Se encontraba mirando lo que ocurría desde algún punto del suelo, debajo de una gran red tejida con brillantes hilos, colgada del techo, el cual no alcanzaba a ver.
En la red se encontraba alguien rugiendo a pleno pulmón que lo liberasen, en ese momento una estruendosa voz dijo:
-Me lo debes, y tú lo sabes.
Percy se despertó sobresaltado, conocía la voz que había oído en su sueño no la potente y fuerte sino la del que se encontraba atrapado en aquella extraña red, pero no era capaz de recordar de quien era.
Decidió no darle más vueltas y vestirse rápido, en poco tiempo Nico le vendría a buscar.
Al cabo de un cuarto de hora Sonó el timbre y Percy oyó a Nico saludando a su madre y su padrastro.
Percy estaba muy contento de poder pasar un día con Nico, enseñándole Nueva York ya que no se veían desde hace cuatro meses cuando vencieron a Cronos y su ejército en agosto, pero le extrañaba que Nico insistiese tanto en esa visita turística.
Terminó de desayunar y salió rápido con Nico de casa, por que empezaron a aparecer huesos en la mesa de la cocina, estaba claro que a Nico no estaba acostumbrado a estar tanto rato con humanos normales, le ponían muy nervioso.
Mientras caminaban rumbo a Central Park, Nico decidió explicarle el porqué de un día tan inusual.
-Percy no es que no me guste pasar tiempo contigo tío, eres mi mejor amigo -bueno de hecho uno de pocos- y lo pasamos muy bien pero insistí en que me enseñases la ciudad porque tenía que decirte que mi padre me ha echado.
-¿Qué cómo que te ha echado?
-No es que me echase de su palacio y me prohibiese regresar, solo que hace dos días, tras irse a visitar el Olimpo, se empeñó en que me fuese antes de Vacaciones al Campamento Mestizo y no paraba de chillar diciendo que allí no estaba seguro, por eso necesitaba hablar contigo antes de que mañana vallamos al campamento.
-Pero no lo entiendo Nico, ¿cómo no ibas a estar seguro en el palacio de Hades en mitad del Inframundo? No se me ocurre un lugar, más seguro para un hijo de Hades. Y ¿Qué es eso de que corres peligro? ¿No abras hecho nada de lo que te puedas arrepentir a otro dios?
-No, para nada desde que me fui del campamento en septiembre después de terminar la construcción de la cabaña de Hades, no he salido ni una vez del Inframundo. Mi padre insistió en que le ayudase a cerrar mejor las entradas del Tártaro después de lo que ocurrió, hasta Perséfone empezó a enseñarme a cultivar plantas de piedras preciosas-con escaso iba bien, hasta que hace dos días vino Deméter hecha una furia chillando y se llevó a mi Padre al Olimpo, cuando regresó a las pocas horas es como si todo hubiese cambiado. ¿Te ha dicho tu padre algo sobre porqué esta así el mío?
-No, no le he vuelto a ver desde el verano y no he notado nada raro aparte de que los Dioses están cumpliendo su promesa.
-A que te refieres.
Cuando fui al campamento ya había el doble de cabañas y el triple de campistas, por lo visto de momento no se han olvidado, me gustaría saber cuánto tardarán en olvidarse otra vez de sus hijos y de la promesa que me hicieron.
-Bueno eso ya me lo dijo mi padre, los dioses son olvidadizos y dentro de algunos años alguien tendrá que recordar se lo, a propósito no te ha dicho Annabeth que pasase algo raro en el Olimpo? Se supone que ella está trabajando allí en su reconstrucción ¿no?
-Si pero ya terminó la reconstrucción hace unas semanas y al terminar el colegio se fue al campamento, donde nos está esperando.
-Por cierto que estuviese en el Inframundo no quiere decir que Hermes no me tuviese al corriente de como marchaba lo vuestro , al parecer es noticia en el Olimpo, desde que Atenea le exigió a Afrodita que os separase o algo así-casi no podía dejar de reírse-me gustaría saber que le pasaría a la chica que se atreviese a mirarte o sonreírte, me da a mí que no lo podría hacer dos veces.-casi se muere de la risa al ver la cara que se le había puesto aPercy, ambos sabían que era cierto.
-Bueno vas a seguir cotilleando como una hija de Afrodita o te enseño la ciudad -dijo Percy un poco enfadado.
-Está bien ya paro.
Después de un día agotador regresaron al apartamento de Percy y mientras Nico le explicaba a Paul todo sobre los esqueletos que podía convocar, Percy hacía su mochila con la ayuda de su madre.
-Percy hijo entiendo que quieras ver a tus amigos y pasar más tiempo con Annabeth en el campamento, te mereces el descanso, pero cuídate y no se te ocurra irte a ninguna misión sin decírmelo, o te prometo que te pasarás el resto del curso con clases de apoyo todas las tardes, ¿entendido?
-De acuerdo Mamá no te preocupes, te prometo que te avisaré.
Está bien termina tú la mochila yo iré sirviendo la cena.
Después de cenar Nico intento ponerse en contacto con su padre utilizando las sombras pero al ver que no daba resultado los dos se fueron a la cama a dormir, mañana tendrían que despertarse muy temprano.
