FanFic SasuHina, ambientado en Konoha post-guerra. Basado en el Manga y lo dicho por Kishimoto. No haré Ooc pero hay que tener en cuenta que en el manga no se ve el cambio real de Hinata luego de la guerra, ademas de las reacciones posibles en las situaciones en que la pondré, y por otro lado la actitud de Sasuke con una pareja (de nuevo, en el manga que termina cuando Sasuke se va de la aldea luego de la guerra).

M por lemon, violencia y situaciones...bueno... que forman parte de los FanFic M (aun no escribo toda la historia así que no se exactamente que va a suceder)

Los personajes pertenecen a Kishimoto en su manga Naruto, la historia es mía (sin contar el pasado...obvio)

Capitulo !: La Princesa en la Torre

Era la heredera del clan más prestigioso de Konoha, llena de lujos, con una vida fácil y un futuro asegurado...

Como le gustaría que eso fuera verdad.

Su primera infancia fue feliz, su madre, Masahi, lograba que su día a día fuera envidiable, la llenaba de amor y cariño, y hacía de ella la niña más alegre del mundo. Su padre siempre fue frío y estricto, pero su esposa sabía cómo hacer que mostrará sus verdaderos sentimientos con ella y con su hija, siempre y cuando estuvieran solos.

Hinata era feliz, hasta que su madre murió.

Se apenaba de que Hanabi no pudiera tener el amor materno que ella recibió, pero ante la muerte de Masahi su padre se había vuelto cruel, luego de entrenar terminaba tan agotada que poco podía pasar con su hermanita.

¿Cómo un padre puede tratar con tal desprecio a su propia hija?

Hinata era la viva imagen de su madre, tenía esa personalidad dulce y amable, esa preocupación hacia los demás y la bondad de la misma. Le recordaba a su difunta esposa y la odiaba por eso. Sabía que, a pesar de esa forma de actuar, podía ser una gran líder, pero ver en ella el reflejo de Masahi lo disgustaba, quería que ella cambiará, que dejara esa personalidad. Por eso la trataba como lo hacía, con desprecio. Tan fuerte era ese objetivo que se lo contagio al consejo, no la cambiarían con piedad, esperaban que con el tiempo su decepción le afectaría tanto que se convertiría en lo que deseaban. Grave error.

Su vida había sido casi imposible de soportar desde la muerte de su progenitora, pero se aferró a lo poco que tenía. Primero fue Ko, el cual era la única persona (y aunque era su deber) que la cuidaba y trataba con amabilidad; luego fue Naruto, éste le salvó la vida, veía como a pesar del odio que la aldea le profesaba este nunca se rendía, al contrario se esforzaba más, eso la sacó de la oscuridad, le dio fuerzas para soportar la pesadilla que era el Souke. Pasado unos cuantos años apareció Kurenai, Shino, Kiba, Akamaru y Neji (luego de los exámenes Chunnin). La lista de personas que le daban fuerza para poder levantarse cada mañana aumentaba y se hacía más fuerte. Eso al Souke no le gustó, podía haber mejorado como Shinobi, pero su personalidad no cambiaba en absoluto. Al principio se aprovecharon de las peleas que perdía, tanto con su hermana, en los exámenes Chunnin y, aunque todos los aldeanos y Shinobis la encontraron honorable en la batalla de Pain, ellos decidieron verlo desde otro punto de vista.

La guerra comenzó y Hinata demostró ser una Kunoichi fuerte, segura y admirable para todos. Peleó junto al héroe de Konoha, lo ayudó, lo sacó adelante y eso ni siquiera ellos lo podían negar, por lo tanto decidieron ignorarlo.

...

Se escuchaban gritos y chillidos de emoción dirigidos al Uzumaki, ella no podía estar más orgullosa, el niño que todos odiaban se había convertido en un hombre que todos admiraban. Ya no tan escondida, puesto que desde la guerra se había vuelto más confiada, miraba al héroe de Konoha ser idolatrado por los aldeanos, quería acompañarlos, pero que una Hyuga se rebajará a alabar a otro ninja públicamente era mal visto y posiblemente los ancianos del clan aprovecharían eso para regañarla.

El rubio se dio cuenta de su presencia alejándose de la multitud dejando un clon de sombras para reemplazarlo.

─ ¡Hinata-Chan! ─ exclamó con alegría acercándose

─ Konichiwa Naruto-kun ─ saludo acompañado con una pequeña reverencia. Ya no se ponía tan nerviosa en su presencia, en la guerra se había hecho más cercana a él y más segura de sí misma.

─ ¿Quieres ir a Ichiraku? Últimamente me dan Ramen gratis, ¿acaso no es fantástico 'ttebayo?

─ Lo es, pero no puedo- su semblante se volvió deprimente y tapo sus ojos con su cabello. ─ Iba de camino al cementerio. ─

El ánimo de Naruto quedó por los suelos, ese era un tema delicado, aún se sentía culpable, después de todo si él no hubiese sido tan débil en ese momento Hinata no lo hubiese tapado ni Neji a ella.

─Te acompaño─ dijo como una afirmación más que como pregunta, pero Hinata no tenía ganas de ir con alguien, cuando visitaba a su primo le gustaba estar sola.

─No Naruto-kun, quiero ir sola, si lo quieres visitar anda en otro momento─ dijo fríamente, y aunque no tenía la intención de ser grosera noto que a Naruto le había afectado. A pesar que se arrepentía de haberlo dañado, lo paso de largo siguiendo su camino.

─"Baka"─ escuchó a Kurama en su interior ─ "Lo hecho, hecho esta"

─ Demo...

─"Ella es fuerte, pero oculta en su interior algo que no termino de entender"─ comentó pensativo

─ ¿Qué cosa?

─"Te dije que no lo acabo de entender baka"─ lo regañó de nuevo ─"Pero hay oscuridad en su interior"

─ ¡¿En Hinata?! Estás loco 'ttebayo

─ "Hasta tu tenías oscuridad en tu interior, la dejaste en ese lago, ¿recuerdas?"

─ Es diferente... Tal vez es por la muerte de Neji. ─ dedujo con desánimo.

─"No es solo eso" ─ murmuró poniéndose serio ─ "Esa oscuridad está desde mucho antes, recuerda que desde que naciste estoy en tu interior, lo menos que podía hacer era ser un espectador de tu patética vida"

─ No tienes que ser tan cruel conmigo 'tteba...

─ "Cállate y escucha" ─ le ordenó a su estúpido Jinchuriki ─ "¿Recuerdas cuando la conociste?"

─ Iie

─ "Baka"

─ ¡Oye!

─ "Da igual." ─ decidió sintiéndose estúpido en pensar que Naruto tendría tan buena memoria ─ "Tenias unos cinco años"

─ ¿En serio?

─ "Si, desde entonces tú ya poseías un poco de oscuridad por el trato que te daban los demás, era una razón comprensible"

─ ¿Y desde cuando ella tiene esa oscuridad?

─ "No lo sé, tampoco soy un adivino"─ Naruto hizo un puchero ante la actitud del Kyubi ─ "Pero en ese entonces, cuando la conociste, ya estaba ahí"

─ ¡¿Nani?!

─ Y la segunda vez, solo unos meses después, era aún mayor.

─ Hinata... ─miro a donde su amiga había estado antes con preocupación.

...

La tumba de su primo ya estaba algo sucia. Sabía que Tenten, Lee y Gai estaban en una misión y su padre y hermana eran demasiado orgullosos como para ir. Sacó las hojas que cubrían la lápida, puso flores frescas en un florero que ella había dejado desde el funeral, prendió un incienso y dejó algo de comida.

─ Ohayo Niisan─ saludó sin poder evitar que una lagrima cayera, ya había sido casi un año y aún no podía aceptar que el no estaba para ella. Intentó recomponerse rápido. ─ No debiste haberte ido, ahora no tengo ningún apoyo en la mansión además de Ko que veo cada vez menos... Te ex... Extraño- sollozó ya sin poder controlar el llanto. ─ Era mi sacrificio no el tuyo, yo debería estar muerta, no tú.

Desde un árbol alguien la miraba con preocupación, el solo había ido a visitar a sus seres queridos, pero quedó frío al escuchar el llanto de la Kunoichi, el conocía la tristeza de perder a alguien, pero ver a Hinata así le rompía el corazón.

─ Sabes, las cosas en la mansión están igual, o peor que de costumbre. Al principio dejaron de tratarme como basura, supieron de mi participación en la guerra y no tenían como ponerla en mi contra, estaba feliz, pensé que por fin todo había terminado─ se sentó al lado de la lápida mirando al cielo algo más calmada. El espectador se sentía mal por espiar a alguien en esa situación, aun así había algo que le preocupaba desde hace un tiempo. ─ Pero luego de un tiempo las cosas volvieron a ser como antes, y sin ti ahí es insoportable ─ bajo su mirada al notar que una hoja había caído hasta la tumba y la sacó. ─ No debiste haber interceptado en mi sacrificio. Tú lo sabías, tal vez no lo pensaste en ese momento, tal vez querías darme un tiempo más o creíste inocentemente, al igual que yo, que luego de la guerra me apreciarían más. Mis días están contados Nissan- una brisa corrió por el lugar moviendo las hojas secas del otoño en un pequeño remolino, el pelo tan negro que llegaba a reflejar morado se elevó danzando a la dirección del viento, el humo del incienso cambió su dirección y Kakashi, desde una rama, intentaba entender lo que la ojiperla acababa de decir. ─ Nunca de lo dije a nadie, solo Tsunade-sama lo sabía por razones obvias, pero la convencí de que todo estaba bien. Si lo sabía el clan la pesadilla sería peor ─ acaricio con la yema de sus dedos la tumba mirándola con cariño ─Luego de Pain no me cure por completo, a veces me duele tanto que apenas me puedo parar, pero lo oculto como puedo y ha funcionado- dirigió sus manos a donde la cicatriz hecha ese día se encontraba─ Cuando me sellen no creo que lo soporte, ya es peligroso siendo mayor, pero estando herida es imposible que sobreviva. Por eso debí haber muerto yo, te sacrificaste por una causa perdida.

Sintió como una rama se movía y miro con terror, que alguien la hubiese escuchado era lo peor que podría pasarle, si era alguien del clan y se lo decían al consejo no dudarían en sellar a la vergüenza de la familia para asegurar su muerte. Siempre tuvieron el miedo de que ella se revelará y tomará el puesto de heredera, después de todo era la primogénita, pero al matarla todo se solucionaría. Ya eran muchas las veces en que la habían intentado asesinar y que ella había logrado protegerse o Neji la había salvado. Ahora siendo más fuerte era difícil que se le acercaran tanto, pero todo era tan fácil como sellarla.

─ ¡Byakugan! ─ siguió con rapidez al que la había estado espiando, desde que su primo había muerto ella hacía lo posible para vivir y que el sacrificio de él no fuera en vano. No tenía mucha fe en lograrlo, pero no se rendiría, ella lucharía con todas sus fuerzas por sobrevivir el mayor tiempo posible.

Kakashi fue más rápido.

...

Caminó con terror hasta el distrito. Sus piernas apenas podían moverse sin caer, sus manos y frente sudaban frío, su cuerpo entero sin excepciones temblaba, y aunque intentaba controlarlo, pensar que todo estaba bien, que no debía estar nerviosa, era inútil.

Ko la esperaba en la entrada. No era buena señal

─ Hinata-sama hay reunión del Souke, la esperan.

El aire salió de sus pulmones, no quería ir, quería salir corriendo y no volver. Pensó en Neji, ella había dicho que iba a intentar sobrevivir, pero ahí estaba caminando obedientemente hacia su muerte.

─ No puedo creer que esa haya sido la decisión- exclamó enojado un miembro de la rama principal golpeando la mesa.

Nadie presto atención a su llegada, eso la confundió. Se sentó en su silla asignada cerca de su padre que la miro recriminatoriamente por llegar tarde para luego volver a ignorarla.

─ Ese traidor debería ser asesinado, a lo menos encerrado de por vida. ─ exclamó una mujer al lado del anterior.

─ Hemos intentado hacer entrar en razón al consejo de Konoha- comenzó su padre generando silencio en la sala para escuchar sus palabras ─ Pero tiene al Hokage y al Uzumaki apoyándolo, sin decir que dos Kages más han mostrado su perdón al traidor.

─ Pero somos el clan más impo...

─ No tenemos mucha influencia en el tema, el traidor Uchiha no es parte de nuestro clan─ interrumpió

─ Pero es una vergüenza para los clanes y sobre todo los portadores de Kekkei Genkai, el Byakugan es procedente del Sharingan.

─ Dije lo mismo, pero no les importa. Lo único buenos es que no lo veremos por mucho tiempo. Cuando vuelva planeamos que hacer.

La reunión terminó y ella aún no entendía nada, sabía que tenía que ver con Sasuke Uchiha, él había vuelto luego de la guerra y desde entonces estaba encerrado esperando por su condena. Si es que el Souke estaba tan enojado quería decir que dicha condena no había sido tan mala, estaba feliz por Naruto y aliviada de que la reunión no fuera por ella.

Sabía que hasta los 20 años no iba a ser atacada seriamente, a los 21 los herederos comienzan a ejercer como líderes junto al anterior y a los 25 solos. Por lo tanto a los 20 (si es que no antes) comenzaría la caza, sabrían que queda poco tiempo para que fuera nombrada líder y harían todo lo que tuvieran en su poder para evitarlo. Aún faltaban años para eso, aun así no evitaba que actualmente intentarán atacarla o degradarla, lo único que hacía que siguiera siendo heredera era el ser la primogénita. Los Hyuga seguían las reglas como si su vida dependiera de ello, en estas el primogénito era el heredero, sin excusas, por eso la única posibilidad de pasar el puesto a Hanabi era matarla a ella.

...

─ Hinata-sama─ se escuchó desde afuera de su cuarto acompañado de delicados golpes en la puerta. Despertó de mala gana, desde hace noches que había dormido mal. Siempre, a esa época del año recordaba la muerte de su madre, y en cada visita al cementerio, ya sea para verla a ella o a su primo, le daba escalofríos pensar en la persona que la había espiado ya de hace un año.

─ ¿Qué ocurre Ko-san?

─ El Hokage pide verla en su oficina.

Podía ser que las aldeas estuvieran en paz, pero aún habían muchas misiones, se devolvían pergaminos robados en guerras anteriores, se compartían conocimientos (por ejemplo en medicina) y habían múltiples reuniones entre Shinobis. Podía estar todo bien entre naciones, pero aún habían bandidos y ninjas desertores, además de muchos que, en contra de esa repentina unión de los Shinobis, intentaban crear caos.

El número de misiones que usualmente tenía el equipo 8 se había multiplicado a creces, y había veces en que le daban misiones junto a otros equipos o hasta sola, no tenía descanso, Kakashi le daba una luego de otra.

─ ¿Me llamó Hokage-sama? ─ dijo evitando bostezar.

─ Por favor llámame Kakashi─ ordenó como a cada persona que lo trataba tan cortésmente, el nunca quiso ser Hokage, se consideraba a sí mismo el líder interino hasta que Naruto estuviera listo.

─... Kakashi-sama?

─No

─Kakashi-Dono

─Tampoco

─ ¿En qué me necesita? ¿Hay una nueva misión? ─ preguntó para cambiar el tema, su educación había sido muy estricta como para poder llamar al mismísimo Hokage informalmente.

─ Si, hay una misión─ Hinata suspiro de manera involuntaria, ¿acaso no habían reglas sobre la sobreexplotación laboral? No tenía el valor para negarse, estaba a punto de aceptar cuando la herida de Pain le comenzó a doler. Solía suceder cuando se sobre esforzaba, cuando comía o dormía poco, y aún más cuando tenía pesadillas. En ese momento se acumularon todas. El dolor era insoportable.

─ ¿Hinata -San? ─ preguntó el peli plata notando que algo no estaba bien.

Luego de escucharla en el cementerio leyó todo lo que encontró sobre el clan Hyuga, cada regla, suceso, misiones y sobre todo sobre Hinata Hyuga. Le sorprendió, jamás pensó que un clan pudiera tener tantas y tan estrictas reglas, o que Hinata haya pasado por tanto hasta ese momento. La muerte de su madre, el secuestro que llevó a la muerte del padre de Neji, los grandes daños recibidos luego de los exámenes Chunnin que tardaron más de lo común en sanarse, según los rumores, por el uso de Jutsus para mantenerla así como castigo por su debilidad. Luego estaba un reporte de Kurenai cuando recién comenzaba a entrenarla expresando su preocupación sobre el posible maltrato psicológico hacia la pequeña. Había también otro reporte de Neji en el que pedía que se mantuviera en secreto su identidad para luego avisar sobre el peligro que corría la Kunoichi dentro del clan, también había uno de Ko por lo mismo, y uno de una de las ninjas médico de la aldea preocupada por el autoestima de la joven, que se había tirado a morir con Pain, una que se repitió en la guerra. Para terminar el reporte de una misión del equipo 8 donde la Kunoichi se desplomó en combate, la trataron con el médico de un pueblo cercano y hubo preocupación en lo que murmuraba bajo el efecto de la fiebre, en que hablaba con Neji diciendo que ella debió haber muerto y no el. Cuando terminó, no entendía como no se habían tomado en cuenta esas evidencias, al parecer las primeras fueron recibidas por Sandaime el cual murió antes de hacer algo al respecto, luego Tsunade que con todo el papeleo había dejado para después la lectura de algunos reportes, olvidándoos luego del ataque a Konoha.

¿Qué podía hacer? El Clan Hyuga era uno de los más poderosos de todo el mundo Shinobi, ni siquiera el siendo Hokage tenía mucho poder sobre ellos, y el meterse en el tema sería visto como ofensa, haciendo además que Hinata fuera más atormentada y probablemente estuviera en aun más peligro. Concluyó en mantenerla lo más alejada de su clan posible sin levantar muchas sospechas, la ponía en toda misión que encontraba y si preguntaban decía que era una de las mejores Kunoichis de la aldea (cosa que en verdad creía), pero se le pasó en alto la herida, como nunca mostraba molestias pensó que era soportable y no causaría mayores estragos, era más importante mantenerla a salvo de su clan, pero lo subestimó, tal vez el mismo en su intento por protegerla había firmado su muerte, ¿qué excusa le daría al clan? La heredera estaba en el hospital sin razón aparente, sin volver de una misión. Lo investigarán, sacarían la verdad y se aprovecharían de eso.

─ Hinata─ la nombró una voz conocida con seriedad y ¿enojo? Abrió los ojos confundida, la cama incomoda, olor a desinfectante y el constante pitido que acompañaba a su ritmo cardíaco le anunciaban que estaba en el hospital. Recordó lo ocurrido de golpe. ─Me habías dicho que ya no te dolía, esto podría haber ido a peores─ continuó la ex Hokage con molestia

─ Demo... ─ su garganta estaba seca y le costó hablar, comprendiendo eso Tsunade le dio para beber ─ D...Dijo que no se podía evitar, o dejaría de doler o seguiría haciéndolo.

─ Podría haberte dado algo para que fuera menor dicho dolor, o buscado alguna solución experimental. Pensé que ya estaba resuelto.

─Estoy bien ─ afirmó ─ solo duele a veces y es soportable, esta vez fue diferente porque se juntaron muchas cosas

─ Esa no es excusa Hinata─ la regaño Kakashi que estaba desde el principio apoyado en una esquinas de la habitación─ Has ocultado muchas cosas a la aldea, no solo esta. ─ estaba más enojado con si mismo que con ella, pero en ese momento al mirarla tan mal no pudo evitar mostrarle su molestia.

No entendió a lo que se refería. Siempre fue muy inocente, nunca consideró que haya ocultado algo a alguien, por lo menos no sin buenas razones y jamás mantuvo en secreto nada que afectará a otro. Lo miro extrañada, había visto al Hokage feliz, serio, neutro, sonrojado, triste, pero jamás enojado, por lo menos no con ella, en cambio en ese momento la observaba de esa manera y no lo entendía, la ex Hokage también tenía otra actitud, su manera de retarla era la usual, pero en sus ojos había tristeza, y eso en Tsunade era algo preocupante.

─ ¿Q... Qué ocurre? ─ titubeó asustada, algo estaba mal. Luego recordó, ¿qué le iba a decir a su padre? No tenía excusas, podía decir que se desmayó por anemia, pero eso mostraba debilidad y estaba cansada de esas miradas de desprecio, luego de pasar tanto fuera de casa por las misiones tuvo mucho tiempo para pensar, y creyó muy en el fondo que Neji no querría que muriera, pero tampoco que sufriera.

─ Ocurre que...

─ Nada, solo nos diste un buen susto─ interrumpió Godaime dándole una mirada reprobatoria a su sucesor─ Debes descansar, te quedaras aquí hasta mañana

─ No─ respondieron Kakashi y Hinata en coro. La ex Hokage los miró sorprendida. Kakashi le habló del tema de Hinata, pero sólo a grandes rasgos, ella no sabía que el simple hecho de que ella estuviera en el Hospital ponía (irónicamente) su vida en riesgo

─Yo soy la doctora y digo que se queda─ demandó con su típica seriedad. La habitación permaneció en silencio mientras la Sannin anotaba las indicaciones para las enfermeras.

─Tsunade-sama─ susurró la Kunoichi con un ascendente terror que se reflejaba en el aparato que sonaba cada vez más rápido.

La mujer no entendía. Kakashi le había contado de su preocupación por Hinata referente a su clan, le preguntó sobre los reportes que ella confesó no haber tenido tiempo de revisar y le preguntó sobre qué tanto poder tenía un Hokage sobre un clan como los Hyuga, más que eso nada. Estaba arrepentida de haber mantenido la condición de la ninja en secreto, para la edad que tenía debió decirle a su familia, y aún ahora ese era su deber, si Kakashi supiera que ella pensaba poner al tanto a Hiashi se hubiera negado y probablemente al saber las razones se habría mantenido en silencio.

Godaime salió de la habitación rumbo al distrito Hyuga.

─Hokage-sama─ llamó luego de analizar lo sucedido ─ ¿Cuánto sabe del tema? ─ preguntó al saber qué había sido descubierta, no le extrañaba, el líder de la aldea era muy perceptivo y sabía que el Chakra que vio en el cementerio le era conocido.

─ Todo─ respondió en un suspiro

─Entiendo. ─ No podía hacer nada al respecto, era más prudente esperar a ver qué pasaría.

Ella sabía que la vida que tuvo en el clan no era común, que estaba en una pesadilla, pero no le tomaba el peso debido. Sentía que su sufrimiento no era de mucha importancia ya que a su punto de vista no era nada comparado con otros, como Naruto, Óbito, incluso sentía empatía por la del ninja que le produjo esa herida, Pain. ¿Cómo podía ella alegar por algo que no era nada a diferencia de lo de los demás? Ciertamente se estaba fijando en ejemplos muy extremos, no veía lo bueno de la vida de otras personas como lo era la de sus compañeros de equipo y sus amigos. Soportó todo con la excusa de que ella no era la única que sufría y que no era quien para alegar por aquello.

─ ¿No dirás nada más? ─ continuó el peliplata.

─ ¿Que quiere escuchar? ─ respondió con otra pregunta sentándose en la camilla para mirar mejor al Hokage y confirmar que a pesar de la máscara su rostro mostraba decepción, esa emoción que tanto estaba acostumbrada a recibir.

─ No lo sé, tal vez que quieres vivir, hacer algo al respecto, pedir ayuda, resguardo, cualquier cosa

─ S...si quiero vivir, pero no hay mucho que pueda hacer al respecto, y pedir ayuda sería meter a otros en mis problemas, no hay necesidad de aquello, todos tienen sus propios problemas.

─Con que eso es lo que piensas ─ murmuró apenado, no era que no quisiera ser salvada, simplemente había pasado tanto tiempo que lo había normalizado, era muy tarde, se habían demorado mucho, esa Kunoichi de la edad de sus propios alumnos estaba tan rota que ya era parte de ella, pero tanto Naruto como Sasuke habían salido adelante, algo debía ser útil para salvarla, no sólo de su clan, sino también de sí misma.

─Hokage-sama─ llamó una voz acompañado de humo que al dispersarse mostró a un Ambu del grupo que había juntado con la misión de cuidar a Hinata en lo que se podía. ─ Ellos lo saben, vienen hacia acá.

─Retrásalos

─Entendido─ respondió para esfumarse de nuevo.

Mordió un dedo e hizo los sellos para invocar a sus canes, a uno le pasó un pergamino en el que acababa de escribir, a otros les encargo la misión de resguardar el lugar y al último le dijo que guiara a la Kunoichi.

─ ¿Kakashi-dono? ─ murmuró confundida.

─ Hinata, debes huir de Konoha

─ ¡¿Nani?! ─ exclamó con sorpresa

─ Estas en peligro, tu clan sabe de la herida y aun con mi puesto no puedo hacer nada para evitar lo que te harán

─ Demo... ─ sintió la sangre dejar su rostro y su cuerpo temblar, la máquina sonaba con más insistencia y se sentó en la camilla intentando incorporarse, pero aún se sentía débil. Quería huir, pero también quedarse, ella sabía que en algún momento eso pasaría, y, aunque deseaba salvarse, todos sus amigos, los cuerpos de su madre y primo, su primer amor y su vida completa estaba en esa aldea. Se encontraba en la disputa de huir para vivir en el exilio o quedarse y pasar lo que le quedaba con sus seres queridos. ─ No puedo─ comentó sorprendiendo al Shinobi ─Sabía que esto pasaría, y aunque agradezco su ayuda debo aceptar mi destino, huir sería confirmar lo que ellos usaban para despreciarme, sería poco honorable y débil, debo quedarme y...

En unos segundos Kakashi la dejo inconsciente y la puso en el lomo del perro ninja para que se la llevara quisiera o no. Cuando Hiashi llegó su hija ya no estaba, había huido.

Y ese es el primer capítulo, ojalá les haya gustado. Tengo como dos mas, pero tengo que corregirlos y todo eso.