Hola mi gente! Aqui les dejo mi participacion en el reto "¿Qué tan ebrios estamos?" del foro "Hazme el amor".
Disclaimer: La serie Inuyasha le pertenece a Rumiko-sensei, si fuera mia mandaria a Kikyo en un cohete a Jupiter y sin regreso.
Pink Lady
Capitulo 1…
Pink Lady, un nombre peculiar para una bebida, no sabía si era porque estaba ebria o qué, pero le pareció muy gracioso, la traducción del nombre seria dama rosa…en definitiva estaba muy ebria en ese momento, tanto que hasta el gato del bar tender que estaba observándola desde la repisa más alta y vacía le parecía gracioso, aunque este la mirara como si fuera una de sus presas y quisiera atacarla.
No sabía cómo fue que dos de sus mejores amigos, Sango y Jinenji, la convencieron de ir a ese club, la música sonaba con fuerza y dudaba que si alguno de ellos dos la llamara los escuchara. Hablando de ellos, se acercaron hasta su amiga para tratar de convencerla de ir a bailar con ellos.
—Vamos Kagome ven con nosotros—Dice Sango tomándola de un brazo.
Kagome se soltó del agarre con brusquedad y le pidió al bar tender que le sirviera otra copa bien llena.
—Por favor Kagome, no nos gusta vete así—Dice Jinenji viendo a su amiga con tristeza.
—Pues no me hubieran traído—Dice la azabache dándole un trago a su bebida—Les había dicho desde un principio que no quería venir.
—"Y ahora estamos pagando las consecuencias"—Piensa Sango con pesar, habían traído a su amiga para que se divirtiera y se distrajera un poco, pero desde que llegaron la chica ha estado sentada bebiendo sin parar.
Kagome acababa de terminar con su novio, Bankotsu, o mejor dicho fue él quien la mando al diablo sin ninguna explicación, solo le dijo Ya no quiero volver a verte, esto se acabo, desde entonces no ha querido salir de casa más que para ir a la universidad o hacer las compras, su ánimo estaba por el piso. Sus amigos intentaron animarla de todas las formas posibles, pero ninguna dio resultado, ni traerla al club más popular de toda la ciudad había servido. La dejaron allí sentada bebiendo y se fueron de regreso a la pista de baile. Kagome los miro alejarse y bufo regresando su mirada chocolate a su copa que ya estaba por la mitad, suspiro, no le gustaba tratar a sus amigos de esa manera pero ya que, a lo hecho pecho.
—¿Qué haremos?, de verdad no quiero que Kagome se quede allí sentada el resto de la noche—Dice Sango con frustración mirando a Jinenji.
—No lo sé—Dice Jinenji rascándose la nuca, al levantar la vista se fijo en una de las mesas del lugar, en ella se encontraban tres hombres, dos de ellos de cabello negro atado, uno lo tenía largo atado en una cola alta y el otro lo tenía corto atado en una cola baja, el tercero tenía el cabello corto de color plateado—Oye Sango, ¿Qué esos chicos de allí no son los chicos que estudian en la misma universidad que Kagome y tú?—Pregunta señalándolos.
—A ver—Dice Sango mirando en la dirección que señalaba su amigo—Si, son Miroku, Koga e Inuyasha, ven—Dice jalando a Jinenji hacia la mesa—Hola chicos.
—Oh pero si es la bella Sango—Dice Miroku con una sonrisa al verla llegar.
—No intentes nada sospechoso Miroku—Advierte Sango mirándolo amenazante, ya se sabía sus manías de sobra.
—Tranquila, no planeaba hacer nada—Dice Miroku con una gota estilo anime resbalando por su cabeza—¿Tanto desconfías de mi?
—Mejor ni te respondo—Dice Sango cruzando los brazos.
—¿Y qué los trae por aquí?—Pregunta Koga mirándola con curiosidad.
—Kagome—Responde Sango señalando la barra, Kagome estaba pidiendo otra copa de Pink Lady.
—Se ve terrible—Dice Inuyasha alzando una ceja—¿Todavía esta así por Bankotsu?—Cuestiona tomando un trago de whisky del vaso que estaba frente a él.
—Sí, y si soy sincera ya me estoy cansando de esto—Contesta Sango con enojo.
—También yo, ya no sabemos qué hacer con ella—Concuerda Jinenji.
Inuyasha los miro por un rato y luego miro a Kagome, la pobre se veía más deprimida que nunca, suspiro y se levantó de la mesa.
—Dejen que yo me encargue—Dice empezando a caminar hacia la chica.
—El esta ebrio ¿Verdad?—Pregunta Sango sin dejar de mirarlo.
—Si—Responden Miroku y Koga al unísono.
—Me lo imaginaba—Dice Sango mirándolos a ellos, no era normal que Inuyasha se comportara de esa manera.
Observaban desde lejos ¿Qué estaba planeando hacer?, Sango y Jinenji se sentaron con los otros dos sin dejar de mirar a Inuyasha. El ojidorado llego con Kagome que no se dio cuenta de su presencia.
—Hola Kagome—Saluda Inuyasha sentándose a su lado, la chica se asusto ligeramente y luego lo miro con sorpresa.
—¿Inuyasha? ¿Qué haces aquí?—Pregunta sin dejar de mirarlo, sus mejillas estaban sonrojadas por el alcohol.
—Vine con Miroku y Koga a pasar el rato—Responde Inuyasha restándole importancia—Tu deberías de estar haciendo lo mismo con Sango y Jinenji—Dice mirándola con cierto enojo.
—¿Acaso viniste a sermonearme?—Dice Kagome dando un trago muy largo—Tu estuviste igual o peor cuando Kikyo te dejo.
Auch, ese fue un golpe bajo, Inuyasha no se esperaba eso, aunque de todos modos ya se veía lo ebria que estaba así que no dijo nada, aunque sabía que lo decía era cierto no dejaría que lo afectara.
—Vámonos—Dice cortante quitándole la copa para luego beberse lo que quedaba de un solo trago y dejarla sobre la barra, el tampoco estaba muy sobrio que se diga pero al menos estaba en mejores condiciones que ella, se levantó y agarro a Kagome del brazo jalándola fuera del club.
—Oye no, déjame—Se resiste Kagome tratando de zafarse del agarre sin mucho éxito, el era más fuerte que ella, y aparte estaba muy mareada, sentía que su estomago evacuaría en cualquier momento.
Inuyasha saco su celular una vez estaban afuera y al verlo tenía un mensaje de Miroku.
Miroku:
¿Qué sucedió amigo? ¿Por qué salieron así de repente?
Inuyasha:
Kagome está muy ebria, la llevare a su casa.
¿Podrías preguntarle a Sango si sabe si Kagome trajo sus llaves?
Después de enviar ese mensaje ayudo a Kagome a subirse en su auto del lado del copiloto, y luego se monto él en el lado del conductor, no paso mucho para recibir la respuesta de Miroku.
Miroku:
Sango dice que revises el bolso de la señorita Kagome, deberían de estar en el bolsillo grande a un lado.
Inuyasha hizo lo que le pidieron, pero no encontró nada.
Inuyasha:
No las tiene.
Miroku:
Sango dice que revises en el más grande.
Reviso el bolsillo más grande y al igual que en el otro no las encontró allí tampoco, y es que Kagome tenía un desastre allí dentro.
Inuyasha:
¿Sabes qué? La voy a llevar a mi casa, queda más cerca y no tendré que inspeccionar el desastre del bolso de Kagome.
Miroku:
Como tú digas.
Sango dice que espera que no te propases con ella.
Inuyasha:
Je, ni que fuera tu.
Envió el mensaje y encendió el auto. A los pocos segundos de arrancar recibió otro mensaje de Miroku.
Miroku:
Yo jamás me propasaría con una chica que esta ebria.
Inuyasha:
Miroku, tú y yo sabemos que lo que dices, lo que piensas y lo que haces son cosas muy distintas.
Miroku:
…
Inuyasha:
¿Ves como tengo razón?
Mientras enviaba este mensaje, Kagome lo observaba, no es que no se hubiera fijado antes, pero Inuyasha era muy apuesto, en secreto siempre observaba sus ojos, dorados como el sol que la derretían por dentro, cuando lo veía entrenar en el equipo de artes marciales de la universidad, en el que ella también estaba, notaba su bien formado cuerpo cuando le quitaban la parte de arriba del uniforme en una pelea de práctica, era tonificado pero no musculoso. Inuyasha sentía que lo observaban, al llegar a un semáforo observo a Kagome, estaba quedándose dormida; suspiro, él sabía perfectamente por lo que la chica estaba pasando y no la criticaba por lo que hacía.
Sin saber cómo ni cuándo, había desarrollado un cariño que iba más allá de la amistad por ella, pero no podía decírselo y mucho menos ahora.
1-Porque estaba ebria y estaba por quedarse dormida.
Y 2-Porque estaba pasando malos ratos por culpa del idiota de Bankotsu.
Siguió manejando hasta llegar a su casa, estaciono el auto en el garaje y luego cargo a Kagome hasta una habitacion, y no sabía por qué, pero algo le decía que esta iba a ser una noche muy larga.
Continuara…
