Hola, bueno como aún estoy en blanco con las continuaciones hibapin...T_T *entra en depresión y deja una nota explicando* "como estoy en blanco y se me vino esto a la cabeza decidí escribirlo, se habla de la historia del mandato de vongola secondo y sus guardianes.
Katekyo Hitman reborn no me pertenece, es sólo de Akira Amano y estoy ahorrando para hacerle una estatua por crear a Xanxus y Ricardo
La trama de la historia es mía, espero que les guste el rating es T por contenido violento, lenguaje hiriente a la sensibilidad del lector y escenas xxx. Un saludo"
Simplemente incompatibles
Prólogo
"Desprecia, odia y mata, serás tan temido como quieras pero después no vengas buscando aprecio"
El cielo italiano lucía gris, aventurando que no tardaría en haber una tormenta, al igual que el día anterior y el anterior también, en el gran castillo Vongola, concretamente el salón principal se encontraban todos los subalternos, trajeados correctamente de negro esperando en pie, la larga mesa de roble y las sillas habían sido retirados horas antes por los criados ante el evento que iba suceder en esa habitación y tan sólo había una silla, más parecida a un trono real, y nadie debía sentarse en ella.
Giotto se había ido, había abandonado la famiglia, se fue a Japón y había encontrado el amor en aquel país y ya no iba a regresar, Daemon Spade seguía como guardián de la niebla y nadie estaba nada tranquilo.
-Dicen que el que mire al objeto óptico demoníaco...que usa al día siguiente aparece muerte-murmuraba uno.
-Ese hombre es un monstruo, el engendro del demonio-susurraba otro.
Un tercero se metió en la conversación.
-Eso es porque aún no sabéis como es el nuevo capo...
-¿Peor que el guardián de la niebla?
-En los barrios bajos era un hombre muy temido...y muchas famiglias están a sus pies...y su sobrenombre es...
Todas las voces fueron silenciadas al oír el chasquido que emitió las puertas dobles tras ellos, el aliento fue contenido y las miradas se centraron en ese lugar, los fuertes pasos resonaron con decisión en la sala, un hombre alto entró, su cabello era negro, atado por detrás, su piel era morena y sus ojos eran verdes oscuros como el bosque más frondoso, su labios se curvaban en un mueca que mostraba tanta seriedad como desprecio hacia los que allí estaban, vestía un impecable traje negro con el que podía alimentarse un barrio entero al igual que sus zapatos, su camisa era verde, casi tan oscura como los ojos y la corbata anudada en un nudo italiano. Un aspecto impoluto para el nuevo capo de la que sería la más poderosa de todas las familias.
-...Es él...El terror de los infiernos...
A más de uno le temblaron las piernas y el corazón resonaba con fuerza en sus oidos mientras aquel hombre caminaba hacia adelante con firmeza, no le hacía falta ordenar que ninguno de aquellos corderos se apartase, el miedo que inspiraba su sola presencia bastaba para que, en menos de un segundo, dejaran libre un camino entre las impecables baldosas de marmol blanco.
Él continuó su caminar sin vacilaciones.
Nadie apartaba la mirada de él, se le conocía por muchos nombres.
El que no tenía piedad.
Desalmado.
Demonio.
El terror de los infiernos.
Pero de ahí en adelante sólo sería conocido por un único nombre.
-Podéis llamarme...Vongola Secondo-anunció sentándose en aquel trono.
CONTINUARÁ
Hasta aquí el prólogo, los capis serán más largos, espero que os guste, en el siguiente Vongola Secondo se llevará una desagradable sorpresa con uno de sus guardianes.