Pareja: SaiHinaSasu [SasuHina]
Autora: DarkAmy-chan
Género: Romance/ Comfort/Humor

- Hablan
- "Recuerdos"

Nota: Este Fic es la Secuela de White Wishes

Nota 2: Este capítulo estará narrado desde el punto de vista de Sasuke. El siguiente, quien sabe.

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Los Personajes de Naruto no me pertenecen, son de Kishimoto

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The Only One

Maldición. Todo me daba vueltas. Se supone que ya debería estar acostumbrado a esto, a despertar con la boca agria, con la sensación de que te estuvieran apretando el cráneo, pero a pesar de que ya van más de dos años con esta temática, siempre era lo mismo.

¿Para qué decir que dejaría de beber después de cada sesión? Si estaba claro que solo serían simples palabras, las cuales terminarían llevándoselas el viento.

Irritado de esta mierda de vida, maldigo por bajo al percibir un peso sobre mi pecho. Al parecer una vez más había traído a alguien conmigo para pasar la noche. ¿Cuántos habían pasado por aquí, desde que me convertí en modelo? Ya había perdido la cuenta. No era como si me importasen, ya que solo eran una herramienta de desahogo, un intento por llenar ese maldito vacío que siento en mi interior.

Sin ningún tacto me aparto para sentarme en la orilla de mi cama de dos plazas, causando que el chico de cabello azulino despertase asustado, mirándome sin comprender mi reaccionar. Tomando las sábanas color negro para cubrir mis partes bajas, me puse de pie para mirarlo desde esa altura.

Se acabó el juego. Vístete y lárgate. ─ Sin importarme sus reclamos, sus amenazas, me meto a la ducha para sacarme el olor de esta persona, para borrar los recuerdos de una noche de alcohol y sexo, como tantas otras veces. Mi vida a estas alturas era un círculo vicioso, uno que sentía que me ahogaría en cualquier momento.

Después terminar de asearme por completo, de ponerme unos pantalones holgados, salí a buscar algo con que callar mi estómago. Al entrar a mi habitación tras salir del baño, me percaté de que ese estorbo ya no estaba, pero otra de igual sobrenombre había salido de su cueva en su lugar. Realmente había sido una estupidez aceptar el noviazgo impuesto por mi padre, solo para que me dejase en paz de una maldita vez. Un día de estos debía echarle de mi departamento, decirle que hasta que el compromiso no se hiciera realidad, no le quería ver todas las mañanas cantándome el mismo cuento.

¿Hasta cuándo te aburrirás, Sasuke-kun? ─ Ahí empezó el sermón diario. ¿Se da cuenta acaso que no hago ni el más mínimo intento por prestarle atención? ¿O es que le gusta hablarle al aire? ─ ¿Te das cuenta que todos a quienes traes, tienen similitudes con…?

Cierra el pico Karin ─ Le corte furioso ─ No se te ocurra nombrarlo, si no quieres que te saque a patadas de aquí.

¿Quién se creía para venir a meterse en mi vida, para nombrar a esa persona? ¿Por qué se empeñaba en hacerlo, en recordarme lo que había pasado?

Soy tu prometida Sasuke-kun. No puedes correrme… ─ Imposible no sonreír con sorna ante sus vocablos. ¿En verdad pensaba que con un simple título como ese, me tenía amarrado a su lado? Sera idiota. ─ ¡¿De qué te ríes?!

De lo tonta que puedes ser. ─ Dije antes de comenzar a comer el pan que había hecho. Y tal como era de esperarse, prosiguió con su circo matutino, sacando incluso a relucir que era una ingeniera comercial, como si eso fuera a quitar el hecho de que era una estúpida en muchas cosas. ─ Si tanto te molesta, ¿Por qué te empeñas en salir tan temprano de tu dormitorio?

¡Porque soy tu prometida, maldita sea! ─ Importancia cero para mí, nuevamente. ¿Debería dejarla hablando sola como siempre? Tenía una sesión de fotos en una hora más después de todo. ─ ¡Deberías respetarme como tal!

Tsk. Eres molesta. ─ Murmure tras terminar de comer el ultimo bocado, centrándome en su expresión, aquella que reflejaba su rabia. Que pérdida de tiempo. ─ Que no se te olvide que estas aquí por decisión de mi padre. A mí no me interesas, y eso lo sabes.

Ya era suficiente. Podía quedarse alegando sola, como si me importase. Solo quería dejar todo atrás, olvidarme del pasado una vez más.

Fue en eso que el sonido de mi celular me saco de mis pensamientos. Era mi agente Hatake Kakashi, que seguramente llamaba para recordarme del evento, y por supuesto de otras cosas muy comunes también.

¿Sasuke? ─ Consulto al aceptar la llamada. Hpmh. ¿Quién más esperaba que fuera? ─ Debo suponer que te has levantado hace poco, ¿no?

¿Qué? Si te vas a poner como Karin, voy a cortar. ─ Odio cuando trata de tomar el lugar de mi padre, dándome esos discursos de lo que era bueno para mi vida, y lo que no. ¿Qué podían saber ellos? Era mí maldita vida, y yo haría lo que quisiera con ella.

Como era de esperarse, aún con mis palabras, ese entrometido de mi agente me reclamo por irme con el último modelo. ¿Qué un día alguien podía enterarse de mis actos? ¿Qué por despecho alguno de ellos podía dar alguna entrevista en mi contra?. Como si me fuera a importar eso. Era su palabra contra la mía. Eran esos modelos mediocres, contra el modelo popular del momento.

No les convenía hablar de mí, no si querían surgir en este rubro.

Pero eso no era lo que me estaba molestando en estos momentos que conducía hasta el estudio fotográfico, era el nombre de quien iba a ser el fotógrafo de turno, el manager de mi nueva compañera de trabajo.

Con que nos volveremos a ver, Sai… ─ El rojo del semáforo detuvo mi camino, permitiendo que me sumergiera en los recuerdos, el momento en que conocí a ese tipo. Desde que le vi, en como note como le miraba, me di cuenta de sus intenciones, cosa que Hinata parecía ignorar.

"Tú eres su amiga, ¿no? ¿Cómo no vas a saber dónde está? ─ Ya no sabía qué hacer, donde ir. Habían sido muchos días desde que asistió por última vez a clases, donde no respondía ninguna de mis llamadas. Inclusive su departamento parecía no estar habitado. ¿Cómo podía desaparecer así no más?. No me había dejado otra opción. Esa chica rubia del café era mi última carta. ─ ¿Por qué pones esa cara? ¡Respóndeme maldición!

Maldije a los cuatro vientos por no quedarme callado, porque buscarte como un estúpido enamorado, por no ser capaz de mandarte al demonio y aferrarme a mi orgullo. Pero simplemente no podía, todo era tan irreal, tan similar de alguna manera a lo ocurrido hace años atrás con la partida de mi madre.

¿Por qué todos a quienes amo, me dejan atrás en el olvido?

…Y-Yo lo siento Sasuke-kun… ─ ¿Qué sentía? Ocultaba algo ¿verdad?. Estaba seguro que era así, su mirada me lo indicaba. ¿Por qué? ¿Por qué se había marchado? . No tenía sentido, nada lo tenía a este punto. Estaba desesperado, necesitaba saber cualquier cosa, aunque fuese mínimo. Fue ahí que el recuerdo de ese fotógrafo llegaba a mí. ¿Podría ser…?

Ese sujeto. El fotógrafo… ─ ¿Por qué su expresión cambio levemente al nombrarlo? ¿Acaso mis suposiciones no eran erradas?"

El sonido de las bocinas atrás de mi coche me saco de mis pensares, captando que la luz ya había cambiado, que al parecer el pasado no quería dejarme ir, como siempre en mi vida.

No quería toparme con ese maldito, con su estúpido rostro, el cual solo me trae recuerdos que por estos tres años he tratado de borrar de mi mente, de mi cuerpo.

¿Por qué sigo recordándote Hinata? ¿Por qué te empeñas en aparecer en mis memorias?

Un golpe detuvo mi camino dentro del set, al cual había llegado recién. Con desagrado baje la mirada hacia aquello que había detenido mi andar, encontrándome con unos ojos blanquecinos, los cuales me observaban con un eje de ¿desconcierto?

Me había quedado perdido en esa mirada, en su cabello azulino cortado al estilo princesa. ¿Qué estaba ocurriendo? ¿Qué era esta extraña emoción?

…L-Lo siento. Y-Yo… ─ El tono suave de su voz hizo que llevase mi atención a su boca, a sus diminutos labios color rosa pálido, que temblaban sin saber que decir. ─… Y-Yo…

Hikari ─ La voz de una tercera persona me saco de mi estupefacción, causando que tanto yo como esa chica volviéramos a ver a quien acababa de aparecer en escena. Sin darme cuenta mi ceño se frunció al percatarme de quien se trataba, al apreciar cómo se acercaba para colocar una de sus manos en la mejilla de esta mujer. ─ ¿Pensabas escapar?

Pude percibir por unos segundos nuevamente la mirada de esa chica sobre mi persona, antes de bajarla al suelo, notando como también apretaba sus manos, las cuales mantenía unidas a la altura de su corazón. Aquel actuar fue suficiente para que ese estúpido fotógrafo notara mi presencia, para que posara su atención en mí mientras sonreía falsamente.

Uchiha Sasuke. Es un placer verte nuevamente. ─ Con desagrado aprecie como extendía su mano para saludarme como si fuéramos conocidos, amigos de antaño. ¿Es que no sabía cuánto me desagradaba? No era más que una molestia.

No lo es para mí. ─ Dije tras ignorar su fingida cordialidad, al pasar a su lado con las manos en los bolsillos de mis blue jeans.

Tan simpático como siempre. ¿Es que aún estas estancado en el…? ─ Yo sabía que iba a decir, y por eso mismo no tarde en voltear a encararle. Pero mis intenciones de callarle fueron detenidas al ver la reacción de esa mujer, al notar como llamaba a ese desgraciado interrumpiendo sus vocablos. Podía ver el dolor en sus ojos al nombrarle, al decirle que se detuviese.

¿Podría ser que ese tipo le haya contado lo ocurrido? ¿Es que me tenía lastima?

Irritado les ignoro, marchándome por fin de ese sitio para ir en búsqueda de ese imbécil de Kakashi, antes de que me llame nuevamente por mi retraso.

En silencio contemplo a quien era maquillada a unos metros de mí, sin poder despegar mis ojos de los suyos, de sus finas facciones adornadas por un suave sonrojo en sus pómulos. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué una extraña emoción circulaba por mi cuerpo con solo verle, al recorrer todo su ser con mi mirada?

Aun cuando platicaba con ese sujeto, no podía despegar mis pupilas de sus movimientos, apreciando la suavidad de estos, los nervios que brotaban por los poros de su pálida piel.

¿Acaso era que mi presencia le causaba aquello? ¿Podría sentir lo mismo que estaba expresando yo? ¿Por qué? ¿Qué era exactamente esto?

Espero que no estés planeando llevarla a tu cama esta noche, Sasuke. ─ La voz seria de mi manager me saco de mi cavilaciones, provocando que desviase mi atención hacía su persona, que meditase sobre lo recién escuchado. Una imperceptible sonrisa se había instalado en mis labios sin que me diese cuenta. ─ Olvídalo. No puedes. Ella al parecer es la novia del fotógrafo.

Al escuchar aquello, mis ojos volvieron hacia esas dos personas, apreciando así su cercanía, la confianza que a simple vista parecían tener. No sabía porque, pero aquello lo hacía aún más divertido.

La quería en mi lecho esta noche, apreciar esas blanquecinas orbes que tenía por ojos cuando llegase al orgasmo. Escuchar esa diminuta boca soltar leves gemidos con cada embestida, mientras sus pómulos se coloreaban no solo por la vergüenza, sino por el calor del momento compartido. Y mucho más si con eso lograba cabrear a ese maldito de Sai.

"¡Abre la puerta, si no lo haces la tirare abajo!. ─ No tarde en llegar rápidamente al lugar donde vivía ese tipo. Apenas logre sacarle a esa mujer su ubicación, rápidamente fui hasta la dirección en cuestión, hasta a aquel condominio en el cual parecía vivir. ─ ¡Que abras te di…!

Pero mis gritos quedaron detenidos a medio camino al abrirse lentamente la puerta, al notar a ese tipo salir para cerrar a sus espaldas. Velozmente le agarre de la camisa que llevaba puesta, a acercarme a su rostro con furia. Estaba seguro que él sabía algo. Él y esa mujer amiga de mi pareja.

¿Dónde está Hinata? ─ Pregunto sin rodeos, sin soltarle ni un segundo, mucho más al ver como sonreía levemente. ¿Es que se estaba burlando de mí? ¿Quería que le golpease? ─ Tú sabes dónde está, ¿cierto?

¿Por qué debería? ─ Porque desde que te vi, me di cuenta que te gusto ¿o me equivoco? ¿Por qué él no me dejaría porque si? Menos porque había dicho que me amaba, que le gustaba más que la idiota de Naruko… ─ Y si supiera donde está, ¿crees que te diría?

Ahí estaban esas palabras, las cuales implícitamente me decían que le gustaba, que si fuera por él nosotros no deberíamos estar juntos.

Eres un… ─ Iba a pegarle, a descargar mi furia en su estúpido rostro sonriente, pero nuevamente mis palabras se veían interrumpidas, esta vez por las suyas.

¿No crees que se fue por algo? ─ ¿A qué se refería? ¿Por qué se marcharía sin decirme siquiera adiós? A pesar de que el día anterior a su desaparición habíamos hecho el amor hasta caer rendidos. Él me amaba, yo lo sabía, lo había sentido en sus besos, en su cuerpo, en cómo se aferraba a mi piel mientras me decía que me quería. ─ Todos aburren Uchiha Sasuke, y tú no debes ser la excepción.

La imagen del moreno marchándose mientras me decía que se había aburrido asalto mis pensares. Era él junto con otra figura más, una que a penas y lograba recordar, pero su largo cabello azulino me mostraba que se trataba de mi madre, de la mujer que me abandono cuando aún era un crio.

¿Por qué? ¿Es que podría ser cierto? ¿Y si mi madre también estaba aburrida de todo, de mí?

Sin darme cuenta el peso de sus vocablos sucumbió en todo mí ser, causando que le soltase, que bajase la mirada en un intento de ocultar lo mucho que me había afectado, mis enormes deseos de sacar todo esto que sentía en el pecho, de desahogarme.

Te ves cómo alguien que siempre ha tenido todo lo que quiere. ─ Ya nada llegaba a mí. No podía creer que todo esto estuviese ocurriendo. Que haya abierto mi corazón a alguien después de prometer jamás hacerlo, solo para que terminase de la misma manera. ─ Ahora sabrás lo que es no tener todo lo que se desea, como es la vida en realidad.

Todas las personas que quería me hacían daño, me dejaban cuando más les necesitaba."

Ya no necesitaba sentimientos estúpidos, personas que dijesen amarme solamente para conveniencia propia, hasta que se aburriesen. Ahora era yo quien las utilizaba, quien les sacaba provecho hasta que me hartasen, hasta que encontrase alguien más con quien pudiese divertirme.

No podía evitar maldecir por bajo al apreciar como ese idiota de Sai no se le despegaba, como no la dejaba sola en ningún momento. A pesar de que la sesión termino hace varios minutos, inclusive ahora que nos encontrábamos todos reunidos festejando lo bien que todo había salido, tal como siempre pasaba.

Reunidos en un local, en una mesa previamente reservada, con comida y tragos a destajo. Todos bebiendo, comentando lo bien que nos habíamos complementado en las fotos, como dos piezas de un rompecabezas. No pude evitar sonreír ante tal estupidez. Yo solo había actuado como normalmente lo hacía a la hora de posar para una revista, con el mayor profesionalismo posible. Después de todo era como me ganaba el dinero, lo que le encabronaba la existencia a mi padre.

No podía perder aquello.

Aunque no iba a negar que esa mujer lo había hecho muy bien. Tenía un aire de niña buena, que contrarrestaba a la perfección con la imagen que siempre trataban de mostrar de mí.

Éramos el clásico poster del demonio queriendo corromper al ángel de luz.

Mi oscura mirada fue a parar nuevamente a la figura de esa chica, como se mantenía en silencio. Se notaba a leguas su incomodidad, aquello que logro ocultar a la perfección en el momento en que la cámara nos apuntó en el comienzo de la sesión de hoy.

Ambos éramos buenos profesionales, buenos para ocultar lo que realmente sentíamos. Aunque ella solamente lo hacía a la hora de trabajar, mientras en mi caso, la máscara que me puse desde ese día quedo tan sujeta en mí, que ya casi ha pasado a ser mi verdadero rostro.

Ahora que recuerdo, su nombre es Hikari, ¿no?. Este significa luz. Un nombre perfecto para mí, para sumergir en mis tinieblas, en la oscuridad de mi habitación.

No me daría por vencido en la meta de esta noche tan pronto, menos cuando veo que se ha puesto de pie, pidiendo disculpas porque iba a ir al tocador.

Al apreciar como comenzaba a alejarse, no tarde en decir que saldría a tomar aire. Por suerte ese fotógrafo de mala muerte estaba siendo entretenido por nuestros contratistas, dándome la oportunidad perfecta para apresurarme, para que este ser oscuro fuese en búsqueda de esa luz. Pero mi sorpresa fue grande al verla en medio de ambos tocadores (hombres – mujeres), como si dudase a cual entrar, hasta que por fin después de tanta indecisión, accedió al que menos esperaba.

¿Qué estaba ocurriendo ahí? ¿Sería acaso que…?

Sin que se percatase de mi presencia, seguí sus pasos, cerrando la puerta tras de mi al notarnos solos; provocando que voltease asustada a verme tras pasar el pestillo.

…¿S-Sasuke-kun…? ¿Q-Que estas…? ─ Me sentía como un lobo hambriento tras su presa al verle retroceder con cada paso dado hacía su persona. Me gustaba ver sus reacciones, su nerviosismo con mi sola presencia.

Era un pequeño ratoncito asustadizo, uno que se veía completamente delicioso con ese vestido celeste pálido.

La pregunta correcta no seria. ¿Qué haces tú en el baño de hombres? ─ Al verla por fin acorralada en una de las paredes, impidiéndole la añorada escapatoria con mis brazos a cada lado de su rostro, deleitándome con ese desconcierto en sus facciones, con esos nervios a flor de piel. Maldición. Me estaba poniendo duro de solo verle así, tan pendiente de mis movimientos, de lo que fuera a hacerle.

Podía leerla completamente. Algo en mi interior me decía que ella me deseaba tanto como yo.

…Y-Yo me e-equivoque. ─ Musito en un hilo de voz, claramente perturbada por mi cercanía, porque en un segundo mis labios estaban a centímetros de los suyos. ─…N-No me fije…

¿Me creía idiota, o qué? Sabía perfectamente que no había sido así, que el entrar al baño de hombres había sido por decisión propia después de verle titubear por unos segundos. Estoy seguro que lo había hecho a propósito, solamente porque sabía que vendría a por ella.

¿Por qué no vienes conmigo? ─ Murmure sobre sus labios, acariciándolos con mi aliento, mordiéndome las ganas por terminar de acortar esta milimétrica distancia que nos separaba. ─ Tengamos nuestra propia celebración en mi departamento, en mi cama.

No pude contener más mis deseos, mi anhelo por probar sus labios. Menos al notar el gemido contenido que provocaron mis palabras, mi invitación al pecado.

Esa mujer seria mía esa noche.

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Fin Chapter 1:-

Notas Dark: Hola a todos mis queridos lectores. Este primer capítulo es mi regreso al fandom SasuHina. Así es. Después de tanto tiempo alejada, con mis ideas más claras, he decidido volver. Lo había prometido ¿no?. Solo necesitaba calmar mi corazón, encontrar mi centro nuevamente.

Este es el fandom que me hizo escribir, que me llevo a conocer maravillosas personas. ¿Cómo abandonarlos para siempre? Imposible.

Además, se lo debía a mis amados antis, a quienes siguen jodiendo a los amantes del SasuHina por no gustar de las parejas "canon". Este capítulo es dedicado a ellos. Se los había prometido en mi tumblr, y las promesas se cumplen. d(ゝ∀・)

Eso sí queridos lectores. Como me he dado cuenta que en muchos fics varios leen, guardan en favoritos, siguen la historia, pero no comentan, he decidido poner una especie de meta para seguir. La cual consistirá en:

Si me llegan más de ocho comentarios en este primer capítulo, la historia será continuada. Si yo veo que no dejan comentarios, pero se guardan en favs, se lee o sigue, etc, la dejare hasta ahí no más.

¿Es lo justo no creen?

Comentar no cuesta nada después de todo, ¿no están de acuerdo?. Después de todo a través de estos los autores sabemos si está siendo del agrado de los lectores o no. Además que ustedes saben que yo estoy en otros fandoms ahora también, y en donde vea más apoyo, ahí será en donde más participare escribiendo con más rapidez las continuaciones.

Después de este primer capítulo, escribiré un One-shot OsoIchi (Osomatsu-san), y luego vere cual de mis historias tiene más apoyo (comentarios), y esa será en la que me concentrare para continuar inmediatamente. Osea. Si el One-shot OsoIchi llega a tener más comentarios que este primer capítulo, que el último chapter de Cold Cherry (Fic AyaHina), me pondría enseguida a escribir otro shot de esa pareja. Pero si hay más de este, el segundo capítulo lo tendría lo más rápido que pueda, ya que me centraría en este inmediatamente.

Espero se haya entendido. Si no es así, no duden en consultarme. Con gusto aclarare dudas.

Besitos

PD: Espero nos leamos en el segundo capítulo, ya que tengo pensado una buena trama para esta secuela.

DarkAmy-chan