( Gintama es prioridad de Hideaki Sorachi ).
Las bebidas alcohólicas suelen "tapar" las emociones pero nunca terminan su deber, como en este caso por ejemplo:
—¡O-Otra copa! — Grito una muchacha pelirroja, alzando una pequeña copa de sake.
Si, es este caso.
Esta señorita pelirroja más bien llamada Kagura se encontraba en un estado muy pasado de un simple "ebrio" como le suelen decir a los madaos tirados en los bancos del parque.
—Kagura, deja de beber —. Le pidió la muchacha a su lado. Si, no estaba bebiendo sola, estaba con su cuñada y su hermano.
—Déjala que beba hasta que le agarre un coma alcohólico. Así aprenderá—. Exclamo Kamui, en cambio su novia solo frunció el ceño.
—Si dejo de beber... Me acordare de nuevo y no quiero. — Pronuncio Kagura con lagrimas en los ojos, el maquillaje negro cubría parte de sus ojos y mejillas dando comprobar que lloro bastante y el maquillaje se corrió por todo su rostro.
—Es obvio que de esto te acordaras hermanita, haber dejado plantado al policía en medio del altar y huir es algo tormentoso que te perseguirá todo el resto de tu vida —. Comento con una sonrisa Kamui causando que Kagura se acordara y comenzara a llorar otra vez.
—No ayudas Kamui. — Le reprendió Nobume, Kamui solo se encogió de hombros restándole importancia.
Kagura estaba a punto de casarse con el hombre de su vida Okita Sougo, pero ella por culpa del miedo o falta de valentía salio corriendo apenas había entrado a la iglesia. Y ahora solo se arrepentía y trata de ahogar su cometido y arrepentimiento con alcohol puro.
—Vámonos Nobume, son las tres de la mañana y yo quiero algo, acuérdate. — Kamui se levanto del asiento listo para marcharse — Hermanita, si necesitas algo ya sabes donde estoy. — El sabia perfectamente que Kagura era una adulta y la comprendía por eso sabia que debía dejarla a solas y que aclare sus sentimientos y pensamientos.
—Kagura... — Murmuro Nobume arrodillándose, después de todo no quería dejarla sola .
—Estaré bien, ya me iré yo, gracias —. Kagura forzó una sonrisa y Nobume se retiro aun preocupada.
Kagura solo se quedo ahí sentada. Su blanco vestido estaba rasgado y manchado por culpa del maquillaje, ya que ella lo uso para ocultarse el rostro cuando había huido lo suficientemente lejos.
Comenzó a llorar nuevamente al recordar el rostro de Sougo cuando ella volteo repentinamente y se largo. Sabia que él no le perdonaría, lo sabia. Pero aun lo amaba con toda su alma, de eso estaba segura.
— Que acto mas cobarde...
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Gracias por leer. ¿Okikagu Week, cierto? Entonces quise dejar mi pequeña tontera. Como siempre gracias por leer y bueni si quieren dejar review adelante xD. los quiero ^w^
