Este fic participa en el minireto de marzo para "La Copa de las Casas 2015-16" del foro La Noble y Ancestral Casa de los Black.

Trabajo: Fabricante de Pociones

N/A: muchas gracias a Nasuasda por ayudarme a pulir la idea y las primeras correcciones eres un amor! El resultado final ya no pude mostrarlo para corrección pero espero y no haya quedado tan mal.


Sus amigos no la tomaron en serio cuando mencionó su deseo de convertirse en Fabricante de pociones, su familia trató de persuadirla para que cambiara de opinión. Laura Madley, tozuda como su madre, dijo que no.

El recuerdo de su hermana, quien agonizó y murió debido a la viruela de dragón, la hacía desear encontrar la cura que la erradicara. Para honrarla, para que otros no tuvieran la misma sensación de impotencia que ella tuvo en su momento.

Fue difícil, pero su dedicación y deseo lo hicieron posible. Obtuvo su nombramiento después de mucho trabajo y más de una visita a San Mungo (cortesía de sus experimentos bajo el método de ensayo y error).

Laura defendió sus ideas frente a sus colegas, quienes —al no tener nada mejor que hacer— se dedicaban a cuestionarla y menospreciarla.

—Si ni Merlín lo consiguió, ¿Cómo podría lograrlo alguien como tú, pequeña Maddy?- solía decirle su colega.

Ese comentario quedó grabado en su mente, al igual que las bromas sobre su apellido y su meta. Laura Madley la ilusa, la soñadora, Maddy la loca.

Se dedicó a varios proyectos: la mayoría pequeñas aportaciones, otras mayores (desde un nuevo sabor para la poción pimentónica hasta una mejora en la poción matalobos que ayudaba a mitigar los efectos del cambio en luna llena).

Mas nunca quitó el dedo del renglón a lo que ella consideraba un reto personal.

Viruela de dragón.

Ella podía lograrlo, solo era cuestión de tiempo, estaba segura.

Fueron años forjando su reputación como fabricante de pociones. Viajando y recolectando información de cualquier lugar, revisando todo lo relacionado con el trabajo de Gunhilda de Gorsemoor. Debía haber algo para mejorarla. Perfeccionarla.

La revelación llego en un pequeño poblado mágico, alejado de las grandes comunidades, donde no había registro alguno de dicha enfermedad en generaciones. Una sencilla raíz que utilizaban en sus alimentos diarios fue el indicio que buscaba para dar comienzo a una serie de experimentos.

Después de dos años de ensayo-error, por fin tenía en sus manos la cura con la que había soñado. La patente no tardó en ser aprobada con todo el estudio demostrado.

Cuando la entrevistaron y le pidieron decir unas palabras, Laura supo exactamente qué decir.

—Gracias. A los que creyeron en mí y a los que no. Y sí, alguien como yo logró hacerlo. La loca logró su sueño.


N/A: tada! ahí esta XD honestamente me gustó mas esta versión que la original que tenía y bueno no se si es poco o mucho tiempo dos años pero tomando en cuenta que son magos y hay magia creo que puede ser creíble así que esta es mi aportación. Nos vemos!