eso ojos azules se mete hacia el espacio personal de Dean, empujándolo contra la puerta cerrada y provocando un gemido de la garganta del joven.
"Cuál es... ¿Cuál es tu nombre? ", suspira entre besos frenéticos, mordiendo el labio inferior del otro hombre" Necesito... saber qué gritar cuando... cuando me folles... "
Castiel se estremece en el momento en que Dean respira en su contra, la forma en que le pregunta su nombre, y él no puede ayudarse a sí mismo cuando él le susurra 'Castiel', ha ido demasiado lejos en el alcohol y la lujuria para molestarse siquiera el pensar en un nombre falso. Él débilmente piensa que podría arrepentirse más tarde, pero la idea de este magnífico hombre gritando su nombre envía otra oleada de placer directo por la espalda a la piscina baja en su vientre, y es todo lo que puede lograr para tirar suavemente de la camisa del hombre en lugar de arrancársela.
"Tu-... ¿tu nombre?", Jadea, mientras jala la camisa sobre la cabeza de Dean y lo arroja sobre el sofá detrás de ellos, con los dedos que dudan por un segundo antes de empezar a deslizarse sobre los abdominales, descubriendo al instante que el endurecido músculo se siente bien, no ajeno, bajo sus manos.
La forma en que el cuerpo de Dean responde a sus toques es adictivo, cada tirón del aliento o el empuje de las caderas en contra de Castiel le hace sentir más borracho, un remolino en la cabeza por lo que le es muy difícil ver más allá de la cara de Dean en este momento.
"... Dios... eres hermoso ..."
Respira, haciendo una pausa por un momento para observar el cabello perfectamente despeinado y el cuerpo endurecido. Este hombre es de los que te dejan sin aire y Castiel lo tiene esta la noche para si... o por lo menos por una hora más o menos. Él se inclina y cierre la boca sobre el cuello del hombre, aspirando su aroma y sabor, y gimiéndole.
"Cas .. Castiel? "
La sonrisa de Dean es sustituida por un grito de asombro con la boca abierta, cuando hinchados labios empiezan a chupar en su cuello. Él levanta sus manos para ponerlas sobre los hombros de Castiel tratando de calmarse a sí mismo, mientras el otro hombre sigue besando, mordisqueando y lamiendo su piel caliente.
"Nnnh … no suena tan mal, Cas ... "
Dean gime, cuando siente los dientes mordiendo suavemente pero con pasión en su clavícula, la piel de su pecho y sus dedos se clavan en los hombros de Castiel.
"Dean... Yo... soy Dean ... "
Su cadera se resiste a los toques continuos, los besos posesivos y gemidos bajos procedentes de la garganta de Castiel. Su voz, Dios... aunque Castiel no era tan guapo, era caliente, magnífico, - le faltaban un poco las palabras cuando se trataba de adjetivos para describir su belleza - como fuera, Dean todavía lo quería. Había algo en su voz, el sonido profundo y rasposo volviéndolo a Dean imposiblemente duro.
"Oh Dios... Cas por favor ..."
Por lo general el no era el tipo de persona que ruega... pero esto ... querido Señor ... estaban solo besándose y tocándose y Dean estaba asustado ya que estaba a punto de venirse en los pantalones como un maldito adolescente.
Castiel se lame los labios mientras se aleja del cuello de Dean, las manos deslizándose por los lados del hombre para tirar y apretar alrededor de su cintura, barajándolo hacia el sofá. Se sienta y tira de Dean en su regazo, volviéndolo a besar con fuerza, con los brazos alrededor de su cintura mientras sus caderas se aprietan duro en la búsqueda de fricción y presión.
Todo pensamiento práctico se ha ido por la ventana en este punto, la forma en que Dean le estaba rogando poniendo la sangre Castiel en llamas, todo su cuerpo dolorido pidiendo una liberación ya. Había una cosa buena acerca de envejecer, sin embargo, fue capaz de resistir más tiempo, y mientras él lo quería, no había presión para él, ninguna amenaza de venirse en sus pantalones, por lo menos no todavía. El cuerpo de Dean le hace más difícil la segunda parte, sin embargo, los jadeos que escapan de los labios amoratados envía sensaciones de hormigueo corriendo por su columna vertebral haciéndole erizar los pelos del cuello. Castiel se estremece y araña con su mano por la espalda de Dean, frotándose contra el culo del hombre con un gemido sin aliento.
"Dean..."
Dean gime a las uñas de Castiel dibujando líneas en su espalda y la presión de una polla dura contra su trasero.
"Cristo ... Cas .."
Él le besa de nuevo duro, sus lenguas luchan por el dominio, pero Dean rindiéndose a todo demasiado pronto. No se trata de ganar o perder - se trata de si tendrá o no la oportunidad de sentir la polla de Castiel palpitante dentro de él o no antes de venirse. Dean se queja de nuevo, entonces retrocede y se desliza hasta el suelo delante de Cas, sus manos agarrando sus muslos y apartándolos. Sus dedos encuentran el botón de los pantalones de Cas 'y segundos más tarde lo está tirando abajo por las piernas de Castiel.
Inclinándose hacia delante, Dean respira caliente contra la fina tela de calzoncillos bóxer blanco de Cas , notando los contornos de la polla dura debajo. Cuando tira de la ropa interior abajo también, se toma un momento para mirar, observando en cómo el miembro de Castiel presiona contra su estómago, enrojecido, palpitante y listo, Dean no puede esperar mas. Se inclina hacia abajo, lamiendo la punta tentativamente antes de llevárselo a los labios envolviendo oh-tan-apretadamente alrededor de esta carne caliente.
Hay una fracción de segundo en que su mente racional ve a través de la bruma y la niebla del alcohol y la lujuria, pero en cuanto la boca de Dean toca su polla, esa voz es aplastada bajo el gemido de Castiel.
"Oh dios ... D.. Dean ..."
Se sentía fantástico, el calor húmedo y caliente de estar dentro de la boca de alguien. A Meg no le gustaba dar mamadas, y en los 7 meses que habían estado juntos Castiel podía contar con una mano el número de veces que había recibido una... y que nunca habían sido tan absolutamente hambrientas tampoco. Dean lo llevaba como si se muriera de hambre y Castiel podía darle exactamente lo que necesitaba sólo por chupar lo suficiente. Su cadera empuja hacia la boca del hombre de ojos verdes, y él deja escapar otro gemido lento, un quejido cuando Dean se lo traga aún más. Su mano serpentea hacia abajo para agarrar el pelo muy corto de Dean , apenas puede tomar lo suficiente para un puñado, pero Castiel lo necesita, tirando ligeramente, sus ojos se deslizan cerrados mientras su boca se abre con un improperio de "Joder", apenas un soplo en la habitación por lo demás tranquila .
"No", Dean piensa mientras sonríe alrededor de la polla de Castiel…"joder "¡ni siquiera empieza a cubrir lo jodidamente fantástico que es esto!'
Cierra los ojos y Castiel traga, él siente animar su caderas y sus manos apretar en su cabello y Dean no puede obtener suficiente de esto, de Cas. Lame una raya larga hasta su polla, mientras se retira un poco hacia atrás, mirando hacia el otro hombre, se ve completamente destrozado, el pelo despeinado y Cas está devolviéndole su mirada a través de los ojos medio cerrados.
"Vamos", Dean lo alienta, lamiendo el pre-venir de sus labios, una de sus manos se envuelve alrededor de la base de la polla de Castiel "folla mi boca, Cas".
El cuerpo de Castiel amenaza con recalentarse cuando el obedece la persuasiva orden de Dean, agarrando la parte posterior de la cabeza del niño y tirando de él hacia abajo sobre su polla. Castiel inicia un ritmo lento que rápidamente se fortalece a medida que se estrella cada vez más rápido, una fantasía que él ni siquiera sabía que tenía mientras Dean lo traga tan fácilmente.
"Oh... Dios... tu boca... j... joder..."
Sus caderas se arquean hacia arriba, tartamudeando un poco cuando lo arrolla una ola de placer y él sostiene Dean hacia abajo, nariz enterrada contra su cuerpo y apenas respira, o trata de capturar el aliento en la garganta. Castiel deja de lado la parte de atrás de la cabeza de Dean rápidamente después de eso, jadeando mientras mira al hombre.
"… Ven aquí..."
Su voz es mas ronca que antes, los labios húmedos, como él los lame y observa la forma musculosa de rodillas frente a él, con los ojos verdes brillando en la penumbra de la habitación, apenas lo suficientemente iluminada para ver unos metros mas alla.
A Dean le gusta ver. A él le gusta observar a su compañero convertirse en deshecho, le gusta distinguir el momento exacto en el que va a venir. Castiel no va a venirse, no todavía. Dean está en realidad bastante impresionado, él ha tenido torpes debutantes en abundancia y, normalmente, una mamada lograba el truco. Pero Castiel era diferente, lo que había sido claramente obvio desde el primer segundo y Dean obedece a su pedido, empujando a sí mismo hasta que él está de pie justo enfrente de Cas.
Él espera, quiere asegurarse de que Cas lo observaba atentamente, antes de que Dean comience a desabrocharse el pantalón, encogiéndose a retirar hacia abajo los calzoncillos negros apretados también. Completamente desnudo da un paso adelante, balanceando las piernas por sobre Castiel, hasta que se encuentra suspendido justo encima de la polla del otro hombre. Inclinándose, él cepilla sus labios contra Cas ', besándolo suavemente aunque aun desesperado. Cuando se tira hacia atrás, sus ojos se encuentran y en el corazón de Dean da un vuelco.
"Cas, por favor... Te quiero dentro de mí ..."
Castiel se estremece, sus manos acarician los laterales de Dean y agarran su trasero, apretando los globos firmes de carne y maravillándose de lo fuerte que es, tan bien musculado. Envía una emoción a través de su cuerpo, la neblina alcohólica se eleva un poco al darse cuenta de lo que Dean estaba pidiéndole.
Él grazna "Tienes... ¿tienes protección?", Y se ruboriza intensamente al tener que decirlo en voz alta.
Cas mueve una mano por la raja del culo de Dean, dedos provocativamente cerca, pero sin tocar su entrada. Su otra mano serpentea alrededor, titubeando, luego se envuelve alrededor de la polla de Dean, su pulgar rozando el pre-venir sobre la punta manchando el camino para su mano poco a poco tomando a Dean mientras Cas lo mira, observando los musculosos muslos temblorosos del estómago temblar.
*****
Dean esta muy lejos de poder pensar con claridad. La forma en que Cas lo está mirando, tocándolo, suavemente, con ternura, como si fuera algo precioso, algo digno de amar, adorar incluso. Dean se estremece ante ese pensamiento ridículo y siente que sus rodillas se debilitan, cuando Cas envuelve los dedos tímidamente alrededor de su erección. Sus ojos se cierran y él presiona los labios con firmeza, tratando de mantener para si los fuertes y vergonzosos gemidos
"El... bolsillo de atras...", finalmente jadea una respuesta a la pregunta de Cas.
Él siente al otro hombre moverse, puede escucharlo buscando y él está de vuelta, su mano acariciándolo y sus labios encontrando su nuez de Adán. Todo el cuerpo de Dean está temblando, mientras abre los ojos y toma el condón de las manos de Cas , inclinándose un poco hacia atrás para tener una mejor vista. Él no rompe el contacto visual, cuando desliza el preservativo sobre la polla de Castiel, lamiéndose los labios al ver la deliciosa anticipación de lo que vendría después. Él quiere montarlo, quiere estar encima de él, quiere verlo moverse, quiere ver a Cas retorciéndose debajo de él. Dios, este simple pensamiento que tiene hace estremecer a Dean de deseo. Toma una respiración profunda y se posiciona, la polla de Cas presionando ligeramente contra su agujero, antes de bajar a sí mismo en ella poco a poco.
Es perfecto.
Dean puede ver la sorpresa en la cara de Castiel, el shock y la confusión, pronto reemplazado por el placer y la dulce dulce lujuria y cuando está completamente lleno, Dean se hunde para presionar juntas las partes superiores de ambos y sentir por un momento.
"Cas... Cas ..."
El condón lubricado era perfecto, y Cas toma una fracción de segundo para agradecer a los responsables del mismo antes de llenar sus espacios mentales con placer crudo, quemándolo de adentro hacia afuera en el calor apretado que envuelve su polla. Él aprieta los dientes y silba el nombre de Dean, un sollozo suave rompera través de sus labios mientras el hombre se desliza hasta el fondo, la polla de Cas toca fondo en su interior. Fue más allá de lo que jamás había sentido, un apretado tan poderoso que temía que iba a desmayarse por la presión.
Cuando Dean se inclina Castiel no puede detenerse a si mismo y rápidamente envuelve sus brazos alrededor de la espalda baja del hombre, apretando sus cuerpos juntos y cambiando ligeramente el interior de Dean.
"Dean ..."
Parecía ser la única cosa que podía decir ahora Cas, atragantándose con las palabras cuando su boca recorre a lo largo de la mandíbula del otro hasta los labios, capturándolos con un ronco gemido. Su cuerpo estaba reaccionando rápidamente, y casi antes de que pudiera pensar en ello mueve su cadera hacia atrás, hacia abajo y luego hacia arriba, deslizando apenas una pulgada hacia fuera y luego de nuevo en el calor apretado, el movimiento sedoso y maravilloso.
"Oh-... D … Dios ... Dean ..."
"Eso más o menos lo resume todo", pensó Dean pero ni una palabra escapo de sus labios. Lo único que podía hacer era respirar, sentir y escuchar las exclamaciones silenciosas de Castiel. Y entonces él se mueve... y Dean se pierde. Él arquea la espalda, un gemido escapa de sus labios mientras echa hacia atrás la cabeza y mueve sus caderas. El ritmo que Castiel fija es lento y tan tortuoso, pero a pesar de que Dean estaba acostumbrado a ser tratado con rudeza y sin piedad, era perfecto. Sigue los golpes constantes de Cas con sus propios movimientos y girando su cadera sólo un poco, para que cuando Cas empuja en el la siguiente vez, la punta de la polla se desliza por encima de su punto dulce y Dean ve las estrellas. El nombre del otro hombre se escucha en la habitación antes tranquila y puede sentir el ritmo acelerar, Castiel empujar más rápido y más duro y Dean no puede mantenerse silencioso por mas tiempo. Cuanto más rápido Cas empuja hacia arriba y dentro de él, obtiene gemidos mas fuertes de Dean, hasta que esta temblando, confuso retorciéndose.
"Cas... No puedo... oh Dios... "
Sus rodillas se debilitan y por un momento, cuando se derrumba en la parte superior de Castiel, acaba sorprendido porque esto es algo que nunca había pasado antes. Siente el movimiento de Castiel, deslizándose fuera del cuerpo de Dean y está prácticamente llorando por la pérdida de fricción, de esta increíble sensación de estar lleno. Cas está agarrando su hombro suavemente y girándolo, hasta que se extiende por debajo de él y Dean lo ve flotando por encima. Cuando se desliza en su interior de nuevo, Dean casi gime, mordiéndose el labio mientras cierra sus ojos.
Castiel necesita tener las manos sobre Dean, tiene que agarrar sus caderas y ver blanquear la piel bajo la presión, ver como el cuerpo debajo se estremece con el placer que él, Castiel, está dándole a otro hombre. Hay destellos de "esto está mal" , "Meg" y "¡no eres gay!" En la parte posterior de la cabeza, pero el alcohol y la forma en que Dean lo mira pasa por encima de ellos, haciendo que se retiren a un sonido blanco ruidoso de fondo, y se centra en una sola cosa: Dean.
La forma en que Dean dobla la espalda y respira, tan hermoso debajo de él con las piernas arqueadas que se envuelven alrededor de sus caderas y labios gruesos que se abren con gritos cuando Castiel chasquea sus caderas hacia delante hasta enterrarse en el interior del hombre una vez más. Todo lo extendido delante de él es hermoso, y a pesar de sus problemas con la coordinación general, de alguna manera, en este momento, Castiel es perfecto. Se mueve correctamente para Dean, deslizándose en su interior más profundo y sorprendentemente dando en el punto una y otra vez con cada embestida larga. Una floración de orgullo despierta dentro de Cas y se mueve más rápido, empujando una de las piernas de Dean por encima de su hombro y sosteniendo las caderas del hombre a un lado para que Dean esté en angulo cuando Cas golpea en él, mas y mas duro ahora, su propio aliento llegando a quebrarse.
Traga duro y gime por lo bajo, sus ojos cerrándose mientras envuelve una mano alrededor del muslo del hombre para mantener su cuerpo quieto mientras se sumerge en él, la otra moviéndose desde el sofá pegajoso para envolverla alrededor de la polla de Dean, golpeando firmemente desde la base, el momento es un poco incómodo, pero se torna cada vez mas rápido.
"Dean... N… No puedo... no voy a durar..."
Es una locura. La cara de Dean se aprieta en el cuero negro, cuando Cas golpea dentro de él una y otra vez. Dean siente el sudor corriendo por la cara y levanta una mano sobre su cabeza, estirándose, tratando de respirar. Cuando Cas habla, Dean siente algo muy profundo dentro de él una chispa, encenderse, dejando su cuerpo en llamas. Viene duro y ruidoso, la cara pegada a la superficie del asiento del sofá como Cas le monta a través de su orgasmo. Manos de Dean están agarrando el brazo, su respiración entrando apresurada, jadeos ásperos, un mantra de "Dios" , "oh" y "Cas".
En el segundo en que Dean llegó su cuerpo se torno drásticamente apretado duramente en torno a Cas, y por mucho que lo intentara Cas no podría durar a través de eso, empuja solo un puñado más de veces antes de venir él mismo, terminando en el condón con un gemido gutural. Acaba en el interior de Dean, incluso con el preservativo que le separa de la idea de estar dentro del otro y lo que ha hecho se va hilando en su cabeza y poco a poco se retira lejos, sentado en el otro extremo del sofá con un suspiro tembloroso. Todo su cuerpo es blando, revestido de sudor la espalda y los muslos, y respira profundo inhalando rápidamente, tratando de calmar el tronido que su corazón esta haciendo en su cabeza.
Todo lo demás es abrumado por sensación de que ha tenido sexo en el centro de un club lleno de gente con un hombre impresionante, que es, básicamente, un desconocido y fue el mejor sexo de su vida. Cas se siente enfermo.
Dean siente a Cas retirándose, hacia fuera y el sonido que hizo a eso es gutural, casi inhumano. Se toma su tiempo para respirar, calmarse, antes de girar sobre su espalda y se arrastra hacia arriba, hasta que él se está inclinando contra el reposabrazos, mirando a Cas. Hace una pequeña sonrisa en su rostro ante la mirada que el hombre pasó a través de él y le extiende una mano para palmear a Castiel.
"Eso fue...Sólo... wow ", dice con el tiempo, lamiéndose los labios e inclina la cabeza hacia atrás, sonriendo al techo. Porque realmente... no hay otras palabras, especialmente ahora, que la neblina post-sexo sigue nublando la mente de Dean.
Cuando regresa la vista, Cas todavía está en la misma posición, un tipo de rostro impasible y por primera vez esta tarde, Dean se siente incómodo y un poco preocupado. Él enrolla sus piernas, envolviéndolas alrededor del cuerpo de Cas 'y extiende una mano, indicándole que se acerque.
"Ven aquí..."
Los remolinos de Castiel en su mente, la neblina de alcohol y sexo esta llenándolo, y por un momento se deja caer, yendo de buena gana de nuevo en los brazos de Dean y envuelve un brazo alrededor del hombre, inclinándose para besarlo otra vez, un lento escalofrío bajando por la espalda, donde su camisa estaba pegada a sus músculos con el sudor.
La voz en la parte posterior de su cabeza habla de nuevo, esta vez más insistente, más fuerte y no desaparece como antes.
"Esto está mal, tienes que salir, ¡tienes que irte ahora!
Se endurece en los brazos de Dean entonces, rompiendo el beso cuando un sentimiento de pavor golpea sobre él, abriendo los ojos, ya que parece despuntar por fin en qué es exactamente lo que acaba de hacer.
"... Mierda", susurra, los ojos muy abiertos mientras mira a Dean.
Dean siente a Castiel endurecerse, lo siente deslizarse y abre los ojos, todavía demasiado atrapado en el suave beso que habían compartido, sólo para darse cuenta de lo que estaba sucediendo. Parpadea unas cuantas veces a través del velo de gotas de sudor en sus pestañas hasta que ve con la claridad suficiente para darse cuenta de que es pánico lo que distorsiona la cara de Castiel.
"Hey, hey... ¿qué pasa? ", pregunta y su voz es tranquila, lenta, suavemente su mano sosteniendo el brazo superior de Castiel, mientras trata de averiguar lo que había cambiado en los últimos segundos.
"¿Algo está mal?"
Castiel se muerde el labio inferior y se levanta, desenredándose a sí mismo de Dean con tanta suavidad como puede, agarra su ropa, y comienza a vestirse rápidamente. Se mete a sí mismo, con condón y todo, de nuevo en sus vaqueros y se aleja del sofá, mirando a Dean, sus ojos parpadeando a través de las emociones.
"Yo estoy... Jesucristo... Lo siento... "
Él sopla un suspiro, lo hace calmarse lo suficiente para mirar a Dean en los ojos, traga por la repugnancia que siente sobre sí mismo por lo que hizo mientras el alcohol se evapora.
"Me tengo que ir, esto ... esto fue un error, lo siento, yo ... no puedo ..."
Se pasa la mano por el pelo, y la boca "Lo siento" de nuevo, sus ojos le dolían, y entonces él está fuera de la puerta, cerrándola detrás de él despacio, dejando a Dean solo en la habitación.
Dean no puede procesar lo que está pasando, no se da cuenta de que está siendo abandonado sólo de la peor manera posible, hasta que Castiel está fuera de la puerta. Él está allí, durante cinco minutos, diez, veinte. Cuando por fin se mueve, se siente barato, sucio, como una puta. Ha tenido una noche como esta muchísimas veces anteriormente, pero nunca, ni una vez, había sido tratado de esta manera. Le duele, y la súbita comprensión lo golpea como un martillo. El sexo había sido increíble, el infierno, había sido sin duda el mejor sexo que jamás había tenido. ¿Y ahora? Está acostado en un sofá pegajoso en la parte de atrás de un club gay de mierda al que esta tan familiarizado y se siente perdido y solo. Por fin se levanta, se pone los calzoncillos y los pantalones y se acerca a la puerta. Él mira hacia atrás una vez más, como si Castiel siguiera allí, como si mirando hacia atrás, de alguna manera pudiera regresar el tiempo, tratar de cambiar las cosas... él ni siquiera sabe lo que hizo mal...
Deja el Haight esa noche, no esta en el estado de ánimo para otras citas, ni siquiera en el estado de ánimo para sexo. Cuando cierra la puerta de su apartamento y de su hermano menor, Sam, son las 3 de la mañana y se pregunta, cuando fue la última vez que regresó tan temprano del club. Se hunde en la cama completamente vestido y se queda mirando el techo, hasta que el sueño le vence finalmente, sus sueños le torturan con profundos gemidos y jadeos impetuosos y un nombre que se repite una y otra vez.
