Hola! Bueno, he decidido empezar otro Dramione más o menos largo (el número de capítulos aún no lo tengo muy claro) y aquí tenéis el prefacio. Quiero aclarar que, como prefacio, el primer capítulo que será el próximo en ser publicado no será la continuación de éste sino que será el principio "verdadero" de la historia. Otro punto importante que quiero dejar claro es que no sé cuándo podré ir actualizando los capítulos porque suelo tardar bastante, así que no esperéis que actualice un capítulo cada semana porque no será así. Intentaré actualizar tan pronto como pueda porque sé lo que molesta estar pendiente de una historia y que parezca que no va a ser actualizada jamás; lo siento, de verdad, pero prefiero avisarlo desde el principio. Dicho esto no me queda más que desear que os guste! Un besito!
Prefacio
- ¡Malfoy, háblame! ¡Abre los ojos, maldita sea! – gritaba Hermione mientras le zarandeaba hacia adelante y hacia atrás intentando levantarle - ¡Malfoy! – seguía sin responderla - ¿Vas a morir? ¡Joder! – la castaña fue bajando la voz hasta reducirla a nada mientras empezaba a sentir las lágrimas escapándose de sus ojos. Se sentía impotente y sola en aquella inmunda celda donde no había nada más que el frío cuerpo de Malfoy sobre el suelo que ahora ella apoyaba sobre sus rodillas.
Le dio unas palmadas en la mejilla para ver si abría los ojos y al notar el contacto de su piel, le recorrió un escalofrío. Estaba tan frío que hubiera jurado que había muerto.
Hermione empezó a sollozar y no pudo evitar que su mente viajara hasta el principio de todo. - No te mueras, por favor…
Cerró los ojos y les dio vía libre a los recuerdos…