Bueno, una nueva hsitoria continua. ¿Por qué? Porque una ya está acabada y no em he acordado de traerla. ¿Pasa algo? xD Por eso he empezado otra y als demás estan por acabar, menos la de Un nuevo comienzo...
Aclaraciones: Es un Rei/Usagi exclusivamente y contiene lemon, yo aviso xD.
::Preludio::
Una chica rubia, vestida con el uniforme típico de marinera de las escuelas de Japón iba de camino al templo Hikawa a reunirse con sus amigas. Estaba nerviosa y no sabía el por qué. Desde hace días se sentía extraña. Cada vez que veía a su querido Mamoru sentía un dolor en el pecho. ¿Por qué? Se preguntaba ella mientras caminaba. ¿Por qué desde aquél día no siento lo mismo por Mamo-chan?
Sin quererlo y sin darse cuenta, había llegado a su destino. Respiró hondo y subió las escaleras y allí la vio. Vio a Rei cómo regañaba a Yuuichirou, el chico que ayudaba a ella y su abuelo en el templo. Todo el mundo sabía que el hombre estaba enamorado de Rei pero ella no quería reconocerlo.
Usagi se hizo una imagen mental de la boda de Rei y Yuuichirou y una sensación extraña se apoderó de ella. Tenía ganas de abrazarla y alejarla de él. ¿Que me está pasando? Yo amo a Mi novio... ¿Por qué ahora me ocurre esto? Y muchas preguntas como esta le llegaban a la cabeza.
Se sentó en un escalón más abajo para que no la viera. ¿Qué estaba haciendo? No contó en ese momento que la morena era muy perceptiva y la vio, más bien sintió el aura de la princesa. Se acercó lentamente a la rubia y le colocó la mano en el hombro, asustándola.
-¿Por qué no entras? Las chicas aún no llegan, lo extraño es que hayas llegado puntual. ¿Te encuentras bien?- Preguntó la morena en broma.
-Perfectamente ca.. digo Rei. -Estaba a punto de decir una palabra que hubiera sonado rara pero se corrigió inmediatamente. -Le iba a decir "cariño". ¿En qué estoy pensando?- Pregunto para sus adentros desconcertada.
-Dí lo que quieras, pero últimamente estás muy extraña...-
¿Acaso ella era capaz de notar lo que los demás no? Sí, tratándose de ella, seguramente. Lo que la rubia no entendía es por qué eso le preocupaba. Entendía que era su amiga y se preocupaba por ella pero esa mirada... Esa mirada era más extraña aún y la rubia se preguntó por qué. Se levantó y Rei la estaba esperando para entrar, cómo si se fuera a perder. Le restó importancia al gesto y se encaminó hacia ella y ambas caminaron a la misma velocidad.
¿Por qué sentía ella eso hacia su amiga? Estar cerca de ella la hacía sentir... Bien, algo que Mamoru no había logrado nunca en lo que llevaban de relación pero en cambio ella, lo había hecho.
-¿Por qué me siento así? Es muy reconfortante.- Pensó la rubia mientras entraba por la puerta.
-¿Qué me pasa? Esto es muy raro. Más tarde lo consultaré con el fuego sagrado.- Memorizó en su mente al tiempo que ambas se sentaban.
Esperaron un rato a que las demás vinieran cuando el teléfono sonó. La morena se levantó y lo atendió.
-¿Rei? Soy yo, ami. Me ha surgido un imprevisto y no puedo venir, lo siento de veras.- La morena negó.
-Está bien, Ami, otro día será.- Se giró a la rubia. -Ami no vendrá, le ha salido algo urgente.-
-Oh, ya veo..- Dijo simplemente ella.
A los minutos, otra llamada telefónica, esta vez era Minako diciendo que no podía venir porque tenía mucho trabajo y una a una, fueron llamando para cancelar la reunión. Ambas chicas suspiraron, otra reunión en la que no estaba todo el mundo y Mamoru tampoco, pero la rubia ya sabía lo que el chico estaba haciendo así que por él no se preocupó. La morena se dio cuenta de que su princesa estaba ausente y la intentó distraer.
-¿Ya tí qué o quién te tiene así, atontada?-
-Hmm, te lo voy a contar ya que eres la única que está aquí.- Ella se olía algo raro.
Usagi se puso cómoda en su lugar y empezó a contarle lo que había escuchado el otro día por la noche. Escuchó a Mamoru decirle a alguien que estaba esperando el momento oportuno para pedir que se casara con él. Sentía felicidad pero a la misma vez, tristeza. En estos momentos, debería estar saltando de alegría, pero no lo estaba y creía que, por fin, comprendía el motivo.
-¿De verdad? Me alegro por ti, amiga.- Pero no lo dijo muy contenta.
-¿Rei, qué te pasa? Estás muy rara, como si estuvieras... Decepcionada?-
-¿Qué? !No, claro que no! Sólo que... No me lo esperaba...- La rubia nunca la había visto tan nerviosa.
-Vamos Rei, puedes confiar en mí.-
Dicho esto, la morena se levantó pero se tropezó y cayó encima de ella con el rostro muy pegado y ambas se sonrojaron. Usagi tenía los ojos cerrados para disfrutar de las sensaciones que le producían al estar así con la morena y la chica no podía evitarlo, algo más fuerte que ella la impulsó a hacer lo que iba a hacer. Se acercó a sus labios y la besó.
Usagi se sentía extraña, una sensación agradable recorría todo su cuerpo. Reconoció que esos labios no eran de su novio. Abrió los ojos y al instante notó la mirada llena de... ¿Amor? Que le lanzaba la morena.
-Usagi, yo...-
-Shh... No digas nada.- Y acto seguido la besó.
Ese beso era el mejor que había recibido en mucho tiempo, ni su novio la besaba así. Ahora entendía lo que sentía, estaba enamorada de Rei y parece que el sentimiento es correspondido pero... ¿Seré capaz de aceptar la propuesta de Mamoru? Ahora seguro que no pero de eso se olvidó rápido y siguieron besándose durante un buen rato.
Buenooo, me he lucido supongo. ¿No? XD
Hacía tiempo que esta idea me rondaba por la cabeza, y ésto sólo es el preludio... xD
¡Nos vemos!
