Tres palabras que no son suficientes.

Chasing Cars-Snow Patrol

-Dean, no tenías porque hacerlo, podrías haber seguido con tu vida normal- Sam poso sus ojos en los de su hermano esperando una respuesta.

-No podía dejarte así Sammy, simplemente no podía- Soltó un suspiro.

-Y como crees que eso me hace sentir?- bajo su mirada al suelo con las lagrimas amenazando con salir de sus ojos -Irás al infierno y todo por mi culpa-

-¡No es tu culpa! Fue mi decisión- vio fijamente el rostro de su hermano -No llores por favor- dijo casi en un susurro.

-Debiste dejarme morir...- sintió las lagrimas comenzar a bajar por sus mejillas.

Dean lo tomó por las solapas de su chaqueta y lo acerco a su rostro en un movimiento brusco

-¡No vuelvas a decir eso Sam!- Su voz era gruesa e impregnada de enojo -¿¡Como se supone que yo iba a vivir con eso!? ¿Como se supone que iba a vivir sin ti?-

La ultima pregunta salió en un susurro tan bajo que si Sam no hubiera estado a escasos centímetros de su hermano no lo habría escuchado.

Sam observo a Dean con confusión sintiendo un ligero calor en las mejillas, no podía evitarlo, el rostro de Dean estaba tan cerca que podía sentir su aliento golpearlo, lucho por no abalanzarse y apoderarse de esos labios con los que tantas veces había soñado.

-Dean- dijo evitando la mirada del otro, si seguía observando aquellos ojos cristalinos no estaba seguro de poder contenerse más -Podías haber seguido cazando con Bobby, matar al demonio como lo hiciste esta noche, encontrar a alguna chica...- decir aquello realmente le dolió -formar una familia, pudiste hacer con tu vida tantas cosas- y las lagrimas seguían con su recorrido.

Dean dejo caer su cabeza en el hombro de su hermano y dio un largo suspiro antes de hablar -No lo entiendes Sam- dijo contra su hombro

-Entonces explícamelo- contestó, su mano subió a acariciar el cabello de Dean pero la detuvo, simplemente la puso en el brazo de su hermano.

-Yo...- Dean dejó caer sus brazos a los costados -Yo te amo Sammy- lo dijo escondiéndo más su rostro en el hombro contrario.

La sorpresa en Sam fue evidente, el sabia de sobra que su hermano le amaba, siempre lo había demostrado pero nunca se lo había dicho de manera tan abierta. -Yo también te amo Dean y lo sabes, somos hermanos- y sus palabras eran ciertas pero el sabía que el amor que sentía por su hermano no era para nada fraternal.

-Eso es lo que no entiendes Sam- su voz era casi inaudible -Yo no te amo como a un hermano-

Sam se quedo de hielo, "debí haber escuchado mal" pensó, "Dean no puede haber dicho eso, mi mente me esta jugando una mala broma, tiene que ser eso" tomó a Dean de los hombros y lo separo de su cuerpo para observar su rostro

-¿Que?- fue lo único que atinó a decir.

Dean tenía la mirada perdida en alguna parte del suelo, ya lo había dicho y ahora no había marcha atrás así que decidió seguir -Soy un enfermo, lo se, pero siempre ha sido así Sam, te he amado desde que apareciste en mi vida, más que a nada- alzó la mirada hasta que sus ojos se encontraron con los marrones de su hermano en donde encontró la valentía para continuar hablando -Siempre pensé que era normal que yo te quisiera tanto puesto que siempre cuide de ti, y por todo lo que hemos pasado, pero...- se aclaro la garganta para quitar el nudo que se había formado en esta - cuando decidiste ir a Standford a comenzar una nueva vida me di cuenta de que te necesitaba, ya no era el mismo y me refugiaba en la caza para tratar de mantener mi mente alejada de ti, pero simplemente no podía, fue ahí cuando lo comprendí todo, el amor que yo siento por ti, esto...- se señalo el pecho en donde se encuentra el corazón -que siento aquí, nada tiene que ver con amor fraternal-

Sam no podía hacer más que escuchar a su hermano hablar, no podía creerlo, su hermano jamás expresaba sus sentimientos y ahora le estaba diciendo que estaba enamorado de él, de la misma manera que él lo estaba de Dean, si no estuviera hecho piedra en ese momento seguro estaría gritando de felicidad, pero su cuerpo no respondía así que solo siguió escuchando.

-Lo lamento Sammy pero es lo que siento, y no espero ser correspondido, yo se que estoy mal, pero tenía que externarlo, me lo he guardado tanto tiempo, simplemente ya no podía más- se giro hacia el Impala dispuesto a abrir la puerta cuando sintió como lo jalaban del brazo para detenerlo

-Dean- le llamo Sam sin saber que más decir, Dean bajo su mirada al suelo sin voltearse a ver a su hermano

-Sam...solo, hagamos como que nada ha pasado, por favor- susurro tratando de zafarse del agarre de su hermano pero este no cedió

-Dean mírame- dijo Sam jalando el brazo de su hermano para que este se volteara -mírame por favor-

Dean se giró hacia él pero con la vista evadiendo sus ojos, Sam entonces tomó entre sus manos el rostro de Dean para hacer que conectaran sus miradas, cosa que funcionó

-También te amo de la misma manera Dean- el aludido abrió los ojos con sorpresa -fue por eso que me fui a Standford, porque creía que estaba mal y que tu jamás me corresponderías-

Dean puso sus manos sobre las de su hermano y las quito con delicadeza

-No Sam...no dejes que yo te arrastre conmigo al infierno, esto esta mal, no debe ser así, somos hermanos, ¿Que dirán de nosotros?- Sam puso una mano en la boca de Dean para evitar que siguiera hablando

-Olvídate del mundo, olvida el infierno y todo lo demás, nos amamos Dean y es lo único que importa-

Como toda respuesta Dean quito la mano de su hermano de su boca y lo jalo con una mano en su nuca para besarlo, el beso fue suave, tanteando el terreno, queriendo conocer cada parte de la boca del otro, la lengua de Dean recorriendo cada rincón de aquella cavidad que tanto le quitaba el sueño, Sam tomo el cabello de Dean entre sus manos y río dentro del beso, Dean se separó con lentitud y lo observo confundido

-¿De que te ríes?-

Sam deposito un beso efímero en sus labios, aun sonriendo -Nada, es solo que esto es tan irreal, no puedo creerlo- Su sonrisa era todo hoyuelos, Dean se deleito y no pudo evitar sonreír también

-Es real Sammy, aunque no debería ser así, esto realmente esta mal pero se siente tan jodidamente bien- lo acercó de nuevo para robarle otro beso -Vamos a descansar, después hablaremos de esto- y con esas palabras Dean se subió al auto dispuesto a regresar al Motel en turno.

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SAM

Todo esta bien, lo haremos bien, juntos, como siempre ha sido.

No necesitamos más, a nada ni a nadie, somos tu y yo.

Así que ¿Porque no nos dejamos llevar por esto que sentimos? yo lo haré ¿Lo harás tu? ¿Y te olvidaras de todo lo demás?

Es increíble que hayamos llegado hasta aquí, y no se como decirte todo lo que siento pero encontraré la manera.

Solo no me dejes porque te necesito para ser yo mismo, porque me reflejo en tus ojos y necesito de su brillo para vivir.

Quédate conmigo Dean.

"Todo lo que soy, todo lo que alguna vez fui, se encuentra aquí en tus perfectos ojos que son todo lo que puedo ver."