Disclaimer: Ni la historia de One Piece, ni sus personajes me pertenecen, por desgracia no soy un genio como Oda-sensei.
PRÓLOGO
El ambiente de la oficina cada vez estaba más y más cargado, en la mesa el cenicero rebosaba de las colillas y los puros que se iba fumando uno detrás de otro, le gustaba el placer de fumar, pero sabía que se estaba excediendo y no lo podía evitar. En su cabeza no se dejaba de repetir la misma escena: Akainu atravesando con su puño de magma el pecho de Ace. Una y otra vez la ira le corría por las venas, el sentimiento de venganza era muy grande, por eso permanecía encerrado en lo que quedaba de su oficina, observando por la ventana las obras de restauración de la bahía.
Cuanto tiempo había pasado ya… ¿una semana? ¿Dos? Ahora eso no importa, lo único que lo mantenía alerta eran los periódicos que le traía Bogart cada mañana. Su rutina durante los últimos días no había cambiado: levantarse, vestirse, ir a la oficina y esperar noticias o algún indicio de que Luffy siguiera aún con vida. El periódico era un buen medio para enterarse pues a raíz de los últimos acontecimientos, los periodistas estaban al tanto de cualquier información relacionada con la guerra que desató Shirohige, las consecuencias de su muerte y el descontrol de miles de piratas alrededor del mundo aclamando una nueva era único que alteraban sus rutinas eran las visitas de Tsuru, Aokigi, Sengoku, Bogart y la de sus subordinados Koby y Helmeppo.
Tsuru siempre iba a limpiar la porquería del escritorio y a consolarlo a su manera, las mujeres en estas ocasiones siempre tienen palabras amables. Aokigi se quedaba dormido el sillón de la esquina, a veces es un hombre de pocas palabras, pero es buena compañía. En cambio Sengoku le echaba una y otra vez un sermón de que tarde o temprano tenía que pasar, pues Ace era un criminal…Pero las visitas más interesantes eran las de Bogart, trayendo el periódico y alguna información extra, y la de Koby.
Cuando despertó en la enfermería después de desmayarse en el campo de batalla, los médicos le dijeron que estaba desarrollando el poder del "Haki", por lo que le tocaba enseñarle a dominarlo y a usarlo correctamente. Venía a visitarlo con frecuencia junto con Helmeppo, un poco celoso de la situación, ya que iba a conseguir ser más fuerte a partir de ahora. Siempre le venía a decir que estaba 100% seguro de que Luffy seguía con vida y que en cualquier momento habría noticias suyas, y le preguntaba cosas sobre que era el Haki y demás, pues sabía que aún no iba a empezar el entrenamiento, aún les quedaba unos días de recuperación y los campos de entrenamiento estaban inservibles después de varias sacudidas de la Gura Gura no mi.
Esa misma tarde Sengoku entró en la oficina con unos paquetes de galletas de arroz y un poco de té. Esa acción le sorprendió, pues siempre que hacía eso es que quería "hablar" de algo serio. Y sin más rodeos le dijo:
- Garp, esto no puede seguir así, necesitas desconectar. He pensado que no te irían mal unas pequeñas vacaciones.
NA: He aquí el prólogo de esta historia, que me iba rondando por la cabeza y tenía ganas de escribir sobre la vida de Garp. Pronto subiré el primer capi ^^ no os lo perdáis!