Bueno aquí estoy de vuelta con otra mini historia.
Ya sabéis que nada de lo que conozcáis es mío si no de JKR.
Esta historia va dedicada a una de mis mejores amigas, a la que quiero con todo mi corazón, y que ha estado y esta siempre que la necesito.
Así que esto va para ti, porque sea cual sea el resultado de tus notas, tienes algo importante amigos de verdad, y yo te voy a apoyar en todo lo que quieras y más.
Y para demostrártelo te he escrito esto, espero que te guste.
Las verdaderas amigas.
Lily estaba sentada frente a la chimenea de su sala común, el pelo lo tenía más rojo que de costumbre y brillaba con una intensidad increíble. Sus ojos eran de un color verde agua por culpa del llanto incesante.
Lentamente su amiga Lau se acerco hasta ella, y la abrazo, así estuvieron durante mucho tiempo, hasta que los sollozos de Lily apenas eran oídos, en ese momento su mejor amiga, le levanto la cara, para que se miraran de frente.
-¿Hace cuanto tiempo que nos conocemos Lily?
-Mucho.
-Nos conocimos antes de venir aquí, pero teníamos vidas distintas, pero el día que fuimos a estudiar juntas, nos hicimos amigas, sabes amigas de verdad- Lily no entendía todo aquello, pero la verdad estar con su amiga así la ayudaba mucho.- Somos de esas amigas que sabe todo sobre la otra, como que tu numero favorito es el 7 y el que menos te gusta el 21, que el color que más te gusta es el lila.
-¿Qué es lo que pretendes decir Lau?
Lo que quiero decirte, es que te conozco, y aunque pretendas esconder tus sentimientos a todo el mundo, o incluso a ti misma, a mi no puedes. Siempre he sabido tus dudas de corazón, y las sigo sabiendo, y se que lo amas, y si estas así es por él.
-Yo…
-No digas nada, solo te quiero decir que lo necesitas, así que no te quedes ahí sentada, y una vez en tu vida ten el valor de ir a por él, antes de que sea tarde. Lucha por lo que quieres.
-Es muy fácil de decir Lau, pero yo tengo miedo.
-Lo se, créeme que lo se, y es normal que lo tengas, pero escúchame, que el miedo a perder no te impida luchar.
-Esa es…
-Si.
-Esta bien lo haré.
-Eso espero porque aquí viene- Y diciendo eso se fue. Lily se giró y ahí estaba entrando por la puerta con una sonrisa triste, ella no espero más y se acerco a él.
-Yo Li... quiero decir Evans siento- Pero no pudo seguir hablando puesto que Lily lo había besado, pero ese beso no era como los que había recibido alguna vez de chicas huecas y despampanantes, ese beso estaba cargado de sentimientos, con ese beso, Lily le decía las cosas que no era capaz de decirle a la cara.
Y él, no quiso ser menos, y le correspondió el beso, con el mismo sentimiento que ella, mientras colocaba sus fuertes manos, alrededor de su cintura, y la acercaba más a él, para poder sentirla mejor, para saber que realmente y por fin Lily Ros Evans era suya.
Espero que os haya gustado, y que me dejéis algún review.
Y miles de gracias a todas las que me habéis dejado uno en la historia de un diario y dos amores, que también es de Lily y James.
Un beso.
DRAMIONE BLACK
