Juntos por siempre
Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto.
Este fic está dedicado a: ¡Sabaku no Kuraii-chan, por su cumpleaños que fue ayer!
¡Disfrútenlo!
Ahí, bajo la luz de la luna, la vi. Con su esbelto cuerpo de piel nívea, su largo cabello negro ondeándose ante la suave brisa, y sus ojos perlas brillando al ver el hermoso reflejo de la luna en el mar.
Con paso lento me acerqué a ella, sintiendo cómo el agua mojaba mis pies. El corazón casi se me sale cuando ella volteó a verme, con aquella sonrisa cautivadora que yo amo tanto.
Una vez que llegué a ella, la rodeé con mis brazos en un fuerte abrazo. Ella me lo devolvió, ocultando su cara en mi pecho. Podía sentir su fría respiración, lo cual ocasionó un leve temblor en mi cuerpo; al parecer ella lo notó, y se alejó un poco de mí. Su mirada buscó la mía, más yo la bajé para que no notara mi profunda tristeza. Con su fría mano tomó mi mentón, levantándolo suavemente; pude observar perfectamente cómo sonreía con melancolía, y no pude evitar mirarla detalladamente cuando se separó completamente de mí.
Su perfecta sonrisa, que aún hoy, demostraba dulzura y felicidad.
Sus finos labios, que alguna vez supieron a gloria.
Sus pequeñas manos, finas y suaves. Alguna vez aquellas manos viajaron por mi cuerpo en un momento de pasión.
Sus bien torneadas piernas, que causaron la envidia de algunas, y las ganas de tocarlas sin pudor alguno como a mí.
Su delicado cuerpo de muñeca, tan frágil a mi vista, que alguna vez tuve miedo de romper. Cubierto por aquel vestido blanco, simple y sencillo, pero que a la vez, la hacían parecer una hermosa princesa.
Su suave piel, aquella que marqué como de mi propiedad con besos y caricias.
Su cabello negro, sedoso y con aquel particular aroma a jazmín, que aun ahora, lo podía oler al ondearse con el viento.
Y aquello que más me gustaba…
…sus ojos…
Aquellos hermosos ojos perlas, que me miraban con dulzura cada mañana. Aquellos que me miraban con deseo y pasión en las noches. Aquellos que en ese momento me miraban con infinita ternura, alegría mezclado con tristeza, melancolía y…
…sin vida…
-Naruto-kun, ya es hora de que me vaya. – Murmuró mientras ponía su mano en mi mejilla.
Sentía tantas ganas de llorar, de maldecir al destino por quitarme lo que yo más quería.
-N-No quiero que… te vayas, Hinata. – Susurré con voz quebrada. Puse mi mano encima de la suya en un vano intento de sentirla.
Hinata sonrió con tristeza, y traspaso su mano de la mía. Sentía un nudo en la garganta, quería gritar, llorar, ¡Olvidarme de todo e ir con ella!
-Sabes que siempre estaré contigo, Naruto-kun. – Susurró en mi oído mientras me abrazaba. Ya sin soportarlo me eché a llorar, cerrando los ojos mientras intentaba aferrarme a Hinata. No soportaba el hecho de que ya casi no la podía sentir.
-Naruto-kun, tienes que dejarme ir. – Entonces, sentí cómo aquel nudo en mi garganta desaparecía y sin contenerme, saqué todo el dolor que sentía.
-¡NO PUEDO! ¡¿ME OYES?! ¡NO PUEDO DEJARTE IR! – Grité con histeria, dolor destilando en cada palabra. – ¡NO QUIERO PASAR EL RESTO DE MI VIDA SIN TI! – Apreté los dientes, dos ríos de gruesas lágrimas surcando mis mejillas –. Sin tu caricias, sin tus abrazos, sin tus sonrojos... – Cerré los ojos con fuerza, apretando los puños. – ¡SIN TUS BESOS! ¡NO LO SOPORTARÍA! – Mi voz se quebró y caí de rodillas en la arena, mis sollozos era más fuertes y mis lágrimas salían con más rapidez de mis ojos.
Hinata solo se quedó parada sin decirme nada, pero pude observar las pequeñas lagrimas que caían de sus ojos perlas mientras se ponía de cuclillas ante mí.
-Y-Yo, lamento tener… que… dé-déjarte, Naruto-kun. – Sollozó entre hipidos.
-Llévame contigo. – Pedí con voz fría, mas ella negó con la cabeza.
-Tienes que cuidar de Mizuki-chan, ¿Recuerdas? – Mi hija, ¡es verdad! No la podía dejar en este momento, cuando ella más me necesitaba. Borré todo rastro de lágrimas cuando paré de llorar y la miré fijamente.
-Prométeme... – Murmuré captando la atención de Hinata –...prométeme que…cuando llegue la hora… TÚ vendrás por mí.
Hinata sonrió y asintió con la cabeza.
-Te lo prometo. – Lentamente se acercó a mí y me besó. Podía sentir sus fríos labios sobre los míos, pero a mí me dio igual, la besé con pasión, dulzura y mucho amor. Lentamente nos separamos, sonrió por última vez.
-Cuida mucho a Mizuki-chan. – Me pidió con dulzura, pero podía ver el esfuerzo que hacía para no volver a llorar. Yo le asentí.
-Toda la vida. Siempre oirá lo mejor de su madre. – Ella me dedico una sonrisa nostálgica y agridulce –. Y tampoco permitiré que los mocosos se le acerquen. – Dije con falsa seriedad, causando una leve risa en ella. Dio media vuelta y se encaminó al mar.
Cuando por fin llegó a la orilla, volteó a verme y me dedicó una sonrisa de lo más hermosa mientras se sonrojaba levemente.
-Te amo, Naruto-kun. – Susurró lo suficientemente audible como para que yo la escuchara. Volvió a darse la vuelta y se adentró en el mar, desapareciendo en el proceso.
Di un suspiro pesado mientras veía a la luna en lo alto del cielo. Un jalón en mi pantalón me sacó de mí trance, miré hacia abajo y observe a una pequeña niña de no más de seis años, de cabello rubio y ojos azules como los míos.
- ¿Papá? ¿Estás bien? – Me preguntó mientras me miraba con un tierno sonrojo en sus mejillas.
- Si cariño, estoy bien. – Tomé en brazos a mi pequeña y lentamente me fui yendo de la playa. Mas antes de irme me di la vuelta y miré por donde había desaparecido mi pelinegra.
- Yo también te amo, Hinata-chan. – Susurré al viento. La suave brisa revolvió mi cabello y un olor a jazmín llegó hasta mí. Sonreí y con mi pequeña en brazos, me fui de aquel lugar, con la seguridad de que el resplandor de la luna nos guiaría de hoy en adelante.
"Sabía que era una sucia jugarreta de la vida,
pero también sabía que ese no era un "Adiós" sino un "hasta luego",
porque no importaba si el destino se empeñaba en separarnos, nosotros estaríamos juntos por siempre"
Nota de la autora:
¡TARÁ!
¡Espero les hayas gustado!
Pucca: ¿No tienes algo qué decir?
¡Sip!
¡FELIZ CUMPLEAÑOS KURAII-CHAN!
Espero que te la hayas pasado muy bien en tu cumple y que este fic te hayas gustado.
¡Y a ustedes también queridos lectores!
Merece: ¿review, tomatazos?
Aclaraciones: Mizuki significa "bonita luna"
¡Pucca y yo les deseamos una feliz pascua pasada!
¡Nos leemos!
Bye XD
¿Algún review?
