¡Buenas a todos! Voy a empezar este pequeño desafío de cien drabbles acerca de los hermanos Stark (+Jon Snow, -Rickon) espero lo disfruten!
Disclaimer: Los personajes pertenecen al asesino serial más notable de la literatura.
Historia uno: Arya y Nymeria - Introducción
Los pasos de Arya retumbaron por todo el castillo cuando se alejó de su padre y hermanos, sentía tanta emoción que apenas notó que casi tira a la septa por la escalera en su carrera de regreso a su habitación. Al entrar, cerró de un portazo y dejó a la cachorra de loba huargo que le habían traído en el suelo, luego, se acostó frente a ella, mientras el pequeño animal se incorporaba y empezaba a olisquear todo lo que había en el cuarto.
- Un nombre... - Repitió Arya, tal y como le había dicho su padre al momento de entregarle aquella cachorrita que habían encontrado en los bosques.
Observó al animal, y de pronto, se sintió completamente en blanco. Nunca había tenido responsabilidad sobre algo o alguien, esa criatura ahora dependía totalmente de ella, y algún día se transformaría en una gran loba huargo como las de las historias que cuenta la Vieja Tata, acerca de hombres valientes que mataban lobos huargo como ella, o tambien Niños del Bosque. Esto le dio rabia. Según ella, algunos hombres no parecían tan valientes como se los pintaban en esas historias. La mayoría masacró inocentes, o invadió las tierras de pueblos más débiles. Las mujeres en cambio, tuvieron que abrirse paso por sus propios medios en el mundo que estos hombres valientes gobernaban.
- Mujeres valientes – Se dijo para sí misma, y luegó se incorporó – Nymeria.
Casi como si hubiera salido de su instinto, la loba huargo giró su cabeza dándose por aludida, clavando sus grandes ojos dorados en los grises de ella. Arya sonrió y gateó hacia ella, bajando el rostro hasta quedar a la altura de la pequeña cachorrita. Le acercó una mano hacia ella y dejó que la olisqueara.
- Vas a estar conmigo ahora, Nymeria – Dijo, estirando un poco más la mano para acariciarle la trompa – Yo soy Arya.
Nymeria soltó un pequeño ladrido agudo en respuesta. Arya sonrió. Era como si estuviera respondiéndole
Espero que haya sido de su agrado! Y si no lo fue, no leas el siguiente.
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