El solo tenía cuatro años.
Oscuridad, esa vacía oscuridad donde siempre había estado se convirtió más solitaria. La única persona con la que podía contar dejo este mundo.
El solo tenía seis años.
Solo quería proteger, ahora huía con los demás mientras era llamado monstruo. Podía viajar y vivir con ellos pero jamás seria de los suyos
Ella solo tenía diez años.
Era tanto su amor, que sin pensarlo dos veces se sometió a las órdenes de la corrupción con tal de protegerles.
Ella solo tenía doce años.
Voces. Voces que no parecían venir de algún otro lado más que su mente, pronto la suya fue tomada a cambio.
Ellos solo tenían dieciséis años.
Vivían en la oscuridad eterna y silenciosa, sin que la posibilidad de vivir en la luz se cruzara por su mente. Se habían rendido sin darse cuenta.
Pero fue a los dieciocho que ambos emprendieron su viaje en el que (sin importar si querían, si estaban listos, o si lo necesitaban) lucharon y aprendieron muchas cosas que les hacían falta. No se conocían antes y no se conocieron por esos tiempos, ni una vez chocaron entre sí, no estuvieron ni un kilómetro uno cercas del otro, no hubo conocidos en común u otros intermediarios.
Eran dos vidas apartadas… y esta es la historia de cómo se conocieron, después de terminar las grandes aventuras que tuvieron, las peleas que en parte heredaron de sus antepasados.
Ahora se desencadenara una nueva aventura, una aventura para ellos y así tal vez, solo tal vez, encontrar algo que les faltaba desde hace tiempo y muy apenas conocieron gracias a sus amigos, quienes serán pequeños colaboradores de esta historia.
No se desanimen, aunque dice pequeños colaboradores, yona y los otros tendrán anexos en esta historia (no, esta no es mi excusa para cuando no tenga idea de cómo continuar la historia… ok, no)
espero que les guste y gracias por leer. Si en algun momento quieren alguna historia aparte en especifico, no duden en pedirla :D