-Este era uno de mis favoritos.- dijo Eli con una sonrisa a su novia recostada a su lado. Trixie miraba interesada el comic que él sostenía entre sus manos y que le había mostrado con toda ilusión, además de los muchos otros regados por toda la cama del chico.- Tenía el poder de volar y también de mover objetos con la mente.

-¿Con la mente? Pero, si mueve objetos con la mente, ¿para qué necesitaría las manos entonces?- preguntó la chica con justa razón. Eli abrió la boca para responder a ello, mas la cerró al no hallar una respuesta que no la dejara con más dudas.

Trixie había mostrado mucha curiosidad acerca de las personas de la superficie y su cultura desde que había comenzado a salir con el líder de la Banda, y este no había encontrado una mejor manera de representar todo aquello que con los comics de superhérores.

Bueno, era cierto que ellos representaban muchas cosas del Mundo Ardiente: problemas, la ley, ciencia, tradición, escenarios y acciones cotidianas de sus habitantes. Pero para una persona completamente ajena al concepto de "súper-héroe", aquellas características sumadas a los tales "super-poderes" resultaban algo ridículos, sin mencionar que estos últimos eras increíblemente comunes en las babosas que veía todos los días.

-Pero también hay super-heroínas.- continuó el Shane luego de un intento de explicación acerca de por qué los humanos con telequinesis aún requerían de sus extremidades.- Como esta de aquí. Tiene superfuerza y puede correr a la velocidad de la luz.

-¿Las mujeres de la superficie pueden hacer eso?- preguntó la pelirroja asombrada.

-Claro que no.- rió Eli.- Es ciencia ficción. Se supone que científicamente sería posible, aunque nadie lo ha probado jamás.- aclaró.- Cuando era niño, deseaba con todas mis fuerzas ser un superhéroe.- comentó incorporándose para tomar una posición heróica.

-¿Y que pasó?

-Pues, no lo sé. Crecí, supongo.- respondió dejándose caer en la cama de nuevo.- Supongo que con el tiempo poco a poco me percaté de que no era posible hacer nada de eso en la vida real.- Triste, tomó uno de los comics al azar.

Trixie, a pesar de no comprender su fanatismo hacia aquellas historias, realmente sentía su decepción. Con una sonrisa de lado, se acercó hacia él y tomó su mentón para situar en sus labios un beso similar al que algunos minutos atrás había visto en la ilustración de uno de los comics, cuando una ciudadana que acababa de ser rescatada agradecía al héroe por salvare la vida.

-Tú eres un superhéroe, Eli.- le dijo tras separarse.- Lo eres para Bajoterra, o al menos para mí.- agregó antes de rodear su torso con sus brazos. Eli sonrió y recostó su cabeza sobre su cabello.

-Seh, eso creo... Pero igual me gustaría poder volar...

¡La semana santa empezó!

Me fue estupendo en los exámenes, y aunque no pude avanzar mucho con los fics, creo que tendré ya uno listo para publicar cerca del miércoles.

¡Un beso!