Sus manos tocaban cada parte de mi cuerpo, apretando más fuerte en aquellas zonas que le gustaban más, aunque en algunos momentos era dolorosa la forma en la que exploraba mi cuerpo, no podía quejarme, eran las reglas, al final de cuentas, ella me había elegido, y si yo quería su protección tenía que aguantar, así eran las cosas en Evergarden, no estaba segura si los profesores lo sabían, y tampoco quería descubrirlo, necesitaba conservar mi beca para poder terminar mis estudios en aquel instituto de prestigio, este era mi último año y por fin sería libre de aquel tormento.

Sus ojos grises azulados miraron los míos y sonrió, siempre sonreí al ver mi rostro sonrojado, quizá pensando que yo disfrutaba de aquello, muy en el fondo de mi obscuro ser no podía evitar sentir cierta lujuria, pensando hasta donde sería capaz de llegar aquella vez, pero por otro lado, mi miedo al sobrepasar el límite con alguien a quien no amaba me detenía al pensar aquellas cosas.

Su boca llegó hasta mi cuello, y al principio, lo que era una suave caricia con sus labios, se volvía en una dolorosa mordida, sabía que mañana amanecería con una marca de dientes, sabía que mañana al verla caminar por los pasillos sonreiría con altanería al verme marcada por ella, marcada como un vil ganado.

La furia me estaba consumiendo, pero nunca dejaba que esta saliera, temía tanto en las consecuencias que podía acarrear dejarme llevar por mi enojo que al final la sumisión me controlaba.

Ella se separó de mi y me miro por varios segundos sin borrar su sonrisa arrogante, limpio la comisura de sus labios y se levantó abrochándose la blusa.

-vístete- me dijo con voz fría mientras ella caminaba hacia su espejo

Yo me levante de aquella enorme cama y abroché el botón de mi pantalón, tomé mi camisa que estaba tirada en el piso y arreglé poco a poco mi ropa, colocándome por último el suéter que mi madre había hecho para mi, una vez lista, levante la mirada y la vi mirándome con el ceño fruncido.

-no piensas ponerte la pulsera?- preguntó interrogante

mire hacia todos lados, y la encontré tirada aún lado de la pata derecha de la cama, suspire y la puse en mi muñeca izquierda.

- créeme, yo disfruto tanto como tú esto- camino hacia mi- si te tengo aquí es únicamente por lástima -dijo hirientemente

-si es así- dije en voz baja- porque me elegiste a mi- la mire fijamente- pudiste haber elegido a alguien más... entonces, porque a mi?-

Ella suspiró y se lanzó a la cama.

-si tanto te desagrada estar conmigo puedes irte- cerró sus ojos

-porque nunca me respondes?- fruncí el ceño

-porque no hay nada que responder Granger- se recargó en sus codos y me miro- eres débil, esa impresión frágil que das me dio tanta tristeza que no pude evitar compadecerme de ti ok- Volvió a acostarse- o que?, acaso prefieres ser de las chicas surplus y dejar que cualquiera te haga lo que yo?, créeme se defraudarian tanto al saber que ni si quier sirves para eso- se burló

Mis puños se cerraron por la forma despectiva que se refería a las chicas que no habían sido elegidas por nadie.

- tienes suerte que te pinte como una salvaje en la cama, muchas mueren por tenerte -

-eres de lo peor- dije

-puede ser- susurró- ahora, si no tienes nada más que decir, lárgate de mi habitación quieres, tengo visita en un rato y quiero descansar-

Apreté mi mandíbula ante su actitud y sin más, salí de su habitación, al encontrarme en el pasillo, me recargue en la pared y unas enormes ganas de llorar me invadieron, no podía darme el lujo de ser débil, respiré hondo y salí de aquel lujoso edificio.

Hace cinco años había ingresado a esa institución, ingenuamente me sentía tan orgullosa de asistir a un lugar tan prestigioso, visualizándome en un futuro como alguna futura, empresaria, presidenta o con un cargo importante que desafiará mi intelecto, pero después de tres años, y ahora con diecisiete años no sabía si quería seguir en aquel lugar.

Evergarden se dividía en dos zonas, una era la zona de las chicas privilegiadas, todas ellas eran hijas de algúien de la realeza, empresario o multimillonario, personas con poder, haciendo que ellas liderarán aquel lugar , y otras, eran chicas como yo, chicas becadas que venían de familias "normales", no carecíamos económicamente, pero para un lugar como aquel, nosotras sólo éramos pobretonas que con nuestra inteligencia habíamos logrado tener un lugar ahí.

Los primeros tres años, habían sido increíbles, no se marcaba tanto la distinción de clases, todas convivíamos pacíficamente, quizá no éramos las grandes amigas con las chicas de clase alta, pero nos trataban con respeto, lo peor llegaba cuando pasábamos a High school, al cumplir los quince años, todo cambiaba, las chicas de clase alta se les asignaba el estupido nombre de suprem, cada suprem tienia el derecho de escoger una Doll, que seríamos las chicas becadas, la ceremonia se realizaba en una habitación cerca de la biblioteca, todas las Dolls eran puestas en un escenario y después iban nombrando a una suprem la cual eligiria a una de nosotras, si eras elegida la suprem te reclamaba como suya dándote algún objeto que identificara a la chica, y cómo Doll tenias que pagar por su protección de cualquier forma que ella te lo pidiera, desde ser su sirvienta hasta realizar actos sexuales, en realidad, no todas ellas eran malas, era raro, pero también habían suprimes que trataban a su Doll como igual, lo lamentable de toda esta situación era cuando no eres elegida por nadie, a esas chicas se les llamaban surplus, al no tener nadie que te protegiera eras susceptible a que cualquier suprem hiciera contigo lo que quisieran, era a lo que se refería ella, mi protectora.

Su nombre era Elizabeth Stonem o Effy como todas la llamaban, hija de un importante empresario, era la única heredera de aquel imperio y por lo tanto su personalidad era altanera, arrogante y presumida, podía encontrarle muchos defectos, pero realmente yo no podía quejarme, a pesar de todo, ella nunca me había tratado tan mal, hasta cierto punto podía sentir que aún me trataba como persona, quizá era porque cuando íbamos a middle school soliamos hablar, o quizá fue por que ella se lo pidió, no lo sabía, y nunca tendría una respuesta.

No sabía en qué momento había llegado a esos jardines, miro su reloj el cual marcaba las diez de la noche, estar sola a esa hora era un poco peligros pero tenía tanto tiempo sin ir a aquel lugar que cuando llegó a esa enorme fuente tomó asiento y abrazo sus rodillas, aquel había sido uno de los últimos lugares que había visitado con ella, aún recordaba su aroma frutal, su cabello rubio brillando con el sol y en especial aquellos ojos azules de color zafiro.

-Fleur- susurro con nostalgia

Porque se había ido?, porque no le había dicho nada?, simplemente un día no había aparecido, y por más que había pedido respuestas a las amigas de la rubia ninguna le había dicho nada, solo la miraban con aquel rostro de indiferencia para después ignorarla completamente, ni si quiera Effy le había dicho nada, y por eso estaba tan molesta con la chica de cabello castaño obscuro, Fleur y Effy habían sido muy buenas amigas en Middle school, y ella y Fleur podría decirse que eran mejores amigas, eran muy pocas chicas ricas que lograban hacer amistad con las chicas becadas pero ella y Fleur habían conectado desde un principio y desde su primer año en aquella escuela no se separaron ni un solo día hasta el día de su graduación de la middle school.

De repente el enojo volvió a ella y recordo aquel momento en que Fleur y ella se enteraron de todo lo que se vivía en High school, faltaban un par de semanas para terminar el curso, y aquel día, ella y Fleur habían salido a caminar después de varios días que la chica de rizos no pudo ver a la rubia, por alguna extraña razón habían terminado en los jardines del ala oeste, los cuales eran utilizados por las chicas del nivel superior, lo primero que les llamó la atención había sido aquella enorme fuente estilo Saint-Cloud park , era hermosa, ambas se habían mirado con complicidad viendo la aprobación en sus ojos par acercarse a ella, era sabido que las chicas de nivel inferior tenían estrictamente prohibido entrar al área de las chicas de nivel superior, pero en aquel momento el lugar estaba solitario, nadie se enteraría, así que ambas se acercaron a aquel lugar, recordaba las palabras exactas de Fleur contándole que en paris había una Fuente muy parecida, diciendole lo deseosa que estaba por qué algún día fuera a visitarla, enumerándole todos aquellos lugares que quería ver con ella, tan ensimismadas estaban que no escucharon que alguien se acercaba, cuando lo notaron, Fleur había tomado su mano y la había jalo hacia unos arbustos, y entonces lo escucharon, aquellos sollozos se habían detenido cerca de ellas, ambas se miraron y trataron de aguantar la respiración.

-mierda!, cómo odio que corran- escucharon la voz agitada de una chica

- por favor!, se los ruego- decía la chica que lloraba- haré cualquier otra cosa que me pidan!

- crei que había quedado claro que es lo que queremos surplus- dijo otra voz que al parecer se había acercado a la chica

Fleur y hermione se miraron con el ceño fruncido ante la extraña palabra que habían escuchado.

- yo... no puedo hacerlo- apenas escuchamos su voz

-que no puedes?, y puedo saber porque la señorita no puede?-

-yo... tengo novio- susurró y entonces todas rieron

- es algo que no nos importa, nadie quiere una relación contigo-

-pero yo...

-Angelina- dijo una voz más tranquila- sabes que es algo que tienes que cumplir cierto?, quiero decir, se que tus padres están muy orgullosos por los logros que has obtenido en el instituto, sin mencionar que la beca que por cierto, nuestro padres financian hacen que Tus padres duerman bien por las noches, sin ninguna preocupación o algo por el estilo.

Los sollozos de aquella chica llamada angelina volvieron a escucharce.

-shshshshsh... no hay porque llorar... solo tomaremos lo que por derecho es nuestro y felizmente podrás irte una vez que terminemos- está bien?- preguntó la chica pero no escucharon respuesta de la otra- buena chica- y las dos chicas escondías supusieron que la otra había aceptado

Al no escuchar nada más que risillas ambas levantaron la cabeza para poder ver qué hacían y quedaron perplejas ante lo que sus ojos veían, cuatro chicas rodeaban a la que supusieron era angelina, esta poco a poco quitaba sus prendas, mientras una de ellas la tomaba de la cintura y la besaba, otra tocaba ciertas partes de su cuerpo y las otras solo miraban con lujuria.

La castaña iba a levantarse cuando la mano de la rubia la tomó fuertemente reteniéndola en su lugar y negando con la cabeza para que no lo hiciera, como pudo sacó de ahí a la castaña y cuando vieron que aquella chicas no podían verlas, corrieron hacia el ala contraria de los jardines.

Al principio ninguna dijo nada, solo se miraron, mientras la castaña intentaba analizar lo que habían pasado, la rubia solo la miraban con preocupación.

-'Ermione- dijo con aquel tono francés característico de la rubia- estás bien?

-que si estoy bien?- dijo indignada- acaso no viste lo mismo que yo Fleur... por dios, esas chicas... esas chicas están en este momento abusando de otra- caminaba de un lado a otro- porque me detuviste?, pudimos haber detenido esa atrocidad- vio a la rubia bajar la cabeza

-no podíamos hacer nada- susurró

-que?- preguntó- porque no?

-'Ermione-

-porque Fleur?- pero siguió sin tener respuesta- ellas hablaron de la beca, porque la amenazaron como si ellas pudieran quitársela?- miro a la rubia y vio que volvía a bajar su mirada con pesar- tu sabes... tú sabes de qué va todo eso?- y la rubia solo asintió- explícame- dijo apenas en un susurro- por favor

Fleur la miro por unos segundos y suspiró, tomó su mano y la llevo hacia una banca cerca de donde estaban.

- hay... hay muchas cosas que oculta este instituto 'Ermione- dijo sin soltar la mano de la castaña- muchas cosas son buenas... pero otras como lo que acabas de ver, son cosas horribles.- tomó aire y esta vez evitó la mirada de la de cabello rizado- como sabrás, muchas chicas de clase alta ya tiene su futuro planeado, será raro de escuchar, pero la mayoría hasta tienen un prometido desde el día en que nacieron.

-prometido?- no pudo evitar preguntar- es en serio?- sonrió pensando que era una broma, y como no pensarlo si se encontraban en pleno siglo XXI, pero al no ver ningún signo de broma por parte de Fleur su ceño se frunció y un pensamiento invadió su mente, miro con pánico a Fleur y apretó su mano para llamar su atención, lográndolo inmediatamente- acaso tú... - pero no pudo terminar su pregunta, de repente una extraña inseguridad invadió su cuerpo

-que si tengo un prometido?- terminó su pregunta por ella- no por el momento- respondió la rubia mirando el suelo- pero quizá lo tenga en un futuro

Y entonces por algún extraño motivo que no entendía sintió algo romperse en su interior

-muchas de las uniones son necesarias en estos círculos 'Ermione, ya sea para mantener los negocios familiares o bien par hacerlo más rentables - volvió a mirarla- es por eso que muchas chicas al tener su prometido, buscan experimentar cosas que no podrán hacer una vez que contraigan matrimonio, para muchas chicas este instituto es una forma de liberacion y rebeldía, para otras es una forma de conocer el amor- la miro a los ojos- al cumplir los quince años, las de nivel superior becadas se catalogan como aptas para ser una Doll-

-una Doll?, ósea, chicas como yo?- preguntó la castaña

-si-acepto- ... ellas... realizan cualquier cosa para tener satisfecha a su suprim si es que ha sido elegida, mientras que la suprime está a cargo de la doll, es la responsable de cuidar su seguridad, evitando que otras suprime quieran propasarse con ella, en realidad, no todas las suprime son como las chicas que vimos, muchas suelen tener un gran vínculo con su doll.

-pero la chica de hace un momento... a ella la llamaron por otro nombre... porque?-

-surplus- suspiró- son las chicas no elegidas

-pero, eso suena bien-

- no lo es- miro con tristeza aquellos ojos chocolate- al no tener alguien que te proteja, practicamente son propiedad de cualquiera que quiera tomarlas, si tienen suerte hay chicas que no son notadas en todos los años restantes, pero otras... - y no continuó esperando que la castaña supiera que se refería a angelina.

-esto es... esto es atroz!- se levantó furiosa- como es que pueden permitir esto, qué hay de los profesores, el director, el consejo?-

-no sé si ellos lo sepan- suspiró- pero ellos nunca se involucrarán, nuestros padres dan mucho dinero como para tomar reprimendas en contra de...- se detuvo

-de ustedes?- terminó hermione- de las chicas ricas?

-créeme mione, yo nunca he estado de acuerdo con todo eso, no es como yo pienso- tomó su mano- pero si es lo que tenemos que hacer... entonces yo te protegeré, no dejaré que nadie se lastime, ni que te fuerce a hacer algo que no quieres- la abrazo

-hablas como si no tuviera elección- se separó un poco de la rubia y miro a aquellos ojos azules. Segundos después se alejó de ella y trató de evitar su mirada- en verdad no la tengo cierto?

-'Erm..

-se sincera Fleur-

La rubia suspiró y abrazó por la espalda a la castaña

-no si quieres conservar la beca... pero hay otra opción para que no tengas que pasar por eso- la giró para que la mirara

-y cuál es?-

- podría hablar con mi padre, pedir que te transfieran a otra escuela y así tú...

-que?- preguntó sin creer lo que la rubia decía- cambiarme de escuela?, tú sabes todo lo que he sacrificado para estar aquí, como podría ser esa una opción?-

-sería una buena escuela 'Ermione, quizá no tan prestigiosa cómo está, pero al menos vivirías lo que resta de la high school sin preocupaciones, sin tener que ver a tus amigas haciendo cosas qué tal vez no les agrade, no lo sé, yo solo... yo solo quiero que estés bien-

-y tú?- susurró

-sabes que yo tengo que terminar aquí... es la tradición-

-Fleur- tomó su mano- entonces quiero quedarme- la miro decididas- si eres tú la que me elige en aquella atrocidad, entonces estaremos bien-

-estás segura?- preguntó la rubia

-si es contigo esta bien- sonrió

-prometo que te protegeré mione- la abrazo- sin importar que

Los brazos de la castaña la apretaron un poco más y de esa forma, aquel día, habían sellado una promesa, promesa que la rubia había roto aquel primer día de clases cuando nunca se presentó.

-vaya vaya vaya- escucho una voz que la sacó de sus pensamientos -pero que tenemos aquí?, una hermosa gatita sin su dueño

Miro hacia donde se encontraba aquella chica, y para su desgracia se topó con la peor persona que podría conocer alguien

-Párkinson- dijo secamente

-no estás feliz de verme Granger?- camino lentamente hacia ella

-debería estarlo?- la miro fijamente a aquellos verdes ojos

-no deberías ser grosera con la gente que es superior a ti- dijo mientras uno de sus dedos acariciaba su mentón- eso es muy maleducado de tu parte

-solo soy educada con las personas que lo merecen- respondio separándose para evitar el toque

La peli negra rio y lentamente camino al rededor de ella.

-siempre tan osada Granger, créeme, si yo fuera tú suprem, te ensañaría buenos modales- susurró en su oído- aunque viendo el poco interés que tiene stonem hacia ti, quizá podamos hacer un cambio- la tomó de la cintura con fuerza-lo cierto es que lanvender comienza a aburrirme

-suéltame- dijo la castaña empezando a notar que su corazón latía más rápido, por todas era bien sabido que Pansy Párkinson tenía ciertos fetiches sadomasoquistas, nadie quería encontrarse a solas con ella, y aunque Hermione no demostrara miedo en aquel momento, internamente empezaba a temblar

-sabes que soy más fuerte que tú- volvió a susurrar en su oído- si quisiera, podría tomarte en este mismo momento y nadie se daría cuenta- dijo burlona

Rápidamente aquella chica tomó las manos de la castaña y la giró poniéndolas contra su espalda

-me lastimas- dijo quejándose al sentir el dolor en sus brazos

La chica hizo más presión y la castaña soltó un quejido.

-suéltame- volvió a pedir

-o que?- se burló

-o te haré pagar- ambas chicas miraron los fríos ojos que las miraba molesta

Pansy rio y se separo bruscamente de la castaña, empujándola en el camino.

-crei que sabias las reglas Párkinson- se acercó la chica de cabello castaño obscuro- ella es mía, así que no vuelvas a tocarla- soltó con desprecio

-ya ya, tranquila Stonem, solo estaba jugando- comenzaba a alejarse con ese andar despreocupada- pero si yo fuera tu... la tendría más vigilada, muchos desean probarla y créeme, no serán tan bondadosa como yo- y sin más se alejó

Una ves desapareció de su vista la de ojos grises camino con molestia hacia la castaña, con un poco de brusquedad la jalo hacia ella y la tomó de las muñecas.

-que carajo haces aquí-

-yo solo... - tragó saliva- quería caminar un rato

-caminar?, a esta hora Granger?- reclamó la de cabello obscuro- acaso eres idiota?

-y eso que más te da a ti?- se soltó con enfado

-que que más me da?- rio- acaso esto- tomó su muñeca y señaló la pulsera que la reclamaba como suya- no te da una idea del porque me importa?

Importar? Pensó la castaña sonrojándose levemente

-tengo un reputación que cuidar, y si te ven con otra, que crees que van a pensar las demás?-

-esto es lo único que te importa?, tú estupida reputación

Effy la miro por unos segundos y se alejó.

- tu no entiendes nada- la miro seriamente- sigues creyendo que el mundo es de rosa y que todas serán tan perfectas como...- callo- olvídalo...es mejor que te vayas a tu cuarto

- como quien?- preguntó armándose de valor- como Fleur- y vio cómo los puños de la ojigris se cerraban ante la mención

-sigues pensando en ella?- cuestionó

-siempre lo hago- susurró

-pues ella no está más - se acercó de nuevo a la castaña- te abandonó, porque no lo entiendes-

- se que tú sabes el porqué se fue... si tan solo tú me explicaras, quizá yo podría... olvidarme de ella-pidió

- lo único que te diré- la tomó de la cintura- es que esa chica que tú conociste ya no existe mas- la pego a su cuerpo y Hermione pudo oler el olor a tabaco combinado con perfume- la que cuida de ti soy yo... porque no puedes verlo- espeto con enojo

Hermione quedó en silencio, de que estaba hablando aquella chica frente a ella, su respiración comenzó a acelerarse al sentir sus labios en su cuello

-a la única que tienes que mirar es a mi- susurro en su oído, se separó y miro aquellos ojos avellana

-crei que mi presencia te desagradaba- repitió lo que hace unas horas había dicho

Hermione no pudo evitar mirar sus labios cuando la otra los mordió, desde hace tres años, effy se había convertido en su suprime, y nunca, en ningún contacto que habían tenido, la castaña la había besado, porque nunca la había besado?.

-tanto como mi presencia a ti- respondió

-porque nunca me has besado?- preguntó por inercia, quizá era el momento, quizá era la admosfera, no lo sabía, en ese momento, solo quería una respuesta

La de cabello obscuro se separó lo suficiente para poder mirarla y por primera vez, Hermione noto algo diferente en aquellos ojos, no eran fríos, tenían un brillo especial, un brillo que no podía descifrar.

-porque nunca creí que lo desearas- susurró, y sintió su estómago encogerse ante la declaración

-tu... lo... deseas?-preguntó con timidez

-acaso importa?- levantó el hombro

-... no lo sé- dijo sinceramente, aquello se estaba tornando extraño, podía contar con su mano derecha las veces que habían tenido un acercamiento íntimamente verbal, pero aquel era diferente, la castaña obscura se veía diferente, pero que había cambiado desde hace una horas en su cuarto a aquel momento?

- y mis caricias?- preguntó al mismo tiempo que su rodilla se ponía entre la suyas haciendo presión en su intimidad-las deseas- poco a poco empezó a mover su rodilla y la de rizos no pudo evitar soltar un jadeo

-yo...- se sonrojo-

-me encanta tu piel- beso su cuello, esta vez dejando la brusquedad- tan suave-subió hasta su mandíbula

-effy...- susurró la castaña cerrando sus ojos

-cada vez...- sus manos habían llegado hasta los botones de su suéter- me cuesta más- desabrocho el último botón y esta vez era su camisa la que se abría dejando ver su brassier- y mas- sus manos acariciaron su esternón y poco a poco bajaban hacia sus pechos- controlarme- una de sus mano acogió uno de sus senos sacándole un suspiro al sentir cómo está lo amasaba con suavidad- he visto tu rostro... y se que te gusta que te toque- dijo haciendo sonrojar a la castaña de rizos- Tuz ojo siempre me miran expectante... preguntando hasta donde seré capaz de llegar- sonrió sobre la separación de sus senos- quieres que pare esta vez... Hermione?-

-yo... -que debía contestar, su cuerpo se sentía caliente y necesitaba enfriarlo con algo

De repente, el sonido de algo quebrarse hizo que se separaran, la ojigris camino hacia el lugar del sonido y vio un maceta hecha añicos, levantó la mirada y a lo lejos lo que parecía una caballería platinada desaparecía por un corredor.

-vístete- dijo con aquel tono frío, miro hacia la castaña que aún se encontraba inmóvil- ahora Granger- demandó

La de rizos poco a poco salió de su ensimismamiento y acomodó su ropa lentamente.

-vamos-

-que?-

-te llevaré a tu habitación- la tomó de la mano y la jalo sin decir nada más.

El recorrido fue silencioso, Hermione miro a la ojigris y noto el ceño fruncido de esta.

-estás bien?- preguntó pero no recibió respuesta

No volvió a instir, quizá habían llegado demasiado lejos, quizá la ojigris estaba molesta porque ella no había respondido, pero que quería que dijera?, su relación siempre había sido fría, en realidad, estaba un poco sorprendida por lo que había pasado, ella nunca se había dejado llevar tanto y effy nunca había actuado de esa forma.

-entra- escucho la voz de la ojigris, la castaña la miro unos segundos y abrió su puerta, estaba apunto de hablar cuando vio a la otra chica girarse e irse de ahí, dio un suspiro y entro a su habitación, sin más se lanzó a su cama soltando el aire al mismo tiempo.

Había sido un día realmente agotador, toda aquella situación la agotaba de sobremanera, tanto valía la pena aquella beca?, se lo había preguntado muchas veces, ella era demasiado inteligente como para sobresalir en cualquier escuela, sabía que llegaría lejos, por supuesto que ser egresada de Evergarden haría las cosas más fáciles pero... realmente aquello la mantenía atada a ese instituto?, o quizá se había quedado porque aún tenía esperanza de volver a ver a aquella rubia?, aunque en ese momento una nueva pregunta surgió de su mente al rememorar aquellos fríos ojos grises, apretó sus piernas al recordar la cosquilleante sensación, aquel día Elizabeth Stonem había actuado tan extraño que en ese momento se encontraba desconcertada, porqué se había comportado así, sentía curiosidad pero tratándose de aquella chica sabía que no obtendría respuestas por su parte, a menos que... se incorporó un poco y miro hacia la ventana, que pasaría si ella la provocara?... no, negó con la cabeza y se sintió avergonzada ante tal pensamiento, volvió a acostarse en su cama y miro la hora, eran las doce y medio dela madrugada, mañana iniciaría el nuevo ciclo escolar, y tenía que levantarse temprano, miro la otra cama la cual estaba vacía, su compañera aún no llegaba, era extraño, todas las chicas debieron haber llegado desde hace horas, aunque que más daba, quizá era una chica de nueva y aún no sabía del programa escolar, de repente sintió tristeza al pensar que tendría que pasar por la ceremonia suprime, se apiadó de ella, ojalá la suprime que le tocara fuera buena con ella, sus ojos empezaron a pesar y poco a poco terminó dormida, sin darse cuenta que minutos después, una chica ingresaba a la habitación, dejando su maleta aún lado de la cama vacía, aquella chica camino hasta la cama ocupada y con delicadeza se sentó observando el Pacífico rostro de la castaña.

-si Jolie (tan linda)- acarició su rostro con suavidad haciendo que la castaña apenas se moviera notando las marcas que tenía en su cuello, recorrió con sus dedos la forma de aquella mordida y después sus rojos labios besaron el lugar como si tratara de curar aquella herida, la comisura de sus labios se levantó y en seguida se dirigió a su respectiva cama, sacó de su maleta lo necesario para arroparse y poder dormir, mañana sería un día realmente interesante, una risilla se escucho en aquel cuarto y después, el silencio y la obscuridad inundó el lugar.