No soy rubia, gracias a Merlín - no combinaría con mi tono de piel -, y no me conocen como Jotaká, si no como la niña rara que esta obsesionada con Harry Potter, así que supongo que no soy aquella escritora británica que me encanta.
Impacto.
Por RoseWeasley13
Rose estaba sentada en la biblioteca, leyendo algún libro de quien sabe que tema de quien sabe que maestro, y aunque estuvieran en el lugar más callado de Hogwarts, eso no impedía que ciertas personas hablaran alto, o literalmente, gritaran a todo pulmón.
Scorpius Malfoy entro corriendo en la biblioteca, ganándose una mirada furiosa de la señora que no sabía su nombre, pero que aun así todos odiaban por que no los dejaba hablar en la biblioteca, aunque ese era un pensamiento muy ilógico, todos sabían que en las bibliotecas no se hablar porque… Bueno ese no es el punto, supongo que saben por qué no se habla en las bibliotecas.
El rubio entro como si lo persiguiera Lord Voldemort al lugar, deteniéndose solo a unos centímetros de chocar con la silla en la que estaba sentada la pelirroja Weasley.
—Rose - jadeo el rubio en voz muy alta, ganándose otra mirada de halcón de la viejita bibliotecaria - Necesito hacerte una pregunta de los TIMOs
Rose frunció el ceño, estaban a unos minutos de presentar los exámenes y el vago rubio que dejaba todo al último venía a hacerle una pregunta referente a los malditos exámenes.
Debía suponerlo.
— ¿De cuál? - susurro Rose, cerrando el libro de golpe y gruñendo la pregunta.
Scorpius sonrió como si fuera su no cumpleaños y se sentó a un lado de la pelirroja.
— ¿Es cierto que Merlín fue alumno de la casa de Slytherin? - inquirió inclinándose hacia Rose, con los ojos brillantes y una sonrisa maniaca.
—Por supuesto que no - gruño Rose, un mago tan honorable como el gran y estimado Merlín no podía ser Slytherin, no podía considerarlo así, no después de vivir en carne propia los cambios bipolares que tienen muchos de los Slytherins.
Empezando por el rubio a su lado y su primo Albus oveja negra Potter.
Scorpius se cruzó de brazos y bufo como niño que quiere su paleta - Claro que lo fue, McGonagall me lo confirmo.
Rose arqueo una ceja, la profesora Minerva jamás mentiría, pero Scorpius era tan irritante cuando quería tener la razón que terminarías accediendo a cualquier cosa que pidiera, o pensando seriamente en tirarte de un puente para quitártelo de encima.
—Estoy seguro de que Merlín fue de Slytherin, las demás casas ya tienen muchos magos famosos en sus listas de estudiantes. ¿Por qué no pueden dejar de ser codiciosos y dejar que Merlín pertenezca a Slytherin?
Rose abrió los ojos anonada, preguntándose internamente si el rubio tenía razón. Sacudió la cabeza y se levantó de la silla, corrió hacia las estanterías al sentir una urgencia de saber si era verdad o puras patrañas del maldito Slytherin.
No podía ser cierto.
Tomo uno de los tantos libros referentes a la vida de Merlín y hojeo frenéticamente y con cierto tono de esquizofrenia el libro, hasta llegar a la adolescencia de Merlín.
Era un Slytherin. Una persona con los colores, verde y plata.
No podía creerlo, no podía ser así.
Merlín había sido Slytherin. Y ella, Rose Weasley había estado equivocada por una vez, eso era digno de documentar en los libros, al igual que Merlín había sido una serpiente.
—Maldito Malfoy - susurro.
Un intento de comedia, no soy buena en esto XD. Al igual que Rose, yo también me sorprendí al saber que Merlín había pertenecido a la casa de Salazar, pero lo supere al instante al saber que yo también soy una Slytherin hecha y derecha, así que me sentí muy orgullosa, aunque veía a Merlín en Hufflepuff como un buen tejón.
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