Personajes principales: Komui Lee, Lenalee Lee.

Desclaimer: Ningún personaje me pertenece, todos son de Katsura Hoshino.

Línea temporal: Indefinida. En sí, se podría decir que esto ocurrió en el espacio en blanco, de los sucesos tras el Arca, y el Arco de Alma, o se puede tomar como un "What it?".

Aviso: Este fic forma parte del topic: "Los registros de Lavi" del foro "Resurgiendo de las cenizas". La historia fue también a petición de Liridetti.


Prólogo


El fuerte golpe que se dio en el escritorio, solo tuvo como efecto el hacer caer el café —próximamente frío— que se encontraba encima de este. Dos pares de ojos, se dirigieron en ese momento a Lenalee. Una Lenalee que tenía la figura encorvada hacia adelante, y una postura tan defensiva que daba la sensación, de que en algún momento se lanzaría encima del intruso. Pero desmintiendo todo, ella también estaba temblando en su sitio, y tenía una respiración tan dificultosa; que uno con simplemente verla —bien— podía hablar del temor que la china tenía hacia ese hombre.

—No puedes hacerle eso.

Leverrier, enarcó una ceja, y en el silencio —aun sin palabras— pareció mofarse de ella. Ya que el podía y es más, lo haría. Así que sin importarle el berrinche de la chica, dirigió su mirada a Komui.

—Supongo que tú lo entiendes, ¿no? A final de cuentas, esto es tu culpa —acusó. A su respuesta Komui asintió

—Mi hermano…

La voz de Lenalee, estaba perdida entre el llanto, y esta desapareció en el momento que su hermano le dio unos suaves toques en la espalda, pidiéndole que se calle y deje las cosas pasar.

—Este nuevo proyecto de los segundos exorcistas, se dio porque tú influenciaste esta política de dejarlos ir. Como ves, esto de intentar quitarles los recuerdos de la Orden no sirve, porque este sistema a veces falla. Algo muy bueno de años anteriores a tu llegada, es que si alguien se unía a la Orden, nunca más salía. Sin importar que fuera un exorcista, buscador, científico o lo que sea.

—Sí lo entiendo.

—Al menos deberías pedir una disculpa, ¿no crees? —Komui calló, y Leverrier, no le dio verdadero interés a su mutismo, a fin de cuentas, ese hombre pagaría los platos rotos dentro de poco —. Bien, debes salir a ver tu obra a más tardar mañana.

Acabada su sentencia salió por la puerta; y una gran parcela de Cuervos, lo siguieron. Lenalee, estaba temblando, y sus lágrimas seguían compungidas en sus ojos.

—Tú no eres un exorcista —ella murmuró.

Komui para consolarla, limpió las lágrimas de los orbes de la chica, y al mismo le acarició el rostro.

—Es cierto, no lo soy Lenalee; pero tú me acompañarás y así estaré bien. —Tras acabar la frase, se sentó desgarbadamente en la silla de su escritorio—. Ahora tráeme café Lenalee, porque yo no puedo trabajar sin café.

Ella aun con el temor a lo que se avecinaba el siguiente día, se dio el placer de sonreír y jugar a que todo era como antes.


La verdad estoy insegura en cuanto a Leverrier. Nunca usé a ese personaje, y de esa forma me encuentro totalmente perdida al manejarlo. Pero a ver qué opinan ustedes.

Y bueno en lo demás, por si no se entendió; la problemática es la siguiente: Ex miembros de la Orden –que salieron de esta, al estilo Jhonny- empezaron experimentos ilícitos, similares a los de los Segundos exorcistas. Esta política de dejarlos ir a cambio de sus memorias –este es un Headcannon, mío- se dio a partir de la influencia de Komui, y los altos mandos le echan la culpa a él, por lo ocurrido. Como una forma de venganza, y castigo, decidieron que Komui vaya a ver su obra, y por supuesto, esta misión tiene como fin desmantelar su proyecto y demás. ¿Se entendió a qué vamos?

Y bueno, eso es todo por ahora…

¿A alguien le gustó el episodio?

PD: ¿Liridetti, de momento te gustó al menos un poco la historia?