Siempre que leía una historia, el autor suplicaba reviews de los lectores, me confundía un poco pero igual dejaba un mensaje.
Este es mi primer fic
Al leer los reviews comprendí el sentimiento y la suplica del autor. Se siente bien.
Agradecimiento
Ver que desconocidos toman su tiempo para darte consejos o cumplidos sobre tu pequeño pedazo de pensamiento que quisiste compartir.
Gracias.
ICHIISAI LULLABY
Arrullo Infantil
-Mierda….
Fue lo único que se escucho en el amplio jardín adornado de costosos arreglos florales y una refrescante piscina en la cual se reflejaba la luna y algunas estrellas que se mostraban orgullosas haciéndole saber a los insignificantes mortales que la noche reinaba.
Pero nada de eso importaba, su lengua se entumía cada vez mas, sus ojos dilatados no parpadeaban al ritmo normal y su mundo parecía moverse al ritmo de una ruleta de poker , la pequeña pelota blanca, constantemente rebotando en diferentes casillas decidiendo el destino de enviciados apostadores dispuestos a ganar.
Pero en el presente, en ese jardín y en esa noche, la pelota blanca seria su cerebro y sus neuronas ansiosas apostadoras las cuales en vez de esperar ganar dinero desean salir con vida de la venenosa pero afrodisíaca pastilla ahora liquida por los ácidos del estomago que circulaba por todo su cuerpo.
-mi…erda…
Susurro otra vez pero con mas dificultad, el azul de sus ojos era casi irreconocible por las delgadas venas color rojo que lo invadían, entonces esto era, una de sus tantas experiencias.
Es normal, muy normal, es simplemente una de las tantas etapas sociales que sucede en la universidad, pruebas y practicas todas las cosas nuevas que te muestran o pasan por tu cabeza lo cual es fácil ya que sin la supervisión de padres y adultos solo necesitas fuerza de voluntad, curiosidad y talvez 2 o 3 cervezas encima…y si puedes 2 copas de tequila también.
Se levanto despacio y con calma cuando sintió que su cerebro dejaba de rebotar en las mortíferas casillas de la ruleta que en su caso seria la conciencia, al notar que era más que imposible que pudiera caminar apoyo ambas manos y rodillas y como un experto bebe de 1 año gateo asta el borde de la piscina.
Se inclino para sumergir su cabeza en el agua, disfrutando como el frió recorría todo su cabello y limpiaba las gotas de sudor por el falso sentimiento de adrenalina que causaba el químico en su interior.
Saco la cabeza despacio, pudo sentir las nauseas y el mareo invadirlo de nuevo, odio la infaltable necesidad de respirar, un grito le llamo la atención, quitando largos mechones rubios frente a sus ojos pudo ver que el silencio era otra alucinación.
Al parecer la fiesta no se había acabado, numerosos universitarios se podían ver tirados en todo el jardín, la mayoría por drogas y otros, muy pocos , por alcohol los cuales eran fácil de reconocer solo se necesitaba echar un vistazo al asqueroso charco de liquido rosa y amarillo recostado al lado de sus cabezas, los demás aun en pie por sus forzosos intentos de controlar lo bueno de la juventud, algunos bailaban, cantaban … peleaban , pensó el rubio al escuchar el seco sonido de un puño seguido por un grito de dolor, otros tenían sexo al parecer las habitaciones, baños, cocina, muebles de sala, y otros refugios se habían agotado así que se conformaban con cómodos y ruidosos arbustos alrededor de la casa …. O también las sillas de plástico reclinable utilizadas ''solo'' para broncearse, concluyo el joven al escuchar gemidos y palabras obscenas saliendo de mojadas bocas que se comían mutuamente y contacto físico y indecente de los cuerpos que al hacer movimientos fuertes y bruscos le provocaban a la pobre silla ruidos y chillidos.
Suspiro y miro su reflejo en el agua, agradeció que nadie estuviera metido en la piscina, sentándose se quito los zapatos, medias y coloco los pies en el agua luego de la refrescante sensación dejo que su espalda tocara el verde pasto para acostarse una vez mas.
Nadie se metería en la piscina seria un suicidio….pensó el rubio, a pesar de ser drogadictos o alcohólicos no dejaban de ser inteligentes, y la inteligencia nunca juntaría un joven drogado sin ningún sentido funcionando correctamente con un hondo y profundo agujero lleno de pesada y fría agua, era simplemente cuestión de lógica.
Una sonrisa apareció en sus labios, su sentido común estaba regresando...lento…pero regresando, eso era bueno la droga poco a poco estaba dejando su cuerpo.
Pero pronto esa sensación de alivio desapareció cuando sus ojos se fijaron en el cielo, al parecer la noche se había cansado de su hermoso y misterioso color negro y decidió teñirse de un claro y dulce color caramelo, con fuerza parpadeo varias veces logrando que los comandos llegaran al cerebro, pero el esfuerzo no sirvió el cielo seguía color caramelo y ahora para su sorpresa las estrellas eran un rió de chocolate que caía lentamente a lo bajo de la tierra, soltó un respiro de frustración al saber que estaba en su punto de locura al ver que en cada rió de chocolate numerosas fresas grandes y rojas se bañaban y caían junto a la torrente corriente.
Cerro sus ojos esperando que la alucinación terminara, ya había tenido varias después de haber tomado la píldora horas antes pero ninguna tan fuerte y loca como esta, solo pasaron unos segundos cuando sus orbitas azules se dejaron ver otra ves, era una risa, alegre suave infantil dulce y ligera… risa.
Miro al final de las numerosas cataratas de chocolate buscando alguien pequeño, probablemente una niña, al ver que no se encontraba en ese lugar sus ojos fueron subiendo tomando de guía las líneas de chocolate que caían del cielo.
Al llegar a lo más alto, donde en el mundo real debería de estar la luna, pudo ver como el nacimiento de los ríos de chocolate venían al parecer de un bosque, pero no había rastros de árboles solo era un largo y recto camino de pasto verde…con algunas flores.
No lo pudo evitar, soltó un gruñido de frustración, ese no debería de ser su alucinación, debería de estar en la mente de una niña de 6 o 7 años, pensó en meter su cabeza al agua pero antes de que pudiera levantarse la risa invadió el delicioso cielo de caramelo.
Esta vez pudo seguir la fuente del sonido, miro el pasto verde que flotaba sin dificultad en lo lato del cielo o mar de caramelo.
Sus ojos se abrieron de par en par y si fuera posible su pupila se dilato más.
Se dejo ver no a una niña como el rubio esperaba, sino a una joven , una hermosa joven , daba pequeños saltos imitando a una feliz infante en Noche buena, su delgado y muy bien formado cuerpo se encontraba cubierto por un pequeñísimo vestido blanco adornado con puntos rojos, un delantal completamente rojo cubría la mayor parte del pequeño y ''infantil'' atuendo, su cintura se veía claramente ya que la cinta del delantal se añadía muy bien a sus curvas amarrándolas suavemente y terminando en un pequeño y provocativo moño en la parte de atrás.
La falda se movía con el ficticio viento que recorría el no lógico lugar, su corto tamaño debería de ser ilegal ya que dejaba ver el largo y lo bien formado de sus piernas, las cuales vestían un par de medias blancas que las cubrían un poco más arriba de las rodillas.
Sin parar de llenar el aire con su dulce e infantil risa llego a saltitos al borde del pasto, se inclino un poco ocasionando que varios brillantes y suaves mechones de cabello se deslizaran por sus pequeños hombros, la adorable posición de la joven era también sumamente confusa ya que forzaba a los pobres ojos azulados del rubio a una mejor vista para poder distinguir entre el cabello de la pequeña belleza y lo profundo del cielo ya que los dos poseían el mismo y exacto color.
La dilatada mirada azul del rubio se unió con la azucarada y dorada de la castaña.
-mimi…
Al pronunciar el nombre de la imaginaria joven, esta solo sonrió y dejando el panorama azul saco de un lugar desconocido una canasta llena de fresas, acomodo sus altos tacones rojos y se sentó en el pasto milagrosamente no dejando ver nada fuera de lo necesario, colocando su cabello detrás de uno de sus oídos tomo delicadamente una fresa con ambas manos y como si fuera de cristal la coloco lentamente en una de las tantas cataratas de chocolate, sonrió para si misma al ver que la fresa se hundía solo asta la mitad y caía en perfecta sintonía con las demás al ritmo de la corriente.
Prosiguió con las otras solo que ahora murmuraba una pequeña tonada dulce y lenta que el rubio reconoció al instante.
-Mierda….
Murmuro mientras dejaba cerrar sus ojos, al parecer la alucinación seguía porque aun sus oídos eran consentidos por la dulce canción que salía lenta y suave de los labios de la ahora reconocida mimi.
Un arrullo infantil… pensó mientras abría los ojos, su imaginación sin control al dejar que la droga tomara lo mejor de su cerebro creando la más fuerte alucinación, sabía muy bien que los últimos minutos serian los peores.
La droga era como un joven….se dejaba entrar en terreno desconocido y lentamente exploraba cada espacio, luego al saber que tendría que salir de ese paraíso daría lo mejor por no hacerlo pero al final la batalla la ganaba el cerebro no sin antes quedar un poco lastimado ya que la inteligente sustancia de químicos entrega asta la ultima energía para poder dejar tan siquiera un poco de su rastro para tener una prueba de que estuvo hay y vivió lo suficiente.
Irónico y un tanto sin sentido….pero sabia muy bien que se encontraba en lo correcto al presenciar y disfrutar la batalla de la pequeña pastilla antes de dejar su cuerpo.
Sus labios hicieron una curva dejando sentir una sonrisa, que buena batalla…
Sus orbitas azules se llenaron de numerosas imágenes de la joven mimi, todo lo que rodeaba su vista se convertía rápidamente en ella, y luego cambiaba otra vez al parecer la droga quería lograr acomodar en ese pequeño espacio llamado cielo las numerosas imágenes de mimi que se habían quedado en su mente, rió un poco al saber muy bien la asegurada derrota de la pobre droga ,ella ignoraba el pequeño echo de que estuvo divagando en el cerebro y no en el corazón, imágenes de mimi tiene miles… llenaría el cielo el espacio y la vía Láctea tal vez….
Aunque las escenas que presenciaba eran rápidas y confusas la lenta y suave tonada de mimi aun entraba por los oídos del rubio logrando calmar sus nervios y bajar un poco la ya descontrolada adrenalina.
Pasaron los minutos y una por una las imágenes y momentos de mimi fueron desapareciendo, el rió de chocolate dejo de caer, el largo y verde pasto desapareció y así lo hizo también la sensual mimi llevándose su pequeño vestido rojo con ella.
Lentamente el color negro tomo el bando otra vez y la luna y las estrellas se asomaron dejando saber al joven que todo estaba normal.
Después de un tiempo pudo sentarse, apoyo sus brazos sobre sus rodillas mientras dejaba que la calma y el razonamiento mandaran una vez mas en su agotado cerebro, paso una mano por su rubio y ahora húmedo cabello mientras un suspiro escapaba por su boca.
-yamato…?
Miro a su derecha para encontrarse a la protagonista y también victima de la difunta droga y fuertes alucinaciones.
No dijo nada solo la miro fijamente mientras con paso suave y elegante se acercaba a el, no pudo evitar notar lo sensual y hermosa que en verdad era su gran amiga mimi tachikawa.
Su cabello suelto y algo desordenado la hacían completamente irresistible mientras que las suaves ondas que adornaban su perfecto e inocente rostro la hacían ver, sin ningún remedio, totalmente adorable.
A diferencia de otras ocasiones en las cuales su ropa era perfectamente combinada y cada una llevando su respectiva costosa y famosa marca, hoy era diferente, un buzo de tela suave beige adornaba su cuerpo pero no dejaba ver su figura, ya que le quedaba un poco grande, pero lo recompensaba con los Jeans oscuros pegados como segunda piel a sus largas y hermosas piernas.
Las llaves plateadas pegadas a un cursi pero adorable llavero de conejito le demostraron que era correcta su suposición.
A su amiga mimi le encantaba salir, y para sorpresa de muchos resistía mucho más que algunos de sus amigos, sin incluirlo a el, pero al igual de cómo amaba la vida nocturna en especial la atmósfera de universidad también amaba quedarse en casa comiendo sus extrañas comidas las cuales la mayoría resultaban saber deliciosas, pero el nunca lo admitiría, mientras disfrutaba de una cursi/romántica o ciencia ficción/aventura película junto a varias de sus amigas, en especial cuando hay examen al otro día.
Esto le da la oportunidad a muchos de sus amigos, incluyéndolo a el, a aprovecharse de la asombrosa inocencia, a pesar de su edad, de la pobre para pedir ayuda, casi siempre para poder llegar a las habitaciones del campus sanos y completos.
El sonido del cascabel que colgaba del cuello del conejo/llavero hizo que yamato saliera del transe, pero aun sin decir nada solo la observo y no pudo evitar recordar ese extraño momento de locura al ver que mimi parada frente a el se inclinaba un poco para verlo mejor ocasionando que varios mechones se deslizaran por su hombro, exactamente igual a como lo hizo minutos antes en el cielo de caramelo.
-tenemos que irnos…
Su dulce vos recorrió el espacio, yamato cerro sus ojos y una sonrisa se dibujo en sus labios mientras suspiraba.
-soñé contigo tachikawa
-hu?...
Movió su cabeza a un lado dejando que su cabello bailara al ritmo del corto movimiento, se veía sumamente adorable… yamato sintió la urgencia de estar cerca a ella así que se puso de pie feliz de que no perdía balance.
-como fue?...
Yamato se acerco más a ella y rió un poco por la ironía, como olvidar en medio de su alucinación que el suave cabello de mimi siempre olía a chocolate.
-no estaba desnuda cierto?
Pregunto con un pequeño puchero, realmente adorable, el rubio alzo su mano y tomo un largo y delgado mechón de cabello, rió por las palabras de la pequeña dulzura pero a la vez al recordar otra cosa obvia de su amiga, su cuello siempre poseía el tentador aroma a caramelo.
-tenias puesto un traje de muñeca….y colocabas fresas en un rió de chocolate que caía desde el cielo que era de caramelo.
Mimi soltó una risa pequeña luego miro los ojos del rubio para luego cambiar su característica alegría por una de preocupación y tristeza, pero fue culpa lo que sintió yamato al ver el cambio de su hermosa amiga, sabia bien que su dulce compañera era inocente pero no tonta…solo con ver una ves a sus ojos azules podía saber que, rompiendo la promesa, había consumido drogas.
Suspiro suave la castaña mientras daba un paso hacia atrás, haciendo que su largo mechón se deslizara entre los dedos de yamato.
-otra vez…. Por eso lo nuestro no funciona….
-trate de no hacerlo…mimi ni siquiera es un vicio…
-pero podría llegar a serlo
-no nunca será un vicio es solo…
-como lo sabes?...nadie sabe eso… solo seamos amigos bien? Ya me canse de tener voluntad por ti.
Sin decir más empezó a caminar.
Ella no lo comprendía…siempre que las tomaba la podía ver a ella
…solo seamos amigos bien?...
Y cuando la veía el sol brillaba mas , su sonrisa se asía escuchar y su vida…valía la pena
…lo nuestro no funciona….
Con seguridad apretó los puños y rápido persiguió a mimi.
-no esta vez…-Susurro mientras su miraba penetraba la espalda de la castaña.
Antes de que mimi pudiera abrir la puerta de vidrio que separaba el jardín de la enorme casa yamato pudo tomarla por los hombros y con un rápido movimiento la tiro a la pared de ladrillo al lado de la entrada de transparente cristal.
-yamato…? – pregunto agitada aun la sorpresa en sus sentidos por el repentino movimiento.
-las tomo por ti.
-por mi?...ishida –apretó un poco mas sus manos que ahora se encontraban extendidas en la pared , en la mitad de estas una muy confundida mimi estaba acorralada – no tiene lógica que tomes algo por alguien el cual te pide que no lo hagas…por favor solo déjame ir por tai ya es tarde….
-no.
-hu?...
-te veo...yo...solo...te veo…-susurro yamato mientras apoyaba su cabeza en uno de los hombros de mimi, sus manos aun en la pared.
-yamato….si dejas de hacerlo me veras siempre sonreír….-susurro mimi al poder escuchar la ultima palabra que escapo de los labios del rubio antes de apoyarse en su hombro.
Yamato se incorporo y junto su frente con la de mimi, dios como amaba a esa mujer.
-te amo…-susurro mientras quitaba una mano de la pared para ponerla en el rostro de mimi.
Ella solo le dedico la vista mas hermosa…su sonrisa junto a sus mejillas color rosa, la necesitaba .haría cualquier cosa, la necesitaba.
-te amo...-susurro mimi al tiempo que dejaba escapar una pequeña e infantil risa, la misma que escucho en su mundo de fantasía.
-lo prometo….-fue lo único que dijo yamato después del largo silencio.
A su ves se acerco mas a mimi y lentamente junto sus labios con los de ella, sonrió al instante mientras sentía sus mejillas arder, no era ironía era la verdad…
La verdad del aspecto rojo de los labios de mimi y su eterno sabor a fresa.
Tal vez las drogas son como los jóvenes…pero jóvenes que aun no encuentran su territorio prometido el cual llamar hogar.
Así que exploran cosas nuevas para llenar ese espacio, esa desesperación o ese deseo de sentir a una persona o ser amado.
Y ahora mientras probaba el más delicioso manjar de fresas caramelo y chocolate comprendía que no necesitaba explorar nuevos terrenos, no necesitaba volver a la ruleta a jugar su suerte, vida y destino, no necesitaba alucinar más con un sueño.
Todo estaba hay junto a el, tan simple tan lógico tan fácil.
Podía verla sonreír cada día
Y sin necesidad de su ahora olvidada amiga.
Desperté por los rayos del calido sol que entraron por la ventana, me tomo un poco de tiempo adaptarme a luz, hace mucho que no soñaba con un recuerdo, y de todos ese en especial el cual hace mucho había pasado.
Mis oídos se llenaron con una hermosa melodía, un murmuro convertido en arrullo al combinarlo con un suave y dulce compás.
Mire a mi izquierda para encontrarla acostada a mi lado, sus ojos aun no se abrían pero de seguro hace mucho estaba despierta.
Sonreí al sentir la más grande felicidad recorrer y abrasar todo mi cuerpo y corazón, todos los días vivía lo mismo al verla junto a mí pero nunca me cansaba.
Felicidad agradecimiento amor entrega…..
-el hombre con mayor suerte en todo el mundo…-susurre dejando escapar un pensamiento de mi cabeza.
Lentamente abrió sus ojos llenándome del mayor placer
Junte mis labios con los de ella disfrutando la pequeña vibración de los suyos ya que no paro de murmurar ese especial arrullo infantil.
La droga es como un joven
Una joven
De curvas suaves y delicadas y perfectas piernas largas
De cabello caramelo
Ojos chocolate
Y boca de fresa
Ella es mi droga, soy adicto a ella y cada día me entrego mas al degustar su dulce sabor, sentir tentación al tocar su piel y escuchar ese pequeño murmullo el cual me recuerda que siempre seré de ella y ella siempre será mía.
Segundo.
No se porque me gusta tratar temas realistas crudos y con cierto cinismo
Tal vez es porque se me hace mas difícil escribir o imaginar, eso no es algo malo al contrario es algo bueno.
Como es complicado , al terminar mi historia y ver que es de mi agrado me sentiré bien conmigo misma al saber que pude hacer algo difícil.
Por eso siempre dicen que tomes el camino difícil porque al final aprenderás cosas para caminos futuros además te deja un delicioso y apetecible sabor de victoria en la boca.
Espero y les guste alguna sugerencia, consejo o idea que te gustaría ver en un capitulo no duden en hacérmelo saber. Solo menciónenlo en sus reviews¡.
Made Hayai , Ki O Tsukete ¡¡ SHIAWASE ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Ruri-chan