Hola c:

Estoy muy feliz de escribir una nueva historia, bueno les doy una nota importante Parte de este capítulo ya lo había publicado para participar en un reto, mientras ideaba la trama se me ocurrió agregar muchas cosas, por desgracia el límite del foro son de 800 palabras por lo que decidí reinscribirlo y publicarlo como un fic más, solo que este se extenderá como en siete capítulos, algo que el pasado solo fue un One Shot.

Bueno dejando claro todo, Es mi regalo de navidad para ustedes:'D Por ser tan buenos lectores, y estar siempre conmigo. Espero que les guste de verdad, porque lo hago con todo mi carriño. Lo quiero mucho y les dejo el primer capítulo c:

Dulces navideños.

Cap. 1: ¿Crees en las marcas de maldición?

Corría lo más rápido que sus pies podían, empujaba gente, pateaba rocas, saltaba charcos, solo para llegar a su lugar favorito, donde nadie la hacía daño, donde era tomada en cuenta. Cuando llego, se acerco rápidamente a la orilla y se sentó, para comenzar a sentir las líneas cristalinas que resbalaban por sus mejillas.

El llego a su lugar favorito, sin necesidad de correr o preocuparse. Se apoyo en un árbol y admiro las aguas del lago, apoyo sus orbes en una corriente y la siguió, hasta que un cuerpo impidió seguir. Un cuerpo pequeño, lo reconoció. La chica se veía mal, y por más que lo detestaba, necesitaba asegurarse de que estuviera mejor.

Se acerco a ella, tomo asiento a una distancia.

—Deja de llorar— Pronuncio a secas.

La chica giro asustada, lo miro a los ojos, le costó trabajo aceptarlo pero se perdió en aquella escena, unos ojos chocolate brillosos por el llanto, sus mejillas sonrojadas por su sangre agitada, sus labios rojos.

—Para ti es fácil decirlo— respondió con una voz fuerte— Todos te prestan atención— La miro confundido, ella bufo — Tenemos la misma historia, mis padres murieron a la misma edad que los tuyos, pero aun así nos esforzamos bastante para seguir adelante y comprobarle a la gente que podemos, ¿Y cómo lo pagan?

—Explícate.

—Eres el centro de atención, tienes muchos amigos que te procuran, te felicitan por hacer las cosas bien, ¿Qué paso cuando decidiste irte? Cuando abandonaste todo para cumplir tu sueño— Silencio—… Te quieren tanto que fueron a buscarte, mandaron gente para que regresaras, te negaste, pensando de solo en ti. Y cuando regresas, pones un pretexto. Eso que nos une.

— ¿Algo que nos une?

—Tú marca de maldición, la tienes en tu cuello, la que te hace más fuerte… Yo tengo igual una marca de maldición, la tengo en el corazón y me hace más débil… y a diferencia tuya, yo no escogí tenerla. Ahora dime Sasuke ¿Crees en las marcas de maldición? Tu consigues las cosas tan fácilmente, yo me esfuerzo y no es lo mismo, pero no creas que es reclamación, simplemente ya me harte. Lo siento.

Sasuke abrió sus orbes, no podía creer lo que veía, un espejo, uno que le reflejaba perfectamente, Tenten era tan igual a él, solo que él era egoísta muy diferente a esa cálida chica, sintió la necesidad de pagar todos los platos rotos, de asesinar a sangre fría a las personas que la han hecho sufrir, él quería que estuviera bien, él quería protegerla.

Puso su mano en el hombro de la castaña, fue lo suficiente para que esta se abalanzara y comenzara a llorar en su pecho. Apoyo ambas manos a la espalda de Tenten, pero en su interior comenzó a odiarse a sí mismo, ¿Cómo podía actuar así con una simple mujer? No, se respondió, ella no es una simple mujer. Es algo más que eso.

La aparto de él y con sus pulgares limpio las lagrimas que corrían, se odio por el acto, pero una pequeña y cálida voz en su interior indicaba que era lo correcto, que era lo tenía que hacer, porque lo deseaba. Se acerco a ella y junto sus frentes. Tenten solo levanto las cejas sorprendida no podía creer lo que él iba a hacer, pero lo creyó cuando sintió el contacto de sus labios en los de ella. Solo la beso con ternura, uno muy leve pero que demostraba sinceridad.

—No creo en ellas… porque yo me encargare de borrar la tuya— susurro el Uchiha para volver a abrazarla.

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La estaba mirando demasiado, tenía que dejar de hacerlo. Ha pasado unos días de su plática y tonto beso, culpo de nuevo a la debilidad, pero desde ese entonces no han hablado.

Había reunión con Tsunade, no ha puesto mucha atención porque solo se la pasa viéndola, pero lo que le más le sorprende es que se ve igual de alegre y molesta como la recordaba, mientras la Hockage habla, la castaña ríe en voz baja con Lee, cruza palabras con Naruto o voltea para hacer cosquillas a Neji, algo que le causan ¿celos? Movió su cabeza, no, el no podía sentir celos, no es su estilo. Lo mejor sería poner atención.

—Trabajaran en parejas para organizar el festival navideño, los ninjas que se encuentran a mi lado izquierdo pasaran por un papel donde revelara su pareja, los del lado derecho pasaran por un papel donde se les asigna el cargo— Dio ordenes la Sanín, y comenzaron a pasar.

Sasuke miro a la chica- de nuevo-, no dejaba de quitarle la vista, ella camino unos pasos y sonriente tomo un papel, lo abrió y la sonrisa se le desapareció de los labios, arrugo de nuevo el trozo de hoja para guardarlo, regreso a su lugar para luego reír con sus amigos. Era el turno Sasuke que fue avisado por un codazo por parte de Shikamaru, ya que él seguía embobado en la chica, paso desenvolvió el papel "duces" leyó y lo guardo.

Regreso a su lugar y sí, de nuevo miro a la castaña, seguía riendo, le dio un leve empujón a Neji y en respuesta él le revolvió el cabello, el azabache apretó fuertemente la mandíbula, ¿Pero qué estaba haciendo? Se relajo, pero de nuevo ardió su sangre cuando Tenten giro a mirarlo, "Genial" pensó, ella se había dado cuenta de que la observa, pero la chica no hizo nada, regreso su vista de nuevo para hacerle una pequeña broma a Lee.

Suspiro, se había hartado, quien sea su pareja luego lo buscaría, comenzó a caminar a la salida, pero una mano lo sujeto de su muñeca impidiendo su partida.

—Somos pareja— le informo Tenten enseñándole el papel que decía su nombre— ¿Cuál es nuestro cargo?

—Dulces— secamente dijo.

—Bueno, podemos ponernos de acuerdo en estos días— le sonrió, ¿Cómo podía estar tan tranquila?

—Hpm— respondió cruzando sus brazos.

— ¿Puedes ir hoy a mi casa como a las 6?

— ¿No es demasiado tarde?

—Después de aquí iré a entrenar, después tengo que comer, me da hambre, y prometí ayudar a Neji a entrenar, no puedo hacer todo— le puso una cara de puchero.

Recordó que la joven estaba fastidiada, tal vez respetando sus horarios se relajaría más.

—A las 6:00—finalizo y se dio la vuelta para comenzar el camino.

¿Cómo podía ser posible? Su mente aun no lo asimilaba, ¿Por qué ella se comporto como si no pasara nada? ¿Cómo si nunca hubieran hablado? ¿Cómo si él nunca la hubiera besado?