Fanfic escrito para participar en el evento del grupo Mis Fics Ichiruki

"…:::Oneshot para el día internacional IchiRukista:::…"

Escrito por yura Afrody

LOS PERSONAJES DE BLEACH NO ME PERTENECEN

SON PROPIEDAD DE TITE-SAMA

Amor prohibido

Byakuya kuchiki líder de una de las familias más poderosas y adineradas de la ciudad de karakura, después de fallecer su amada esposa por una grave enfermedad se dedicaba únicamente a su trabajo y a su joven hermana, sabía muy bien que algún dia ella se tendría que hacer cargo de todo su patrimonio y que necesitaba un buen hombre a su lado, sin embargo no permitiría que cualquiera tomara ese lugar, debía ser un hombre a su altura y de su clase social.

Era una tarde común y corriente, Rukia kuchiki caminaba por el jardín entre los cerezos, ese dia en especial no quería estar acompañada de nadie, solamente quería estar sola y meditar, los fantasmas del pasado la acosaban y no le permitían estar tranquila. La joven llego hasta un hermoso lago de aguas cristalinas, se podía observar en el fondo de este a los pececitos nadando.

Ese lugar era tan mágico y apacible, tomo asiento debajo de un gran cerezo que estaba junto al estanque, tanto que podía recargarse en él y tener sus pies dentro del agua, se recargo en el tronco , se quitó los zapatos y remojo sus pies, la temperatura del agua era perfecta, al poco tiempo cayó en un profundo sueño.

— ¡RUKIA! — se escuchó a lo lejos la voz de un joven que conocía muy bien

la joven despertó pero ya no se encontraba junto al estanque, de hecho no sabía dónde se encontraba, estaba todo completamente oscuro y no podía ver nada más que el tronco donde se había quedado dormida, rápidamente se puso de pie y el tronco desapareció, ella se encontraba descalza pero aun así comenzó a caminar en la pesada oscuridad.

— ¡Rukia! – se escuchó nuevamente pero ahora más cerca de la joven

De repente frente a ella se ilumino un punto en la oscuridad, se acercó hasta el lugar y lo que vio la dejo horrorizada, era una imagen que ella conocía bastante bien, el cuerpo sin vida de un joven pelinegro tendido en el suelo muerto, muerto por su culpa, él le había salvado la vida y había pagado con la suya.

La joven despertó de golpe, tan exaltada y desorientada que sin querer cayo al estanque, trato de salir del pero era demasiado profundo, además no sabía nadar muy bien y el enorme vestido que llevaba puesto ese dia era demasiado pesado, el aire comenzó a faltarle y poco a poco perdió el conocimiento.

-+ yura Afrody +-

Ichigo kurosaki era un joven jardinero que trabajaba para la familia kuchiki, hace unos años había decidido trabajar para poder pagar sus gastos de la universidad, al igual que su padre había decidió estudiar medicina y gracias al padre de su amigo Uryu Ishida había podido ingresar a la universidad con ayuda de una beca, sin embargo los gastos eran muy altos para una familia tan humilde como la de él y no había aceptado la ayuda que le había ofrecido su amigo.

Después de varios meses de buscar un trabajo que le permitiera estudiar y solventar sus gastos había visto un anuncio para ser jardinero en la mansión kuchiki, inmediatamente fue a entrevistarse con Renji Abarai, la mano derecha de Byakuya kuchiki el hombre más poderoso y rico de la ciudad y había conseguido el empleo, llevaba casi un año cuidando del hermoso bosque junto con los demás jardineros y la sección del lago estaba a su cuidado.

Estaba dando su paseo diario por la zona cuando vio a la hermana del señor de la casa, nunca había visto a la señorita kuchiki y por ende no la conocía, pero por el extravagante vestido que portaba supo muy bien que se trataba de ella, parecía una hermosa muñeca de porcelana, sin necesidad de maquillajes o accesorios extravagantes era bellísima, dormía plácidamente por lo que decidió retirarse para no molestarlo, estaba alejándose poco apoco cuando la joven despertó y cayó al fondo del lago.

El joven pelinaranja inmediatamente se arrojó al agua para auxiliarla, cuando llego a ella la tomo entre sus brazos y nado hacia la superficie, ella estaba inconsciente y no respiraba, seguramente se había ahogado, gracias a su padre él sabía perfectamente que debía hacer y no titubeo al momento de darle respiración cardio pulmonar, el joven trataba desesperadamente de lograr que la joven reaccionara, después de unos minutos que para el habían sido horas la joven tosió fuertemente y jalo aire, pero volvió a caer inconsciente.

El joven jardinero tomo a Rukia en sus brazos para llevarla hasta su casa donde se harían cargo de cuidarla, alguna de sus mucamas le cambiaría la ropa para que no se resfriara y la atenderían como era debido. Al llegar a la entrada de la mansión rápidamente salió el ama de llaves Nanao Ise, la siguió para dejar a la joven en su habitación y poder retirarse.

-+ yura Afrody +-

Después de que Ichigo saliera de la habitación, Nanao llamo a momo Hinamori, la mucama de Rukia para que juntas cambiaran sus ropas mojadas, dejaron a la joven profundamente dormida y abrigada en su cama.

— ¿Qué le ha pasado a la señorita Rukia? – pregunto Hinamori

— al parecer se ha caído dentro del lago – contesto seriamente Nanao

— ¡Dios mío!, ¿crees que este bien? – pregunto la castaña preocupada

— Ichigo la saco inmediatamente y la auxilio – volvió a decir la pelinegra

— gracias al cielo – dijo aliviada la castaña siguiendo a la pelinegra por el pasillo

— de todos modos el señor Byakuya me ha ordenado llamar al doctor Ryuken para que la revise inmediatamente- dijo finalmente la chica de lentes

-+ yura Afrody +-

Ichigo llego a su apartamento que compartía con su amigo Uryu Ishida, estaba a unas calles de la mansión kuchiki por lo no tardó mucho en llegar, Uryu iba saliendo de la cocina cuando lo vio entrar por la puerta.

— ¿pero que te ha pasado kurosaki? – pregunto extrañado el chico de lentes

— pues simplemente decidí tomar un baño en el estanque – dijo divertido el pelinaranja con una sonrisa

— muy gracioso – contesto el peliazul

— deja me doy un baño y me cambio para venir a platicarte – dijo el chico del ceño fruncido mientras subía a la habitación

Ichigo llego a su habitación, eligió un cambio de ropa y entro a bañarse, mientras se enjabonaba pensaba en lo que había sucedido ese dia, y en la extraña sensación que le había dejado el tener a la joven en sus brazos, por alguna extraña razón sentía la enorme necesidad de proteger a la joven, además el sabor de sus labios se le había quedado grabado y solo pensaba en que quería volver a probarlos.

-+ yura Afrody +-

Rukia despertó, ya era de noche, se encontraba en su cama pero no recordaba muy bien como había llegado ahí, solo recordaba que se estaba ahogando y después un joven de cabello naranja.

— por fin despiertas Rukia – dijo un hombre de cabellos negros de fie en la ventana

— nii-sama – la pelinegra estaba sorprendida

— le avisare al doctor que ya despertaste – dijo el pelinegro saliendo de la habitación en busca del doctor

Rukia se quedó mirando en dirección a la puerta durante unos minutos, tratando de recordar que había pasado en vano ya que no podía recordarlo muy bien, lo único que recordaba con claridad era su sueño, aun no podía superar la culpa que sentía por la muerte de su gran amigo a pesar de que ha bien pasado varios años

— buenas noches señorita. Kuchiki – dijo el doctor interrumpiendo los pensamientos de la joven y entrando a la habitación seguido del líder de los kuchiki

— buenas noches doctor Ryuken – contesto la ojivioleta

— nos ha dado un buen susto – dijo con seriedad el peliblanco

— ¿Cómo se encuentra Rukia Ryuken? – pregunto el pelinegro con la mirada fría

— ella está muy bien, aparentemente solo fue el susto, sin embargo me gustaría verla en unos días, le dejare medicamento para que no se resfrié- dijo el doctor entregándole una receta Byakuya

— la llevare personalmente doctor – dijo el kuchiki tomando la receta

— bueno, me retiro, y tenga más cuidado cuando quiera nadar en el lago señorita. Kuchiki – dijo el doctor con una sonrisa antes de retirarse

— si doctor – contesto apenada la pelinegra

— lo acompaño – dijo Byakuya saliendo de la habitación tras el doctor

-+ yura Afrody +-

Ichigo bajo a la sala para platicar con su compañero sobre su dia, la cena ya estaba servida sobre la mesa y su amigo lo esperaba para cenar, el pelinaranja tomo asiento y mientras cenaban comenzó con su relato.

— y eso fue lo que paso – termino su historia Ichigo entes de meterse un trozo de carne a la boca

— increíble – dijo el joven de lentes

— pues sí, espero que este bien – dijo el pelinaranja

— pues de no ser por ti hubiera muerto – el peliazul bebió un poco de jugo

— por fortuna pasaba por el lugar y la vi – contesto el pelinaranja

— hay algo que me llamo la atención – dijo el chico acomodándose los lentes

— ¿qué cosa? – pregunto extrañado Ichigo

— en el momento que dijiste que le diste resucitación cardio pulmonar titubeaste un poco kurosaki – comento el peliazul lanzándole una mirada acusadora

— etto… no sé a qué te refieres Ishida – dijo el pelinaranja

— a mí no me engañas Ichigo – respondió Ishida causando que su amigo se ahogara con lo que estaba comiendo

— está bien, no te negare que me pone algo nervioso pensar en lo que hice, pero a final de cuentas lo hice para salvarle la vida – dijo el pelinaranja evitando atragantarse con la comida

— dime una cosa – dijo serio el chico de lentes

— ¿ahora qué quieres que te diga? – contesto Ichigo no muy seguro de querer saber la respuesta

— ¿te gusta la señorita kuchiki? – dijo finalmente Uryu mirando fijamente a Ichigo

— pues no te negare que es una mujer muy hermosa – dijo sin ningún peso de conciencia el pelinaranja

— ten mucho cuidado Ichigo – dijo Uryu preocupado

— ¿a que te refieres? – pregunto Ichigo no entendiendo a que se refería

— a que no vayas a enamorarte de la señorita kuchiki, recuerda que ella es la hermana del hombre más poderoso y rico de karakura y dudo mucho a que permita que te acerques a su hermana – soltó finalmente el peliazul

-+ yura Afrody +-

A la mañana siguiente Rukia se presentó a sus clases como cada dia, aun no podía recordar lo ocurrido el dia anterior pero eso no era impedimento para realizar sus actividades, aun a pesar de que su hermano había ordenado que se quedara en cama, ella no podía estar quieta, por lo que decidió hacer su dia normal.

— señorita kuchiki, usted debería estar en cama – dijo asustada la mucama

— no te preocupes Hinamori, estoy muy bien – dijo la pelinegra mientras leía

— pero su hermano dio órdenes de – la castaña fue interrumpida por la pelinegra

— mi hermano no está, además no me estoy esforzando mucho – Rukia le dio un sonrisa a su mucama para decirle que estaba bien

— está bien, pero no dude en llamarme si necesita algo- dijo la castaña retirándose

— espera Hinamori, ¿tú sabes que fue lo que paso el dia de ayer? – pregunto la pelinegra esperanzada de que le dijera algo

— pues tengo entendido que kurosaki la trajo toda mojada y dijo que la había sacado del lago enseguida de que usted cayera dentro de el – dijo la castaña con un dedo en su mejilla

— ¿kurosaki? – pregunto extrañada la ojivioleta

— es uno de los jardineros, él se encarga de la zona del lago – dijo la castaña

— ya veo – dijo la pelinegra con una sonrisa

— ocupa otra cosa ¿señorita kuchiki? – pregunto Hinamori

— no Hinamori, muchas gracias – contesto la joven

-+ yura Afrody +-

Como cada dia Ichigo se había presentado a sus clases y al terminar llego a la mansión kuchiki para trabajar, no había podido dormir bien pensando en lo que Ishida le había dicho, le gustaba la señorita kuchiki, y ¿a quién no le gustaría?, si ella era muy hermosa, pero por muy tonto que fuera cualquiera sabría que ese era un amor imposible, por las diferencias que había entre ellos.

— Ichigo – lo llamo un joven pelirrojo sacándolo de sus pensamientos

— dime, Renji – contesto el pelinaranja

— el señor kuchiki quiere verte en su estudio – dijo seriamente

— ¿no sabes por qué? – pregunto Ichigo con la misma seriedad

— la verdad no… pero… supongo que tiene que ver con que salvaras a su hermana – contesto el pelinaranja invitando a pasar a Ichigo

— está bien – dijo el pelinaranja entrando a la casa

Caminaron por un lago vestíbulo que conectaba el comedor, la sala, la escalera hacia la planta alta y un baño, caminaron unos pasos más y toparon con una puerta en la cual Renji toco

— adelante – se escuchó una voz desde el otro lado de la puerta

— buenas tardes señor kuchiki – dijo el pelirrojo asomándose por la puerta

— ¿encontraste a kurosaki? – pregunto el líder de los kuchiki sin apartar la vista de los papeles que revisaba

— sí señor, aquí esta – dijo Renji entrando con Ichigo detrás de el

— ¿quería verme señor? – pregunto el pelinaranja

— pasa, toma asiento – dijo el pelinegro levantando la vista

— gracias – contesto el pelinaranja sentándose frente al kuchiki

— retírate Renji – dijo el pelinegro con voz fría

— si señor – contesto el pelirrojo retirándose y cerrado la puerta

— tengo entendido que tu salvaste a Rukia el dia de ayer – dijo Byakuya colocando sus codos sobre el escritorio y entrelazando sus dedos

— así es señor, vi cuando la señorita kuchiki se cayó al lago y la ayude inmediatamente – contesto el pelinaranja algo nervioso ante la imponente presencia del pelinegro

— debo agradecerte, Rukia es lo más preciado que tengo – dijo el pelinegro

— no tiene nada que agradecer – dijo el pelinaranja

— claro que sí, el clan kuchiki está en deuda contigo – dijo finalmente Byakuya

— cualquiera en mi lugar habría hecho lo mismo—contesto Ichigo tranquilamente

— aun así, si necesitas algo no dudes en mencionarlo – miro fijamente a Ichigo

— gracias señor, lo tendré en cuenta, necesita algo mas – pregunto Ichigo poniéndose de pie

— no, puedes retirarte – dijo el pelinegro volviendo a sus papeles

-+ yura Afrody +-

Después de haber bajado a saludar a su hermano Rukia salió nuevamente a ver el bosque de cerezos, nuevamente se dirigía hacia el lago, realmente quería agradecerle a Ichigo kurosaki el haberle salvado la vida, y sabía que lo encontraría en la zona que le correspondía.

Al llegar al lugar no vio a nadie, por lo que decidió esperar, tomo asiento en el mismo lugar que el dia anterior y observo fijamente el lago, se veía tan apacible y tranquilo, resultaba increíble de pensar que algo tan hermoso pudo haberla matado y en ese instante cayo en cuenta de que nuevamente había sido salvada, todo por culpa de su descuido, ¿de verdad era ella tan indefensa?

— Rukia, oye Rukia – un joven de cabellos negros llamaba a la pelinegra

— kaien-dono – la ojivioleta estaba completamente sorprendida

— ¿esperabas a alguien más? – dijo el pelinegro con una sonrisa

— etto… pues si… digo no… pero es que es imposible… usted está muerto por mi culpa – dijo la pelinegra con lágrimas en los ojos

— no seas tonta kuchiki – contesto el pelinegro dándole un ligero golpe con su dedo índice en la frente a la pelinegra

— pero es cierto, de no ser por mi descuido… no lo hubieran atropellado… y estaría vivo – la pelinegra se hinco en el piso mientras lloraba

— Rukia mírame – el pelinegro tomo la barbilla de Rukia para que lo mirara

— kaien-dono – Rukia miraba fijamente a su amigo

— no fue culpa tuya… simplemente me había llegado la hora, así como un dia se fue mi querida Miyako… por fin me encontré con ella nuevamente… debes seguir adelante Rukia y ser muy feliz… prométemelo Rukia – dijo el pelinegro tomando la mano de Rukia

— se lo prometo kaien-dono — dijo Rukia abrazando a su amigo sabiendo que esa era su despedida

-+ yura Afrody +-

Ichigo salió de la casa y se fue a realizar sus labores, solo deseaba terminar lo antes posible para irse a descansar, nuevamente daba su ronda por el lago y vio a la señorita kuchiki recostada en el mismo lugar que el dia anterior, decidió acercarse para despertarla, sería peligroso si se repetía la escena de un dia antes.

Cuando se acercó se dio cuenta de que la joven estaba llorando entre sueños, estaba indeciso entre despertarla o dejarla dormir pero quería irse, iba a llamarla cuando ella despertó y lo vio.

— señorita kuchiki, discúlpeme no quería despertarla – dijo el pelinaranja excusándose por haberla despertarlo

— no se preocupe, lo estaba esperando – dijo la joven acomodándose

— ¿a mí? – pregunto el joven

— usted es kurosaki Ichigo ¿no? – dijo la chica de ojos violetas

— si… soy yo… ¿para qué me buscaba? – pregunto extrañado Ichigo

— bueno yo… quería agradecerle que me salvara – dijo apenada la pelinegra

— no tiene nada que agradecer – dijo el pelinaranja colocando una de sus manos en su cabeza, por alguna razón la chica lo ponía muy nervioso

— de todos modos gracias – dijo Rukia levantándose de su lugar y tropezando

— cuidado – grito el pelinaranja

Ichigo tomo a Rukia por la cintura para evitar que cayera, y sin querer se perdió es sus orbes violetas, el pulso se le había acelerado, ella era tan hermosa eso lo había visto desde la primera vez que la vio, pero eso ojos que no había visto antes lo habían cautivado, estaba hechizado, selo había advertido su amigo pero ya no importaba, era demasiado tarde, solamente deseaba perderse en eso hermosos ojos cada dia durante el resto de su vida, quería protegerla, protegerla de todo y hacerla feliz toda la eternidad.

Rukia sintió como unos fuertes brazos la aprisionaban evitando que cayera nuevamente al lago, miro hacia arriba y se encontró con los ojos del pelinaranja, eran tan hermosos, podía ver su alma, denotaban la bondad y el coraje del joven pero a la vez había un dejo de tristeza, una tristeza que ella quería borrar, se sentía protegida y amada entre esos brazos, podía sentir su pulso acelerarse y acompasarse con el de él, deseaba que ese momento fuera eterno, no podía pedirle más a la vida, más que estar a su lado toda la vida y poder hacerlo feliz.

— ¿está bien? – pregunto en un susurro Ichigo

— si… gracias – dijo la pelinegra nerviosa

— permítame ayudarla – el pelinaranja la soltó y tomo su mano hasta alejarla de la orilla para que estuviera segura

— gracias… kurosaki-san – contesto Rukia

— Ichigo – dijo el pelinaranja sonriendo

— ¿Cómo? – pregunto la ojivioleta

— llámame solo Ichigo – dijo el pelinaranja tomando la mano de la pelinegra

— Ichigo – susurro la pelinegra

— ya es tarde señorita kuchiki… la acompañare hasta su casa – Ichigo soltó a la pelinegra y trato de recuperar la compostura

— Rukia… solo dime Rukia – sonrió la pelinegra

Ambos caminaron hasta la entrada de la mansión después de haber dejado a la pelinegra Ichigo se retiró a su departamento para descansar, pues había sido un dia lleno de emociones, ese dia Ichigo y Rukia durmieron profundamente, por fin se sentían tranquilos y en paz.

-+ yura Afrody +-

A la mañana siguiente Rukia se despertó muy temprano, asistió con Byakuya al doctor como le habían indicado y termino sus labores lo más rápido que pudo, tenía tantos deceso de volver a ver a Ichigo que debía apurarse, como los días anteriores llego al lago y lo espero sentada en el mismo lugar hasta que el llego.

— ¿Rukia que haces aquí? – pregunto Ichigo acercándose a la pelinegra

— te estaba esperando – dijo la joven mirándolo

— ¿tienes mucho esperándome? – pregunto el chico sentándose junto a ella

— un poco, pero no te preocupes, entiendo que tienes obligaciones, yo he terminado con las mías antes de tiempo para venir – contesto Rukia dándole una sonrisa

— ya veo, de ver sabido me hubiera apresurado yo también – Ichigo miro a Rukia

— no te preocupes, de cualquier manera me gusta estar aquí – Rukia miro fijamente el lago con una sonrisa

Los dos jóvenes se quedaron durante horas platicando de sus vidas, de sus gustos, de cualquier cosa que se les ocurriera, cada dia era la misma rutina, ambos apuraban sus labores y se encontraban en el mismo lugar, era su lugar secreto, donde podían ignorar sus diferencias sociales, poco a poco sus sentimientos se fueron intensificando hasta que un dia su amistad se transformó en algo más.

Rukia esperaba a Ichigo como cada dia, sentada a la orilla del lago bajo el cerezo, leía un poco y se había quedado dormida, Ichigo llego y se quedó observándola, era tan hermosa, la amaba, la amaba con toda su alma, aunque fuera un imposible, ya no importaba, en ese lugar solo importaban ellos, no había podido evitarlo y roso su mejilla con el dorso de su mano.

— Ichigo – Rukia despertó

— discúlpame, no quería despertarte – dijo el pelinaranja mirándola fijamente

— no te preocupes – tomo la mano de Ichigo y la presiono mas a su rostro

— Rukia – Ichigo no podía más y poco a poco acerco su rostro al de Rukia

— shh – susurro Rukia y lo beso, un beso tierno suave y largo

— perdona… Rukia, yo – Ichigo se separó preocupado

— tranquilo, está bien – la joven tomo entre sus manos el rostro del pelinaranja

— Rukia, ya no puedo esconderlo más… tengo que decírtelo – Ichigo miraba con aflicción a Rukia, debía decírselo sin importar nada

— puedes decirme lo que sea Ichigo – contesto la pelinegra

— tengo miedo – el pelinaranja tomo las manos de Rukia entre las suyas

— ¿miedo de que? – la pelinegra miraba fijamente al joven

— de lo que piense, de que lo que voy a decirte lo cambie todo – dijo apartando la mirada con tristeza el pelinaranja

— Ichigo, mírame – Rukia tomo nuevamente el rostro de Ichigo para que la mirara

— Rukia yo… yo… yo te amo – finalmente lo había dicho, tomo las manos de Rukia y las beso tiernamente, se puso de pie y a punto de retirarse cuando la mano de

— Ichigo… no te vayas – la mirada de la pelinegra rogaba que se quedara

— debo irme Rukia – Ichigo no podía mirarla

— yo también te amo Ichigo – Rukia se puso de pie y lo abrazo por la espalda

— ¿Qué dijiste? – Ichigo se di la vuelta, no podía creer lo que le había dicho

— que yo también te amo – Rukia miro fijamente a Ichigo, las lágrimas habían comenzado a salir

— Rukia… mi Rukia – Ichigo abrazo fuertemente a Rukia y la beso nuevamente, con un beso lleno de intensidad y ternura, era inmensamente feliz

— Ichigo – Rukia no podía dejar de llorar

— ¿por qué lloras? – pregunto preocupado el pelinaranja

— es porque soy muy feliz – Rukia le dio una enorme sonrisa

— Rukia, sabes que lo nuestro es imposible ¿cierto? – el pelinaranja miraba seriamente a Rukia

— ¿por qué dices eso? – la pelinegra miraba preocupada a Ichigo

— yo soy humilde y de clase social inferior, tu hermano jamás me aceptaría – el pelinaranja miraba con tristeza a la chica

— no me importa Ichigo, no me importa la clase social, no me importa lo que mi hermano diga, yo te amo, te amo con todo mi ser, con toda mi alma y solo quiero estar a tu lado – Rukia se abrazó fuerte mente a Ichigo

— Rukia, yo te prometo, que me esforzare, daré todo de mí para ser digno de estar a tu lado – tomo el rostro de Rukia entre sus manos

— ya eres digno mi amor – dijo Rukia antes de besar nuevamente a Ichigo

Y así, quedo hecha una promesa, la promesa de llegar a la altura, la promesa de obtener la bendición del líder de los kuchiki, la promesa de que hasta que ese dia llegara, se amarían en secreto, en ese lugar que solamente ellos compartían, que se amarían hasta el final de los tiempos, sin importar que su amor fuera prohibido.

AQUÍ TERMINA ESTE ONESHOT, ESPERO LES HAYA GUSTA, EN LO PERSONAL ME ENCANTO, DEJEN REVIEWS Y AGRÉGUENME A SUS FAVORITOS.