Hola! Esta historia me ha estado dando vueltas en la cabeza desde hace un tiempo, así que aproveche estos días libres para publicarla. Es la primera vez que publico algo sobre Bra, así que espero que les guste tanto como a mí el escribirla. Sin más preámbulos, aquí va la historia.

-diálogos-

"pensamientos"

Narración (Hecha por Bra)

Cáp. 1: Mi Pesadilla Comienza.

Estaba en completa oscuridad, sola, era como si me encontrara en la nada. No sentía el piso, ni el aire, ni tenia idea del lugar donde me encontraba, solo se que la soledad era lo único que me acompañaba en ese instante. Miraba a todos lados, como buscando una puerta o alguna señal de algo que me diera escapatoria de ese terrible lugar, mas no lo encontré.

-¡¿hola?! ¡¿Hay alguien por aquí?!- mi voz fue llevada por el viento, produciéndose un sonoro eco que me hizo sentir que en el lugar donde me encontraba se trataba del infinito y que estaba sola en el…

Aterrador.

Espeluznante.

Increíblemente Tranquilo.

Estaba acostumbrada a lidiar siempre con ruido, proveniente de cualquier cosa. Una pelea con mi hermano, el escándalo de mi mama preguntándome por el chico de turno, o por haber visto una prenda de moda la cual quería que fuéramos juntas al dentro comercial a comprarla, la televisión y sus programas de chismes, donde solo hablaban de lo "extraña e introvertida" que era mi familia, excepto por la heredera de la corporación capsula, que siempre daba algo de que hablar (tal como mi madre en su alocada juventud, según mi abuela), la radio que siempre me hacia bailar con música moderna, el escandaloso trafico donde siempre me multaban por ir a alta velocidad, hasta las calurosas peleas entre mis padres…siempre había algún sonido o alguna persona a mi alrededor…

Pero ahora no era así.

Estaba sola.

Completamente sola.

Lo último que recordaba era que estaba en una fiesta. Claro, a los 17 y con una vida como la mía, ¿Quién no iría a fiestas? Estaba algo tomada, pero como saiyajin no me preocupaba por 'la maldad' a mí alrededor, ya que con un solo golpe podría dejar inconciente a cualquier hombre que quisiera aprovecharse de mi estado. De pronto sentí un fuerte temblor, la tierra se sacudía potentemente mientras todos los jóvenes a mí alrededor gritaban y corrían, buscando salvarse. Miraba a todos lados, el caos en la multitud había inducido en mí un terrible pánico, que me había dejado en shock. Recordé entonces que yo no había asistido a aquella fiesta sola, así que decidí llamar a mis compañeros de aquella noche.

-¡Pan! ¡Goten! ¡Trunks! ¡¿Qué esta ocurriendo?!-esquivaba a todos los que corrían a mi alrededor, hasta llegar con mis objetivos.

-¿puedes sentirlo tío?- pregunto mi mejor amiga, su ceño fruncido me preocupo bastante.

-si, Pan.- dijo el joven al que amaba en secreto, de echo aquella noche era la que había planeado para decirle cuanto lo amaba, pero cuando estaba a punto de pedirle que nos fuésemos a un lugar mas apartado, comenzó el terrible terremoto.

-se trata de un ki muy poderoso- dijo mi hermano en tono preocupado. - y se esta acercando demasiado para mi gusto… ¡salgamos de aquí enseguida!- ordenó. Ellos 3 se fueron volando, mientras yo les seguí con toda la capacidad de mis piernas, En ese momento maldije el echo de no saber volar.

Cuando llegamos al lugar pudimos ver a un sujeto verde, muy parecido a, según los relatos de mis padres, lo que imaginamos era aquel lagarto que fue derrotado por Mirai Trunks hace muchísimo tiempo atrás. Llegue a creer que se trataba de mi imaginación excitada por el alcohol la que me hacia verlo, pero de inmediato supe que aquella criatura era real.

-valla, hasta que finalmente llegaron los temibles Saiyajins…- dijo esto en un tono de sarcasmo sumamente desagradable. -bien, al fin podré comenzar con mi propósito.-

-¿¡de que estas hablando!?- pregunto goten. -¿¡y quien eres tu?! ¡Identifícate ahora!-

-mi nombre no les importa en lo mas mínimo, pero ya que estos son sus últimos instantes de vida, les complaceré en sus deseos. Me conocen como Akuma, yo fui creado en los laboratorios del gran Fresar con un simple propósito: vengarme de aquellos que provocaron que el mayor conquistador del universo falleciera.-

"maldición es muy fuerte" los puños de Trunks temblaban. Yo hubiese dado todo por saber en que pensaba, por comprender la situación en la que estábamos.

-bien, ya que les ha quedado claro mi propósito, ¡es hora de que su final inicie!- comenzó a aumentar su poder con una velocidad sorprendente. Inclusive yo, que no sabía nada de luchas ni de sentir el ki, sabía que ese tipo era mortalmente poderoso.

Note como mis amigos comenzaban a subir su poder, transformándose todos en Súper Saiyajins. Pan lo había conseguido hace poco tiempo, pero ya lograba dominar a la perfección la transformación, mientras que Trunks y Goten estaban en el nivel 2.

-¡Bra! ¡Será mejor que te ocultes en un lugar seguro!- me dijo mi hermano en una orden, a la cual asentí y obedecí rápidamente alejándome un poco del lugar donde iniciaría la enorme contienda.

-¡bien! ¡Vamos ahora!- grito Goten, a la vez que volaba iniciando su ataque, seguido velozmente por mi amiga y hermano. El primer puño lanzado por el moreno fue atrapado con mucha facilidad por el monstruo, el cual no se movió ni un centímetro para atraparlo.

-no me hagas reír, monito.-la sorpresa no cabía en el rostro de ninguno de nosotros, mientras el solo tenia una sonrisa de lado, se veía que estaba bastante divertido con la situación. -les enseñare lo que es poder el verdadero poder.- dijo mientras doblaba la manos de Goten, el cual se retorcía y quejaba por el dolor, para después ser lanzado potentemente contra Pan, rompiendo una pared de un edificio cercano.

-¡¡GOTEN!!- grite con fuerza y corrí lo mas rápido que pude hacia donde habían caído. Comencé a remover los escombros buscando a ambos, a la vez que los llamaba desesperadamente. -¡Goten, Pan! ¿Están bien?- me alivie un poco al encontrarles, mas me preocupe por el estado de ambos. Pan Tenia una cortada en la frente que le sangraba mucho, mientras que Goten se sujetaba la mano; pero lo más preocupante era que en ambos el miedo estaba reflejado en la mirada.

-me ha roto la muñeca…- dijo con el ceño fruncido. Miro a su sobrina y se preocupo. -¿esa herida es muy profunda Pan? Esta sangrando mucho…-

-no tío.- dijo mientras se pasaba la mano por la frente y observaba los restos de sangre entre sus dedos. -la cabeza puede resultar ser muy escandalosa. Debemos ayudar a Trunks.- dijo mientras lo observaba pelear, siendo fácilmente derrotado por Akuma. Se que su corazón se sintió oprimido al ver como lo golpeaban, aunque ella jamás llegue a admitirlo. Se noto mucho más cuando al ver que le asestaban un fuerte puñetazo en el rostro, salio disparada en su ayuda.

-¡¡PAN ESPERA UN SEGUNDO!!- intento detenerla pero fue imposible. Ahora Trunks y Pan recibían juntos una paliza. -maldición. Bra, debes esconderte hasta que llegue el señor Vegeta. Tu padre es la única esperanza de poder ganar esta batalla.-

-pero Goten, yo…- me silencio con un dulce beso, el cual me dejo en completo shock, escuchando lo que me decía, observando en su rostro toda la preocupación y temor que sentía en aquel instante. Acariciaba mi lacio cabello, mientras trataba de convencerme.

-quiero que sepas que te quiero con todo mi ser desde hace tiempo, pero nunca había tenido el valor para confesártelo. Y también quiero que, si vuelvo de esta batalla, me encantaría que estuvieses a mi lado por el resto de mis días… ahora ocúltate, por favor.-

Las lágrimas invadieron mis azules ojos, mientras temblaba de miedo. -también te quiero Goten. No, no es cierto.- note como abría sus ojos sorprendido. -yo te amo Goten, y se que regresaras a salvo.- sonreí dulcemente, me regreso la sonrisa y salio disparado al combate.

Rato después sentí que el monstruo verde me observaba y sonreía con malicia. Me aterrorice en seguida al notar que se dirigía a mí a gran velocidad.

-¡¡BRA!! ¡¡HUYE AHORA!!- escuche a mi hermano gritar desesperado, mientras intentaba fallidamente detener al monstruo que me perseguía.

Los sucesos que siguieron a ello los vi en cámara lenta. Akuma se acercaba con una maligna sonrisa y un destello de luz amarilla en su puño derecho. Yo corría lo mas que podía a la vez que unas lagrimas rodaron por mis mejillas, de pronto apareció frente a mi…

-muere, princesa de los Saiyajins.-

Después de esas palabras su puño atravesó el lado derecho de mi pecho, después saco su puño de mi interior como si de una espada se tratase, y caí al frió suelo. Mis ojos estaban en blanco, y lo ultimo que pude escuchar fueron los gritos de Goten que se había acercado para intentar salvarme transfiriéndome un poco de ki, yo sentía sus lagrimas caer en mi pálido rostro. Lo siguiente que vi fue la oscuridad en la que me encuentro ahora.

-así que de eso se trata…- susurre mientras las lagrimas me recorrían el rostro. -estoy muerta, y este es el mas allá. Valla destino el de esta Saiyajin, el morir sin pelear.- estaba temblando y llorando, aquello no podía estar ocurriéndome a mi, así que llame desesperadamente al único que creía capaz de rescatarme hasta del mismo infierno. -¡¡PAPÁ!! ¡¡PAPÁ VEN A SALVARME POR FAVOR!! ¡¡PAPÁ!!…-

-¡HPM! Si vieras lo patética que te ves en este momento…-

Abrí los ojos lo mas que pude, voltee en todas direcciones pero nada, era la misma oscuridad que desde el principio de esta horrible pesadilla. -¿papá? ¿Estas ahí?-

-lo lamento princesita, jamás volverás a ver a tu amado padre…-

-¿de que estas hablando papá?- reconocería esa voz donde fuera, aunque la manera de hablarme me hizo entender la realidad. -¿Quién eres tú?-

-pequeña mocosa, soy nada mas que el poderoso REY de los Saiyajins.-

¿Rey? Ahora si que no entendía nada.

De pronto vi un destello de luz a lo lejos de mi y, sin saber como, comencé a volar hacia el, rogando porque aquello fuese una pesadilla de la cual saldría si llegaba a esa luz, y efectivamente salí.

Pero no al lugar al que yo quería, sino a uno completamente diferente y nunca explorado por mi con anterioridad…

Continuara…

¿Reviews?