¡¡¡Ohaiogozaimas a todos!!! este es mi primer fic, espero les guste y comenten, dejen reviews, mensajes y lo que quieran.
Muy bien, ¡Empesemos!
nota: Ni Fullmetal Alchemist ni sus personajes me pertenecen, sino a Hiromu Arakawa.
Capitulo 1: Solo un juego
Nunca pensé que todo acabaría de la forma que acabo, creíamos que seria divertido, un juego, pero no fue así. Mi nombre es Iván, estaba a punto de cumplir 18 años cuando todo pasó.
Todo empezó creo que en las vacaciones, cuando en una venta de libros usados encontré ese libro, era muy viejo, de tamaño mas bien pequeño, con cubierta de cuero y un símbolo extraño en la pasta, sin titulo y escrito a mano, parecido mas a un diario personal que a un libro común. Lo que mas llamo mi atención fue el símbolo de la portada, estaba ya medio borrado por el tiempo, pero se distinguía bien, era como la silueta de una cruz envuelta por una serpiente, arriba de estas había una corona de tres picos y a los lados de la vara superior de la cruz un par de alas pequeñas, que no llegaban a tocar la cruz.
El dependiente me explico que ese era el diario de investigación de un alquimista, y yo al ser tan apasionado de esos temas, decidí comprarlo sin demora. Cuando regrese a casa con mi nueva adquisición, le dije a Jorge, mi hermano mayor, que seria divertido tratar de descifrar el código en que escribía el autor de aquel diario, pues sabia que los alquimistas codificaban sus investigaciones.
-¿Entonces, que dices? ¿Me ayudas?
-No creo, tal vez otro día - dijo con tono de no interesarle - estoy ocupado.
-Pues tú te lo pierdes – Y me fui a mi habitación a empezar con el dichoso libro.
Dos días después, solo había descifrado las primeras paginas, con lo que supe que el dueño original del diario fue alguien llamado Edward Elric (entre otras cosas), pero no mucho sobre la investigación, estaba decepcionado, pero como si algo me forzara a continuar, seguí trabajando con el diario, estaba decepcionado, sabia que seria difícil, pero no que seria tan difícil, cuando de repente escuche que alguien a mi espalda decía:
- ¿Qué estas haciendo?
-¿Eh? Nada, solo leía
Al voltearme mire a mi hermano parado al pie de la puerta, con una sonrisa burlona dibujada en el rostro.
-Aun no tenes nada ¿verdad?
-Si tengo algo; pero es más difícil de lo que creí – Esto último lo dije en voz baja.
-Pues veamos que podemos hacer.
Y empezamos a trabajar juntos para descifrar aquel texto.
El trabajo en equipo facilito mucho la tarea, y en un par de semanas teníamos descifrado poco mas de la mitad del texto, era extraño que el autos mesclara cosas de las que vivía en esos días con su investigación; descubrimos con sorpresa que el autor trabajaba con su hermano menor, lo cual solo sirvió para aumentar nuestra curiosidad por descifrar el resto del diario.
Leímos que su investigación era para encontrar un camino de vuelta a su hogar (aunque no entendíamos a que se referían con eso), desciframos que buscaban diseñar algo que llamaban "circulo de transmutación", con el cual poder volver a su hogar; y los diseños de varios de estos círculos, cada uno mas intrincado que el anterior.
Un día, entre broma y broma, se nos ocurrió probar uno de esos círculos de transmutación para ver que pasaba. Esa noche fuimos a una bodega abandonada cercana a nuestra casa, y dibujamos en el suelo el círculo mas complicado que teníamos hasta el momento, pero al tratar de activarlo no hubo reacción alguna.
-Parece que no funciona,- Le dije a mi hermano- creo que mejor lo dejamos así.
-Tal vez falta algo,-dijo sin siquiera notar lo que le dije- deberíamos terminar con el diario antes de tratar otra vez.
Luego de nuestro primer intento fallido nos esforzamos más para traducir el libro aquel; era como si algo nos forzara a tratar de descifrar ese texto extraño.
Al cabo de tres semanas ya habíamos terminado de decodificar el libro, y si, nos hizo falta algo, nos disponíamos a tratar con el último círculo de transmutación allí descrito.
Me pareció extraño que el dueño del diario dejara de escribir así de repente, sin explicar el éxito o fracaso del experimento, pero por lo menos el último círculo estaba completo y podíamos tratar; al final una nota decía "Solo la sangre del alquimista y su ferviente deseo abrirán la puerta", en ese momento no teníamos ni la menor idea de lo que eso significaba.
Tres días después, regresamos a la vieja bodega y dibujamos el nuevo círculo, este medía aproximadamente unos ocho metros de diámetro, con distintos escritos y símbolos alquímicos por todos lados.
-¿Y ahora que? – le pregunte a mi hermano.
-Dame tu mano – contesto, mientras sacaba una pequeña navaja del bolsillo.
-¡¿Qué estas pensando?! – le grite apartándome un poco.
-Aquí dice "la sangre del alquimista", estuve pensándolo y creo que se refiere a que debemos agregar nuestra propia sangre para que funcione.
-Pues eso creo – dije algo dudoso – pero vos primero, ya te conozco.
-Gallina – dijo mientras se animaba a cortarse en la palma; después de pensarlo un momento, tomo aire y se hizo una cortada en la palma.
-Te toca, y no te eches para atrás ahora – dijo mientas tomaba mi mano y me hacia una cortada como la suya.
-Ahora debemos apoyarnos en el circulo y concentrarnos en activarlo, a ver que pasa – dije disimulando el dolor.
Ambos nos ubicamos junto al circulo y nos inclinamos poniendo las manos en el, luego nos concentramos en activarlo cuando, de repente, una cegadora luz blanca empezó a salir de las líneas que habíamos dibujado, cuando nos dimos cuenta, estábamos de pie ante una enorme puerta negra con símbolos que nunca había visto, y antes de poder yo articular palabra se escucho un horrible chirrido de la puerta que se estaba abriendo, y pude ver una multitud de rostros en las sombras que sonreían, justo antes de que una multitud de rostros se abalanzaron hacia nosotros y nos arrastraran al interior de la puerta; luchamos con todas nuestras fuerzas, pero fue inútil.
Cuando desperté, me sentía realmente mareado, me encontraba en un lugar que al principio pensé era la bodega donde estábamos, pero mis esperanzas desaparecieron cuando pude enfocar la vista y pude notar como era aquel sitio.
Eran las ruinas de un edificio que parecía abandonado hacia ya mucho tiempo, la cámara donde me encontraba estaba medio destruida, el techo se había caído y se podía ver la habitación superior; pude notar que en las paredes había símbolos parecidos a los del círculo que mi hermano y yo habíamos dibujado.
-¡Ah! Eso fue doloroso… hermano, ¿Estas bien?; ¿Hermano?, ¿Jorge?, ¡Hermano ¿Dónde estar?!.
Haciendo un gran esfuerzo intente levantarme, pero caí al suelo, luego de un momento volví a intentarlo y esta vez logre apoyarme en unos escombros.
Con la vista borrosa y el cuerpo totalmente adolorido mire por la habitación en busca de mi hermano, pero fue inútil, ¡EL NO ESTABA!; pensé en buscar ayuda, pero cuando traté de caminar acabe de nuevo en el suelo, sentí que algo duro y pesado caía en mi cabeza, luego todo se oscureció.
¡Hola de nuevo! hasta ahora esto va por este lado (je, je), para el siguiente capitulo les prometo un par de sorpresas
Saludos a todos.