Disclaimer:Harry Potter, así como sus personajes, le pertenece por copyrighta Joanne K. Rowling. El uso de los personajes en la historia es sin fines de lucro y solo con el afán de entretener.
N/A: Esta historia nació cuando veía Piratas del Caribe 4 (¿Era la cuatro?), cuando vi a las sirenas quede totalmente encantada con algunos detalles, luego apareció de la nada Mamma Mia con toda esa belleza griega de las playas y me dedique a investigar sobre las mujeres del mar fue en ese momento que se me ocurrió la perfecta idea de un nuevo fic (Totalmente o cuasi-totalmente incoherente pero aja, CoherenciaNula viene de algún lado).
Y como si fuera señal del destino (Más dramatización de la ya aplicada) me agarre un documental de Animal Planet sobre las Sirenas, definitivamente me volví desquiciada con la idea y así que me dedique a escribir.
La trama de la historia me pertenece, cualquier copia total o parcial de la misma sin permiso previamente del autor queda estrictamente prohibida.
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La Nereida Hechicera
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Capítulo I
Un verano en Capri
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Grecia se destaca por sus hermosas playas, muchas de ellas rodeadas por el imponente y azul Mar Egeo. Los turistas pueden elegir entre una variedad de opciones y es probable que ninguna de ellas los defraude pero de entre todas, la isla de Capri es un auténtico paraíso situado en el Mediterráneo, al sur de Italia central. Pintorescos callejones de estilo medieval, increíbles paisajes, inolvidables puestas de sol, perfectas para la celebración de la boda del año del Mundo Mágico.
Esta cordialmente invitado a la unión en matrimonio de
Harry James Potter y Ginerva Molly Weasley
No es extraño que a dicha celebración solo asistan familiares y las personas más allegadas al Elegido y Salvador del Mundo Mágico, siendo él alguien tan reservado en cuanto a su vida privada. Es por ello que Hermione Granger se encontraba en estos momentos llegando a la isla mediante la Red Flu ubicada en el recibo del Hotel estilo posada junto a sus maletas para pasar el verano en dicha playa.
Al llegar, el calor y la brisa marina la golpearon, totalmente contrariada y frustrada se despojo de sus lentes de sol llevándolos a lo alto de su cabeza sirviendo de sostén a sus rizos modelados que caían en cascada hasta su cintura, sus piernas tornadas descubiertas por el vestido sencillo de veraneo blanco sin mangas, con un cinta azul celeste amarrada atrás en un lazo marcando su bella cintura de abeja en conjunto de una delicadas sandalias de cintas azules y tacón corrido.
Fue recibida en medio de gritos de feliz histeria por Ginny y por las sonrisas ausentes de Luna Lovegood, la primera corrió en busca de un abrazo y en el proceso casi asfixia a Hermione.
– Deberías dejar que respire para que pueda abrazarte como deseas – Intervino la rubia de ojos saltones y mirada color cielo. Ginny al escucharla soltó de inmediato a Hermione con algo de vergüenza, recibiendo de Hermione un hermosa sonrisa y un afectuoso abrazo.
– Felicidades futura señora Potter ¿Por lo general las novias no se mueren de nervios? – Bromeo la castaña con una sonrisa burlona bailando en sus labios, Ginny soltó una risa suelta y alegre.
– Soy una novia eufórica en vez de histérica, déjame disfrutar – Decía al tiempo que regresaba con Luna al sofá donde estaba sentada, Hermione saludo afectuosamente a Luna al tiempo que se tiraba a su lado – Adoro esta isla.
– Pues a mí no me agrada en lo absoluto, el sol me arde en la piel y nunca me ha gustado estar cerca del mar, me hace sentir extraña – Bufo con mueca la castaña, la risa de Luna la acallo y la miro expectante.
– Lo que pasa es que detestas lo que no entiendes, eso es todo – Explico con calma y una sonrisa, Hermione sonrió y recordó que aun no saludaba a su mejor amiga el cual estaba segura si moría de un ataque de nervios por lo que se levanto.
– Me iré a acomodar en mi habitación y luego buscare a los muchachos – Dijo tomando sus maletas y dirigiéndose a lo que le parecía el Hall principal– Disculpe, hay reservación a nombre de Hermione Granger.
La recepcionista le dio una sonrisa mientras buscaba en su cuaderno, Hermione se alerto cuando la vio fruncir el ceño y darle ahora una mirada avergonzada, soltó un suspiro esperando la mala noticia.
– Estoy muy apenada enserio, pero con la boda nos hemos quedado sin habitaciones disponibles y la única que queda es la cabaña de dos habitaciones que está aquí mismo subiendo por las escalera de la plaza central, y ya una de las habitaciones está ocupada pero... – Se detuvo en sus explicaciones, Hermione alzo una ceja esperando – Espere un momento que ya resuelvo, tome asiento por favor – Dijo con amabilidad al tiempo que salía a la plaza central. Hermione se le escapo otro suspiro resignado, tomo sus maletas y se dirigió a sentarse en lo que ella detallo como los muebles, pues eran salidas de concreto con varios cojines colores tierra encima.
Lo cierto es que el Hotel estilo posada estaba decorada a lo 'Mediterráneo', paredes rusticas de blanco con cierto envejecimiento en algunas secciones, detalles en madera, una preciosidad. Contaba con una entrada principal donde estaba ubicada la recepción, seguida por otra habitación contigua que era el Hall Principal donde estaba la Red Flu y varios muebles con el mismo estilo que en la entrada. La recepcionista regreso en ese momento con una sonrisa en su rostro.
– No le importa compartir la cabaña con alguien mas ¿Verdad? – Le dijo al llegar algo emocionada, la castaña negó con la cabeza dando una sonrisa en el acto, todo con tal estar presente en la boda – Entonces sígame que se instalara en la cabaña – Dijo sonriendo más abiertamente, Hermione no creía que se podía sonreír tanto sin que le doliese la cara.
Pasaron por el Hall Principal y seguidamente por la Plaza Central, se notaba que era el lugar para las recepciones y celebraciones, suficientemente extenso para ello. A la derecha de la plaza se encontraba una especie de casa de tres pisos donde estaban ubicadas las habitaciones sin contar planta baja que era para la cocina y salas de entretenimiento que eran una sala de juegos, un bar y una pequeña biblioteca donde podían encontrar historias y mitologías de las islas del Mediterráneo y varios libros básicos del Mundo Mágico.
Ginny le había escrito una carta especificando absolutamente todo sobre aquel Hotel, ya que ellos habían llegado hace una semana.
Al lado izquierda se encontraba una especie de montaña rocosa donde se podía apreciar las escaleras esculpidas que guiaban a una cabaña con el mismo estilo de todo el Hotel color blanco y de tejas rojas algo gastadas. Al frente de ella se encontraba la mejor vista que alguna vez pudiera apreciar, se veía la playa de agua cristalina y blancas arenas, el puerto y sus veleros modestos. La plaza se limitaba en ese extremo con un barandal hecho en madera lo suficientemente alejado del precipicio rocoso que se apreciaba por igual que la bella playa.
Siguió a la joven muchacha recepcionista por las escaleras, al entrar en la cabaña iluminada naturalmente por los grandes ventanales de madera ubicados a lo largo de toda la cabaña. La cabaña poseía una sala modesta con muebles marrones que se notaban mullidos, una mesita al centro de los muebles y una al lado de uno de los dos muebles individuales donde se ubicaba la lámpara.
La recepcionista le enseño el comedor que se encontraba en la misma habitación de la sala, divididas por un mesón de concreto algo angosto y no tan alargado. Pudo apreciar 4 puertas, una al final que le indico era la cocina y 3 al lado izquierdo, ubicadas al centro con una separación levemente considerable, la última le indico que era de la otra persona con la que compartía cabaña, la del medio era el baño y la primera la suya.
Primero le mostro el baño, que consistía en una bañera clásica, el lavamanos con forma de tinaja y un mueble de madera donde se ubicaban las toallas, el ventanal de madera daba entrada a la luz del sol radiante iluminando el baño exquisitamente.
Al entrar a su habitación quedo encantada, al lado derecho se ubicaba la peinadora, al lado izquierdo estaba el closet dejando el centro de la habitación para la cama matrimonial clásica de hierro con la cabecera con delicados detalles, con una mesa de noche a los lados de la cama, la cama vestía una combinación de sabanas entre blanco y marrones en escalas. Frente a la cama, estaba otro de los muebles de concreto que aprecio en el Hall del hotel con los cojines escalas de marrones.
– Hermoso ¿Verdad? – Escucho decir a la recepcionista con orgullo – Yo la decore, al igual que todas las habitaciones y salones, tenía que ver como estaba al comenzar – Dijo con una expresión de claro espanto, Hermione soltó una leve risa al tiempo que colocaba sus maletas en la cama – Su compañero es el dueño del Hotel – Soltó con calma y simpleza la chica, Hermione se volteo furiosamente a verla con asombro – Deseo venir a supervisar la celebración personalmente, puesto el Señor Potter le pidió encarecidamente privacidad.
– ¿Cuál es tu nombre a todas estas y quien es el dueño? – Pregunto con curiosidad la castaña – Mi nombre es Hermione Granger, pero dime mejor Hermione – Se presento con simpatía.
– Oh, un nombre griego muy conocido el suyo, disculpa, mi nombre es Neera Papandreu y el dueño del Hotel también es de Londres Mágico como ustedes, es... – Antes de decir el nombre fue interrumpida por una voz proveniente de sus espaldas captando la atención de ambas.
– Draco Malfoy a sus ordenes señorita – Dijo, el rubio de cuerpo atlético y alto con porte elegante, Hermione ahogo un grito de asombro tanto por el susto de su interrupción como por el nombre del muchacho. Lo observo con detenimiento, vestía unas cómodas bermudas oscuras y una franela beige, ciertamente su imagen informal no era algo que se podría imaginar, era algo que se debía ver para poder creer, justo como ahora – Ya terminaste tu inspección, Granger – Se burlo el rubio de cabello desordenado y expresión tranquila mientras por igual, observaba (Y anotaba) los cambio físicos de la castaña.
– Ver para creer – Fue lo que respondió la chica de mirada achocolatada con tranquilidad, al salir del asombro de la primera impresión – Con que el dueño – Exclamo con una ceja azada.
– Esperaba compartir con una conocida, pero nunca imagine que fueras tu, te hacia instaladísima apenas llegaron los futuros señores Potter – Ignoro su último comentario el rubio, Neera al ver que estaba siendo olímpicamente ignorada sonrió con alegría y se deslió del asunto escapando cual serpiente sin ser detectada.
– Eso me recuerda, Harry fue a pedir tu ayuda en esto, eso es otra sorpresa – Acoto con acierto la muchacha sin bajar las defensas (Educadas y distantes) frente al rubio.
– ¿Qué tan perdida estas de la vida de tus chicos? Parece que mucho si no sabes el trato que podría decirse amistoso entre 'tus muchachos' y yo – Dijo con todo animo de diversión y burla que podía, claro que había notado la distancia que quería marcar la castaña (Hermosa castaña) pero a él poco le valía, pronto las bajaría.
– Así como tienes tus asuntos laborales que atender personalmente, yo los tengo – Dijo educadamente antes de suspirar y dirigirle una mirada cansada – Me cansas, Malfoy ¿Me permites terminar de acomodarme para ir con 'mis chicos'? – Ironizo con una sonrisa burlona que fue respondida por el rubio con la misma sonrisa y un leve asentimiento antes de retirarse cerrando la puerta a su paso – Creo que voy a estrangular a Harry en lo que lo vea.
Decidió desempacar y cambiarse las sandalias por una negras de playa con lo que sería más fácil transitar por las interminables escaleras rocosas que rodeaban la isla en casi su totalidad de las que Ginny le comento en la carta. Al salir de su habitación no encontró a nadie por lo que se dirigió a buscar a sus amigos, encontrándolos en la mitad de la plaza, al parecer, esperándola.
– Y yo creía que te encontraría muerto de los nervios – Dijo para atraer la atención de los chicos, logrando su cometido. El primero en correr a su encuentro fue Harry que la alzo en un abrazo de oso seguido del abrazo fraternal del pelirrojo.
– Draco nos dijo que estabas por buscarnos – Dijo el chico castaño, recordándole a Hermione lo acontecido.
– Muy lindo de su parte nunca comentarme su bella relación con Malfoy – Exclamo la castaña con recelo y refunfuñando – Apuesto que fue la noticia del año y yo nunca me entere.
– Eso sí, fue la noticia del año – Dijo Ron con gracia al soltar una risa – La primera vez que salimos por allí a beber nos atraparon unos fotógrafos y fue un escándalo algo estúpido – Recordó el oji-azul con una sonrisa traviesa.
– A lo mejor no te enteraste por que estas más pendiente de lo que suceda en la oficina, en ambas oficina – Le dijo el castaño con cariño mientras abrazaba a la muchacha – No sé cómo puedes ejercer Derecho en ambos mundos y aun no estar en el manicomio.
– Eso es porque soy una persona extraordinaria – Dijo la castaña con suficiencia y orgullo – Pero en fin, espero que me tengan preparado algo para hoy, sabes que odio la playa.
– Lamentablemente íbamos a mostrarte la isla en velero pero como siempre, mi mama no está por la labor – Comenzó el pelirrojo.
– Ahora desea que regresemos a Londres por Red Flu por algo 'indispensable' para la boda – Le siguió Harry con ironía.
– Entonces me tocara ir con las chicas – Dijo la chica resignada.
– Tampoco se podrá, porque la Señora Weasley las mando a buscar algo al centro y vendrán entrada la tarde casi noche – El castaño ahora estaba algo apenado – No querían molestarte por qué acabas de llegar.
– Entonces ustedes me prepararon un guía alterno ya que ustedes no pueden – Adivino la chica al conocer a sus amigos – ¿Sera con George o Neville?
– No, Neville no vendrá y George esta ocupándose de la despedida de soltero así que le pedí a Draco que te mostrara la isla – Dijo Ron con una feliz sonrisa, Harry lo imitaba y Hermione simplemente no podía creer su suerte.
– Estas jodiendome ¿Verdad? – Pregunto Hermione aun sin creer lo dicho por el joven frente a ella, no recibió más respuesta que otras sonrisas alegres y amplias. No pudo más que soltar un suspiro, por el portal que da al Hall apareció Draco Malfoy, al ver la expresión de la chica una sonrisa maliciosa apareció en su rostro mientras se acercaba a ellos, los chicos observaron al rubio y suspiraron resignados.
– Te vi la sonrisa Draco Malfoy – Comenzó el castaño a modo de regaño, el rubio cambio su expresión a una inocente pero los chicos no se la tragaron.
– Me envían al matadero con una sonrisa y luego regañan al verdugo – Dramatizo teatralmente Hermione mientras seguía con su expresión resignada – ¿Quién los entiende? Andando Malfoy – Le indico mientras se dirigía a la salida del lugar dejando momentáneamente a los chicos solos.
– Con ella no Malfoy – Siguió advirtiendo ahora el pelirrojo – Ya soportamos mucho lo tuyo con Astoria como para que ahora quieras ir tras Hermione.
– Pero si yo no hago nada – Dijo con fingida inocencia el rubio, mal fingida ya que una sonrisa se asomaba por sus labios.
– Además, está fuera de tu alcance – Siguió ahora Ron, al tiempo que la mirada de Draco brillaba al estar frente a un desafío – Es una mujer de su casa y tu eres un rumbero empedernido y más cuando aparece Blaise, aun no sé como lo soporta Theo – Siguió sin ver la expresión que apareció en el rostro del rubio.
– Claro Ronald, dile que no puede conquistar a una chica para que se le quiten las ganas – Se quejo ahora Harry al notar la mirada – Te lo advierto Malfoy, me caes bien y todo pero ella no – Siguió igual de serio, el rubio no contesto sino que se retiro.
– No prometo nada – Dijo antes de desaparecer por el marco para seguir a Hermione que estaba charlando con la Neera.
– Te digo que tu nombre es griego, seguro tienes familiar de acá – Insistía la muchacha pelinegra.
– Mi abuela paterna es de acá, pase mi infancia escuchando sus relatos sobre sus bellas islas del Mediterráneo – Recordó la castaña con ternura – Hablaba más que todo de sus aguas y criaturas marinas, estoy segura que mas era el tiempo que pasaba en el agua que en tierra – Bromeo ganando una risa de Neera y una sonrisa por parte de Draco, al que aun no notaba.
– Espero que esa vena marina la heredaras porque te mostrare la playa – Dijo Draco haciéndose notar, la castaña volteo alzando la ceja interrogando al rubio – Así que mejor busca tu bañador para que podamos ir – Siguió a modo de orden.
– No pienso meterme al agua, Malfoy así que mejor busquemos algo que se acerque al agua pero donde no tenga que sumergirme – Respondió con igual de autoritaria, Neera observaba el intercambio de palabras con gracia, vio al rubio suspirar resignado y seguir su paso a la salida como también vio la sonrisa victoriosa de la muchacha – Gane.
– No cantes victoria, Granger, aún queda mucho para que finalice el día y más tiempo para que termine el verano –Dijo Draco con toda la seguridad que podía transmitir en el momento, la castaña maldijo por lo bajo y gruñendo siguió al rubio.
Este definitivamente no sería un verano normal.
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Hasta acá llego el primer capítulo de esta nueva trama que mi desquiciada cabeza invento, espero algún comentario para poder animarme y hacer todo mas bellamente rápido 3
Aunque dentro de unas semanas me mudare luego de que termine mis clases (Mi último trimestre para luego esperar Noviembre mi Acto de Grado, pronto seré abogada ;-;), antes de ello creo que podre subir uno o dos capítulos más hasta que me instale totalmente en el lugar donde me mudare (Donde ciertamente el internet no es algo de fácil acceso pero siempre está el celular y toda la tecnología Android y esas vainas).
Espero comentarios bellos ;)
Atte:
~CoherenciaNula~
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