...Tiempo especial...

La luz se veía invitadora, el calor en Grimauld place nunca había sido tan perfecto. Incluso el retrato de Walburga se encontraba completamente silenciado por la romántica atmósfera que se había formado.

Sirius tomó las copas y se dirigió a su habitación, no había nada que lo pudiera detener, incluso si estuvieran a punto de asesinar a su ahijado, no dejará pasar este maravilloso momento.

Cuando entró, estaba desnudo. Nada cubría su hermosa figura, y podía ver partes que desde hacía tiempo no veía. Claro, ya le era familiar ese hermoso tono, subidas, bajadas, curvas y demás.

Nada le impediría este momento.

¡Merlín! ¿Qué estaba haciendo? No podía aguantarlo, y su media naranja tampoco. Su sexy posición se hacía más evidente con la luz de luna que atravesaba la ventana. Era posible distinguir unas manchas a lo largo de su perfecto tono, manchas que uno podía llamar "lunares" Era más excitante ver esos lunares que las cicatrices, a él no le gustaba ver su hermoso cuerpo herido. ¡Era una calamidad! Todo el dinero de la familia Black podría desaparecer una herida, pero… él siempre sabría que estaría ahí, que había sido su culpa por no cuidarlo bien.

-No puedo esperar…- susurró, su compañía no dijo nada –Está bien… el que calla otorga- una sonrisa pervertida se apareció en su rostro.

Caminó hasta su hermosa figura, todavía sin resistencia alguna. Desabrochó su camisa, era demasiado calor. Y la dejó tirada en el suelo a su paso, mientras sus manos traviesas comenzaban a recorrer cada curva y parte recta, de una manera seductora.

Cuando posó su peso un poco más arriba, escuchó un leve rechinido que lo hizo sonreír.

-No es tiempo de quejas- contradijo.

Y como un experto vaquero, pasó su pierna por encima y se montó en un solo movimiento. Extendiendo su mano para que tocara aquella larga y suave extremidad.

-Grrrr- el ronroneo se escuchó.

-Qué dulce- devolvió Sirius, guiñando un ojo, apretando aún más. Y lo continuó haciendo por varios minutos, disfrutando cada momento, porque hacía mucho que no lo disfrutaba tanto.

-Sigue gruñendo cariño, sigue para mí- susurró mientras pasaba sus labios en su frío cuerpo.

Sería una larga tarde…


-¡Sirius! ¡¿Qué diablos estás haciendo?- había sido descubierto in fraganti en el acto.

-¡Harry! Yo…-

-¿Cómo diablos metiste esa moto en tu habitación? ¿Por qué está encendida? ¿Por qué demonios estás montado en ella? ¿Quieres estrellarte con la pared? ¡Deja de apretar el acelerador!-


n.n Feliz día de los inocentes? No en México, pero EU cuenta? n.n jajajajajaja. SI llegaron hasta aquí, me alegro de que hayan tenido las agallas de leer todo n.n

Ahora, se aceptan reviews de personas que tengan las agallas de aplastar ese sexy botón de aquí abajo.

any

p.d. Sensei, no me mates.

p.d.2. Ka13ms, no que no? ñ.ñ