Hola

No pude evitarlo, la idea llegó a mi y tuve que escribirla.

Nota: los diálogos estarán entre guiones, y los pensamientos serán escritos entre comillas (") y en cursiva.

Declaimer: Descargo toda responsabilidad los personajes utilizados en este Fic son propiedad del gran Akira Toriyama.


Año 735, King cold, el dirigente secreto de la Organización Interplanetaria de Comercio, se encontraba resolviendo asuntos importantes en un pequeño planeta ubicado en la galaxia del norte. El rey Cold era un ser de temer, y nadie absolutamente nadie podía pasar por encima de él. Este grave error fue cometido por un científico terrestre.

El Dr. Briefs era un científico que se dió a conocer en el vasto universo al trabajar junto a la patrulla galáctica en donde sus inventos y mejoras favorecian a todos aquellos que pertenecían a ella.

Las noticias corren rápido y llegaron a oídos del rey Cold y sus hijos Freezer y Cooler, en ese momento no dudaron en pedir o más bien exigir al Dr. Briefs que trabajará para ellos, con ayuda de su tecnología su conquista del universo sería más fácil. Briefs tenía conocimiento de quién era Cold y su familia. En cuanto recibió la propuesta o más bien amenaza de parte de estos el se negó, jamás trabajaría para personas que se dedicaban a exterminar razas y conquistar planetas. Claramente está fue una gran ofensa para los dirigentes de la Organización Interplanetaria de Comercio, por lo que el rey decidió ir él mismo a resolver problemas con Briefs.

En aquel momento el científico se encontraba en su casa en la tierra disfrutando de un periodo de inactividad en la patrulla galáctica, pasaba los días al lado de su adorada esposa Bunny y su pequeña hija Bulma.

Su paz fue interrumpida por un ser de complexión grande, claramente de otra raza, con cuernos y piel en tono morado y blanco.

-Conque tú eres el científico de la patrulla galáctica-

Briefs no estaba seguro quién era aquel ser que se encontraba ahí, pero claramente no era alguien en que confiar -A sí es yo soy el Dr. Rudolf Briefs, ¿Quién eres tu?-.

-Mi nombre es Cold- En ese momento cientos de temores invadieron al científico claramente sabía quién era y tenía en mente a que venía.

-El rey cold, ¿Que desea?-

-Nadie se burla de mí, nadie sobrevive después de negarme algo, y tú… Estás condenado- En ese momento por las escaleras bajaba una mujer esbelta, muy bella con cabello rubio, que se sorprendió al ver la escena. -¿Quien es el querido?-

-Bunny sube con Bulma y no salgas del cuarto por nada del mundo- Ella no tuvo que oír dos veces eso Rudolf era alguien bastante tranquilo y despreocupado claramente si él decía eso sería algo serio, Bunny corrió escaleras arriba, pero fue detenida por un fuerte dolor en su pierna derecha, derribandola y cayendo de la escalera. Cold había lanzado un rayo de ki hacia ella.

-Bunny…- Rudolf corrió hacia su esposa pero fue detenida por un fuerte golpe que lo derribó y lo mando a estrellarse a la pared, fue tomado del cuello por Cold. -Es tu fin científico, morirás por haberte negado a trabajar para mi, te are sufrir, acabare con este maldito planeta, violare a tu mujer la mataré a golpes frente a ti y después te partiré el cuello en dos-.

Estas palabras acabararon con Briefs, no había palabras para describir todo lo que en ese momento presenció, los gritos de su mujer y el incapaz de hacer algo mataron su alma, Cold cumplió y Bunny pereció por una brutal golpiza después de un calvario, en ese momento Briefs ya no era consciente de sí, lo único que pudo hacer fue maldecir a Cold, para después este le partirse los brazos, una pierna, una lluvia de golpes y por último su cuello partido en dos, para por fin acabar con su sufrimiento.

Cold dió la orden de inspeccionar la gran casa, llevarse toda la tecnología o cualquier cosa que pudiera ser de interés. Los soldados entraron y cumplieron las órdenes, la casa fue saqueada, cada máquina, plano, libro, dibujó todo sería llevado, Cold miraba con interés la cultura terrestre, mientras analizaba todo lo ocurrido recordó cierta frase de Briefs a su esposa "Bunny sube con Bulma y no salgas del cuarto por nada del mundo", entonces Cold se preguntó qué era esa Bulma, la curiosidad llamó su atención y subió por las escaleras con rumbo por el cual la mujer planeaba dirigirse, un pasillo con varias puertas a los lados, inspeccionó cada una no muy seguro de lo que buscaba, cuartos vacíos, habitaciones, una biblioteca y por último al final del gran pasillo, Cold se abrió paso por la pequeña puerta marrón, una habitación más está era más grande, entró no muy seguro de porque perdía su tiempo, luego cierto ruido llamó su atención, una pequeña respiración tan leve, que para cualquier oído era imperceptible pero no para él, atento a eso se dirigió a un pequeño montículo cubierto por telas blancas, que al quitar dejaban ver una pequeña niña de no más de dos años de vida, que se encontraba tiernamente dormida, -Conque tú eres Bulma-, Cold se burlaba de la inocencia de aquella cría sus padres acababan de morir y ella estaba tiernamente dormida, levantó su mano y apuntó con su dedo índice al pequeño pecho de la niña, estaba a punto de matarla, cuando la pequeña despertó y abrió los ojos de manera repentina, lo que lo desconcertó, aquella tenía los ojos del azul más hipnótico que había visto, sus pequeños ojos reflejaban algo que Cold no supo identificar, la observo bien, su pelo de ese tono azul, su piel blanca, esos ojos le recordaban al mar del planeta td43, parpadeo para darse cuenta que la niña no le quitaba los ojos de encima como si buscara algo, si quisiera reconocerlo -Acabo de matar a tus padres, y ahora te mataré a ti-

La niña cambió su expresión por una cara de fastidio, frunció las cejas, esto le dió mucha gracia "Una pequeña insignificante cosa, pero con actitud, bueno supongo que me entendió al fin y al cabo es hija de Briefs del gran científico" Sus pensamientos entonces le dieron una idea, tenía en sus manos una oportunidad la pequeña cría de Briefs seguramente heredera del gran intelecto de su padre sería de ayuda en su reino, y aunque a un fuera un bebé podría criarla a su manera y en pocos años ponerla a trabajar, y sacar el mejor provecho de ella, una sonrisa sádica se dibujó en su rostro tenía una pieza de oro para moldear a su manera, Cold decidió llamar a su soldado elite.

-Señor le reportó que toda la tecnología a sido llevada a la nave-

-Quiero que se lleven todo lo que está en este cuarto, y el de alado, el que está lleno de libros, además lleva contigo a esa cría, cuidala si algo le pasa tu mueres-

Esas palabras desconcertaron y asustaron al soldado Crazo, dió las órdenes a los demás soldados mientras Cold se iba a su nave, se acercó a aquel montículo y tomó a la pequeña criatura en sus manos, nunca antes había cargado un bebé, no sabía cómo hacerlo pero lo haría órdenes eran órdenes, los soldados subieron a la nave y despegó. Cuando salieron de la atmósfera Cold envío su poder de destrucción al pequeño planeta y en cuestión de minutos este fue destruido. Después de los suceso la nave inició su camino de regreso a la base central, Cold pensaba en que su plan con la pequeña niña había resultado un éxito. Luego un ruido interrumpió su paz, un lloriqueo rompía con el silencio.

Crazo entró con la pequeña niña en brazos llorando sin parar.

-¡Caya a esa cosa!-

-Señor no he podido hacerlo, no entiendo a las crías, espero sus órdenes de qué hacer con ella-

El rey estaba a punto de hablar cuando la niña lo diviso con la mirada y de inmediato guardó silencio, -Llama a Tarena-

Tarena era una sirvienta encargada de la comida del rey, una extraterrestre de una especie extinta por el mismo.

-Si rey enseguida voy-

-Soldado Crazo deja a esa cosa en el suelo-

El obedeció y dejó a la pequeña humana en el piso, para luego salir por la puerta, la niña no le despegaba la mirada de él lo que de cierta manera lo desconcertaba, con la poca fuerza de la pequeña está intentó ponerse de pie fallando varias veces, y cayendo en el intento, ninguna de las veces la niña lloro, lo que llamó la atención de Cold, pues sabía que esos golpes le habían dolido era muy débil, poco después la niña logró pararse, equilibrarse y dar unos pequeños pasos en dirección a el, la niña cayó poco antes de lograr alcanzarlo, pero no se dió por vencida, volvió a levantarse y camino hasta tocar la pierna de él.

-¿Qué es lo que quieres mocosa?-, El estaba a punto de patearla pero había algo en esa mirada que llamaba su atención, entonces sin entender el porqué se agachó y tomó entre sus brazos a la pequeña, era una cosa insignificante para él casi nada comparado a su gran tamaño.

Entonces la pequeña de mirada azul tomó uno de sus dedos con su pequeña mano, en ese momento algo cambió en Cold, algo cambio en cómo esa niña influiria en su vida.

Las puertas se abrieron dejando pasar a Tarena que miro con desconcierto la escena presente en ese momento -Rey me mandó a hablar-

-Esta criatura es… Digamos mi nueva adquisición y tú serás responsable de su cuidado, trajimos varias cosas de su planeta inspeccionalas algo de ello debe de ser para su cuidado-. Cold se acercó a Tarena para darle a la pequeña, la tomó en brazos y se quedo viendo. -Eres hermosa- Sin más ella salió. Las semana pasaron Cold sin saber porque pasaba tiempo con la pequeña bebé, ahora su gran sala en la nave era adornada por una pieza de mobiliario que desentonaba completamente el lugar, una cuna en la cual la pequeña niña descansaba. Pasaba varios minutos al día observándola cómo se entretenía con cualquier cosa, y aún a su corta vida demostrando una actitud desafiante, qué tal vez era lo que más llamaba su atención

Esto causaba en el una pequeña pero genuina sonrisa que encontraba camino en sus labios. El viaje terminó y Cold regreso a su base de operaciones, rápidamente destino un área para su pequeña azul, nombre que había dedicado para la pequeña, Tarena cuidaba de ella y el rey sin darse cuenta poco a poco fue a acostumbrándose a ella.