/¡Hi!

Nuevamente me presento aquí con un nuevo fic, de South Park… Si ya se que parece que es lo único que escribo, pero es que tienen material para lo que busco xD –Don't kill me (¿?)-

Bueeeeno, espero les guste, este tiene algo de ecchi –no se escribir lemmon asi solo yaoi(¿?)- pero intentare subirle el tono ;)

¡Ok! Lean y, disfruten./


Capítulo 1 (Alumna nueva...)

Es una mañana tranquila, como muchas en el pequeño pueblito de South Park, Colorado, camiones de mudanza avanzan deteniéndose en la casa donde iban a descargar su carga. Una familia nueva se había mudado al pueblo, una familia de tres, todos entraron al lugar el cual sería su nuevo hogar, inspeccionaron con detalle cada una de las habitaciones del lugar, uno de los integrantes decidió subir y no salir de su cuarto, miro hacia afuera, sujetándose del marco de su ventana, admirando el paisaje mientras que la luz del sol hacia sombra en la capucha que ella tenía puesta, sin dejar ver sus ojos o su rostro; sus padres subieron, divisaron la silueta que se posaba frente a la ventana, le llamaron.

-Cariño, iras a la escuela a partir de hoy, la Preparatoria de South Park, estoy segura que te integraras pronto-sonrió su madre

-Vamos, sal o se hará tarde-termino su padre

La silueta tomo su mochila, la colgó sobre sus hombros y salió de la casa, sujetando el gorro de su capucha para que el viento no se la levantase, camino unos pasos, sus vecinos también iban de salida, un par de hermanos, uno más grande que otro, el mayor llevaba una ushanka verde, que de a poco dejaba ver su cabello pelirrojo, y el menor, era azabache, muy bien vestido y bien parecido; parece que iban tarde, la madre de ambos salió y les informo que subieran al auto, ella los llevaría, cuando divisaron a su nuevo vecino, le miraron y ella enuncio:

-Oh, hola cielo ¿Vas a la Preparatoria no es así?-asintió-Ven, vamos, te llevare a la escuela, mi hijo Kyle va ahí-informo

-Vamos es tarde-dijo el pelirrojo subiendo junto con su hermanito

La figura, se encogió en brazos, subió y se encaminaron hasta la escuela, llegando unos minutos antes gracias a la señora Broflovski. La mujer se despidió de sus hijos y después de quien les acompaño.

-Bueno, aquí es la Preparatoria-comento Kyle-asintió-Es bueno, apenas vamos a iniciar el semestre; estoy seguro que te integraras rápido

-Gracias...-dijo como en un susurro.

En el momento en el que, caminaba de tras de Kyle, fue empujado por accidente, enseguida se dio la vuelta, dispuesto a enfrentar a quien le empujo, topándose con una dulce y tímida mirada, proveniente de un rubio chico de suéter azul.

-D-Disculpa-dijo con miedo a que le llegasen a golpear, pues el aspecto de la persona que empujo era imponente e intimidante

-No hay problema-relajo su cuerpo e iba a seguir, hasta que le hicieron burla al pequeño rubio

-¡Vaya Butters! No sabía que fueras tan marica como para disculparte con un debilucho como aquel-comento el castaño

-¡Agh! Cartman...-dijo Kyle con molestia

-Y dime ¿Así que eres amigo del judío, eh? ¿Qué se siente ser amigo de un jodido judío?

-¡No me llames jodido judío, gordo culón!-gritoneo el otro

-En todo caso... ¿Cómo es que pudiste acoplarte a el judío? ¿Por qué no golpeaste a Butters? ¿Sera que eres un debilucho marica como el?-siguió atacando con sus palabras

-¿Quieres comprobarlo?-dijo dándole la espalda a Cartman

-¿Que? Espera... Cartman es...

-Si... Prevelo judío, para que se arrepienta de estarme jodiendo

-No te tengo miedo, masa de grasa que se hace llamar humano-dijo sin miedo en su voz

-¡Ya me estas cabreando!-dijo intentando darle un puñetazo, sin lograrlo

-La que se está cabreando soy yo-detuvo el puño con su mano e impulso a Cartman contra si para golpearle con la rodilla en el estómago-No soporto que se metan con los que son más débiles-comento-Vamos, se hace tarde-le menciono al pelirrojo, este asintió inmutado y le guio nuevamente a la entrada

-Ah... Hey Kenny-saludo el pelirrojo, el chico de la sudadera naranja saludo con la mano y vio que tras de su amigo una figura con capucha azul grisácea le seguía, frunció el ceño y se acercó sin tocarle; le miro de arriba hacia abajo sin verle el rostro ¿Una copia barata de si? Que vergüenza...

Todos entraron a la escuela, el timbre ya había sonado y esa lucha de miradas tuvo que interrumpirse. Se quedó fuera del pasillo, siendo parte nuevo del alumnado debía esperar a que su profesor le presentase, su clase, seria con el Sr. Kensington y el grupo donde Kyle estaba tomando clase, el Sr. Kensington dio los buenos días, ordeno se sentasen y enseguida llamo a quien esperaba de pie afuera del aula...

-... Hoy tenemos un nuevo alumno, es decir, alumna y quiero que le den una calurosa bienvenida-la puerta se abrió-Preséntate por favor-todos se miraron, dijo "alumno" seguido de "alumna" y después aparece quien golpeo a Cartman defendiendo a Butters ¿Que mierda pasaba?

-¿Quién es ese?-pregunto Stan

-Es mi vecino-susurro Kyle, la garganta de quien se encontraba junto a Kensington se aclaró, enseguida todos pusieron atención

-Mi nombre es Beckye Robins, gusto en conocerlos-sonrió de lado, lo único visible para los demás

-Descubre tu rostro para que te conozcamos Beckye-pronuncio el profesor, ella asintió con la cabeza y bajo su capucha dejando ver un hermoso rostro y bella cabellera color castaño claro amarrada con una coleta baja, poseía un rostro tan fino, una pequeña nariz y unos ojos color miel que hacían juego con esa hermosa tez blanca de la cual era poseedora.

-¿Ella fue quien golpeo a Cartman?-cuestiono Craig

-¡Gah! Eso parece... ¡Ngh! No se ve tan inofensiva

-¡Vaya Cartman! Fuiste humillado por una chica-rio Token-Es la segunda después de Wendy

-Pero parece ser una buscapleitos-enuncio Bebe

-¿Una gamberra?-pregunto Pip

De pronto, Kenny se levantó de su lugar y se acercó a Beckye, le barrio con la mirada, examino cada detalle de su cuerpo y por último, para ser más exacto en saber si era chica o un travesti, con su dedo índice derecho toco uno de los pechos de ella, así, sin miedo; la cara de todos fue de sorpresa máxima, pero no tanto como la de ella que era una mescla entre indignación y vergüenza; y ya para terminar, Kenny aún no estaba convencido al 100% y con ambas manos apretó los pechos de ella, seguido de eso ella le dio un puñetazo a puño cerrado justo en la mejilla, así tirándole al piso por tal y desagradable acto del rubio. Volvió a ponerse su capucha para que no vieran su rojo rostro y se alejó centímetros del semi-muerto rubio

-¡Oh cielos, mato a Kenny!-dijo Stan

-¡Hija de...!-Kenny comenzó a moverse antes de que Kyle terminase su oración

-Kenny, a la enfermería-dijo Kensington molesto-¿Algo que quieras decir Beckye?-en el salón se escuchaban murmullos que aclaraban que ella no era una buena persona, a lo que ella sonrió de lado nuevamente y contesto

-Si... Hay algo...-todos le miraron-No me importa que crean de mí, digan lo que digan me vale mierda, así que, el próximo que se quiera meter conmigo sufrirá el doble que sus amigos-golpeo la pizarra exaltando a todos, incluso al Sr. Kensington

-T-Toma asiento-señalo al lado de Pip, ella camino y se sentó, con cuidado dejando sus cosas bajo su pupitre

-D-Disculpa Beckye... No puedes llevar todo tu rostro cubierto... Debes retirarte la capucha...-dijo temeroso

-Oh si-en seguida se despojó de su capucha y dejo ver de nuevo el hermoso rostro que poseía, pero eso no calmaba a nadie en lo absoluto

La clase comenzó, todo parecía normal, de no ser que la chica de irascible carácter y ojos color miel estaba sentada, mirando atentamente a todos desde su lugar al fondo del salón, sentada junto al rubio inglés, Phillip o Pip como le hacían llamar burlonamente desde hacía años. Todos estaban nerviosos, pero no tanto como Pip, de tanto que temblaba su pupitre a causa de su miedo, una de sus plumas-o lapiceros- cayó al suelo a los pies de Beckye, quien al sentirlo, parpadeo una vez, miro al rubio inglés, luego miro la pluma que descansaba en el suelo y se inclinó a recogerla; al incorporarse para entregar el objeto, acomodo su flequillo tras su oreja izquierda, y le sonrió...

-Toma, creo que es tuya-acerco con amabilidad la pluma

-Si... Gracias-tomo su pluma, la miro a los ojos y le sonrió, olvidando lo intimidante que ella pudo ser hacia un rato

Comenzaron a platicar, ella era diferente a los demás, fue la única que no le dijo "francés", le trato con confianza, respeto y educación, algo que ninguno de sus compañeros pudo hacer cuando niños, se sentía tranquilo a su lado, muy a gusto, sin llegar al punto de enamorarse, se disculpó por haberle llamado "gamberra" y así, llego el timbre que anunciaba la hora del almuerzo.

Continuara…