Muy buenas a todos y feliz dia de los enamorados para todos :) Se que no todos lo pasamos bien este dia y para muchos es solo un dia normal, pero para eso estamos lo que publican cosas en esta pagina, para hacer de este dia algo mas ameno (creo que lo dije muy mal... pero bueh...) Como dije en el último capitulo que subí de "Si quieres ve con él" publicare un TwoShot para el dia de los enamorados, y este es el primero, como sera una ocacion distinta es un universo distinto por lo que los acontecimientos ocurridos en este TwoShot no tienen relevancia en las otras historias que he publicado o publicare mas adelante (si es que llego a hacerlo).
Bueno... Sin mas preámbulos demos inicio a la primera historia, espero les guste y les haga pensar una cosa... Independiente la situación, nunca esta de mas una confesión. Corre video... (Las fechas utilizadas son del presente 2017)
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Desesperado - Zootopia
- Los cambios pueden ser tanto para bien como para mal. Cuando son para mal, el sufrimiento viene después de tomada la decisión, y cuando son para bien, se sufre al momento de tomarla.
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Martes 14 de febrero…
4:40 pm en la ciudad de Zootopia. Es un día hermoso y soleado, los niños que ya salieron de sus escuelas o jardines infantiles juegan en parques o sus mismos hogares siendo vigilados por sus padres los cuales acompañan el momento conversando sobre distintos temas de adultos. Una característica primordial de Febrero es ser un mes de cambios, la temperatura invernal pasa a ser un poco más cálida por la próxima llegada de la primavera, siendo estos días perfectos tanto para pequeños como adultos, sobre todo el presente día, 14 de Febrero. Las parejas de toda la ciudad, tanto comunes como inter especie pasan un momento grato disfrutando de su más perfecta compañía, los restaurants prácticamente llenos y las reservaciones en locales de entretenimiento son algo típico en esta fecha, ambos recibiendo animales con intenciones románticas o melosas para conquistar a su ser querido. Por otro lado los que no tienen tanta suerte y deben sacrificar sus días trabajando o cuidando críos… Pero bueno… Por algo existe el movimiento nocturno. Si saben a lo que me refiero… Por ende, todos salen ganando.
Así es, perfecto es la única palabra que podría caracterizar este día...
-¡SABIAS EL PLAN AL PIE DE LA LETRA Y AUN ASI HICISTE UNA LOCURA PARA QUE NOS DESCUBRIERAN!-
Bueno... No quizás para todo el mundo... En el ZPD encontramos a una coneja con el rostro completamente rojo, muy notorio aun tomando en cuenta su grisáceo pelaje. Sus ojos púrpura mirando con furia y sed de sangre a su compañero el cual tratando de explicar su punto de vista no puede evitar responder ante los gritos de su compañera igual de molesto.
-¿Y que querías que hiciera? ¿Dejarte morir? Entiéndelo, Judy, estabas en el punto de mira de ese lobo. No tengo idea porque trato de dispararte, pero pudiste haber muerto. Un gracias no estaría de más en todo esto- argumenta un zorro de pelaje rojizo respondiendo al nombre de Nicholas Wilde. Nick para los conocidos. El último tiempo ha tenido problemas con sus camaradas del ZPD, mas especifico con su compañera de patrulla Judy Hopps, la cual reprende al zorro por continuos actos de desobediencia a sus superiores.
-Yo no estaba en la mira de nadie, tú quisiste hacer las cosas a tu manera como lo has hecho ultimamente. Dime, Nick. ¿Cómo explicas esto?- Judy le lanzo a Nick una hoja arrugada chocando en su pecho para luego caer al suelo por acción de la gravedad. Su contenido no es algo de lo cual estar orgulloso, pero a Nick poco le importa, tiene argumentos en contra de sus acusaciones. Ahora… ¿Se atreverá a decirlos? Revisemos primero el contenido de este documento:
"Registro de ultimas misiones realizadas por Nicholas P. Wilde"
1.- Tortura de Remmus S. Rinohorn, 43 años, rinoceronte, acusado por narcotráfico y asesinato del león Christian Fangword, de 35 años. Al momento de su captura el imputado se presentó en el cuartel del ZPD con heridas de bala en sus extremidades y varios golpes alrededor de su rostro. Cuando fue entrevistado para las declaraciones explicitó el indebido comportamiento del oficial Nicholas Wilde. Según lo dicho por el imputado, este le disparo y amenazo con fierro en pata, golpeándolo en más de una ocasión. Se realizo un examen psicológico al oficial Wilde para ver su comportamiento pero los resultados de este no afirman la existencia de trastorno alguno.
-En primer lugar, estabas herida por culpa de ese rinoceronte, si no lo hubiera inmovilizado ambos estaríamos muertos. Yo en ningún momento lo amenace y tú lo viste, tú eres mi testigo. Pero claro, el sermón que me mandaste en el juicio tras decir que las amenazas no tuvieron lugar me lo tuve que tragar de todos modos. Si no es Bogo eres tú, y si no eres tú son los doctores- dijo lo ultimo como susurro sintiendo verdadera molestia hacia Judy.
2.- Arresto indebido de John T. Nutriastor, 21 años, nutria, acusado del secuestro de la oficial Judy Hopps y comercio ilegal de menores en el mercado negro. Nicholas Wilde apareció en la comisaria sin su uniforme de servicio y con el imputado siendo arrastrado por el suelo enrollado, literalmente, en una gruesa cuerda. Se le hizo una entrevista para revelar las razones de su comportamiento, explicitando como razón fundamental el no poseer las herramientas adecuadas (en este caso serian las esposas). Se habló con algunos oficiales y la mayoría no juzga su actuar dejando en claro que un policía debe cumplir con su labor sin importar las condiciones en las cuales se encuentre (recordemos que Nicholas Wilde se encontraba fuera de servicio por días legales de descanso y aun así apareció en la escena).
-¿Te recuerdo que estabas secuestrada? Él te secuestro. Cuando me contaron lo sucedido no pude evitar salir a buscarte aun en mi día libre, en el cual me propuse descansar tras quedarme hasta las cinco de la mañana llenando informes porque cierta coneja no es capaz de mantenerse despierta mientras yo debo estar aquí a las siete de la mañana todos los días porque esa misma coneja no tolera empezar tarde una jornada. No tenia esposas así que use lo primero que encontré a mi alcance-.
3.- Asesinato de Lucius J. Wólfram, 33 años, lobo, líder del grupo "Los mugrosos" con más de diez denuncias por tráfico de drogas, asesinato de al menos 150 animales en los últimos veinte años y evasión de una demanda por pensión alimenticia de su antigua pareja Leyla Sáez. Durante una misión encubierta para detener al sospechoso ya mencionado desobedeció órdenes de su compañera y superior Judy Hopps, ocasionando un tiroteo en la calle Tristain, Tundratown. Como aspecto positivo, no hubo heridos graves y los integrantes del mismo grupo presentes en la escena fueron arrestados y puestos en custodia inmediata.
-Se que no debí hacerlo, pero ya explique mi punto sobre este caso. Sí, estábamos encubiertos pero no miento cuando digo que estuvo a punto de dispararte. ¿Qué razones tengo para mentirte? Lo vi, Judy, con mis propios ojos sacar un arma de su bolsillo y apuntarte-.
-Pues yo no vi nada. Solo vi a un torpe zorro que no supo seguir instrucciones DE SUS SUPERIORES y jugo a creerse el héroe de la película. ¿Tú crees que fue grato para mí? Nos metiste a ambos en problemas, y sabes perfectamente que eso no lo soporto- las palabras de Nick resbalaban en Judy, nada de lo que diga la hará cambiar de opinión ya que para ella son simples excusas para salvarse de un castigo todavía mayor que su enojo. Aunque para él, Judy Hopps molesta era como si sucedieran tres terremotos, una bala atravesara su pecho, y Bogo le gritara y mandara a parquímetros. TODO AL MISMO TIEMPO. ¿Por qué le daba tanta importancia? Si tan solo Judy supiera… Por otro lado, hablando de Bogo…
-¡WILDE, HOPPS!- la puerta de la sala de archivos que es donde Judy y Nick sostienen su discusión fue abierta en un abrir y cerrar de ojos, mostrando ante la mirada de ambos la omnipotente figura de Bogo. -¡A MI OFICINA, AHORA!- grito el jefe con la puerta aun abierta. Cuando voltearon a ver se encontraron con su figura y muchas miradas curiosas, todo el ZPD era testigo del numerito de ambos, incluso Garranza (aunque viniendo de él no es para extrañarse). Rodaron los ojos sin poder quejarse y salieron del cuarto con el mismo semblante molesto.
Ambos caminaron en silencio y sin dirigirse la mirada, haciendo el camino, aunque fuera corto, eterno. Judy aun estaba furiosa y deseosa por gritarle muchas cosas más a Nick, mientras que él ya estaba empezando a arrepentirse de haber dicho todo lo anterior. Nada serviría ni hoy ni mañana, y eso lo lastima más de lo que pudiera controlar. Aborrece estar peleado con Judy, pero odia aun más el que ella no reconozca las cosas que hizo por ella. Sumado a eso, un temor se acumula como nudo en la garganta, si bien Judy es bastante paciente con él, cuando pierde los estribos suele cometer locuras de las cuales se termina arrepintiendo al día siguiente, pero que causan un daño casi irreversible, y si piensa en eso es porque ya ha ocurrido otras veces distanciando en leve medida su amistad. Pocos metros antes de llegar a la oficina soltó un enorme suspiro y bajo la cabeza sintiéndose decepcionado de sí mismo, se siente horrible, la animal que más apreciaba en este mundo no entendía sus puntos aun cuando trato de protegerla. Judy siempre le deja en claro que puede cuidarse sola, pero es algo que no puede controlar tan fácilmente, un sentimiento de protección que con el tiempo pasó a ser más una necesidad. Pero… ¿Sirve de algo ahora? Muchas palabras ya estaban dichas y la llama del enojo estaba prendida con fervor, quizás si hubiera callado en vez de corresponder las ganas de discusión de Judy todo habría resultado mejor. ¿O quizás no? Nadie lo sabe con seguridad…
Cuando llegaron a la oficina, Bogo no tuvo ni que darles la orden para tomar asiento, los tres lo hicieron al mismo tiempo y el silencio volvió a dominar hasta que el jefe les dirigió la palabra.
-Me imagino saben por qué están aquí- hablo Bogo. Ninguno hizo nada, una negación, afirmación, ni palabra alguna. Solo las mismas expresiones mencionadas anteriormente, enojo en el rostro de Judy y de decepción en el de Nick. -Escuchen, el último tiempo entre ustedes hemos visto un poco de... Tensión- las palabras de Bogo trataban de ser serenas, cosa rara en el búfalo, pero tiene muy en mente el no gritar para no encender más el ambiente de lo que ya está. -En una ocasión normal les preguntaría las razones de este, pero como su numerito se escuchaba, literalmente, hasta fuera del ZPD no lo haré-.
Ambos se sorprendieron, Judy con algo de molestia y Nick con vergüenza. Usualmente es al revés, pero cuando Judy está enojada no hay mucho que se pueda hacer. Si alguien se entromete en asuntos que son propios de ella no vacilará en molestarse contra dicho o dicha animal (típico de quienes se dejan llevar mucho por sus emociones). En cambio Nick, el arrepentimiento está jugando todas sus cartas, quiere terminar bien con la coneja pero la conoce tan a la perfección que ella no dejara que eso pase. Judy Hopps puede ser muy egoísta a veces tanto que solo le importa a ella quedar bien parada en vez del resto, pensamiento muy poco digno de un ejemplo a seguir del ZPD.
-En vez de eso- volvió a hablar Bogo, -les diré algo que decidí una vez escuche sus gritos. Con el fin de disminuir los conflictos en este establecimiento, los cambiaré de compañero. Esto puede ser temporal o permanentemente, pero para eso es necesario que ambos estén de acuerdo. Ahora, si ambos no lo están, pero uno firma el papel, quien no lo haga tendrá que cubrir los puestos asignados para animales sin pareja, por no decir… Parquímetros y archivos-. Nick abrió los ojos a más no poder. Por muchos momentos malos que pase con Judy nunca quiso un cambio de compañero. Ambos trabajan perfecto y aunque las cosas no se realicen como lo planeado con anterioridad, suelen salir bien. Por otro lado, odia ambas labores en solitario, y no permitirá que ninguno de los dos termine en esas condiciones, así que en un intento desesperado, el zorro trató de argumentar.
-Pero señor- aun así, fue interrumpido.
-Ya era hora...- habló Judy. El silencio volvió a la oficina y Nick miro a Judy completamente atónito. ¿Fue acaso su compañera la que dijo tal atrocidad? Han pasado por momentos tanto buenos como malos pero todos los malos se han superado. ¿Es acaso posible que las cosas terminen en menos de una semana? ¿Es posible que una seguidilla de sucesos lleve a romper el lazo que ambos se han esforzado en fortalecer? En los últimos cinco días Nick cometió esas atrocidades, y si bien puede ser un completo imbécil en diversas ocasiones nunca atentara en contra de ella, no como Judy acaba de hacerlo, fue cuando entendió que sin darse cuenta llevó a su compañera a un vacío de desconfianza y dolor creado por ella misma, vacío que la obligó a decir esas hirientes palabras. Cambió su expresión por una ofendida, pero Judy no hizo nada, ni siquiera lo miró, acción que cambió su herida externa por una interna al mismo tiempo que el ardor de su pecho se volvía más y más intenso.
Bogo deslizo dos papeles en su escritorio y Judy firmo uno de ellos sin vacilar antes de salir de la oficina.
-¡Judy, espera!- ella no se detuvo aun cuando el zorro sin firmar el papel corrió hacia ella, en un intento desesperado por hacerla cambiar de opinión pensó sus palabras, no siendo el tiempo suficiente para hacerlo pero aun así tiene una idea, algo loca pero que puede resultar. Nicholas Wilde ha tentado al destino gran cantidad de veces, tantas que ni un animal con polidactilia podría contar. Una más… Una menos… pensó antes de iniciar su charla final. Sabe que todo puede terminar horrible, pero eso no detiene jamás a un Wilde. -No hablaras enserio. ¿O sí?- dijo cuando la alcanzo por fin.
-¿Lo hago? ¡POR SUPUESTO QUE LO HAGO NICHOLAS PIBERIUS WILDE!- un avance, ella dio media vuelta encarando a Nick. -Te has comportado como un idiota últimamente y has arruinado TODAS las misiones que nos han encomendado. Todo por querer hacer las cosas a tu modo, te has vuelto tan poco confiable que me asusta el ir contigo a otra misión-. Poco confiable... La coneja toco un punto sensible de Nick gracias a su ira. Él dejo pasar unos cuantos segundos para calmarse porque no quería gritarle, por mucho que ella lo hubiera hecho ya. Pensando un poco en las misiones, en sí no es que hubieran salido mal, los maleantes fueron arrestados (o asesinados) pero no es ese argumento el que Nick quisiera sacar, solo la molestaría mas así que siguió con su idea.
-Escúchame, tú no entiendes nada- mal inicio… Las frases clichés no sirven mucho con Judy, menos cuando la hacen sentir aun más ofendida.
-¿Y qué debo entender entonces?- volvió a preguntar antes que el zorro pudiera seguir hablando. -Solo entiendo que no puedes aceptar el recibir instrucciones de alguien más, y quieres hacer todo a tu manera. Somos compañeros, Wilde, un equipo, pero aun así soy tu superior y tienes que hacer lo que YO diga. ¿Entiendes?- su apellido. Otro punto sensible, Judy nunca lo había tratado por su apellido, y si lo acaba de hacer solo puede significar una cosa. La está perdiendo...
-No es lo que tú crees, Judy- tal parece que su esfuerzo no es mucho si continúa diciendo esa clase de clichés…
-Claro que sí, entiendo a la perfección. ¿Quieres estar a cargo? Perfecto, en unos días mas tendrás otro compañero al cual podrás hacerle la vida imposible como a mí me la hiciste esta semana- Nick ya no sabía cómo defenderse. Para todo lo que él decía ella no lo dejaba terminar y contrarrestaba con puntos que para ella tenían el mayor sentido del mundo, pero para él ni uno solo. Su plan no funcionará si sigue manteniendo ese perfil pasivo, y tiene que pensar en otro RÁPIDO. Ahí es cuando se dio cuenta de una cosa... Si el mejor ataque es la defensa... Que tu mejor defensa sea el ataque.
-Entonces... ¿Estás molesta porque crees que quiero estar a cargo?- Judy asintió antes de dar media vuelta y caminar hacia la salida. Nick en ese momento hizo algo que la irritó todavía más... Comenzó a reírse a carcajadas. ¿Acaso le parecía gracioso? ¿Estúpido? ¿Se está burlando de ella? No quiere saberlo, el solo pensar en su rostro con una sonrisa en este empeora aún más las cosas. Sigue caminando, Judy… Solo sigue caminando… pensó tras sentir sus ojos humedecerse. No se va a debilitar ahora, mucho menos cuando ya tomó una decisión, pero no contó con que las cosas no terminaran solo en carcajadas. –Si cuando te conocí pensé que eras una tonta déjame decirte que me equivoque, eres una estúpida. No puedes estar más errada, Judy Hopps- y ahí comenzó. Si Judy ya de por si odia la situación en general que le digan que está equivocada solo la enfurece más, siendo los insultos la parte suave de las palabras que Nick declaró hacia ella. Se detuvo a unos cuantos metros y sin mirar a Nick volvió a tomar parte en la discusión.
-Por supuesto que no lo estoy, Wilde. ¿Cómo es posible que pueda estar equivocada? Tus poco confiables acciones no dejan en evidencia otra razón-.
-Pues si hay otra razón, coneja tonta- una vez más con los insultos. Judy ya no daba más, no quería más, dio un largo suspiro antes de volver a hablar, esta vez con serenidad, señal que le dio a entender a Nick que ahora era momento del TODO O NADA.
-Esta es tu última oportunidad, Nicholas. Si no usas bien tus palabras me iré de aquí y no te hablare jamás. Si puedes decirme la razón de porque estoy equivocada te juro que-
-¡TE AMO MALDITA SEA!-
Silencio...
Era primera vez que Nick interrumpía a Judy aún cuando ella lo hizo muchas veces. El dolor en el pecho de la hembra fue menguando siendo este reemplazado por un gozo inmenso, al mismo tiempo que lagrimas salvajes comenzaron a salir de sus ojos. Quería guardarlas para cuando no tuviera nadie alrededor, para cuando Nick estuviera lejos de ella y pudiera desahogarse con ella misma y sus cobijas. Se arrepentiría de todo al día siguiente, pero el show debe continuar y si el final debe ser triste ella seguiría argumentando para que así fuese. De ser necesario se guardaría todo el resto de su vida. ¿Pero qué hacer con esta última declaración? La ira nunca fue un sentimiento del cual Judy se sintiera muy orgullosa, aun cuando abusaba de ella en situaciones de completo descontrol como lo era esta. Sus orejas cayeron y sus hombros se soltaron, la contracción muscular fue menos intensa al mismo tiempo que su uniforme se sintió como si estuviera hecho de plomo, solo el tono muscular para mantenerse de pie fue el utilizado por su pequeño cuerpo y así no derrumbarse frente a Nick.
-Te amo... ¿Esa bien?- volvió a hablar Nick tras largos minutos de silencio absoluto. -Todo lo que hice no fue para tomar el control de la situación, sino para protegerte. Pensé que lo verías de esa forma pero tomando en cuenta los gritos, la rabia, la firma en el papel que nos entrego el jefe entendí por fin que no lo hiciste. Eso me dio a entender que tus deseos de total independencia son más fuertes que los gestos hechos por alguien que te ama con todo su ser. Ese rinoceronte, apenas te hirió algo se apodero de mí, una ira tan grande que se me hizo necesario ver su sufrimiento para quedar feliz antes de llevarte al hospital. No me importaría torturar del más grande hasta al más pequeño animal si este se atreve a atentar contra tu vida. La nutria, te secuestró. Cuando escuche el comunicador no pude evitar salir corriendo de mi departamento, cansado, sin arma ni esposas, solo para salvarte. Se hizo necesario para mí el darle a probar de su propia medicina, que aprendiera por las malas lo mal que se siente el estar amordazado. ¿Qué mejor forma de hacerlo que con una cuerda? Y sobre el lobo... Bueno, ya expliqué ese punto, supongo que está de más decir que MATARIA POR TI, Judy Hopps. Pero… ¿Qué más da? Es una completa mentira desde tu punto de vista. Todo lo que hice, no fue por control, sino por descontrol. TÚ me descontrolas, por ti iría donde fuese y haría lo que fuese solo para verte sana y salva. Solo por ver esa sonrisa que me vuelve loco. Solo por ver esos ojos hermosos irradiando alegría. Cualquiera que te dañara se merece un destino peor que la muerte. ¿Me entiendes ahora, Judy? Por eso hice lo que hice… Por ti…-. El silencio volvió a reinar en la comisaría, como si las palabras que Nick tenía para Judy ya hubieran terminado, pero la realidad es que estaban lejos de eso. Ella no lo vio pero Nick dio media vuelta en dirección a la oficina de Bogo dándole la espalda a la coneja.
-Pero ya la decisión está tomada...- dijo tras un largo silencio y suavizando su voz. -No sé si firmaste para que el cambio fuera temporal o permanente. Pero yo lo hare temporal por si quieres volver a saber de tu torpe zorro en algún momento-.
¿Qué demonios hice? pensó Judy recordando el papel.
Nick comenzó a caminar y las sensibles orejas de Judy escucharon cada uno de los pasos sintiéndose cada vez con menor intensidad, no podía dejar que se fuera. Estaba molesta, pero ya no... Estaba furiosa, pero ya no... ¿Cómo se siente ahora? Alegre a más no poder y arrepentida de haber firmado. PERMANENTE... Fue donde coloco su firma, todo por la ira, todo por culpa de ese horrible pecado capital que se apodera de tu cuerpo y te hace tomar las peores decisiones de tu vida. No podía dejar que Nick se fuera, no podía dejar que firmara y cambiara de compañero cada tanto tiempo hasta pasar toda su vida en el ZPD sin volver a tomar casos o patrullar con ella. Quería estar junto a él, AHORA más que nunca. Pero que ese "ahora" no fuera solo del momento, sino de un futuro "siempre".
Unos brazos detuvieron a Nick antes de tocar el pomo de la puerta de la oficina del jefe Bogo, al mismo tiempo que la espalda de su uniforme se empapaba de lagrimas soltadas por una coneja que con fuertes sollozos trataba de gritar "NO", estos ruegos sin embargo fueron insonoros, su garganta se lo impide soltando en vez de eso sonidos muy poco entendibles. Nick quedo helado, jamás pensó que sus palabras lograrían sacar de ese estado de ira absoluta a Judy, su idea era soltarlo todo tomando en cuenta que ya había dicho tantas palabras que no sirvieron para nada, unas cuantas mas no deberían hacer cambio alguno, y poniendo todas la cartas sobre la mesa se jugó la vida y la atención de Judy en esa confesión. Fue una idea arriesgada, pero la vida esta para vivirla y si no tomas riesgos en ella no puedes considerarte un animal vivo.
-No...- salió por fin de la boca de Judy. -No te vayas... No me dejes...- rogó con pesar arrepintiéndose de cada palabra y frase dicha con anterioridad. Las palabras pueden ser armas de doble filo en gran cantidad de ocasiones, y por desgracia sus palabras ya hicieron bastante en ambos, más en Nick que en ella misma.
-Yo jamás te dejé Judy, fuiste tú quien me dejó- soltó Nick con un aire pesado. Judy abrió los ojos, su color rojizo y la irritación causada por las lágrimas fueron ocultados por la delgada tela del uniforme azul de su compañero, y en un pequeño segundo agradeció que Nick no la estuviera mirando, pero su pensamiento fue dejado de lado cuando entendió por fin que ya todo estaba hecho. Las palabras, los sentimientos, la firma... Ya todo el daño estaba hecho, y como los sucesos solo se preocupan de una cosa, el ocurrir, estos no pueden revertirse por más que uno quisiera regresar en el tiempo.
Gracias al cielo, el optimismo que Judy le contagia a Nick diariamente jugó a favor de ambos y un último pensamiento atravesó la mente del zorro. Con esto confirmaría el pesar que sintió desde su confesión hasta casi tocar la puerta de la oficina del jefazo. El daño ya está hecho, pero… Este puede repararse si las acciones correctas se confabulan para ocurrir… Solo te pido, Judy Hopps, que reemplaces mi dolor por algo bueno en vez de empeorarlo… pensó Nick. Sabe que el reemplazo a este dolor solo pueden ser dos cosas: el rechazo, o el ser correspondido, y como ya no hay vuelta atrás ni tampoco la opción de dejar todo para más tarde, decidió dar una última jugada antes de pensar en que hará una vez tenga su respuesta.
-Esta es tu última oportunidad, Judy. Si no usas bien tus palabras me iré de aquí y no te hablare jamás. Si puedes decirme la razón de porque estoy equivocado-
-¡PORQUE YO TAMBIEN TE AMO!- grito Judy interrumpiéndolo del mismo modo que él lo hizo hace unos minutos. Ahora era turno de Nick el reemplazar su agudo dolor por un enorme gozo en su frio corazón. Judy no puede verlo en estos momentos, pero una sonrisa se hizo presente en el rostro de su compañero, la sonrisa más sincera que jamás pudo haber mostrado, y que aun así, se la guarda para él mismo. -¿Por qué me haces esto, torpe zorro? Me tienes loca hace meses y tuviste que esperar al peor momento para confesarte. ¿No podía ser cuando estuviéramos viendo películas o en algún pic nic? La semana pasada en el restaurante hubiera sido perfecto. ¿Por qué ahora?- Nick rodó los ojos mientras esa alegría sin igual tomó control de su cuerpo, dándole la fuerza para voltear y ver a Judy directamente en sus (para Nick) hermosos ojos púrpura. Ella tuvo que soltar el abrazo para que Nick se volteara con comodidad, y tomando una pequeña distancia dio las razones de su particular confesión.
-Es porque esos fueron buenos momentos- poso su pata en una de sus mejillas secando sus lagrimas con su dedo. -Los momentos felices no tienen por qué volverse más felices. Algunos lo hacen pero no es el punto- dijo a modo de broma sacándole por fin una leve risilla a Judy. -Son los momentos tristes los que deben tornarse felices... Porque eso los hace inolvidables. Además, los momentos malos existen por una razón específica-.
-¿Y cuál sería esa razón?- Nick rio nuevamente y posó ambas patas delanteras en las mejillas de Judy.
-Para ser arreglados, torpe coneja- su pata derecha ahora fue a parar a la cabeza de Judy para despeinar un poco el pelaje entre sus orejas, soltando una pequeña risa cuando ella lo miró feo una vez más. -Ahora que he intentado hablarte y hacerte entender, todo lo que tienes que hacer es cerrar los ojos, extender tus manos y tocarme. Mantenme cerca y nunca me dejes ir-. El zorro… SU zorro se deshizo del espacio entre ellos y posó sus labios en los de ella.
Judy no podía creerlo, no era su primer beso ni el de su dador, pero si es el más especial que ha recibido a lo largo de su corta vida. Su boca es considerablemente más grande, pero poco le importa, para ella es perfecta esa sensación, ese hermoso contacto que deseó durante (EXACTAMENTE) 5 meses, 16 días, 2 horas y un minuto, tiempo que lleva enamorada de Nick desde el momento que decidió admitirlo, quizás es más, quizás es menos...Pero poco le importa, ahora lo único que ocupa su mente son sus figuras volando juntos. Sus ojos se cerraron mientras sus oídos escuchaban porras provenientes de todos lados. No podía, ni tenía la atención necesaria como para explicitar bien de donde aunque sus orejas tuvieran la facultad para hacerlo debido a su agudeza, pero (como ya se ha dicho) poco le importa ahora. Pasó sus manos alrededor del cuello de Nick atrapándolo más y profundizando el beso. Era cálido, y con la intensidad necesaria para que su corazón brincara de un lado para otro debido al gozo de este momento.
Cuando se separaron pudo por fin ver la mirada del zorro, sus ojos también estaban llorosos cosa que no pudo distinguir antes por sus propias lágrimas. Pero la sonrisa en el rostro de Nick le dio a entender que eran lágrimas de alegría. Secando sus ojos y posando una pata en su mejilla le dio una de las sonrisas más sinceras de toda su vida, cosa que Nick correspondió con una sonrisa de similares características. Sonrisa que se encargaría de darle hasta el último día de su vida.
-Llegados a este punto...- habló Nick con la voz entrecortada. Ya dijo un par de frases clichés durante la discusión, así que... ¿Por qué no serlo aun más? -Judy Hopps... La coneja que me vuelve loco cada día y hace de estos mil veces mejor. No quiero convertirme en el típico animal cliché que hace esta clase de propuesta el Día de San Valentín, pero... ¿Quieres ser mi novia?- la propuesta fue realizada con el zorro tomando ambas patas de Judy y colocando una rodilla en el suelo. El público expectante enloqueció ante la propuesta, todos gritaban "¡DI-LE QUE SÍ! ¡DI-LE QUE SÍ!" constante y rítmicamente mientras aumentaban la velocidad golpeando lo que tuvieran cerca para hacer más ruido, ya fuera una muralla, mesas, entre otro tipo de cosas. La oficial Rodríguez por su parte no pudo evitar tomar del cuello a Lobato para sacudirlo hasta el mareo de la incontrolable emocion.
Pero el público es otra cosa, es momento de la respuesta de Judy. Ella rio débilmente y le dio un beso en la mejilla a Nick antes de abrir su boca.
-¿Quiero ser tu novia? Mm...- para agregar un poco de tensión al asunto dejo pasar unos cuantos segundos tomando una posición pensativa llevando su pata a su boca y posando su dedo índice en su labio inferior, pero todos ya saben la respuesta y ella no tiene planeado decir algo distinto. -Sí, sí quiero- Judy se lanzó a los brazos de Nick siendo levantada del suelo en un abrazo que ambos quisieron no tuviera fin. Nick dio unos cuantos giros en su propio eje dando una sensación mágica a aquel intimo contacto. ¿Qué sucedería después? ¿Que pasaría con la firma del papel? ¿La confianza y la sinceridad serian suficientes para llevar esta relación por buen camino? Muchas eran las dudas, pero todas tenían la misma respuesta... Lo sabrían más adelante, y lo llevaría a cabo juntos. El abrazo duró incontables minutos sucumbiéndolos en un ambiente de privacidad que solo ellos podían percibir. Las lágrimas seguían brotando de manera salvaje mientras sus patas sostienen al otro sintiendo la suavidad del pelaje, los latidos del corazón, y la entrecortada respiración del otro. Nada podía interrumpir tan hermoso momento.
Con excepción de sus propios compañeros… Las porras ya estaban pasando los límites, y cuando ambos volvieron a la triste realidad vislumbraron el enorme público que gritaba de emoción y felicidad por ellos.
Cambiaron la sinceridad de la sonrisa por unos nervios y vergüenza dignos de una confesión en medio del ZPD. La mayoría de sus colegas, tales como McHorn, Lobato (dentro de lo poco consiente que lo dejo Rodríguez), Colmillar, entre otros aplaudían sonriendo a la nueva pareja, otros lloraban con pañuelo en mano como Garranza (nada nuevo para todos), mientras que la mayoría de las hembras miraban enternecidas la escena deseando que alguna vez pudieran tener una relación de ese tipo.
Por otro lado, un miembro del ZPD, o mejor dicho el jefe de este, también era participe del tumulto pero no de la misma forma que sus elementos. Bogo escuchó todo desde la puerta de su oficina, su espalda estaba apoyada en ella desde hace ya varios minutos específicamente desde que escuchó a un zorro gritar sus sentimientos hacia su ahora pareja. Cuando hoyó el grito no pudo evitar posar su cuerpo en la puerta, tal fue la fuerza que ésta casi se abre pero no fue suficiente para hacerlo. Dio gracias al cielo, y escuchó poniendo la más grande de sus atenciones. Si bien Bogo no era alguien muy demostrativo no significa que fuera de piedra, podían conmoverlo de vez en cuando. ¿Una vez al año quizás? A todo reventar dos…
-Quizás es señal que estoy envejeciendo- se dijo a si mismo mirando el techo, todo tras conmoverse por una escena de alto calibre. –Nah, no pienses tonterías, Bogo. Ahora concéntrate, falta algo por hacer...- caminó hacia su escritorio y vio ambos papeles. Uno con una firma "Judy Hopps" con letras muy detalladas y curvilíneas, otra con el lápiz incrustado en ella dejando un agujero hasta en el mismo mueble. El zorro quizás no se dio cuenta, pero antes de salir persiguiendo a Judy tomó el lápiz y lo azotó fuertemente contra el papel sin importarle quien estuviera mirando. -El arreglo de mi escritorio saldrá del sueldo de Wilde, pero antes...- tomando el papel firmado con ambas patas y mirándolo con detalle, dio un fuerte suspiro y lo rompió en varios trozos para luego tirarlos a la basura. Sabe que no pueden vivir sin el otro, y un cambio después de esa confesión no merecía llevarse a cabo.
Una sonrisa atravesó su rostro antes de volver a tomar asiento en su silla de ejecutivo. Al retomar su trabajo, una imagen atravesó su mente, una proyección que quizás se realice en un par de años o en menos tiempo de lo pensado, pero no tiene duda alguna que ocurrirá mas adelante...
-Buena suerte, señores Wilde...-
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Ahora que he intentado hablarte y hacerte entender, todo lo que tienes que hacer es cerrar los ojos, extender tus manos y tocarme. Mantenme cerca y nunca me dejes ir (EXTREME – MORE THAN WORDS)
Tras haber dado esa referencia... Espero les haya gustado esta corta historia :) aun falta otra historia para los que deseen, por otro lado que pasen un buen dia de los enamorados, es un dia comun y corriente pero comercial, el amor se demuestra todos los dias del año, no solo uno. Que esten todos muy bien
Se despide TrollAFKgaming y nos leemos pronto en otro capitulo o historia :)
