.·´º`·.Capitulo 1.·´º`·.
Profecía
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Mientras que cerca en los extensos terrenos verdes que iban rodeando a todo Hogwarts, en el pequeño pueblo de Hogmeade cerca del hermoso como magnifico castillo, algo de por si muy especial pronto iría a pasar lejos de muchos ojos indiscretos.
Mas especial mente en Las Tres Escobas, Dumbledore se encontraba hacia un largo rato esperando, con su cerveza de manteca a medias, sin llegar a haber muchos magos alrededor, pues aun no daba inicio la temporada de clases de ese año y por esa razón el pueblo era de por si mucho mas tranquilo. Y siendo a la vez un excelente lugar de reunión para cosas oficiales o extraoficiales.
Fue en ese momento cuando las puertas del lugar se abrieron y una mujer entro al bar, esta miro alrededor y al ubicar a Dumbledore en la barra del se le acerco ha este, sonriendo enigmáticamente al estar frente a él, quien le esperaba ya en su lugar, desde el instante que le vio ingresar.
-Dumbledore, es un gusto conocerle- le ofreció la mano, sentándose esta seguido al lado del actual director de Hogwarts
-Lo mismo digo- sonríe este con calma -¿cerveza de manteca?- ofreció con su usual amabilidad, en lo que esta acepto con un leve asentimiento y la cantinera le entrego su bebida a la bruja –dígame, tengo entendido y según las referencias que me ha mandado, que desea ser nuestra nueva docente en cuando a adivinación
-Así es señor- acepto solemne y calma la mujer
-¿Qué otras referencias puede darme?- pregunto este bebiendo con calma de su botella
-Vengo de una conocida y antigua familia de videntes- le aseguro esta con orgullo –le aseguro que la asignatura no va a estar en mejores manos que en las mías
-Uhm ya veo…- Dumbledore quedo callado mirándole –y dígame…
Y en eso sucedió, la mujer comenzó a mostrarse ausente, sus ojos se habían girado quedando en blancos ante el asombro del viejo director.
Y ante la presencia de Dumbledore la mujer comenzó a profesar en voz mistica una profecía.
El último con el poder para vencer al Señor de Las Tinieblas se acerca…
Nacido de los dos que lo desafiaron tres veces, vendrá al mundo al concluir el séptimo mes…
Y el Señor Oscuro lo señalara como su igual, pero el tendrá un poder que el Señor de las Tinieblas no conoce…
Y uno de los dos deberá morir a manos del otro, pues ninguno de los dos podrá vivir mientras el otro siga vida…
El único con poder para derrotar al Señor de las Tinieblas nacerá al concluir el séptimo mes…
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Voldemort avanzaba a pasos firmes por el largo pasillo de su base oscura, siendo este acompañado, solo por su más fiel seguidor, su serpiente conocida por todos como Nagini, que reptaba a su lado siguiendo su paso.
Sus avanzar firmes sobre el piso de piedra maciza, iba retumbando en su camino demasiado intimidante en el silencio del lugar, mientras las antorchas mágicas de las paredes otorgaban a su apariencia deforme falta de facciones humanas un aire mas peligroso como a la vez escalofriante, en su conocida apariencia casi de serpiente que había alcanzado de tanto usar e influencia de la magia oscura que corría por sus venas.
Y al llegar a una zona más residencial, donde los mortifagos sin familia muchas veces preferían quedarse para proteger y custodiar la base del grupo.
Este avanzo por esa zona hacia una habitación en especial, donde dos mortifagos estaban allí en custodia, vigilando que la persona de adentro no intentase escapar de alguna forma.
Al verle llegar, estos rápidamente se inclinaron ante el, a ambos lados de la puerta.
-Mi señor- respondieron ante su presencia en esa reverencia sumisa
-¿Cómo se encuentra nuestra huésped especial?
-La bruja se encuentra bien amo- hablo uno de los dos, con un tono firme de voz –hace rato ha despertado como se le informo
-Bien…- este miro hacia el interior –esperen aquí, y no interrumpan por nada del mundo
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Meses después. Hospital Mágico San Mungo
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El matrimonio de los Potter, sonreían bobamente sin poder llegar a contenerse, en la sala de parto donde habían sido atendidos.
En esos momentos a Lily al fin se le había dado permiso de ponerse de pie acompañada esta por James, que le ayudaba a caminar y no perder la poca fuerza de sus piernas.
Luego se detuvo ante una gran vidriera, entraron por una puerta que lateral al vidrio, avanzando entre las cunas ocupadas, pero ellos tenían otro destino por eso es que fueron al final de la sala de maternidad, donde se encontraban bien ubicadas y resguardadas dos incubadoras. Allí dentro se hallaban dos pequeños mellizos, sietemesinos.
Uno de los bebes era bonito, era pequeño de casi inexistente cabello rojizo de ojos grandes castaños, que lloraba con fuerza.
El otro tenia igual de escasos cabellos azabache, pero a di referencia de su hermano, tenia unos grandes como hermosos ojos verdes esmeraldas.
-Mis pequeños bebes…- Lily sonrío con amor, apoyando una mano sobre la incubadora
-Son mas pequeñitos de lo que me imagine- admitió James sonriendo un poco, viendo a sus dos hijos primogénitos.
-Es normal, nacieron dos meses ante- dijo Lily mirando a los bebes, los cuales dormían apaciblemente.
James sabía eso demasiado bien eso.
Habían estado haciendo compras en el Callejón Diagon, consiguiendo solo las ultimas cositas para los bebes, cuando los mortifagos llegaron de la nada, comenzando a hacer desastres y atacar a todos sin miramientos.
El intento llevarse a Lily de allí tratando de no ser visto por el enemigo, pero eso fue imposible, los vieron intentando escapar y comenzaron a atacarlos sin resguardo alguno. Por eso Lily y el no tuvieron mas remedio que defenderse todo lo posible hasta que los Aurores, comandados por Sirius en ausencia de James, aparecieron en el lugar, salvándose ambos de algo inevitablemente peor, como era morir en manos de esos.
Pero de alguna forma Lily fue alcanzada por un hechizo, provocando esto el repentino e inevitable parto.
Fue realmente una alegría cuando el primer bebe nació, llorando enérgico cuando le dieron su primera nalgada para constatar que sus pulmones estuvieran bien desarrollados, pero fue un dolor agudo en el pecho al ver que el segundo pequeño había nacido muerto.
Pero paso algo que sorprendió a todos, cuando ya iban a dar al pequeño por muerto, todos sintieron el leve pulso mágico de este palpitar. Uno de los médicos reaccionando ante esa reacción, se acerco rápidamente y para sorpresa de todos, el medico dijo pero la alegría en su rostro era delator.
'Esta vivo'
Luego de eso ambos fueron puestos en esas invocadoras, para que lograra llegar al peso adecuado de 2 ½ kilos, para poder darles el alta junto a su madre.
James sonrío un poco al recordar todo eso, olvidando la tristeza. Sus bebes ya tenían el peso adecuado, en pocas horas serian capaces de salir con ellos e ir a la casa de ellos donde todos ya se encontraban esperando para poder festejar el nacimiento de sus hijos. Se agacho apenas a la altura de las dos incubadoras mirando calidamente a sus pequeños, antes de ver a su esposa con un brillo especial en sus ojos
-¿Qué nombres le pondremos amor?
-Que tal…- Lily miro a los bebes, pensando todas las posibilidades antes de decidirse al fin –Matius James Potter y Harry Alex Potter ¿Qué dices?- sonríe a James, quien ríe feliz
-Que tienen nombre de campeones y futuros galanes
Lily negó divertida, pero miraron ambos a sus bebes, emocionada como feliz de poder tener a sus dos bebes con sigo, el resultado de su amor real y sincero con su amado James.
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2 Meses Después. Valle de Godric
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James se encontraba en su casa ayudando a Lily con el cuidado y atención casi total que requerían los gemelos/mellizos las 24 horas del día.
Este nunca imagino que el cuidar un bebe fuera problema, pero ciertamente se había equivocado, pues si ya dos bebes le era tanto para el como para su esposa algo difícil de lograr llevar, un bebe solo seria menos lío, pero eso no significaba que seria todo tranquilo como se había llegado a imaginar desde el principio.
Por suerte en su trabajo de Auror, le habían dado una licencia por un año y cuatro meses, de su trabajo de campo, para pasar todo ese tiempo en su casa para cuidar de su bebe, aunque en ocasiones James prefería estar en medio de una lucha contra magos o criaturas oscuras que cambiando los pañales o tratando de calmar el llanto descontrolado de los bebes, ante algún que otro dolorcito estomacal.
En esos momentos Lily se encontraba con Harry en brazos, el pequeño se encontraba jugando con un mechón de cabello de su mama, mientras que Matius se encontraba a su vez en los brazos de James, todos tranquilos al fin.
-n.n no es este el bebe mas hermoso del mundo- Lily le hacia jueguito a Harry, el cual reía y intentaba agarrar la mano de su mama, sin soltar el cabello de esta, con el cual jugaba –amor no tires tanto de mi cabello- ríe suave
-Harry se encuentra despierto hoy- admitió James sonriendo, acunando a Matius que se encontraba despierto en sus brazos, pero bien tranquilo mirando las locuras de su hermano, mientras jugando con un peluche
-Es verdad, parece que hoy despertó de buen humor- asintió con cariño Lily, haciéndole rosquillitas en la pancita a su bebe.
En eso, la chimenea de la sala de pronto se encendió sola, al tiempo que unas llamas azules verdosas se alzaban ante los dos, sorprendiendo a la joven pareja de casados.
Pero por otro lado los dos bebes se asustaron ante aquello tan inesperado, ambos pequeños comenzaron a llorar desconsoladamente del susto, Harry aferrado a la ropa de Lily, Matius aferrado a la ropa de James.
-Que demonios pasa…- James avanzo ágilmente dándole a Lily también a Matius, mientras esta intentaba calmar al asustado Harry, viendo al ir acercándose a la chimenea, al rostro de Albus Dumbledore surgir en las cenizas -… ¿Albus? ¿Sucede algo?
El rostro miro la situación en la habitación.
-Parece que llego en un mal momento- comento al ver a Lily intentando calmar a ambos bebes
-Se asustaron por el estallido de las llamas- le explico la joven madre ya calmando al fin a los bebes, mientras se acercaba a la chimenea
-Oh ya veo, lamento eso- ríe el jovial hombre del otro lado
-Albus ¿porque te comunicaste?
Los ojos del hombre se pusieron por segundos serios.
-Necesito ir a verlos, ¿no tienen problema si voy ahora?
James parpade mirando a Lily quien se encontraba igual de desconcertada que su marido
-No hay problema, ven- dijo este rápido, apartándose así del fuego de la chimenea, así Albus Dumbledore surgió de la misma segundos después ante la mirada curiosa de los bebes.
-Albus… ¿Qué ha sucedido algo?- la pregunta de Lily no se hizo esperar
-Antes que nada- hablo con discreción –me gustaría que nos estemos todos comodos para poder hablar con calma
La pareja se miro de reojo, pero asintiendo James miro a su ex profesor.
-Vamos a la cocina, allí estaremos mas cómodos
-Oh claro- acepto Dumbledore sonriendo
Lily avanzo primero, dejando a los dos bebes en un corralito grande para los dos a un costado, donde dejaba a los bebes cuando tenia que hacer algo en la cocina y no podía tenerlos sin vigilancia.
Mientras los dos bebes se quedaban quietos mirando sus manos o el techo, como los adornos flotantes de encima, distraídos como ajenos a todo lo que allí se llevase a cabo.
James y Albus entraron después, ocupando lugar en la pequeña mesa de la cocina, mientras que Lily le entrego a los dos una taza de café caliente para los dos.
Hubo unos segundos largos de silencio, que solo se escuchaba el leve y alegre balbuceó de los bebes, que atraía la mirada de los tres adultos que se encontraban en la cocina.
-¿Y bien Albus?
El mencionado miro a James, quien se encontraba como Lily, serios ante su presencia allí.
Al final este suspiro suave, tomando un sorbo del café antes de dejarlo sobre la mesa, dejando pasar unos segundos de silencio, que puso a los padres con los nervios de punta.
-Ha surgido una profecía…
-¿Una profecía?- Lily parpadeo desconcertada ante esas palabras
-Así es Lily- el bonachón anciano le sonríe amable, antes de proseguir –habla sobre que de una familia de luz, que sobrevivió al Mago oscuro tres veces, nacerá el elegido para derrotar a Voldemort
Aquellas palabras dejaron a ambos en silencio, los dos por su lado en sus mentes comenzaron a hacer suposiciones, que pronto salieron a la luz de uno de los dos.
-… ¿crees que somos nosotros?
-…Pero los Longvo…
-Son los únicos que han enfrenado a Voldemort de frente y salieron vivos en cada enfrentamiento James, a demás ellos son sangre puras y es mas que seguro que Tom tire a ustedes por considerarlos iguales a él- miro a este al hacer la pregunta –no hay duda que son ustedes y que su hijo Primogénito, es el elegido
Todos se quedaron en completo silencio, al tiempo que la mirada de Lily, James y Dumbledore se posaron en los bebes que descansaban alli, inocentes en el corral.
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5 Años Después. Valle de Godric
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Dos niños jugaban riendo en una casa muy bonita en el patio de su hogar, ambos sobre dos escobas voladoras, revoloteando a poca altura del suelo en el jardín del hogar.
Uno de ellos, de cabello azabache apenas largo, atado en una pequeña coleta baja y de bonitos ojos verdes, hizo una fabulosa pirueta en el aire al tener que esquivar a su hermano gemelo Matius, de cabello corto pelirrojo y ojos brillantes castaños.
En eso el más travieso de los dos, se lanzo de una sobre su hermano, con una clara intención de intentar derribarlo, pero el otro al ver claramente sus intenciones espero al ultimo segundo para poder así esquivarlo.
Ante esto Matius no tuvo tiempo de frenar y mucho menos desviar su dirección y se dio de una contra el árbol de enfrente.
-jajajajaja tonto jajajajajaja- Harry comenzó a reírse sin poder contenerse aun sobre la escoba, que le habían regalado sus padres para su cumple numero cinco de los gemelos.
Mientras que por su lado, Matius medio mareado por el impacto, había logrado mantenerse aferrado al palo de la escoba para no caer de bruces al suelo, aunque por la poca distancia que había, no se habría hecho mas que un raspón o moretón.
-¡Eso no se vale Harry hiciste trampa! Ò.ó- grito Matius a poca distancia para patear el aire y acercarse a Harry, quien aun se destornillaba de risa sobre su escoba a pocos metros de el.
-hey no me acuses de tramposo- el morocho sonrío muy alegre, cruzado de brazos –papa siempre nos dice que debemos sorprender al oponente en un partido ¿no? n.ñ
-Si pero no ahora- refunfuño a su altura –o.o oye por cierto a que hora dijo mama que llegaría
-o.o ehm…- escucho el ruido de una aparición en el interior de la casa, ambos hermanos se petrificaron, al imaginar quien se había aparecido
"¡Es Mama!"
En segundos ambos dirigieron sus escobas al cuarto de estas que había a un costado de la casa, se bajaron casi al vuelo, al tiempo que Harry habría la puerta metiendo de una su escoba. Matius rápidamente guardo la suya para poner el candado mágico de seguridad que su madre había puesto y que habían aprendido a desbloquear, ambos se alejaron lo más posible del armario, justo cuando Lily salio al patio para verlos.
Y ambos estaban tranquilamente jugando bajo la sombra de un árbol con algunos juguetes muggles que a ambos gustaban (aunque no tanto como volar).
-¡mama!- Matius sonriendo se levanto al verla, dejando los juguetes de lado igual que su hermano
-Veo que se han portado bien sin mi- avanzo hacia ellos, revolviendo muy cariñosa el cabello de ambos, besando sus frentes cariñosamente
-n.n claro que si mami, siempre nos portamos bien- admitió Harry, en lo que Matius sonreía más, sabiéndose con su hermano un travieso rompe normas, como su padre.
-Uhm…- Lily miro a sus dos hijos, su instinto de madre le decía, de que esos dos traviesos habían estado haciendo de las suyas en su ausencia –bien, bien, en ese caso vamos ^^- se enderezo con calma –ayúdenme a guardar las cosas y luego vamos a buscar a su papa al trabajo
-*-* ¿Nos dejaran entrar al departamento de Aurores? - exclamo Matius emocionado
-Ya veremos- admitió Lily
-¡Vamos Mati! Tenemos que apurarnos .- Harry tiro rápido de su hermano para entrar a la cocina, comenzando a acomodar los dos todas las cosas que su madre había comprado.
Lily ríe suave viendo a sus dos bebes corriendo de un lado a otro, para acomodar las cosas, ayudándose los dos entre si, acabando con todo en un tiempo record para esos dos niños hiperactivos.
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James por su lado se encontraba en su trabajo, hacia poco le habían dado un puesto de oficinista, algo que en verdad le molestaba demasiado, pues el prefería mas el trabajo de campo, en pocas palabras de pelear contra los malos cara a cara.
Aunque a su vez, el sabia que eso era lo mejor que le podría haber pasado en ese tiempo, ya que en ese puesto trabajaba muchas menos horas que antes y podía estar con su familia más tiempo.
-Hey amigo- James miro a un costado, mirando a Sirius ir acercándose hacia el – ¿no te cansas de estar allí?- sonriendo se apoyo en el respaldo de su asiento –anda hombre pide que te cambien de nuevo al equipo, las redadas no son lo mismo sin tu presencia
-Lo haría pero no puedo- ríe este divertido –es mejor así, puedo estar mas con mi familia y cuidar a mis hijos mejor
-Ña por eso nunca voy a casar- aseguro este refunfuñando como todo un chiquilín, haciendo un berrinche algo típico de él –el casamiento atrae demasiados problemas y responsabilidades
-Y a ti te encanta la vida loca y desenfrenada- ríe James negando, para ver reír a Sirius
-Es lo mejor amigo- le palmeo la espalda divertido –nadie me ordena, ni me regaña, ni me restringe, puedo andar con quien quiera o con cuantas chicas guapas me encuentre y no hay nadie que me reclame n.ñ
-¬¬ y así vas a seguir hasta hacerte un viejo lelo y estés urgido por andar buscando pareja para tener hijos y toda la cosa
-¬0¬ eso nunca- se acomodo el traje que usaba, aunque la corbata mal abrochada ni la toco, como era natural en él, manteniendo su fachada de hombre rebelde y descuidado –esta belleza Black, durara por los siglos de los siglos
-Hasta que alguien te capture y te llegue al registro- le siguió James y Sirius por poco se cae de espalda
-Eso ni en bromas Prongs, ni en broma _
James se ríe con diversión, cruzándose de brazos.
-Oh vamos, que tiene de malo- pregunto divertido, viendo al otro –tengo una esposa encantadora y dos hijos adorables, nada es mejor que eso
-Bueno…- Sirius se rasco la nuca, el adoraba a los dos pequeños de James y había salido padrino de ambos junto con Remus –por lo único que me podría llegar a casar es por un hijo- admitió sonriendo –adoro a esos chibis y quisiera tener algunos así algún día
-Ya llegara tu hora Canuto- ambos se miraron divertidos
-¡padrino! ¡papa!
-O.o heeee… aaahhh!- segundos después Sirius termino en el suelo de bruces, escuchando las risas alegres de dos chibis, al abrir los ojos este no pudo evitar reírse –aahh mis Merodeadores favoritos!- grito alegre
-^-^ Prong!- Harry le abrazo alegre –owo ¿como estas?
-owo si si cuéntanos padrino- Matius a un lado estaba igual de animado -¿le ganaste a aun señor malo?
-Como es esto- James miraba esto divertido, llamando la atención de los dos pequeños –saludan a Sirius pero a mi me pasan de largo, u.u ahora que voy a hacer con las ranas de chocolate que les compre
-o.o…
-o.o…
-_ papa te extrañábamos *-*- ambos se le fueron encima y James se ríe con ganas, sus bebes podían llegar a ser muy convenencieros
-¬0¬ oigan aquí estoy yo- Sirius desde el suelo se reía viendo a los dos niños revoloteando alrededor de su padre
-Consigue tu propios bebes, que estos son míos- James abrazo a sus bebes, para sentar a ambos en sus piernas, besando sus mejillas –que hacen aquí bebes?
-Mama nos trajo papa- sonríe Matius alegre
-¿En serio? ¿Dónde esta?- miro alrededor buscándole
-Mejor que no se aparezca- Sirius se levanto sacudiendo sus prendas –es una mujer demasiado mandona, pero en serio Prongs, no se que le viste a esa mujer
James que le había escuchado en silencio sin objetar nada, solo sonrió de lado mirando a Sirius y el morocho ante esa reacción de su compañero de travesuras, se le erizó enseguida la piel, sudando considerablemente, al sentir un ambiente de tensión surgiendo a sus espaldas.
-Esta detrás de mi ¿verdad?
-owo sip -Matius y Harry afirmaron, en perfecta sincronización, mientras que Sirius se giraba muy lentamente sonriendo a Lily, sin poder atreverse a hablar.
-n.n Sirius se puede saber ¿de quien hablabas?- Lily estaba detrás de él, acompañada de un muy divertido Remus, que al igual de James, miraba con diversión a Sirius sudar ante la situación.
-"Oh diablos…" Ah Lily amiga mía- se le acerco y le abrazo a esta de lo mas amistoso posible –n.n estaba hablando de una compañera bruja del trabajo que es bien loca y mandona
-¿En serio?- Lily enarco una ceja viéndole, sin llegar a creerse las palabras de él boquifloja de Sirius Black
-¡Claro que si! Ò.ó Oh acaso es, ¿Qué dudas de mi? ó.ò- Sirius hizo una leve expresión de ofendido que no convenció a nadie de su inocencia
-¿La verdad?- todos esperaron la respuesta de la mujer –si
-Auch! .- Sirius llevo una mano a su pecho teatralmente, al verse en verdad descubierto –u.u Lily amiga, tu desconfianza hiere terriblemente mis sentimientos
-Te conozco demasiado bien para caer en tus caritas de cordero Sirius- la pelirroja solo reía bajo, ya mas calmada de todo la anterior situación que se creo en el grupo de viejos amigos –por cierto, ¿como les va en el trabajo?
-Puff a mi genial- Sirius sonrío de lado cruzado de brazos, apoyado muy dejadamente sobre el escritorio de James –aunque sin mi amigo retenido aquí presente, las cosas no son taaan divertidas como eran antes, pero al menos aun es pasable todo
-Y acá todo bien- informo James divertido, viendo como Harry y Matius se divertían con algunos objetos mágicos de adornos sobre el escritorio –nada fuera de lo común y lo corriente
-Debes de extrañar tus días de Auror- admitió suave Remus
-La verdad, es que si- admitió James, pero luego sonríe viendo ahora a sus dos pequeños en su regazo –pero por ellos dos puedo dejar un tiempo las batallas para otro momento, con tal de que estén seguros
Sirius se quedo serio ahora, comprendiendo igual que los demás el porque de las palabras como preocupación de James ante la seguridad de sus dos pequeños. Mientras que Remus por su lado les miraba a ambos con una ternura maternal casi infinita a los pequeños, hijos de uno de sus mejores amigos.
Y Lily les miraba con una expresión cariñosa, pero a la vez muy triste, al comprender que uno de sus dos bebes, tuviera una carga tan pesada desde tan pequeño, como era el ser El Elegido para derrotar a Voldemort, desde ya tan corta e inocente edad.
-"Pronto tendremos que comenzar"- pensó Lily viendo a sus dos niños allí tan alegres y felices en el regazo de su padre –"todo será por el bien y el futuro de los dos, no nos queda otra opción"
Continuará…
Hola a todos!
Bueno primero y principal doy gracias por haberle dedicado este tiempo al primer capitulo de la historia, se que como un principio no es la gran cosa y dejara mas dudas que respuestas quizás, pero espero que con el paso de los capítulos estas se resuelvan solas.
Esta historia girara en torno a los hermanos (como pasa siempre que Harry tiene un gemelo) pero yo decidí que gire todo de una forma diferente y lo verán mas adelante.
Una vez mas, gracias por haber leído mi fic!
(Perdonen si encuentran algún error ortográfico jejeje)
Espero que me dejen algunos comentarios que me animen a continuar pronto, nos vemos!
-Kira-
