Este es mi primer fic, supongo que a lomejor algunos ya lo habrán vsito en alguna otra parte... Me anime a subirlo aquí y espero que lo disfruten y os guste

Espero críticas y demás, gracias por pasaros por aquí

Capítulo uno: celebración

Eragon acababa de despertar de su trasformación y tardó un poco en readaptarse a la fiesta, se reanimó al ver que Arya estaba bailando y que la reina había perdido su habitual seriedad, y se dejó llevar por la fiesta que lo llenaba de felicidad. Mientras tanto Saphira se relajó e intentó dormirse pero algo perturbaba sus sentidos, tenía el presentimiento de que un ente se aproximaba, y que no sería nada bueno pero confiaba en las barreras naturales de la ciudad.

Elhian volaba tan rápido como podía, sus alas de fuego, fruto de un hechizo que la consumía, se batían todo lo rápido que podían y sin embargo tenía la sensacion de que llegaba tarde, de que no llegaría a tiempo de avisar a la reina y que todos los elfos morirían. Al llegar a la barrera, ni siquiera se detuvo, el vigilante sabía de sobra quién era ella y la dejó pasar sin ninguna objeción, esperando que lo que fuese a hacer mereciese la pena. Se había saltado todas las normas de seguridad y ya pagaría por ello más adelante. Mientras tanto la elfa seguía acelerando la velocidad mediente otro hechizo mágico, y buscó a la reina en el palacio real cuando recordo la celebración que se estaba llevando a cabo, y sin más volvió a levantar el vuelo en busca de la reina y del resto del pueblo élfico que estaba a punto de sucumbir a manos del tirano.
Saphira se levantó de un salto, fuera lo que fuese lo que se acercaba estaba dentro del bosque, o había matado al guardián, o la había dejado pasar, aunque por la velocidad que llavaba lo dudaba mucho. Así pues, avisó mentalmente a un Eragon bastante alegre, que al principio no hizo caso de las advertencias de Saphira, lacual tuvo que resignarse. Mas poco a poco su nerviosismo fue aumentando hasta que no pudo más y agarró a Eragon con una zarpa, hasta que consiguió que reaccionara.
-Algo se acerca- le comunicó, a lo que el respondió

-Es imposible, las barreras ...

-Las barreras no han echo nada Eragon, tengo miedo.- Dijola dragona mirando al cielo, una bola de fuego acaba de aparecer a lo lejos y se dirigía hacia ellos con asombrosa velocidad. Saphira no pudo hacer mas que esconder a Eragon detras de sí misma y esperar a que la cosa esa no acabase con todos ellos.

Elhian decendió rápidamente y casi cayó al suelo si no se hubiese estabilizado con sus alas. Buscó a la reina con la mirada y se detuvo una milésima en la dragona que la miraba amenazadoramente, pero no perdió el tiempo y encontró a la reina con Arya al lado, seria. - Cómo ha cambiado- pensó Elhian para sí, y poco a poco perdió su rasgos felinos y volvió a su forma élfica, afortunadamente nadie la reconoció y se permitió observar a Arya unos segundos. - Ha cambiado mucho, parece más triste¿se acordará de mi?-. Pero no penso en eso y se dirigió acia la renia con paso firme, se detuvo a pocos pasos e hizo una reverencia. - Quién me iba a decir a mi que le haría una reverencia a la reina?- se dijo para sí, lentamente miró a la reina a los ojos, temerosa de que la reconociera, lo que no sucedió. - Han pasado casi 100 años, cómo me va a recordar?- tomó aire, se acercó más a su oreja y murmuró

- Mi reina, un ejército de úrgalos viene hacia aqui, esta vez encontrarán la ciudad, al parecer el tirano encontro la forma de llegar hasta aquí, debéis organizar la defensa cuanto antes-

La elfa se retiró despacio hasta quedar delante de la reina. - Es curioso, no habría vuelto hasta aquí de ningún modo- se dijo mientras recordaba con amargura los pocos años que pasó allí - pero esta misión es más importante que mi pasado-.
Después de unos instantes que a Elhian le parecieron eternos la reina tomó una decisión
-¡¡¡Escuchad, habitantes de Ellesmera, hoy el enemigo llamará a nuestra puerta, pero no la abriremos, armaos y preparaos para la batalla¡Defended Ellesmera con vuestra propia vida si es necesario!- Todos los elfos parecieron dudar un instante, pero reaccionaron rápidamente y recobraron el control de sí mismos mientras volvían a prepararse. Eragon miró una vez más a la recién llegada e inexplicablemente notó un parecido con Arya que pocos llegaron a observar.
-Ten cuidado, no estaré allí esta vez-la voz llego a la agitada mente de Elhian, la relajó y la hizo sentir más segura

-Gracias, no se que haria sin ti, Alhonn.

Yse dirigió a informar a la reina de la posisción del frente enemigo.