Recuerdos de una vida sin fin

Capitulo I

La primera cita

Si, lo recuerdo. Era invierno y nevaba. Hacia mucho frío, pude observar como grandes copos de nieve comenzaban a acumularse alrededor del castillo. El lago cercano estaba completamente congelado debido a las bajas temperaturas que hay. Pero yo no puedo sentir frío, no siento nada.

Nada

Desde hace mucho tiempo atrás.

No se cuanto tiempo, unos cuantos siglos supongo.

-"Lord Alucard"

Abro mis ojos, oscuridad.

-"Lord Alucard"

Abro por completo la tapa de mi cómodo ataúd. Hago una mueca sarcástico como siempre.

-"¡Jo! Eres tu Walter"

-"Lord Alucard, hace tiempo que no veía dormir ¿me equivoco o estaba soñando?"

-"¡Jo!"-volví a exclamar –"claro que no. Eso lo dejo para los humanos"-sonreí orgulloso. Si orgulloso de ser un nosferatum, el mas poderoso por cierto. Mi comentario pareció no agradarle mucho al anciano, asi que hizo una mueca de disgusto dejando mi copa de "vino" sobre la mesa cercana.

-"Sir Integra lo manda a llamar. Lo espera en la Biblioteca"

-"si, si… ya voy"-dije de mala gana.

No volvió a decirme nada más. Pero pude leer sus pensamientos. Sabia cuanto se enfadaba Walter cuando no tomaba muy en cuenta a mi ama. Pero me importaban muy poco los comentarios que me estaba dirigiendo el mayordomo en esos instantes.

Habia algo que me perturbo, realmente –o sea a mi- reí irónicamente, hace tiempo que no recordaba nada parecido.

Un castillo, nieve alrededor de el, un lago… un bosque…. Tal vez, el clima… Londres comenzaba a cubrirse con una capa de nieve ya.  

Sacudí mi cabeza saliendo de mi ataúd, me desperece con lentitud. Colocándome mi gabardina, mi sombrero de amplio vuelo y mis lentes oscuros decidí abandonar mi "habitación" como humano, sabiendo que mi "ama" estaba ya impaciente por saber de mi.

-"¡Alucard!"

Jo, le atine. Sir Integra Wingancy Hellsing no estaba de muy buen humor en estos instantes. Y, por supuesto, mi retraso le habia exaltado aun mas –si era posible- conocía el malhumor –y lo malhumorada- que era, y me divertía a su costa, como siempre.

-"¿si?"-dije tratando de aparecer inocente, claro esta no funciono ya que mis sonrisas burlonas me delataron por completo.

-"¡¿Dónde demonios te has metido?!"

-"ama, estaba en mi habitación hace una media hora… ¿sabia que el clima esta muy frío estos días? Debería salir de vez en cuando"-sugerí. Bueno, esa fue la gota que derramo el vaso.

Los ojos de Integra realmente derramaban chispas. Creo que de haber sido humano habría salido rápidamente por mi sentido de supervivencia, pero dado que soy un vampiro bueno me quede.

Ella termino de dirigir sus miradas asesinas contra mi y –dado que estaba enfadada y nerviosa- fue directamente hacia su escritorio y encendió uno de sus tan afamados y caros cigarrillos. Aparentemente, calmándose un poco.

Después de unos segundos, hablo finalmente.

-"Anderson se ha movido otra vez"-dijo rudamente cruzando sus piernas y dirigiendo la silla en mi dirección –"estuvo eliminando a un grupo de vampiros en nuestro territorio. Y, también acabo con alguno de nuestros hombres"

-"ese, Anderson"-reí con sarcasmo recordando al susodicho padre –"no se rinde, ¿Verdad?"

-"no, por lo menos hasta no tener tu cabeza"

-"ama, no es que la contradiga, pero Anderson ya me ha degollado un par de veces y ¡jo! Sigo aquí"-reí aun con mas sarcasmo presumiendo de mis habilidades, por supuesto

-"¡Demonios! ¡Puedes dejar de bromear tan solo una vez! ¡No entiendo como tomas todo esto a la ligera!"-ups! La racha de malhumor se hizo presente en Integra por milésima vez en toda la mañana. Colocando ambas manos sobre su escritorio –"no quiero a Anderson cerca de aquí. Lo sabes. Si apareces, te ocuparas de el. Te puedes retirar"

Dicho aquello volteo su amplio sillón dándome la espalda, sacando otro de sus cigarrillos y encendiéndolo.

Humanos, no los entendía ni pretendía entenderlos.

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El dia estaba terminando, estaba realmente cansada. Habia estado practicando todo el dia y también entrenando a algunos nuevos reclutas en Hellsing que no se habia percatado que de verdad la tarde estaba muy avanzada.

-"¡hey, mignonette!"

Una voz muy alegre le hizo volver. Pip se acercaba alegremente trotando hacia ella.

-"¡Capitán! ¡Le he dicho muchas veces que….!"

No pudo seguir porque el muchacho se habia abalanzado sobre ella con la prioridad de robarle un beso. Cosa que no consiguió, por supuesto. Victoria con casi toda su fuerza arrojo al mercenario contra un muro que estaba muy cerca.

-"ay…."-se quejo el francés –"mondiu! Si que pegas fuerte, mignonette. No importa"-se alegro acomodándose el traje –"¿Estas lista?"

-"¿lista?"-se sorprendió la chica de cabellos rubios

-"sip, hoy saldremos a dar un paseo por Londres"

-"¡¡EHHHHHHHHH!!" -Ok, no se esperaba tremendo disparate. –"veras…. Capitán… no… no es correcto"-dijo nerviosa, jamás habia salido a una cita –"además que…"

-"vamos, cazar monstruos, sin ofender, no es todo lo que vas a hacer en tu vida. Vamos"-se apresuro –"todos necesitamos un momento de relajo y diversión. ¡es por tu bien!"

-"pe… pero… mi… mi maestro… no creo que este de acuerdo…"-dijo aun mas nerviosa

-"¡ja…! ¡Ahora me dices que tengo que pedirle permiso al vampiro ese!"-se quejo –"¡Alucard! ¡Alucard! ¿En donde demonios se ha metido? ¡ALUCARD!"

-"¡cállate!"-dijo apenada tapándole la boca con todas sus fuerzas –"esta bien… salgamos"

-"¡perfecto!! ¡te espero en la puerta de la mansión dentro de media hora! ¡Hasta prontito, mignonette!!"-grito jubiloso dando trotadas en dirección opuesta a la agente.

Seras suspiro resignada… ¿en que lío se acababa de meter? O sea, nunca en sus… 19 años habia salido con un chico, y tampoco nadie la habia invitado a salir. Recordaba que en el orfanato siempre sus compañeros se alejaban de ella, por miedo a salir lastimados. Eso hasta los 15 años que comenzó su entrenamiento para ser policía. Como su padre.

No era tiempo para recordar su pasado humano. Pues ya no lo era. Su maestro, Alucard, la habia convertido ya en su aprendiz, y por consiguiente en vampiresa. El se lo habia repetido numerables veces.

-"ya no eres mas humana… entiéndelo… ahora bebe la sangre"

Eso era lo que le habia dicho hace dos noches. Cuando la encontró aun divagando entre si beber o no beber la sangre que amablemente Walter le dejaba todas las noches en su habitación.

Siempre tan frío, siempre tan cortante. Siempre tan… bueno como el solía ser.

Ese dia… cuando estuvo a punto de morir, bueno de hecho murió. Aun solía soñar como una horrenda pesadilla, cuando ese vampiro la tenia aprisionada, amenazando con violarla y después matarla. En esos terribles momentos pensó que seria el fin de su vida. Cuando apareció, el. En el cielo, la luna se habia teñido de rojo por la sangre que habia corrido en el pueblo, por sus compañeros caídos, por ella misma, su temor, su pena.

Su salvación siempre habia sido el.

Alucard, su maestro.

-"dime, agente… ¿eres virgen?"

Una pregunta, tan simple, tan bochornosa, tan… -"…s…si ¡lo soy!"-titubeo al principio

¿Qué clase de pregunta hace ese tipo en una situación asi? Fue lo que cruzo por su mente. Pero no sabia porque pero le contesto con la verdad.

Luego, un disparo atravesando su pulmón. Sentía como el brazo que la aprisionaba dejaba de ejercer fuerza y ambos, el vampiro y ella caían al suelo lleno de barro, húmedo, frío. Su propia sangre escurriendo en todo el suelo. Estaba perdida- Con las fuerzas que le quedaba miro hacia su "asesino", su amplia gabardina de un rojo intenso que habia contraste con su cabello negrísimo. No entendía porque pero de una manera sentía como si le hubiera salvado, pese a ser su verdugo.

-"¿quieres vivir?"

¿Vivir? ¿Cómo puedo vivir ahora? Fueron sus pensamientos, no sabia porque, pero sentía que el podría hacerlo realidad.

-"si"

El individuo amplio su sonrisa. Se arrodillo hacia ella y la levanto cuidadosamente dejando ver sus afilados colmillos acercándose a su frágil garganta. Súbitamente, como una caricia, los enterró en su cuello. Cerro los ojos, no habia dolor… no, nada. Sentía como sus venas alimentaban al hombre que pasaba de ser su asesino a ser su salvador.

Cayo en un profundo sueño. Un letargo… fue dulce. Realmente, dulce.

-"bienvenida"-dijo el. La estaba cargando entre sus brazos, se sentía tan bien

-"¿Qué… que sucedió?"-pregunto sintiéndose totalmente recuperada. Ya no sangraba, no habia dolor. Estaba como si nada hubiese pasado –"¿quie… quien eres?"

-"estas muerta"-dijo tranquilamente –"¿tu nombre?"

-"Se…Seras Victoria"-respondió con nerviosismo. Si, estaba nerviosa. Podia sentir la calidez de su captor. Era muy agradable estar asi –"¿Cómo que estoy muerta?"

-"te convertí en un vampiro"-dijo con la mayor tranquilidad del mundo –"desde ahora soy tu maestro. Mi nombre es Alucard"

-"¿vam… vampiro?"-pregunto sintiendo nauseas –"¿eres un vampiro? ¿Alucard?"

-"vaya… si que eres lenta, chica policía"-rió sarcásticamente. Por alguna que otra razón su comentario hizo que se sonrojara escondiendo su rostro entre sus manos. Al parecer "su nuevo maestro" pudo ver su reacción asi que rió con mas fuerza, con algo de malicia.

Volvió al presente. Le gustaba recordar esa escena. Movió la cabeza hacia ambos lados. No, tenia que dejar de pensar en su maestro.

Otra vez, como casi todas las veces, su temperatura corporal subió deliberadamente. ¡La cita con Pip! ¡Tenia 15 minutos! Se habia quedado soñando y recordando despierta durante tanto tiempo.

Corrió bajando a las mazmorras donde esta su habitación.

Si… no entendía porque, pero el sentimiento que habia en su interior cuando pensaba en su maestro se intensificaba. Trataba y trataba de ignorarlo. Sin embargo, no podía.

Prefirió dejarlo para después y buscar en su armario algo que no sea azul y con el emblema de Hellsing. Se volvía a repetir ¿en que demonios se habia metido?

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La noche estaba bellísima. El parque central de Londres estaba cubierto de nieve. Habia nevado casi toda la mañana y el cielo estaba parcialmente despejado. Habia luces por todos lados, puesto que se acercaba la navidad.

-"vaya, si que esta haciendo frío, ¿eh, Victoria?"

-"Capitán…"

-"¡hey… espera mignonette! ¡Aquí, no soy capitán ni tu sargento! ¡Solo soy Pip y tu solo Victoria!"-rió con énfasis –"ven… conozco un lugar donde hacen un excelente chocolate caliente y unas tortas de chocolate exquisitas"

-"pe… pero"-dijo siendo jalada de la mano del muchacho –"Capi… digo Pip… espera"

-"¡tatan!"-dijo Pip –"¿habías hecho algo asi antes, Victoria?"

-"es… precioso"-dijo la chica mirando el horizonte –"¿de verdad podemos comer aquí?"

-"¡Por supuesto! ¡Disfrutas de la vista! ¡Ver el Tamesis si que es relajante ¿no?!"

-"Jamás habia estado en el Big Ben"-afirmo con una sonrisa, que hizo que su compañero se sonrojara –"si que sales muy poco, creo que debemos salir mas seguido"-rió desviando su mirada

Victoria olvido sus preocupaciones por unos segundos.

-"desearía que mi maestro estuviera aquí, para que pudiera verlo. Estoy segura que tampoco lo ha visto alguna vez. Seria bueno convencerlo"-pensó en esos instantes cogiendo la taza de chocolate caliente entre sus manos. De pronto una brisa fría comenzó a inundar la estancia.

-"esta disminuyendo la temperatura"-dijo el francés tratando de acercarse mas a la rubia con intensiones de abrazarla.

-"no es eso…"-musito Seras no dándose cuenta de las intensiones de su acompañante –"¡Cuidado!!"

Súbitamente, una sombra emergió de la oscuridad. Victoria habia lanzado a Pip al suelo con todas sus fuerzas evitando que ambos fueran cortados por la mitad gracias a unas bayonetas dirigidas hacia ellos.

-"Anderson…"-susurro Victoria parándose.

El sacerdote estaba de espaldas a ella riendo por lo bajo –"buenas noches, señorita. Discúlpenme por haber interrumpido tan abruptamente su cita. Tan solo pasaba a saludarlos"

-"¿Qué quieres?"

-"¿Qué… que quiero? Sabes que mi trabajo es eliminarte, a ti, a Alucard y a todos los paganos. Como miembro de la legión Iscariote mi deber es asesinarte"

-"Capitán, váyase. Es una orden"-dijo Victoria poniéndose en guardia

-"ja… piensas que te dejare, mignonette. Estas equivocada, cherie. No tendrás la diversión para ti sola"-dijo el soldado interponiéndose entre la chica y el sacerdote –"vamos atácame, sirviente del Vaticano. Para poder llegar a ella tendrás que matarme primero"

-"cumpliré tus deseos, pagano"-dijo Anderson sacando mas de sus bayonetas –"los eliminare y después iré por ese bastardo de Alucard"

-"¿a quien llamas bastardo, humano?"

-"¡Maestro!"-grito Victoria. Ahí. Parado en una de las agujas del Big Ben estaba el no muerto mirando con desprecio a Anderson.

El sacerdote amplio su sonrisa.

-"bien. No tendré que irte a buscar, perro de Hellsing"

-"creo que será divertido"-dijo el vampiro con una de sus sonrisas mas desquiciadas. –"¡Esto es entre los dos!"

Se aproximo hacia su oponente apuntándolo con su poderosa Cassull y disparando. Al mismo tiempo que Anderson lanzaba una de sus bayonetas directo a su cuello.

Alucard cayo al suelo, su cuello habia sido atravesado por la bayoneta de Anderson y el habia esquivado por muy poco la bala de plata del vampiro.

-"bien. Eso fue rápido"-dijo el sacerdote –"despídete, vampiro"-dijo dispuesto a larzar otra bayoneta, cuando Victoria se interpuso.

-"¡Mignonette!!"-grito Pip

-"¡Agente!"-dijo Alucard desde el suelo

-"Chica estupida"-dijo Anderson riendo locamente –"esas bayonetas están con agua bendita… no podrás moverte… ni a quien llamas tu maestro. Espera vampiro, acabare con la niña en pocos segundos. Después seguirás tu"

-"¡Seras!!"-grito Pip. Aproximándose a la chica. Anderson lo detuvo hiriéndole con su crucifijo gravemente. Su cuerpo cayo al suelo semi inconsciente.

-"maldita sea"-se retorció –"no… Victoria…."

-"Ma… Maestro…"-dijo la chica sintiendo dolor –"lo siento…. Yo…"

Alucard miraba la escena. Sintió miedo… ya no recordaba como se sentía… pero si, era miedo.

-"Mina…."

Las antipáticas notas de Lime: Como que sucedieron muchas cosas en este capitulo ¿no? Jajaja… creo que apresure mucho las cosas… Pues no me resisti. ¡Tenia que hacer un fanfic de Hellsing!! Lime esta completamente afanada U.U. Perdon, mi primer fic de Hellsing, se aceptan quejas. Pero he tratado de que sea lo mas coherente posible!! Bueno como ya se habran dado cuenta, Lime planea hacer un SerasxAlucard… o tal vez no?? Me encanta la pareja que hacen 0 los amo!! Son tan bellos!! Bueno Alucard… bueno los dos jajaja…!! Prometo que no va a ser tan largo y sip, va a haber crossover con el libro de Drácula de Bram Stoker (Lime lo leyo hace mucho tiempo, sera ocasión para leerlo nuevamente y sacar mas ideas) Tambien según el manga Alucard es Vlad Teper, el empalador o sea el famoso Conde Drácula. Ya lo ire explicando poco a poco para quienes desconozcan. Bueno, aquí les dejo el primer capitulo!! Ojala que les gusten y me dejen reviews!!

No sean tan malos!! Es mi primer intento!!

Nos leemos pronto!

Lime