Disclaimer: Los personajes del Club Winx no me pertenecen, son propiedad de Iginio Straffi y Rainbow.

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¡No me pude resistir! xD esta idea o cosa me llevaba dando vueltas por la mente varios días y hoy por fin se me hizo a.a

Está narrada en primera persona, yo avisaré en cada capítulo por quién.

Ahora, a ver si les gusta:

Capítulo 1: Despedida

Musa POV

Tomé la última prenda que colgaba en un gancho de mi vasto closet, deslicé la puerta y la coloqué en la ya atiborrada maleta morada. Suspiré recordando el porqué de esto. Era alguna clase de prueba personal para demostrarme y demostrarle a papá que podía cuidarme sola, que soy una mujer responsable y madura como para estar en un lugar sin provocar problemas.

Lo difícil era la confianza.

Giré mi cabeza con fuerza para alejar esos pensamientos negativos que inundaban mi mente. ¡Vamos Musa! Ya no le des más vueltas al asunto eso solo produce estrés. Regresarás y todo estará bien.

Es verdad. No importan las inferencias de mi padre respecto a todo el asunto y su inseguridad al mandarme lejos de casa, o mejor dicho: a lo que yo considero mi casa. Porque sí, mi verdadero hogar siempre es y será Gardenia.

Aunque albergue recuerdos dolorosos, yo atesoro los más preciosos, no solo por mi infancia y mis amigas; sino que es el lugar natal de mi madre. Y mi madre lleva ya cuatro años que falleció, qué triste ¿no? Todo por una terrible enfermedad no detectada a tiempo. No pudimos hacer nada. El impacto ocasionó una fuerte recaída en el ánimo de mi padre que incluso tuvimos que mudarnos muy lejos de todo y dejar la enorme casa que por años fue su cálido nido de amor. Lamentablemente, él no tenía en quien apoyarse, (pues no tenía hermanos ni cuñados) solo nosotros pero, sabía a ciencia cierta que no era lo mismo, yo contaba con el cariño y apoyo de mi hermano mayor con el cual hasta ahora, gracias al cielo, llevaba una sana relación con tan solo ciertas peleas basadas en celos, nada del otro mundo.

Una rebelde lágrima resbaló por mi mejilla izquierda. La limpié inmediatamente, no podía permitirme llorar sino todo esto no tendría sentido. El pasado es pasado y es mejor enterrarlo.

Era mejor canalizar lo positivo. ¡De vuelta a Gardenia! Esa hermosa ciudad con vista al hermoso mar mediterráneo. Una ciudad alegre y tranquila y no como los Estados Unidos que, aunque algunas ciudades tenían su fama bien elevada, sus calles no dejaba de ser peligrosas y desconocidas para mí. ¿Miedo? No puedo decirlo con certeza, es decir, ¡me largo a vivir sola! Dice mi padre que la soledad es lo que debería darme miedo. Pero yo sé que no estaré sola.

Recuerdo, escasamente, mis años en la escuela primaria. Mis vecinos, mis maestros y sobre todo mis amigas. Éramos seis en un principio hasta que, en cuarto grado de primaria, nos informaron que llegaba una niña nueva a la clase. Y… ¿por qué cuento esto? Sencillo. Ella se convirtió en mi mejor amiga. Sin olvidarme del resto, claro. Solo que con Darcy, las cosas sucedieron diferente.

Ella estaba pasando por el divorcio de sus padres y mi primer instinto fue darle mi más sincero apoyo, ya que a causa de eso, sostenía una actitud muy tímida. (No era como Stella que, aunque sus padres también se habían separado hace tiempo y debido a su magnífica situación económica, lo recompensaban comprándole juguetes caros y toda la ropa que a la princesa se le antojara). Además, ¡la habían separado de sus hermanas! Debido a ser la mas pequeña, ella quedó con su madre y las otras dos con su padre. Triste. Yo no sé qué haría si me separaran de mi querido Helio.

Ambas compaginábamos de una manera muy agradable, me escuchaba y la escuchaba, fue mi pañuelo cuando mamá murió, ella estaba sola y yo me quedé sin una figura femenina. No intento quitarle merito al resto de mis compañeras que también estuvieron conmigo en esos difíciles momentos pero, a Darcy le tenía un cariño especial… como una segunda hermana. Nunca le haría daño. Por eso, cuando tuve que alejarme de mi hogar por una tragedia, le prometí que no tendría otra mejor amiga, que nunca la olvidaría, que la llamaría; pero sobre todo, que regresaría.

Y aquí estoy, en un enorme cuarto vacío, sólo adornado por sus pintorescos colores rosas y morados y ostentosos muebles de madera a punto de tomar un vuelo que me llevaría a mi nuevo destino.

Agarré mi maleta y bolso de mano para dirigirme a la entrada. Antes de salir, di un fugaz vistazo a la que fue mi alcoba. Extrañaría la enorme y suave cama al centro, ya que mi nueva vivienda no será la antigua mansión, nop, yo tendría mi propio departamento y eso es lo que tanto asusta a papá. Su única hija mujer de 16 años viviendo la vida loca de preparatoria.

–¡Papá! Ya estoy lista —grité bajando con cuidado las escaleras.

—Apresúrate Musa, tu vuelo sale en 30 minutos —refunfuñó molesto. Sabía que era más que nada porque temía despedirse de mí.

—¡Qué! Cómo es posible, si cuando subí a ducharme faltaban tres horas —lloriquee anonada, sin darme cuenta del tiempo transcurrido.

—¿Y así quieres vivir sola? No tienes sentido del tiempo hija —sermoneó—. Eso y que te distraes fácilmente.

No entendí a qué se refería.

—No creas que no me di cuenta de que te encaramaste a escuchar música —oups, tal vez había sido eso.

—Pero fueron solo veinte minutos —dije con los brazos extendidos.

—Minutos... ¿o canciones? —me señaló molesto.

—Ya papá, se hará más tarde —me sonrojé cambiando el tema, porque él estaba en lo correcto.

Vi que suspiró y se lanzó a abrazarme. Un abrazo fuerte y cálido, como solo un padre lo da.

—Hija, sabes que te adoro, pero…

—Ya hablamos de eso pa… soy lo suficientemente responsable para estar sola, además, no es como si no conociera la ciudad. Gardenia es nuestro hogar-

—Sí, Musa. Pero soy tu papá, no quiero que nada malo te pase. Hija, prométeme por favor que te vas a cuidar, que no te dejarás influenciar por malas compañías.

—Sí papá, lo prometo —lo abracé con más fuerza, agradecida interiormente de que no sacara el mismo tema en discordia de los últimos meses.

—Todo esto lo hago por ti. Te amo.

—Yo también. Seré responsable, estudiaré muy duro y no te arrepentirás de dejarme ir —sonreí con ganas.

—Confío en ti —a pesar de sus palabras, notaba esa mirada de duda y sus muecas de inseguridad.

Finalmente me despedí de él, admito que fue doloroso, pero debía seguir mi propio camino de libertad. A mi hermano lo había visto anoche, conversamos casi de lo mismo que mi padre mencionó. Tan celoso como siempre.

Subí al coche, él tenía mucho trabajo y no podía acompañarme. Yo agradecí porque no pude evitar soltar más lagrimitas. A pesar de estar cumpliendo mi 'capricho' las dudas seguían en mi mente, ¿estaba haciendo lo correcto? ¿dejar a mi familia así como así? No era para siempre, además, en estos tres años los visitaría con regularidad.

De nuevo, intenté concentrarme en lo positivo: mi mejor amiga iría a recogerme al aeropuerto, será la primera cara amigable en ver al bajar del avión.

Me alegré por eso.

Sonreí.

Muchas aventuras me aguardan. Y espero que todo salga bien.

Así es, muchas aventuras le esperan a Musa en esta nueva mi historia xDDU que ya me daba muchas vueltas en la cabeza, (imaginé todo de un jalón xD) estoy muuuy feliz ;u; y es raro, escribí esto en una hora o.o aunque la idea era que fueran 500 palabras 7u7 algo así como un prologo, ya que Musa habla un poco de su vida xDD y que no les sorprenda lo de Darcy (sí, ellas dos, enemigas mortales (?) aquí son BEST FRIENDS FOREVER, Musa la ADORA, [pero no me olvido de las Winx uwu] lel) no se preocupen que todo tiene una razón de ser que se revelará más adelante n.n (aunque por el summary, imagino que ya se imaginan 7u7 [un triangulo amoroso /._./]) En fin, solo piénsenla diferente 7u7 ya les explicaré en el próximo capí que, por cierto, la idea también era que fuera de 500, pero ahora que este quedó de más de mil… no sé de cuanto me salga xDDD (al igual que el resto del fic, pero no será tan largo, pensé en una trama simple, pero diferente ;n;)

Sólo espero actualizar pronto ;u; #PosMeArriesgo xDDD

¡Hasta luego! /._./