ANTES! de que empiecen a echar tierra y pestes, las advertencias: Este fic fue realizado por RutLance -CrystalFairy, South Park y otros detalles no son míos ni me interesan, solamente publico con la aprobación y consentimiento de la autora. No gano nada excepto pasar un rato más en la pc haciendo esto (en lugar de escribir xD) ¿Dudas? Las haré llegar a la autora. El crédito de esta historia no es en absoluto mío.
Nota aclaratoria de la autora: Los personajes de la serie de South Park no me pertenecen; hago esto por el simple hecho de entretenimiento, más que nada para entretenerme yo. Les agradezco de antemano a todos los que lo leen.
Este fanfic está dedicado a Soul Flash, Angelic Guardian y Soul's Angel (=3) sólo espero qué les guste.
¡Hoy es el cumpleaños de Cartman, yeah! Lástima que me enteré apenas hace un par de días. A la próxima será algo mejor. Un detalle curioso es el hecho de que tuve que oír "You belong to me" de Taylor Swift y "Tik Tok" de Ke$ha para poder terminar de escribir este capítulo y inspirarme en ellas para poder crear a los personajes que saldrán más adelante.
¡Dusfruten el capítulo!
Don't date him!
Capítulo 1: ¿¡Qué yo qué!
Lucy Harley es la chica que todas las chicas desean ser: bonita, de buena figura, cabello sedoso, atlética, de buena posición económica, popular, capitana de la cuadrilla de porristas, siempre a la moda, lista y simpática.
Y es la clase de chica con la que todos los chicos sueñan, desean salir con ella y quisieran tener de novia. Y eso ella lo sabe muy bien, ya que día tras día recibe mínimo 30 declaraciones de amor.
Se corre el rumor de que si sales con ella puedes tener a cualquier chica que desees; pero si te rechaza, vas a ser un perdedor cualquiera que a sus cuarenta años vivirá acampando en el sótano de tus padres. Por lo que nunca se ha sabido a ciencia cierta cuántos han sido rechazados por ella. Más lo que nadie sabe es la razón por la cuál últimamente lo hace, y se debe a que su corazón ya tiene por quién latir...
- ¿Es en serio? Me estás jodiendo, ¿verdad?- Exclamó sorprendido el rubio ojiazul.
- Es la verdad, no estoy mintiendo.- Le contestó medio apenado el chico pelirrojo.- Ni siquiera yo lo puedo creer.-
- Hey, ¿qué sucede?- Les preguntó un chico de cabello negro que recién se sentaba a la mesa con su charola del almuerzo.
- Lucy Harley, Stan.- Le contestó el rubio.- Eso sucede.-
- Ah, ¿y ahora qué hizo?- Indiferente comenzó a comer.
- Pues.- Se le acerca y le dice en voz baja.- Le mandó una nota a Kyle diciéndole que lo quiere ver hoy, saliendo de clases, atrás de las gradas de la cancha de fútbol americano.-
Stan dejó caer la comida en la charola por la sorpresa. Se sacudió la cabeza, volteó a ver a Kyle que se sonrojó hasta las orejas, miró a Kenny como si fuera un insecto raro y se puso una mano en la frente...
- Es una broma de Cartman, ¿verdad?-
- ¡No, no es obra de Cartman!- Kyle sacó un sobre que traía escondido en un bolsillo de su chamarra.- Realmente es de Lucy Harley.-
Stan tomó el sobre que le extendió su amigo, era por todos conocidos que la chica sabía cómo llamar la atención, y era muy detallista al respecto. El sobre era de color celeste lleno de dibujos de nubes y estrellas de colores pastel, selladas siempre con una tierna calcomanía de un osito abrazando un corazón con la frase "Para ti". Stan sacó la carta, al fin que el sobre ya estaba abierto, percibiendo el sutil aroma de la hoja perfumada, que lo hace frotarse la nariz del disgusto. Extendió la hoja, que además de estar membretada a nombre de ella y con la frase "Be the Best", tenía un marco lleno de dibujos de uniformes, pompones, altavoces, banderines, bastones y todo lo referente a las porristas. El mensaje escrito era lo mismo que había dicho Kenny anteriormente, sólo que estaba escrito en tinta de gel multicolor y un beso al final de la misma con lápiz labial color Passion Wine...
- Tienes razón.- Stan le regresó la carta y el sobre a Kyle.- Es demasiado para ser de Cartman. Podría ser de alguna otra chica.-
- Es de ella.- Aseguró Kenny.- Es su estilo, su letra y sus labios.- Ambos se le quedan viendo perplejos.- ¿Qué? La he visto hacer este tipo de cosas muchas veces, por eso estoy al mil por ciento seguro de que es de Lucy Harley.-
- ¿Y vas a ir Kyle?- Stan le dirigió la mirada a su mejor amigo.
- ¿Bromeas? ¡Claro que voy a ir!- Kyle unió sus manos ilusionado.- ¡Es Lucy Harley, Stan! ¡Lucy Harley!-
- Kyle, más vale que no gastes saliva explicándole a Stan.- Le dice divertido Kenny.- Recuerda que ya no desea saber nada acerca del amor desde que lo dejó Wendy.-
- Wendy...- Stan repentinamente está en un rincón oscuro totalmente deprimido.- Wendy, ¿porqué?-
- Kenny, recuerda que nunca debemos mencionarla frente a Stan.- Le reprendió el pelirrojo.
- Por favor, ya necesita superarlo.- Le contestó Kenny.
Wendy Testaburger decidió que si quería sobresalir de entre los demás, tenía que dejar South Park y a Stan, dejándolo solo, triste y desolado, al grado de deprimirse profundamente al oír su nombre...
- Ella mi chica, la razón de mi vida.-
- Stan, ya olvídala amigo.- Kyle le dio un par de palmadas en la espalda.
- Cierto, y si necesitas otra razón para vivir, conozco muchas de las cuáles elegir.- Dijo sonriente Kenny.
En eso, llegan Cartman y Butters platicando, el primero está visiblemente molesto y se sientan con sus charolas del almuerzo...
- En serio, Eric.- El rubio trataba de convencerlo.- El capitán dice que esta es tu oportunidad, así que aprovéchala.-
- Butters, cierra la boca.- Cartman casi tira la charola y a Butters al suelo.- Y ve y dile a ese capitán que se meta su "oportunidad" por el culo.-
- Bueno, él dijo que si decías eso, me dijo que te dijera que fueras tú personalmente y se lo metieras.-
- Hey, ¿qué sucede?- Les preguntó Kenny curioso por la plática de ambos.
- Hola Kenny.- Lo saludó sonriente Butters.- Es que el capitán de nuestro equipo quiere que Eric entre. Dice que tiene aptitudes.-
- Y yo ya te dije que me importa un carajo.- Cartman empezó a comer.
- Pe-pero yo también creo que deberías de entrar, Eric.- Le animó Butters.- A-Al menos, ven hoy a la práctica.-
- Como sea.- Giró los ojos, ve el sobre y lo agarra sin permiso.- ¿Y esta mierda?-
- ¡Suelta eso, culón!- Kyle le quita el sobre.- ¡Es mío!-
- No me digas, ¿una carta de amor escrita por ti para ti para ocultar que eres un judío marica?-
- ¡Carajo Cartman! ¡No soy un marica, hijo de puta!- Le gritó Kyle.- Además, yo no me mandaría una carta a mí mismo.-
- Cierto.- Dice Kenny divertido.- Esa carta se la mandó Lucy Harley.-
Cartman giró los ojos fastidiado mientras que Butters abrió grande la boca y los ojos...
- ¿En serio?- Preguntó incrédulo.- ¿Lucy Harley, la que dicen qué si te rechaza vas a ser un perdedor cualquiera que a sus 40 años vivirá acampando en el sótano de tus padres? ¿Esa Lucy Harley?-
- Sí, quiere verme después de clases.- Kyle estaba radiantemente feliz.- Tal vez le gusto.-
Kenny y Cartman rompen en risas, Butters se cubrió la boca balbuceando algo como "Dios mío" y Stan sigue igual de deprimido...
- ¡No se burlen, hijos de puta!- Les gritó molesto Kyle.
- ¿Qué tiene el capitán maravilla?- Preguntó Cartman ignorando a Kyle.
- Ah, lo de siempre.- Kenny chasquea los dedos enfrente de Stan.-¿Haces los honores?-
- Será un placer.- Sonrió Cartman maliciosamente.
Agarra la leche de la charola de Stan, le jala por detrás de los pantalones levemente y la vacía dentro de la ropa interior...
- ¿¡Qué carajos!- Gritó Stan saltando de su lugar mientras el líquido le escurría en los pantalones.- ¡Cartman!-
- ¿Qué?- Le sonríe mientras los demás ríen a carcajadas.- Sólo te estaba ayudando.-
- Sí, pero no así.- Se volvió a sentar incómodo y ríen con más fuerza.
- Es que cómo me dijiste que no lo hiciera igual que la última vez.- Sigue ocupado comiendo su almuerzo.- Tuve que improvisar.-
- Mira Cartman.- Stan se toca el puente de la nariz.- A la próxima no uses leche ni pudín.-
- Oye Kyle.- Le pregunta Butters al pelirrojo.- ¿Y le vas a llevar flores?-
- ¿Flores?- Kyle se atemorizó.- ¿Y de donde carajos consigo flores ahora?-
- Bueno, puedes arrancarlas de aquí mismo de la escuela.- Le sugirió Stan.
- Si el judío hace eso, sólo demostrará que es un avaro.- Cartman se rió del consejo.
- Oye, no es una mala idea.- Stan le dio un golpe en el antebrazo.
- ¡Ouch!- Cartman se frotó el brazo mientras Kyle lo veía molesto.- Es la verdad, no gastaría en ellas pero esa puta de Lucy Harley se daría cuenta de que las tomó de la escuela.-
- ¡Oh, tienes razón!- Kyle ocultó la cabeza entre los brazos.- ¿Qué haré?-
- Tranquilo.- Le dice Kenny dándole una palmada.- Además, no sabes para qué quiere hablar contigo, así que olvida eso.-
- Gracias Kenny.-
- Bueno, si deseas un consejo gratis.- Cartman se levantó de la mesa con su charola vacía.- No le vayas a decir que eres un judío de mierda.-
- ¡Vete al carajo, gordo de mierda!- Kyle le lanzó algo de su charola sin atinarle.- Maldito hijo de puta.- Se sentó cruzándose de brazos.
- No le hagas caso, Kyle.- Stan trató de calmarlo.- Además, Kenny tiene razón, no sabes para qué quiere hablar contigo.-
- Entonces, ¿no es una declaración de amor?- Preguntó tímidamente Butters.
- Ni idea, Butters.- Kyle se desanima.
- Bueno, un consejo nunca está de más.- Kenny le sonríe.- Así que cuando la veas, no hables hasta que ella te lo indique ni la interrumpas. A las chicas les molesta eso.-
- Cierto, sonríele siempre y contrólate.- Le dice Stan.- Debes demostrarle que sin importar qué carajos pase o te diga debes estar tranquilo y sereno.-
- Y que la boca no te apeste a mierda.- Todos se le quedan viendo a Butters.- E-Es que a nadie le gusta el mal aliento, así que consíguete una menta.-
- Cierto.- Comienza a registrarse los bolsillos sin éxito.- Ehm, ¿Stan?-
- ¿Qué?-
- ¿Tienes de casualidad alguna menta?-
- No. ¿No tienes?-
- Pensé que sí tenía una, ¡carajo!- Voltea a ver a los rubios.- ¿Ustedes tienen algunas?-
- No, lo siento Kyle.- Le dijo Butters.
- Yo tampoco tengo, pero no te preocupes.- Kenny le guiñó un ojo.- Sólo mastica un poco de yerbabuena y estarás bien.-
- Genial Kenny.- Kyle pone cara de fastidio.- ¿En donde carajos consigo yerbabuena aquí en la escuela?-
- Ehm, hay un árbol de eucalipto rumbo a la cancha de fútbol americano, tal vez con algunas hojitas sea suficiente.- Sugirió Butters.
- ¡Buena idea Butters!- Kyle se levanta sonriente con su charola.- Bien, deséenme suerte.-
Kyle se aleja mientras Stan, Kenny y Butters lo observan alejarse, luego siguen comiendo hasta que Kenny rompió el silencio...
- Yo apuesto 50 dólares a qué le dirá alguna tontería o lo mandará al carajo.-
- Yo no sé, pero creo que sí le pedirá que sea su novio, o al menos, que salgan juntos en una cita.- Dijo Stan aceptando la apuesta.
- Bueno, sólo espero que Kyle no termine en el sótano de la casa de sus padres.- Finalizó Butters.
El resto de las clases transcurrieron normales, menos para el pelirrojo que se le hicieron terriblemente lentas. Una vez saliendo del salón de clases, corrió a los casilleros para guardar sus cosas y enfrentarse a su destino...
- ¿Vas a ir a ver a esa perra puta de Lucy Harley, Kyle?-
- No es una perra puta, Cartman.- Cerró con fuerza su casillero molesto por el comentario.- Así que no me estés jodiendo, gordo de mierda.-
- Por favor, judío.- Cartman soltó una carcajada.- Al menos te hubieras fijado en algo que estuviera a tu "altura".-
Stan, Kenny y Butters llegaron en ese momento, y al verlos, frente a frente, sabían que algo no marchaba bien...
- Lo que pasa es que te da coraje porque ella se fijó en mí y no en una bola de manteca como tú.-
Inexplicablemente, Cartman rompió en risas y le dio un par de palmadas a Kyle tras secarse un par de lágrimas...
- En serio, judío.- Cartman estaba rojo por la risa.- Tienes mucha mierda en la cabeza para que andes babeando por tan poca cosa.-
- ¡Ella no es tan poca cosa!- Sujetó a Cartman de la ropa y acercó su rostro al de él.- ¡Ella es una chica decente y delicada, no como la puta de tu mamá!-
A Cartman le molestó el comentario ya que dejó de reír e iba a golpear a Kyle sino fuera porque los demás los separaron...
- ¡No llames a mi mamá puta, pendejo!- Le gritó completamente molesto.
- ¡Le llamo como quiera, estúpido!- Stan trataba de controlarlo.- ¡Qué bueno que ella no es mi madre!-
- ¡Ya basta!- Stan logró aplacar a Kyle manteniéndolo alejado de Cartman.- ¡No se estén peleando, carajo!-
- ¡Él empezó Stan!- Kyle se trató de justificar.- Insultó a Lucy Harley.
- No le prestes atención, Kyle. No vale la pena.- Stan le recordó su cita.- Tienes que verla ahorita mismo, ¿no?-
Mientras, Kenny y Butters a su vez intentan calmar a Cartman...
- ¡Tranquilo, tranquilo!- Kenny lo sujetaba con mucha fuerza.- ¡Ya pasó, ya pasó, cálmate!-
- ¿Calmarme? ¿No oíste lo que me dijo ese hijo de puta?- Cartman golpeó un casillero.- ¡Carajo!-
- Escúchame, gordo de mierda. Sé que Kyle no debió decir eso de tu mamá pero cálmate.- Kenny trató de hacerlo razonar.- Además, a lo mejor Lucy Harley lo manda al carajo y así tú podrás aprovechar para joderlo, ¿no crees?- Cartman logra calmarse.- Bien, ¿qué tal si vas con Butters a la práctica y le rompes el culo a su capitán para que te deje en paz?-
- Sí Eric. Vamos a la práctica.- Butters lo jala de un brazo y se lo lleva rumbo al gimnasio.
Kenny resopla y se acerca a los otros dos cruzándose de brazos...
- Bien, el culo gordo está lejos de aquí, ¿qué pasó?- Preguntó Kenny.
- Es que él empezó a insultar a Lucy Harley y me enojé.-
Kenny giró los ojos, se los cubrió con una mano y tras un momento, se acercó a su casillero para sacar una bolsa donde guardaba sus cosas...
- Bien, ya pasó. Así que respira profundo. ¿Estás listo para verla ahora mismo Kyle?-
- S-Sí.- Contestó nervioso el ojiverde.
- Bueno, hagamos esto. Stan y yo tenemos también práctica hoy en las canchas, así que si necesitas nuestra ayuda, pues nos haces una seña o algo, ¿no Stan?-
- Claro, Kenny.- Le da una palmada en la espalda a Kyle.- Lo que necesites amigo.-
- Gracias chicos.- Les sonrió Kyle.- Son los mejores.-
- Bueno, vámonos.- Comienzan a caminar.- Nunca dejes plantada a una chica o te pateará las bolas.-
Momentos después, tras caerse un par de veces, quedar colgado gracias a una cuerda que se amarró a la cintura para evitar caer nuevamente de golpe al piso y que los del equipo de fútbol americano lo quisieran agarrar de piñata a garrotazos, (Siendo vergonzosamente salvado por Stan), Kyle logró alcanzar las hojitas de eucalipto con mucho esfuerzo...
- ¡Puagh!- Exclamó al masticarlas y escupirlas.- ¡Qué asco! ¡Qué feo saben!-
- Ni modo, así tú lo quisiste!- Kenny sonrió divertido de ver cómo batalló Kyle para conseguir un par de hojas.- Bueno, buena suerte.-
Kyle se encaminó hacia la parte trasera de las gradas mientras sentía que el corazón le latía fuerte en el pecho y le sudaban las manos. La chica aún no había llegado, así que trató de recordar los consejos: No hablar hasta que fuera su turno, sonreír, estar sereno y... ¿no decirle que es judío? No, Cartman no se saldría con la suya ni se lo permitiría...
Ya lo imaginaba todo, él del brazo de Lucy Harley paseando por toda la escuela mientras los demás los veían y los felicitaban. Y justo al pasar frente al gordo, se detendrían sin decirle nada para observar que no sólo se pondría verde de la envidia, sino también humillado por la terrible derrota y lo pisotearía como el gusano que era. Al fin, Kyle Broflovski ya no sería el judío del que todos se burlaban y maltrataban, ya no...
- ¡Hola!- Una vez alegre lo sacó de sus pensamientos.- Lo siento, ¿te hice esperar?-
Kyle se volteó a verla, y ahí estaba ella, su piel era blanca, suave y fresca, su largo cabello negro recogido en una cola de caballo hacía resaltar las facciones de su rostro tan fino que parecía esculpida en mármol o moldeada en porcelana pura. Sus ojos, de un brillante color violeta, habían sido la perdición de muchos chicos y chicas; de frente amplia, mejillas rosadas que la hacían ver cada vez más encantadora; su boca perfecta en todos los ángulos y su sonrisa complementaban todo el cuadro haciéndolo suspirar...
- ¿Estás bien?- Su voz era exquisita y clara como el murmullo de un arroyo de agua cristalina.
- Ehm, sí. Hola.- Contestó Kyle con una sonrisa.
- Qué raro.- La chica volteó a ambas partes.- Huele a pasto recién cortado.-
Ok, el masticar el eucalipto fue mala idea, bueno, al menos no parecía molestarle en lo más mínimo, así que aún había esperanzas...
- Oh, lo siento.- Le extendió la mano.- Soy Kyle...-
- Sí, lo sé.- La chica lo interrumpió.- Y tú ya sabes quién soy, así que sólo llámame Lucy.-
- Lucy.- Kyle sentía que flotaba en un nube.- Bien.-
- De seguro te preguntarás el porqué estás aquí, ¿verdad?- Se lleva las manos a ambos lados de la cara.- ¡Oh, cielos, no puedo hacerlo!-
- ¿Qué, qué pasa?- Preguntó confundido Kyle.
- Bueno, es que nunca acostumbro a hacer esto y no sé si sea una molestia para ti.-
- ¡Oh, para nada! Al contrario, será un placer.- Kyle se sentía en la cima del mundo.- Sólo dime para qué me necesitas.-
La chica le sonrió y le dio un abrazo repentino haciendo que el pelirrojo se sintiera el más afortunado del mundo. Lucy dejó de abrazarlo y lo tomó de la mano...
- Gracias, eres un chico muy amable.- Los ojos violetas brillaban intensamente.- Ahora sé que puedo contigo. Es que necesito la ayuda de alguien y pues, pensé en ti. ¿Me podrías hacer un pequeño favorcito?-
La mirada suplicante de la chica y su sonrisa apenada hicieron volar maripositas en el interior del estómago del chico judío, quién ya no tenía mente con la cuál pensar correctamente...
- Tú dirás.-
- Bueno, es que como tu amigo me dijo que eres gay, pues yo pensé que me podrías ayudar sin aprovecharte de la situación.-
El ojiverde sintió que le movieron el tapete ante tal revelación y lo primero que pensó, salió de su boca automáticamente...
- ¿Mi amigo te dijo que soy qué?-
- Gay, eso me dijo.- Le confirmó Lucy.
- ¿Quién de todos?- Pensó en algo como castrar a Eric Cartman, golpearlo, aventarlo de un puente o tirarlo moribundo en el bosque para que una manada de lobos se indigestara con él.- ¿Fue alguien de cabello y ojos cafés?-
- No, fue tu otro amigo.- Le dijo sonriente.
Si fuera Kenny, Butters no contaba tanto como amigo así que no importaba, sabía que mil muertes impensables serían muy pocas...
- ¿Acaso te dijo Kenny?-
- No, fue tu otro amigo.- Señaló hacia el campo en donde estaba practicando el equipo de fútbol americano.- Mira, ahí está.-
Los chicos en el campo estaban muy metidos en la práctica por lo cuál ignoraban lo que estaba sucediendo. Kyle decidió arreglar ese asunto después ya que tenía que mostrarse "tranquilo y sereno"...
- ¡Oh, lo siento!- Se disculpó Lucy y lo abrazó.- De seguro aún no sales del clóset, ¿verdad?- Le acaricia la espalda mientras lo abrazaba.- No te preocupes, no le diré a nadie, yo tengo muchos amigos que han pasado por lo mismo.-
El abrazo hizo que Kyle se le olvidara el asunto de inmediato y volvió a sonreír como un idiota soñador. Bien, aún faltaba lo más importante...
- Ah, no te preocupes.- Lucy deja de abrazarlo y lo mira.- ¿Cuál es ese favor que me quieres pedir?-
- ¡Ay, no!- Lucy empezó a reír como tonta.- Ya me dio pena contigo.-
- Anda, qué no te dé pena.- Kyle le siguió el juego para saber de qué se trataba.- No es algo malo, ¿verdad?-
- Bueno.- Lucy paró de reír mientras sus mejillas se encendían en un rojo profundo.- Te lo diré en plan de amigas.-
Kyle no hizo más que sonreír incómodo. Lucy Harley realmente creía que era gay...
- Es que quiero que me ayudes con alguien.- Empezó a decir un poco nerviosa.- Es que yo no le hablo y por alguna razón, cuando estoy cerca de él no puedo decir nada coherente.-
El chico judío de pronto sintió que las maripositas de su estómago empezaron a morderlo, así como también que rodaba cuesta abajo. ¿Acaso ella?...
- Es alguien que tú conoces, uno de tus amigos.-
- ¿Quién?- No estaba seguro de querer saberlo. Ya no estaba seguro de nada.
- ¡Hey Lucy!- El grito de una de las chicas de las cuadrilla los interrumpió.- Te estamos esperando, tonta. Tenemos que empezar con la práctica.-
- ¡En un momento voy!- Le gritó de vuelta y miró a Kyle algo incómoda.- Lo siento, tengo que irme a mi práctica y tengo algunos compromisos después.- De pronto se le iluminó el rostro con una sonrisa.- Mira, mañana me dices si me puedes ayudar o no, ¿de acuerdo?-
- Sólo si me dices quién.- Kyle se moría por saber.- Digo, secreto por secreto.-
Lucy se acercó a él, aproximó su boca a uno de sus oídos y dictó la sentencia de muerte...
- Me gusta Eric Cartman.- Le dijo despacito como si temiera que el viento se llevara las palabras.- Nos vemos mañana, Kyle.- Y le besó la mejilla izquierda.
Lucy Harley se dirigió hasta donde su cuadrilla dejando solo al pelirrojo, que no se movió hasta que sintió que alguien lo tocó en el hombro...
- ¿Eh?-
- Kyle, ¿estás bien?- Le preguntó preocupado su mejor amigo.
- ¿Stan? Stan.- Bajó la mirada y la alzó furibundo tratando de ahorcarlo.- ¡Stan!-
- ¡Uagh, uagh, uagh!- Stan trató de quitárselo de encima para poder respirar.
Kenny sujetó por detrás a Kyle y lo tiró al suelo, el ojiverde se levantó de nuevo tratando de golpear a Stan sin lograrlo...
- ¡Hey, tranquilo!- Kenny volvió a sujetar a Kyle sin soltarlo.- ¿Qué tienes?-
- ¡Eres un hijo de puta, Stan!- El judío estaba loco de coraje.- ¿Porqué mierda dijiste eso?-
- ¿De qué carajos estás hablando?- Stan no tenía ni idea de lo que hablaba.- ¿Qué mierda dije?-
- ¡Lucy Harley cree que soy gay!- Kenny lo soltó por la sorpresa dejándolo caer.- ¡Y todo porque le dijiste que soy un marica de mierda!-
Stan se quedó petrificado, Kenny no podía creer lo que acababa de oír, mientras que Kyle volvía a levantarse del suelo casi a punto de llorar...
- ¿Porqué Stan? Yo no te hice nada malo.-
- Mmm, la verdad.- Stan se llevó una mano al mentón.- No me acuerdo haberle dicho eso.-
- Kyle.- Kenny intervino.- ¿Estás seguro que fue Stan y no alguien más?-
- Fue Stan, Lucy me lo dijo.- Kyle volvió a ver a Stan que seguía meditabundo.- ¿Porqué me mentiría ella?-
- No lo sé, dímelo tú.- Le contestó Kenny.
- ¡Ya me acordé!- El grito hizo que los otros dos voltearan a verlo.- Lo que pasa es que cuando rompí... rompí con...- Empezó a gimotear y luego está recostado contra un árbol completamente deprimido.- Wendy. ¡Wendy!-
- ¡Mierda!- Kyle se cubrió la cara con las manos.- ¿Porqué carajos ahora?-
- No te preocupes, Kyle.- Kenny sonrió malicioso.- Yo lo arreglo, sé componer televisiones viejas.-
Kenny se le acercó y sin aviso alguno, le dio un coscorrón que lo sacó de la depresión...
- ¡Ouch, eso me dolió!- Stan se frotaba la cabeza.- ¿Qué pasó?-
- Nos ibas a contar el porqué le dijiste a Lucy Harley que Kyle es gay.-
- Ah, sí. Bueno, es que cuando rom...-
- ¡Al grano, Stan!- Le gritó Kyle interrumpiéndolo.
- Bien, bien.- Stan hizo lo posible por ser directo.- Lo que pasa es que hace días estaba molesto, ella se me acercó preguntándome qué tenía y yo le dije que Kyle me tenía harto porque de tanto querer "alegrarme" parecía marica.-
Kenny se echó a reír cayendo de espaldas al suelo, mientras que Kyle se golpeó la cabeza y casi se da un tirón de cabellos...
- Lo siento amigo.- Stan se disculpó sinceramente.- No fue mi intención decirte marica. Realmente estaba muy enojado en ese momento.-
Kyle empezó a tranquilizarse tras oír la disculpa, sólo era un malentendido y se podía arreglar, más ese no era ya el problema...
- Ah, está bien, Stan. Pero tú tendrás qué explicarle todo a Lucy.- Lo amenazó.
- Sí, lo que tú digas, compañero.- Dijo Stan dispuesto a arreglar el malentendido.- ¿Cómo te fue con Lucy Harley?-
Kenny se puso de pie dejando de reír para enterarse de lo que había pasado...
- No.- Kyle se desanimó.- No quería nada.-
Kenny y Stan se voltearon a ver entre sí, se acercaron a su amigo, en cuyo rostro se reflejaba que algo no estaba bien. Kenny iba a preguntarle algo pero su celular sonó...
- ¿Sí?- Contestó el rubio.- No, aún estamos en la escuela, espera.- Tapa el aparato y les dice a los otros.- Es Cartman, quiere saber si vamos a hacer algo...-
Antes de que Kenny terminara, Kyle le quita el celular enojado...
- ¡Cartman, eres un hijo de puta!- Apretó fuerte el celular.- ¡No, vete tú al carajo!-
Colgó la llamada, le arrojó el aparato a Kenny y empezó a patear el pasto con mucha fuerza...
- Kyle.-
- ¿Qué?
- Tal vez esté mal pero, ¿el gritarle a Cartman tiene que ver con Lucy Harley?-
- ¿Qué?- Se ríe histérico.- ¡Claro que no! ¿Qué tiene que ver ese culón pendejo con Lucy Harley?-
Ambos se cruzan de brazos mientras lo miran fijamente...
- A ella le gusta Cartman, ¿bien?- Se sienta en el suelo.- Y como cree que soy gay, quiere que le ayude a acercarse a él porque por alguna jodida razón no puede hacer o decir algo coherente.- Oculta la cara entre sus rodillas.- ¡Dios, estoy bien jodido!-
- ¿Qué? ¿Ella quiere que seas el cupido?- Preguntó Kenny sin obtener respuesta.- ¿Y la vas a ayudar?-
- No lo sé, maldita sea.- Kyle empezó a mecerse.- Ella espera mi respuesta mañana.-
- Entonces dile que no, aclaramos que no eres gay y le preguntas que si quiere salir contigo, como amigos, digo.- Stan trató de confortarlo.
- Como si fuera tan fácil, Stan.- Kyle recordó toda la plática.- Si le digo que yo no soy gay seguramente pensará que me aproveché de la situación para abrazarla y que me besara en la mejilla.- Se sonrojó un poco.
- Wow, es la primera vez que oigo que ella besa y abraza a un chico.- Kenny ocultó una sonrisa.- Si se entera que no eres gay te odiará el resto de su vida. Estás bien jodido, Kyle.-
- Bueno, sólo tienes de dos.- Dijo Stan.- Fingir que eres gay y ayudarla con Cartman, o decirle la verdad y que te odie de por vida.-
- ¡Dios!- El pelirrojo miró al cielo.- ¿No puede haber otra solución? Cartman es un cochino, pendejo, malo, odioso, idiota, racista, gordo, estúpido, anti-semita, retardado, tragón, flojo y burlista. ¿Porqué no se da cuenta?-
- Bueno, es que el amor te vuelve ciego y estúpido.- Aclaró Kenny.- Además, alguien tiene que hacerle ver que él no es adecuado para ella.-
De pronto, en la cabeza de Kyle se oyó un sonidito que le indicaba una idea, se puso de pie muy contento y volteó a verlos a los dos...
- ¡Eso es! ¡Eso es, Kenny!- Gritó eufórico sujetando a ambos de un brazo.
- ¿Qué? ¿Qué dije?- Preguntó extrañado el rubio.
- ¡Ya sé como hacerle para conquistar a Lucy Harley!- Kyle saltaba como si tuviera resortes en los pies.- ¡Y todo gracias a Stan! ¡Y pensar que iba a quemar tu casa cuando te durmieras en la noche!-
- Ah, sí. ¿Qué hice yo?- Preguntó el aludido algo temeroso.
- Bien, este es mi plan.- Los soltó mientras los ojos le brillaban.- Voy a fingir que soy gay y le ayudaré a Lucy Harley para acercarla a Cartman.-
- ¿Y eso que tiene que tiene bueno?- Stan no captaba aún la idea.
- Es simple Stan, en vez de ayudarla para conquistar a Cartman, haré que ella se convenza de que él no es ni será nunca su tipo. Y cuando ella necesite de mí, le diré que es la única chica en este mundo con la cuál andaría de novio.-
- ¿Y crees que funcione, Kyle?- Le preguntó Stan inseguro.
- ¡Claro que sí, es una idea genial!- Se calma un poco.- A menos que ustedes digan algo, así que por favor, no le cuenten nada a nadie, especialmente a Cartman. Se burlaría de mí el resto de su vida.-
- Bueno, yo no le diré a nadie a cambio de qué me vayas contando todo con lujo de detalles.- Inquirió Kenny.
- De acuerdo. ¿Stan?- Puso una mirada suplicante.
- No creo que sea buena idea pero no le contaré a nadie.- Le da un consejo.- Pero, sólo en caso de que no te sale como esperabas, no sigas, ¿de acuerdo?-
- ¡Gracias chicos, son los mejores!- Se acomoda la mochila sobre el hombro y se va corriendo.- ¡Nos vemos mañana! ¡Yujú!-
Ambos lo ven desaparecer y se miran perplejos...
- ¿Y quién ganó la apuesta, Kenny?- Preguntó Stan ansioso por el dinero.
- Mira, ¿qué tal si lo dejamos hasta que esto arroje algún resultado?- Sugirió el rubio.- ¿Qué te parece?-
- Está bien.- Aceptó el otro.- Sólo espero que Kyle sepa lo que hace.-
- Stan, no me lo tomes a mal pero yo creo que sería mejor que Kyle le dijera toda la verdad a Lucy Harley y que no saliera con ella.-
- ¿Y porqué dices eso, Kenny?- Preguntó confundido.
El rubio ocultó las manos dentro de los bolsillos, cerró los ojos, suspiró y vio por donde se fuera su amigo...
- Porque ella no vale la pena, Stan.- Comentó indiferente.- No vale la pena.-